5
El 9 de marzo era un dia muy especial, y es que Min Yoongi no cumplía 18 años todos los dias. Si bien el -ahora- mayor de edad no solía emocionarse mucho con los festejos de cumpleaños, tenía una linda novia que estaba demasiado ansiosa por la fecha.
Había preparado, no solo una tranquila reunion con sus amigos mas cercanos en la casa de Yoongi con ayuda de su suegra, sino que también tenía una pequeña sorpresita guardada especial para su novio.
La pareja se encontraba tomando unos refrescos en el sofá del living mientras sus amigos disfrutaban del pastel, juegos de mesa y musica para pasar el rato. Jennie estaba comoda en su regazo, Yoongi acariciaba su muslo con cautela y se besaban esporadicamente cuando nadie los veía.
Podría decirse que era de sus mejores celebraciones de cumpleaños.
Una vez que todos los regalos fueron abiertos, Jennie se acercó aún mas a su novio, procurando que nadie escuchara su conversación y le susurró al oído.
- ¿Sabes? Ese no era el único regalo que tengo para ti. -dijo con una sonrisita. Yoongi la imitó y se acercó a su oído con curiosidad.
- ¿Ah, si? ¿Qué mas tienes para mi?
Desde aquel dia en que comenzaron a explorar sus cuerpos y a conocerse de manera mas intima, no habían parado. Sesiones de besuqueo en el sofá terminaban en sexo oral, toqueteos mirando peliculas acababan en masturbaciones mutuas y la calentura parecia ascender cada vez mas. Se notaba que la pareja se había acercado mucho mas los últimos dias y ellos, se encontraban en su propia nube desde entonces.
- Mis padres se van mañana de viaje por trabajo. -susurró contenta. -Tendré la casa para mi sola durante una semana entera... Bueno, tendremos. -murmuró insinuante y besó de manera casta el cuello de su novio.
Yoongi, sonrió sin poder evitarlo y asintió sin decir nada mas. Sabía lo que significaba.
Esperaron toda la noche, luego de despedirse de sus amigos y abrazandose en la cama del mayor, para despertar la mañana siguiente mas emocionados que nunca. El, ahora, rubio puso un poco de ropa en una mochila y la pareja se despidió de la señora Min, la cual los saludo con efusivos abrazos y les pidió, con un tono sugerente, que se cuidaran.
Ambos asintieron avergonzados pero finalmente, luego de almorzar llegaron a la residencia Kim. Una enorme casa, por no decir mansion, dentro de un barrio privado que estaba a 20 minutos de la casa de Yoongi en auto.
Los dos entraron y notaron que no había nada. Jennie encontró una de las tantas notas frias que sus padres le dejaban en el refrigerador y suspiró. No esperaba que justo el dia que llegaba con su novio, quien no les simpatizaba, ellos la recibieran con una calida sonrisa pero de todas maneras la frialdad le dolía un poco.
Sintió los brazos fuertes y calidos de su novio detras de ella. Un beso en su nuca y su nariz de botón paseandose por su cuello.
- Te tengo, bebé.
- Lo sé. -dijo sonriente, y volteó para besar con cariño a su novio.
¿Qué sería de su corazón si no lo tuviese en su vida?
La joven pareja disfrutó de la tarde, escuchando musica en el patio, disfrutando de unos licuados en el patio trasero mientras Jennie se bronceaba y Yoongi dormía en los sillones cerca de la piscina.
Cuando el sol se ocultó, Jennie despertó a su novio de su siesta con un par de besos humedos en su cuello y espalda, haciendo que el rubio temblara de gusto y despertara sonriente.
Ordenaron pollo frito, helado y buscaron algun programa para ver en lo que cenaban. Al final, eligieron ver un par de capitulos de La casa de papel mientras disfrutaban su cena.
Jennie suspiró mientras tomaba de su helado.
- Palermo es tan sexy. -dijo no muy fuerte pero lo suficiente para que Yoongi la escuchara.
- No mas que yo. -respondió el mayor con un ligero puchero, provocando que ella sonriera divertida por sus celos y volteara para abrazarlo por el cuello.
- No mas que tú. -aseguró mientras unía sus labios en un beso lento, tierno y mojado.
Yoongi se pegó mas cerca y comenzó a acariciar su espalda gracil y suave mientras profundizaba sus besos. Dejó que su lengua se encargara de la situacion mientras continuaba acariciando cada porcion del cuerpo de su dulce novia.
