La mansión le hacía honor a su nombre, pues era un lugar amplió y valioso, con decoraciones que iban desde pinturas hechas por pintores famosos, hasta reliquias increíbles las cuales rondaban las cifras de muchos millones de dólares. Cada habitación tenia una cama grande y suave, con su respectivo baño, biblioteca, mesa de noche y un ventanal gigante, las cuales se encontraban decoradas con cortinas de seda, las cuales hacían juego con el resto de la alcoba, casa habitación era de un color diferente, para el gusto de cualquiera, era algo que les había parecido impresionante y algo curioso a los chicos, pues eran muchas molestias, además, mantenerlas impecables, era un trabajo duro y agotador.

Taehyung dejó que cada uno escogiera su alcoba preferida, con el color y la vista que más les gustara. Cualquiera podría pensar que el rubio era un chico atento con una personalidad muy noble, pero todo era mentira, Taehyung solo lo hacía por el secreto que Namjoon sabía sobre él, pues sabía que si dejaba que hablara, todo por lo que había trabajado, se iría a la basura. Después de unos minutos, cada uno escogió su habitación preferida, a excepción de Namjoon, quién seguía sin elegir una, pues por alguna extraña razón, no quería entrar a ninguna, cada que se acercaba a una alcoba, un escalofrío recorría su cuerpo y le hacía temer, incluso si en ese preciso momento se encontraba sosteniendo la mano de Jin.

—Ésta es la última habitación. —dijo Taehyung— ¿No piensas escoger alguna? Tengo cosas que hacer.

—Aún no me he decido por una... —susurró Namjoon con disgusto por aquella sensación.

—No tengo tiempo para esto, le pediré a una de mis empleadas que se quedé contigo. —informó llamando a una chica joven con uniforme de criada— ella es Samanta, hace lo que le pidan, si quieres follartela no hay problema.

—Es un gusto conocerlo. —saludó haciendo una reverencia.

—Si no quieres esta bien, igual será mía esta noche. Hasta pronto Namjoon. —murmuró Taehyung alejándose del lugar.

La chica empezó a decirle a Namjoon las cosas buenas de cada habitación, como la vista, el tipo de color apto para el cuidado de los ojos, la comodidad y lo poco usadas que estaban, lo último le había llamado la atención "¿Lo poco usadas que estaban?"  ¿Eso quería decir que habían sido ocupadas por otras personas? Era algo extraño para el peli negro, pues eran habitaciones muy lujosas para ser usadas por personas del servicio, además, esas personas se encontraban en el piso de abajo, entonces ¿Quién las usaba? Decidió quedarse con la duda y continuar escuchando.

Luego de unos minutos, Namjoon decidió quedarse en una habitación cerca de los otros chicos, sin importar el color o la historia que tuviera. La chica tomó una de las llaves que tenía en su bolsillo y abrió la puerta; esta era de color azul fuerte, lo cual la hacía lucir oscura y nostálgica, sensación que no demoró en llegar hacia Namjoon, lo cual le pareció extraño y curioso, es por esa razón, que Namjoon empezó a caminar por toda la habitación, observando cada detalle, hasta que notó algo raro en el baño.

—¿Esos son rasguños? —preguntó mientras observaba la puerta por dentro.

—Probablemente algún animal se quedó en cerrado, si gusta, puede tomar otra habitación mientras arreglamos esta. —dijo la criada con una sonrisa amable.

—Está bien. —dijo Namjoon saliendo del baño, pero frenó en seco al escuchar la llave de la bañera goteando.

Namjoon sintió nuevamente aquel escalofrío que tanto le atemorizaba y con los nervios de punta, decidió voltear hacia la bañera, encontrándose con la escena más asquerosa y horripilante que había visto en su vida, incluso siendo un chico acostumbrado a ver cadáveres todos los días. Había una chica muerta de unos 25 años, la cual tenía su carne putrefacta, llena de gusanos y hongos, el agua ennegrecida de la bañera le llegaba hasta sus pechos, los cuales parecían tener quemaduras de cigarros, al igual que sus brazos y piernas, que se veían un poco por fuera del agua.

Namjoon trató de respirar y calmarse, para así llamar a la policía y que encontraran al culpable, aunque él sabía muy bien quién había sido, pero mientras marcaba el número en su teléfono, la criada lo interrumpió, pues lo veía algo pálido y tembloroso, lo cual le había parecido extraño. El de cabello negro no entendía la reacción calmada de la chica, pues prácticamente detrás de ella había un cadáver de una chica un poco más mayor que ella ¿Por qué no le sorprendía? ¿Acaso estaba enseñada a ver ese tipo de cosas? Realmente no entendía lo que estaba pasando.

—¿Se encuentra bien? —cuestionó la criada.

—¡¿Acaso no lo ves?! —exclamó Namjoon sobresaltado.

—¿Ver qué? —preguntó la chica sin entender nada.

—¡Eso!

Namjoon señaló la bañera, la cual estaba vacía y limpia o mejor dicho, impecable, con un delicioso olor a rosas, además, tenia velas a su alrededor, para una noche romántica si eso era lo que el huésped quería. El peli negro quedó impactado, abriendo sus ojos grandemente por la impresión, pues hace unos segundos había una chica muerta ahí, en su forma más asquerosa y repugnante ¿Qué había pasado? Hasta que en ese momento volteó a mirar a Jin, quien se encontraba observado la bañera, tapando su nariz con su mano derecha, haciendo un gesto de disgusto.

Namjoon le pidió a la chica que lo dejara solo, ya que tenía que hacer algunas cosas, aparte quería ducharse y luego dormir un poco. La chica un poco confundida acepto, saliendo de la habitación y cerrando la puerta tras ella. Una vez que se encontraba solo, se acercó a Jin y lo abrazó por detrás, observando la bañera vacía al igual que el peli rojo, preguntándose si lo que había visto, era solo por el miedo que sentía.

—La chica se llamaba Rosa, estaba enamorada de Taehyung. —comentó Jin, sorprendiendo nuevamente a Namjoon.

—¿Qué quieres decir con eso? —indagó Namjoon.

—Que lo que viste es real, Tae mató a la chica mucho antes de que yo muriera, se obsesionó mucho con él, hasta volverse una molestia.

Namjoon se apresuró a salir de la habitación, para empezar a entrar en cada habitación, incluyendo en la de sus amigos, para así saber si su teoría era cierta.

Nuevo capítulo
¿Qué tal un poco de terror?