Min Yoongi es un hombre que se crió en una familia con dinero, su apellido viene de una importante familia de empresarios exitosos y bueno el no fue excepción y también creó su propio emprendimiento a partir de los dieciocho años, amaba el café y los gatos, que mejor unir ambas ideas y abrir su primer cat-cafe, al principio solo iban sus amigos y familiares tuvo que pagar clases para aprender hacer variedades de cafés y así tener un menú más extenso. Su padre le dijo que dejará ese absurdo y vergonzoso local y trabajará en la empresa familiar pero se negó todas las veces e insistió con su pequeño local, recogía gatos callejeros para domesticarlos y darles el amor que merecen.

Sin rendirse y ahora a sus veintiocho años es dueño de una gran cadena de cat-cafes por todo Seúl y Daegu, pronto abriría más en otras regiones. También tenía mucha popularidad entre los hombres y mujeres, ya que era un codiciado soltero sin embargo él no ha mostrado interés en absolutamente nadie y además ha rechazado a quién se le acerque para declararse, decía que no tenía tiempo para relacionarse con alguien prefería a los gatos como compañía, aunque eso no detuvo a cierto grupo de desesperados y los acosos fueron más frecuentes, se acercaban a abrazarlo o besarlo a la fuerza y su madre toda preocupada le contrató un servio de guardaespaldas.

— mamá, te dije que no necesito un gorila de dos metros siguiendome a todos lados —el azabache suspiro molesto sentándose en el cómodo sofá de su oficina.

— por supuesto que si, cada vez hay más depravados detrás tuyo —se quejó su madre totalmente desesperada, quiere proteger a su bebé— ¿recuerdas a esa lunática que se coló en la fiesta de su abuelo diciendo que era tu prometida y los guardaespaldas se lanzaron sobre ella cayendo todos en el pastel? oh no, no más —negó con una expresión dura y saco su teléfono.

— mamá no llames, Suran era una buena amiga solo estaba bromeando —Yoongi bufo y tomo a su gato llamado lucifer para acostarlo en su regazo y darle mimos.

— tarde, mañana llegará tu nuevo guardaespaldas, más te vale ser amable y obediente sino voy a tener que tomar medidas más drásticas, Min Yoongi estás advertido —amenazó furiosa y se acercó para dejarle un beso en la mejilla a su hijo y después unas caricias al adorable gato, se retiró cerrando la puerta con fuerza.

Yoongi arrugó su nariz ofendido y acercó más al minino en su pecho.

— no necesitamos un hombre gigante para que nos salve, yo mismo se defenderme —se quejó haciendo un puchero, el gato contestó con un suave maullido— no te burles de mí, se algo de karate —dio suaves golpecitos sobre la narcita del gato y rió al escuchar su fuerte ronroneo. Chilló enamorado y le dio más caricias y besito, su amor por los gatos era enorme, no necesitaba a una pareja ni un tonto guardaespaldas.

Eran las doce de la tarde y Yoongi se encontraba en su principal cafetería supervisando y haciendo el café, siendo el dueño seguía haciendo su amada labor, tenía su cabello perfectamente peinado y usaba el uniforme con el delantal blanco crema con gatitos en el, a veces ocupaba sus lentes ópticos ya que los lentes de contacto le provocaba ardor al final del día, con profesionalismo hacia los pedidos y les enseñaba a los nuevos trabajadores, siempre estaba muy ocupado.

La campanita sonó al momento que la puerta se abrió revelando a un joven de cabellos rubios y aspecto de ángel, saludó con una hermosa sonrisa captando la atención de muchos y se acercó a la caja haciendo la fila, traía puesto un pulcro traje de dos piezas de color negro, una limpia y blanca camisa, su zapatos brillantes y una linda corbata celeste pastel. El traje le quedaba algo apretado dejando ver esas bonita figura, su pequeño cintura y el redondo trasero esponjoso atrapaba miradas lujuriosas sin embargo el rubio ignoró todo y pidió hablar con el señor Min Yoongi para informar que su nuevo guardaespaldas ya había llegado.

Hoseok era el mejor amigo de Yoongi, también trabaja en el café y justo hoy estaba en la caja, no podía creer que esa cosita sexy y adorable era el guardaespaldas, sus manos eran pequeñas y muy bien cuidadas, su rostro daba la impresión que fuera mucho más joven, pero no pudo resistirse su sonrisa y con un sonrojo en su rostro fue donde Yoongi para informarle, tardo unos minutos en salir echo una furia con una expresión amenazante buscó al estúpido guardaespaldas gorila de dos metros con la mirada sin embargo nadie en ese local tenía aquella descripción, Hoseok soltó una risa y señaló en dirección a la zona de juego de los gatos se encontraba un chico con traje jugando muy animado con los tiernos animales, sonreía tan feliz que sus ojos desaparecían haciéndolo ver más dulce y lindo e incluso se podía escuchar como les hablaba con cariño y recibía ronroneos y gracias por parte de los mininos sacándole risitas. Yoongi creyó estar en el paraíso, un hermoso chico y muchos gatos, si, si, si acepta.

— secate esa baba, hyung —la risas de burlas del pelirrojo lo sacó de su burbuja, parpadeo varias veces para saber si aún estaba soñando, chilló internamente al ver que el ángel era real.

— Hoseok, ¿quién es él? —preguntó con suavidad y sonrío más al ver como el rubio reía más.

El pelirrojo frunció sus cejas confundido por la pregunta y la extraña reacción del mayor al ver al hombre hermoso, negó riendo al captar todo, a su hyung se le caería la mandíbula por la sorpresa.

— tu nuevo guardaespaldas, tontito —lo abrazo por los hombros al decirle, quedando ambos mirando al rubio.

Yoongi inmediatamente se tenso y abrió su boca sorprendido, luego la cerro y tragó saliva, miró al rubio y después a su amigo, lo vio asentir con una sonrisa divertida y un guiño. Se separó de su amigo y abrió su boca tomando una respiro pesado.

— ¡QUEEEEEEEEEEEEE! —gritó a todo pulmón asustando a todos y captando la mirada del lindo rubio.

¿Cómo era posible que un adorable ángel sea su guardaespaldas?

💕🐱🐥💕

¡hola dulzuras!

por fin pude terminar esto, no saben cuantos días estuve escribiendo, borrando y escribiendo hasta que por fin sale algo decente.

mil disculpas por tardar pero ustedes saben que no ando de ánimos (bueno casi nunca ando bien).

espero que les haya gustado.

muchas gracias por su voto/comentario/leída.

los tkm♡

-sam.