Jennie gimió cuando él apretó sus muslos con deseo y ella terminó sentada a horcajadas sobre él, lamiendo su oreja y suspirando su nombre, como buscando mas.
Apretó sus brazos musculosos mientras sus centros se tocaban. Se sentía humeda y caliente en todas partes, Yoongi manejaba su cuerpo como si fuera una pluma y ella simplemente se dejó ir.
Yoongi acarició sus pechos, sus pezones erectos lo llamaban a morder y apretujar, y eso se dispuso a hacer. Ella tironeó de sus cabellos teñidos disfrutando de la situacion. Siempre le gustaba cuando él lamia sus senos, era delicado y bueno, pero no perdía el toque de erotismo y rudeza que tanto le gustaba. Era apasionado, sabía exactamente como tocar y lamer y eso, la volvía loca.
Jennie comenzó un vaiven con sus caderas, gozando de los gemidos roncos de Yoongi, se sentía bien hacerlo disfrutar tanto como él se lo hacía a ella, pero en ese momento quería mas.
- Yoonie... Por favor...
- ¿Quieres hacerlo, muñeca? -preguntó tirando de su pezon con sus dientes, regodeandose con los gemidos agudos.
- Sí, si por favor, hazmelo ya. -rogó clavando sus uñas en sus hombros y es que, el miembro erecto de Yoongi se estaba clavando directo en su centro. No podía aguantar mas.
El mayor se levantó con ella encima, la cual aferró sus piernas en la cintura varonil de su novio y ambos caminaron juntos sin dejar de besarse hasta el cuarto de la menor.
La castaña aprovechó el momento para quitarle la camiseta a su novio y besar su pecho duro. Cuando notó que el miembro de Yoongi se endurecía mas ante sus caricias se sacó su propia camiseta, quedando desnuda de la cintura para arriba.
Yoongi recostó a Jennie en su suave y enorme cama mientras él quedaba de pie frente a ella, acarició con la yema de sus dedos sus muslos internos y tiró de sus shorts, dejandola solamente con sus bragas humedas.
- No sabes las ganas que tengo de comerte. -dijo casi gruñendo. Se agacho mientras dejaba las piernas de su novia sobre sus muslos y lamió por encima de sus bragas color vino. Podía sentir toda la humedad escondida que luchaba por salir y él, por supuesto, no tardaría mas en degustar ese dulce elixir.
Lamió desde arriba hacia abajo, introduciendo su lengua dentro de su agujero caliente, saboreando cada parte de su centro. Ni siquiera necesitaba ser preparada, Jennie estaba tan mojada que podría deslizarse dentró de ella como manteca caliente. Aún así, sería la primera vez de ambos y debían ser cuidadosos. La pasarían bien juntos.
Metió dos de sus dedos en su, ya acostumbrada, vagina, empapandolos con sus jugos para luego lamerlos bajo la excitada mirada de su novia. Estaba a punto de enloquecer.
- N-no puedo m-mas... Por favor, hazlo. -gimió completamente ida y con ganas de mas.
El rubio noto la necesidad latente de su novia y empezó a masturbarse mientras admiraba su coño chorreante de flujos que parecía incitarlo a pecar. Ambos estaban listos y no querían esperar mas.
Yoongi se recostó en la cama, sentandose con la espalda pegada al cabecero de la cama, Jennie lo miró confundida.
- Estuve investigando y creo que esta será la mejor forma para ti. -remarcó mientras tomaba su mano y la sentaba a horcajadas sobre él. -Creo que dolera menos, ya sabes, debemos hacerlo menos doloroso para ti.
Jennie asintió entendiendo el punto, aunque siempre pensó que la manera mas comun de comenzar era con él encima. De igual manera comenzó un vaivén con sus caderas, mojando la polla dura de Yoongi y rozandola contra su clitoris hinchado.
- E-espera un poco, Jen... Me vas a matar. -jadeó mientras buscaba la tira de condones y sacaba uno.
Con paciencia tomó el condón y se lo puso detenidamente ante la fija mirada de Jennie, para despues, masturbarse un poco mientras observaba a la caliente chica encima de él que estaba a punto de tirarsele encima y devorarlo. Amaba esa mirada.
- ¿Lista, Jen? -preguntó mirandola a los ojos, dejando de lado su calentura por un segundo.
- Estoy lista, Yoonie. Hagamoslo juntos. -gimió mientras bombeaba la polla de su novio.
