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–Lamento que sea pequeña– Dijo Yoongi cerrando la puerta tras él.

–No es pequeña– Respondió Jungkook caminando hasta el sofá. –Es del tamaño justo para un muñeco como tu–

Yoongi sintió sus mejillas teñirse de rojo y se dirigió a la cocina intentando calmar sus manos temblorosas y sudadas.

–¿Quieres jugo, gaseosa, agua, café, vino, cerveza...?– Comenzó a enumerar pero el cantante lo interrumpió.

–Café ¿Puede ser?– Preguntó antes de verlo asentir varias veces.


–Trabajaba en una cafetería– Dijo Yoongi viendo como Jungkook bebía del café.

Jeon tragó apresurado y dejó la taza en la mesa de centro para lamer sus labios y voltearse a Yoongi.

–Me siento en desventaja– Soltó Jungkook acercándose a él. –No sé nada de tí–

–No hay mucho que saber– Respondió mordiendo su labio inferior. –Aún no me lo creo– Susurró parpadeando. –¿Puedo?–

–¿Tocarme?– Asintió al ver a Min darle la razón antes de acabar la pregunta.

Yoongi llevó sus manos a las mejillas del menor y acarició su piel con incredulidad, hasta que sintió la respiración ajena sobre la suya. Pasó su mirada de los labios del cantante a sus ojos y asintió suavemente antes de que este lo besara.

Nunca había sentido algo así. No era un beso o una caricia, era la completa euforia contenida en su pecho al sentir los labios de aquél a quien amó por años sobre los suyos.

Sintió las manos ajenas sobre su cadera y como el azabache profundizaba el beso lentamente.

Se subió sobre sus muslos y sintió como el azabache pegaba sus cuerpos con firmeza.

–El café– Susurró Jeon entre besos.

–Al diablo el café– Respondió Yoongi haciéndolo reír entre besos.

Jungkook se puso de pie, alzando al pálido y haciendo que él rodee su cintura con sus piernas.

–¿Tu cuarto?– Preguntó sobre sus labios.

Yoongi solo señaló con su indice la puerta y bajó sus besos por su barbilla hasta su cuello, permitiéndole al menor ver el camino.





Cuando cayó a la cama ya había sido despojado de su ropa, solo quedando en boxers y medias ante la oscura mirada de Jungkook.

Respiró con pesadez mientras veía al menor quitarse la ropa y arrojarla al suelo, sin quitarle la mirada de encima.

Confirmó la que siempre supo. Jungkook tenía un aire de cazador que no se podía disimular con sonrisas amables y lindas palabras.

Sintió sus labios en su cuello y como las manos pasaban por todo su cuerpo. Sintió su erección grande y dura clavarse en su trasero y como el aroma del Forment llenaba sus sentidos.

Era un sueño, pero se sentía real porque ni la más vivida fantasía se había sentido tan perfecta.

Arqueó la espalda con fuerza cuando sus largos dedos entraron en él y abrió bien las piernas para poder ver como su brazo tatuado acababa por perder los dedos dentro de él.

–Condón– Susurró Jungkook mientras separaba su apretado interior con sus dedos fuertes.

Yoongi se dejó caer en la cama para estirar su brazo hasta su mesa de noche y poder tenderle un preservativo. Jungkook retiró sin demasiado cuidado sus dedos de él y se acercó para besar sus belflos hinchados cuando tomó el sobre.

Yoongi pasó sus manos por sus brazos y enredó sus dedos en el cabello ajeno mientras Jungkook peleaba con el látex y su lengua al mismo tiempo.

Cuando lo sintió en él, no pudo gritar, no pudo gemir, solo pudo abrir los ojos de par en par cuando acabó de aceptar la realidad.

Estaba teniendo sexo con Jeon Jungkook.

Los siguientes minutos fueron un desastre de movimientos caóticos y gemidos desenfrenados.
La cama había golpeado con demasiada fuerza la pared y las sábanas habían acabado casi en su totalidad en el suelo.

La piel blanca de Min se había teñido de rosa por los besos, mordidas, chupetones y golpes de embestidas.

