(Foto solo de referencia)

Narrador Omnisciente.

-Vamos bebé~

-No

-Porfavor vamos~

-No, papi, eres malo.

Suspiro, su pequeño se había enojado por lo del pañal. Pero creo que lo enojo más el que haya servido para prevenir otro accidente. Pues el pequeño si había tenido otro accidente y el pañal lo había prevenido.

-Pequeño no te enojes, puedes usarlos solo por la noche, hasta que me demuestres que ya no te harás encima.

El pequeño estaba bajo las sábanas y no quería salir.

-Ichi..

El pequeño asomó su cabeza de las sábanas y lo miro con un puchero.

-Perdón, si?

Le acaricio la mejilla y lo abrazo mientras el pequeño se aferraba a su ropa. Lo alsó y lo llevó al baño secando las pocas lágrimas que había salido. Al llegar abrió el agua de la bañera empezando a llenarla a la vez que desvestia al pequeño, con cuidado lo acostó de nuevo donde estaban las cosas del baño y le sacó el pañal con cuidado para luego tirarlo a la basura y alsar al pequeño metiendolo a la bañera.

El baño apasiguo (si esta mal escrito avisenme porfavor) un poco las cosas, de un momento a otro los dos ya estaban riéndose, aunque sea levemente, y demostrando de ese pequeño cariño que ahora se tenían. Karamatsu alsó al pequeño con cuidado y con tranquilidad empezó a sacarlo.

-Puedo ponerte otro pañal bebé?

Un segundo de silencio provocó un suspiro al mayor.

-S-Si papi.

El comentario si que no se lo espero, su pequeño había aceptado. Sonrió completamente feliz y lo acostó de nuevo sacando otro pañal para colocarselo con cuidado y volver a ponerle la pijama de murciélago.

-Tengo que comprarte más ropa bebé pero seria mejor que tu la elijas así que luego veremos unas por Internet y mandare a hacerlas.

Un beso fue dejado en la frente del menor a la vez que Karamatsu caminaba hacia la cocina. El pequeño tan solo se agarraba de su cuello sintiéndose tan agradecido por tener un buen y lindo papi.... Esperen.. ¡¿Lindo?! El de morado se sonrojo un poco... si.. tal vez...Sonrió levemente acurrucadose en sus brasos cuando el mayor se sentó en una silla.

Karamatsu lo miro y río levemente abrazandolo mientras las mucamas servían el desayuno y suspiraban enamoradas por lo tierno que era.

-Bebé, no vas a comer?~

El menor solo separó su cara para verlo.

-No quiero separarme papi

Dicho eso lo abrazo un poco más fuerte haciendo sonreír levemente al mayor y acercarle una porción de su desayuno.

-Aquí viene el avión~

El pequeño río levemente y abrió su boca mientras Karamatsu metía el tenedor a la boca del pequeño y luego de un segundo lo sacaba.
Los dos estaban en su mundo completamente felices, nada los interrumpirá nunca.

Unos golpes en la puerta se dejaron oír mientras Karamatsu suspiraba y se levantaba con Ichi en brasos caminando a la puerta. Unas voces conocidas lo hicieron sonreír levemente mientras la abría.

-Nissan!/Hola!

Las dos personas se miraron y rieron levemente hasta ver al pequeño niño en sus brasos.

-Vamos pasen, no se queden afuera.

El de azul se alejo de la puerta mientras la pareja entraba.

-Ichi saluda

-Ho-hola..

El de chamarra amarilla sonrió un poco más.

-Hola! Soy Jyushimatsu! Ella es Homura!

-hola

La pareja parecía feliz mientras el pequeño estaba algo nervioso. Los cuatro Caminaron Hasta un sofá y se sentaron con el menor sentado en las piernas de Karamatsu.

(...)

El de amarillo había logrado hacerse amigo rápidamente del menor y ahora se encontraban los dos jugando a armar un rompecabeza. Homura y el de azul se habían sentado a conversar un poco más mientras los dos vigilaban a los que tenían delante.

De la nada el estomago del de amarillo sonó.

-Ah! Losiento! No desayuné nada!

El de amarillo río levemente mientras el de azul suspiraba y negaba levemente.

-Puedes ir a la cocina entonces, trae algo para que comas y para Ichi.