El rubio asintió y apretó su miembro mientras Jennie levantaba su cadera y ambos metían el pene duro del mayor dentro del centro humedo de la castaña.
Jennie se mordió el labio al sentirlo entre sus labios exteriores y respiró hondo, preparandose para bajar.
- Hazlo a tu tiempo, amor. No te preocupes. -Yoongi acarició su mejilla sonrojada y le sonrió. -Tenemos todo el tiempo del mundo, tú solo asegurate de hacerlo con cuidado.
Ella asintió, conmovida por la delicadeza con la que era tratada y, respirando profundo, decidio hundir la polla completamente para hacerlo rapido.
Sintió el gran pene invadir su apretada cavidad, escuchó el sonido lascivo de sus jugos y jadeó ante el pinchazo que le provocó aquel brusco movimiento. Escuchó a Yoongi gemir, pero de gozo, aunque se quedó quieto y esperando a que ella le diera el okay para seguir.
Se aferró al cuello de su novio y respiró hondo, tratando de relajar su interior, había sentido una molestia no tan leve pero tampoco dolorosa. Podría decirse que era muy soportable y mentalmente agradeció por la posicion que Yoongi recomendó.
Gimió al mover sus caderas, sin alzarlas, rozando el clitoris contra el pubis de Yoongi, deleitandose con los gemidos roncos del rubio. Sus ojos estaban cerrados y se notaba el esfuerzo que hacía por no moverse.
Luego de un minuto, Jennie asintió para si misma y levantó sus caderas y muslos creando un suave movimiento que le sacó jadeos al mayor.
Yoongi apretó la cintura de su novia y se mordió el labio con ansias. Jennie sonrió, sensual y excitada, con ganas de volver a sentir el pene punzar bien adentro suyo.
- Yoon... Puedes moverte. -rogó mientras movia sus caderas y gemía a la par. El mayor observó a esa preciosa chica moverse encima suyo con una sensualidad que lo volvió loco.
Si no se calmaba podría acabar en segundos.
Con una sonrisa perversa asintió y empezó a arremeter contra el centro delicado y jugoso de Jennie, mientras asaltaba su boca en busca de besos.
Sus lenguas se enredaban mientras sus genitales se succionaban y se fundían en una sucia melodia. El chapoteo de su saliva se mezclaba con el de sus sexos, apretandose con hambre.
- Estas... Tan apretada, me estas volviendo loco. -dijo Yoongi, completamente enfocado en mover sus caderas hacia arriba, embistiendo a su novia y haciendola temblar del gusto.
- Mas adentro, mas adentro. -pidió clavando sus uñas en sus hombros anchos.
- Dios, me estas succionando el pene, nena.
Jennie se sonrojó y pudo sentir su interior vibrar, al parecer le gustaba la charla sucia y las manos de su novio apretando su trasero con fuerza, abriendo sus gluteos mientras lo impulsaba hacia arriba, ayudando con las penetraciones.
Se sentía en el cielo, sus piernas temblaban y se estaba cansando de la posicion pero no podía parar. Sus pechos rebotaban y cada tanto, Yoongi se encargaba de besarlos con desesperacion.
Ambos se miraron a los ojos y sonrieron sin poder evitarlo.
- Nunca sentí algo asi. -dijo Jennie, tirando su cabeza hacia atras, dejando que Yoongi la penetrara a su gusto.
- Quiero hacertelo todos los dias, Jennie. -suspiró el mayor mientras le hacía un chupeton en su cuello. Dejaría una marca muy oscura pero eso era lo que buscaba.
El clitoris de Jennie comenzó a frotarse de forma mas brusca contra el pubis de su novio y sus gemidos se volvieron incontrolables. Yoongi continuó arremetiendo hasta que notó las piernas de su novia temblar.
Con un poco mas de fuerza, levantó su cuerpo, dejando a Jennie recostada con sus rodillas flexionadas mientras él quedaba sobre ella, aún con su polla clavada y los talones afirmados en el colchón.
Sacó su miembro lentamente y observó como éste entraba de una embestida dura en el coño rosado y mojado de su novia. Podía ver sus jugos resbalar por sus muslos de manera lasciva. Estaba mas excitado que nunca.
Apretó sus pechos y continuó penetrando ese caliente centro con fuerza, buscando aquel lugar especial que haría a su novia chillar de placer. Frotó su pulgar contra el clitoris de Jennie, provocando que ésta gritara.