Ambos habían acabado sudados y cubiertos de semen al momento de acabar, momento que los dejó a ambos destruidos en la cama, con la mirada en el techo y los pechos agitados.

Había sido mil veces mejor de lo que ambos habían esperado.

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–¿Sabes?– Dijo Jungkook mientras acariciaba su espalda desnuda. –Esperaba llegar y encontrar tus paredes empapeladas en mi cara– Soltó haciendo a Yoongi abrir los ojos de par en par. –¿Acaso me mentiste y no eres ARMY?–

–¡Claro que no!– Dijo sentándose, ignorando el dolor e su cadera. –Guardé todo para no incomodarte, pero si quieres lo sacó enseguida–

Jungkook rió ante su reacción y lo tomó de la muñeca para volver a acostarlo a su lado, permitiendose abrazar su cuerpo desnudo nuevamente.

–Relájate– Susurró acariciando su cabello. –Pediré algo de comida para que no tengamos que salir de la cama ¿Si?–

–Habrá que bajar a recogerla– Susurró cerrando los ojos ante sus caricias.

–Llamaré a alguien de confianza para que suba–

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–Tienes que irte ¿Verdad?– Preguntó Yoongi mientras que juntaba las sobras de comida.

–¿Quieres que me quede?– Preguntó Jeon esperando un asentimiento instantáneo, pero Yoongi hizo una mueca. –¡¿No?!–

–¡No es que no!– Dijo cuando comenzó a reír a carcajadas. –Pero me muevo mucho por la noche y mi cama es pequeña y no me gustaría patearte toda la noche–

–Entiendo, tranquilo– Dijo divertido. –Igual me tengo que ir– Mintió alzando los hombros. –Tengo trabajo muy temprano–

–Es una pena que trabajes tantas horas– Suspiró sentándose en la mesa junto al menor. –Me gustaría volver a verte–

–Lo harás– Susurró viendo como el menor se veía genuinamente sorprendido. –Si no veo que andes hablando de mi, podríamos volver a vernos–

–Me encantaría– Suspiró en un aliento suave. –Realmente me encantaría–

–Sólo quiero que entiendas algo– Dijo dudoso, tomando su mano entre las suyas. –No busco una relación, no puedo tener una, no ahora–

–Lo entiendo– Soltó Min sin dudarlo, sorprendido al cantante. –Tampoco quiero una pareja, solo quiero volver a verte–

–Oh– Dijo incrédulo. –Genial, entonces–

–Genial– Asintió suavemente. –¿Te acompaño abajo?–

Yoongi mordió su labio inferior en el recibidor, viendo de reojo al portero dormido en el mostrador.

–Gracias por preocuparte porque no se sepa– Susurró Jeon con el cubrebocas puesto. –Me dejas tranquilo–

–Como fan, no me gustaría enterarme de tus cosas privadas sin tu permiso– Asintió bajando la mirada.

Jungkook sintió su corazón calentarse de ver a un ARMY genuinamente preocupado por él. Era un sentimiento que ya conocía, pero, la relación con Yoongi le daba más posibilidades.

Se quitó rápidamente el cubrebocas, las ventanas y puertas eran de vidrio así que debía ser rápido. Tomó su barbilla y en un rápido movimiento juntó los labios con los ajenos.

Yoongi correspondió al instante, poniéndose de puntas de pie y rodeando su cuello con sus brazos para que no se vea su rostro, permitiéndoles que el beso dure un poco más.

Cuando cortaron el beso, Yoongi no bajó los brazos y subió la mascarilla ajena con los dientes para que, al separarse, no se vea su rostro.

Jungkook sonrió ante sus cuidados y acarició su mejilla antes de salir del recibidor.

Yoongi lo vió cruzar al estacionamiento y esperó a que el Mercedes negro salga para salir a la calle y saludarlo en silencio, ganando que Jungkook toque la bocina a modo de despedida.

No sabrían que se volverían a ver en tan poco tiempo.





4/4

Hasta acá por hoy
🙂 al fin llega lo minimaente interesante

Por si no leyeron la nota, les cuento que hice una cuenta privada para AUs exclusivos para la gente que más comenta
Está entre el capítulo 10 y 11 por si quieren leer la explicación más detallada
Espero que comenten 🥰

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