El de morado solo miraba la escena en silencio, Por alguna razón no se sentía alegre estando fuera de las piernas de su papi. Cuando el de amarillo llegó le entrego al menor unas galletas haciéndole sonreír levemente. Las galletas tenían forma de gatito, como a el le gustaban.

-Si!

El de amarillo festejo cuando el pequeño colocó la ultima pieza. La imagen que se mostraba pensaba que era un pato pero el de amarillo sostenía que en realidad veía un conejo. Los dos empezaron una pequeña discusión la cual el mayor gano gracias al apoyo de los otros dos. Cosa en la que el menor se sintió mal pero lo guardo en su interior como siempre lo hacía. Aunque eso no evitó que pusiera una pequeña mirada triste que los mayores notaron.

-B-Bueno porque no vamos al patio?

Los tres se levantaron mientras Ichimatsu también se levantaba. Hasta que una de las mucamas lo alsó.

-Karamatsu-sama nosotras cuidaremos al pequeño.

El de azul vio un momento a los ojos del menor, no estaba seguro, pero suspiro asintiendo mientras los tres mayores se iban del lugar.

(....)

El pequeño sollozaba en silencio por la nueva pesadilla, estaba sentado a oscuras en el cuarto, las mucamas lo habían dejado ahí luego de arrullarlo y hacer que se durmiera para pasar más tranquilo la siesta. Pero las pesadilla lo despertaron, no debería tener miedo pero la habitación a oscuras le recordaba al armario donde su madre lo encerraba. Gracias a eso su vejiga no lo aguanto y manchó de nuevo el pañal, aunque eso no le interesaba. Subió sus piernas y las abrazo mientras las lágrimas y el llanto tomaban presencia.

(..)

-Bebé!

El de azul se acerco rápidamente abrazandolo, el pequeño estaba temblando completamente, sus brasos estaban Rasguñados, el pañal pesaba, por su cabeza pasaban todas las cosas que le habían pasado y se sentía terriblemente mal.

Karamatsu se sintió muy mal, era su culpa. No debió dejarlo en ningún momento, se sentía idiota. Alsó al pequeño con delicadeza y empezó a arrollarlo mientras caminaba por todo el cuarto y acariciaba levemente sus brasos. Luego de unos momentos el pequeño dejo de llorar por lo menos un poco así que el de cabello azul camino hacia el baño.

Cuando llegaron el mayor lo desvistio y le cambio  el pañal junto el pijama, para luego volver a alzarlo y abrazarlo fuertemente. Estaba limpio así que mañana recién le daría un baño. El pequeño estaba ya un poco más tranquilo lo único que faltaba acallar eran los pequeños hipidos del pequeño.

-Mejor bebé?~

El pequeño asintió acomodandose un poco en los brasos del mayor. Mientras este caminaba hacia el cuarto.

-Quieres que te prepare un poco de leche caliente para que duermas?

Ichimatsu volvió a asentir mientras empezaba a morder un poco su dedo gordo. Quería dormir pero no tenía casi nada de sueño.

-Choroko!

La chica aparecio a su lado rápidamente.

-Si Karamatsu?

-Prepara un.. Bib... de leche.

El Bib era para que Choroko entienda y prepare un Biberón, no sabia que diría el menor. La mucama pareció entender y asintió saliendo del cuarto mientras Karamatsu acostaba al pequeño en la cama y lo arropaba al mismo tiempo que se acostaba a su lado. La de rodete llegó enseguida y le entrego el biberon al mayor saliendo del cuarto.

-Oye bebé~

El pequeño estaba con los ojos cerrados aferrado a su camisa.

-Abre la boca bebé~

El menor abrió levemente sus ojos junto a su boca mientras Karamatsu metía la tetina del biberón a su boca. Ichimatsu quiso alejarse pero algo le decía que se deje, además de los brasos del mayor, un segundo después comenzó a tomar del biberón mientras se acomodaba en sus brasos. Extrañamente se sentía bien así por lo que unos pocos segundos luego de terminar el biberon se durmió.

-Eres una ternura bebé~

Hablo en un susurro el mayor dejando el biberon a un lado y abrazandolo mejor para cerrar sus ojos.

-Lamento lo de hoy..

Un pequeño susurro logró hacer sonreír al menor mientras el sueño hacia caer al de cabello azul.