- ¡Ah! ¡E-espera! ¡S-si sigues así yo...!
Yoongi buscó su boca con necesidad mientras movía su polla dentro de su centro. Entre sus besos mojados pudo sentir como Jennie se tensaba ante una de sus embestidas.
Bingo.
Sonrió perversamente mientras arremetía contra ese lugar de manera fija, apretando sus pezones y adorando sus gemidos agudos.
Podía sentir el coño succionandolo y apretando su polla de manera esporadica. Estaba por acabar, y si continuaba tensando sus paredes vaginales, él también lo haría.
La castaña sintió como su vientre se retorcía y una conocida sensación la invadió de repente. Quería mas, mas y mas.
- V-voy a... ¡Yoongi!
- Y-yo tambien, Jen. -dijo jadeante y penetrando con brusquedad su punto. Las paredes de su novia lo estaban succionando al punto de no poder aguantar mas.
Jennie sintió un estallido invadir su cuerpo entero, estirandose hasta sus muslos temblorosos y su vientre sensible. Grito como nunca antes había gritado y se aferró a la espalda de su novio mientras su coño devoraba el miembro a punto de estallar.
Sus piernas quedaron flácidas en el colchón mientras Yoongi seguía disfrutando de su centro. Arremetió cinco veces mas en ese lugar tan caliente y finalmente, acabó dentro del condon. Sus piernas se endurecieron y como acto reflejo mordió el hombro suave de su novia, sacandole un gemido.
Escuchó la respiracion acelerada de Jennie mientras él la miraba desde arriba, tambien tratando de recobrar el aire perdido en su orgasmo.
Ambos se observaron y se sonrieron mutuamente, con encias rosadas y dientes blancos. Sus ojos brillantes demostraban la felicidad pura que sentían al haberse entregado en cuerpo y alma al otro. Se sentían completos. Y mas cerca que nunca.
No había forma de estar mas cerca.
Yoongi se dejó caer un poco, abrazando el cuerpo fragil y sensible de su novia mientras ella acariciaba su espalda y trataba de calmar su intimidad aún tensa que se contraía al rededor del miembro del rubio.
Los dos pudieron calmar sus respiraciones y simplemente juntaron sus labios de forma perezosa pero con mucho cariño.
- Debo salir, bebé. Necesito corroborar que todo esté bien. -dijo besando su sien. Ella asintió y besó su pequeña naricita sonriendo.
Yoongi se enderezó y lentamente, procurando no lastimar a su novia, comenzó a deslizar su miembro fuera de ella. Jennie gimió un poco pero nada que indicara dolor.
El rubió pudo notar las manchas de sangre sobre el condón, que se mezclaron un poco con los jugos de su novia sobre la cama. Esperaba que pasara asique se quitó el condon, haciendo un nudo en él y lo tiró en la papelera que Jennie tenía cerca de su cama.
Luego podría tirarlo, antes del baño que ambos necesitaban.
- ¿Ducha? -preguntó acariciando las mejillas rellenitas de Jennie y riendo al verla tratando de abrir sus ojos y mantenerse despierta.
- Estoy muy cansada, oppa. -dijo cerrando sus ojos y entregandose al mundo de los sueños.
Yoongi asintió, sabiendo que su chica ya se había dormido y, tomando su camiseta que se había quitado anteriormente, limpió los muslos de su novia y su centro, al igual que su pene relajado.
Tomó el cuerpo languido de su novia y la acomodó casi sobre él. Dejando que levantara su pierna y la pusiera arriba de sus caderas, mientras la abrazaba por la cintura.
Había sido perfecto. La mejor noche de su vida. Agradecía que Jennie no saliera lastimada y que sus cuerpos se hayan aceptado de manera tan rapida.
Apretó el cuerpo delgado a su lado y besó su cachete, cerrando los ojos para dormir al igual que ella.
A veces se preguntaba como un chico aburrido como él pudo conquistar una diosa como lo era Jennie, sin embargo, eso ya no importaba mas.
Porque eran uno.
Y no cambiaría esa sensacion por nada en el mundo.
Fin.
me costó un monton hacer este capitulo, lo escribí mas de 4 veces y este fue el mejor resultado... espero que les haya gustado y perdonenme por hacerlxs esperar tanto! estoy un poco oxidada con el smut lol
si les gustó no se olviden de dejar un comentario y una estrellita, me harían muy feliz :)
nos vemos la próxima! ♡
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top