08. Abrazos reconfortantes

(CAPITULO 08:
Abrazos reconfortantes.)


—¿Qué sucedió?—El patriarca de la familia observaba confundido a todos. Alice se encontraba observando un punto en la pared, teniendo visiones de muchas cosas, lo cual le ocasionaba jaqueca. Esme miraba preocupada a todos sentada a un lado de Rosalie y Emmett, quienes simplemente hablaban entre ellos en bajos susurros.

Jasper se encontraba analizando muchas cosas con respecto a Edward, pero en el momento que sintió los sentimientos de cierta chica de cabello cobrizo se enderezó.

—¿Dónde está?—Sol observó a todos lados tratando de buscar a su pareja hasta que su mirada fue hacia Carlisle y Alice—. ¿Alice?

—Está viniendo, fue a cazar—el susurró de la pelinegra tranquilizó un poco a la violinista, la que suspiró con fuerza y le dio una mirada de agradecimiento al empático que le había ayudado a relajarse.

—¿Me dirán que sucedió?—El mayor se acercó a Solar abrazándola, sabiendo que necesitaba una muestra de afecto en ese momento.

—Edward encontró a su Tua Cantante—La chica de cabellos cobrizos al oír aquello se separó del doctor, mirando a Alice con seriedad—. Estuvo a punto de asesinarla, pero se controló y cuando terminó la clase salió, y simplemente... desapareció por el resto de las clases.

—Quiso evitar la muerte de esa humana...—Las palabras de Esme hicieron que Emmett negará y hablará seriamente rodeando con suavidad con un brazo la cintura de la rubia.

—Quiso evitar decepcionarlos, no quería que con un acto egoísta todo se arruinará—el pelinegro habló serio, sabiendo que su hermano se sentía así.

—¿Alice?—La aludida miró al patriarca—. ¿Viste algún futuro de Edward o de esa humana?

La mirada de la pixie se contrajo por un segundo. Miró con miedo al doctor, a lo que Rosalie le observó entrecerrando los ojos.

—Yo...—La chica no lograba articular palabra, por lo que Rosalie se enfureció al tener una idea de lo que sería.

—¿Qué viste, Lice?—Solar se acercó a ella buscando alguna razón de su mutismo.

Todos se confundieron al notar la actitud de la chica. Jasper notó un miedo en ella como una felicidad inexplicable, de repente sintieron la presencia del pianista.

—Vamos... ¿Qué sucede con esa humana?—Emmett se impacientó y empezó a mirar a Alice en buscando una respuesta, hasta que sintió la mano de su pareja.

Edward entró a la habitación haciendo que la chica detuviera sus pensamientos y los centrara en muchas cosas, así evitando que el chico leyera sus visiones.

—¿Es en serio?—la voz estupefacta de Rosalie llamó la atención de todos. El cobrizo le miró y se sorprendió al leer sus pensamientos. Esme se adelantó y caminó cerca de ella.

—¿De qué hablas, querida?

—¡Alice ve un futuro donde Edward se enamora de Bella!—Aquello fue una cubeta de agua fría para Solar, la cual al escuchar aquello tomó con fuerza a Alice de los brazos y la movió—. ¡Maldita sea!—La rubia señaló al nombrado y le miró molesta.

Las maldiciones de parte de la chica no se hicieron esperar. Emmett al escuchar sus palabras la trató de tranquilizar. Jasper se tensó y trató de controlar los sentimientos de Sol, quien simplemente al ver que Alice no hablaría, la soltó suavemente y se quedó callada.

—Simplemente... Edward decidirá.

La voz filosa de la de cabellos cobre se escuchó, ocasionando que Esme y Carlisle se sintieran mal por ella. Edward al sentir sus palabras se arrepintió de todo y trató de acercarse a ella, logrando una mirada fría de parte de Solar.

La violinista vió a Alice triste, sabía que había tomado su lugar apoyando a Bella. La decepción de la chica fue algo fuerte de sentir de parte del empático, quien miraba a todos; era su hermana más cercana y le hacía aquello.

Fue un borrón lo último que vieron de parte de ella. Rosalie rápidamente fue tras su amiga sin antes darle una mirada de muerte a Alice y a Edward, el cual se encontraba estupefacto. Emmett negó viendo a la chica y se fue a buscar a su pareja.

El lector de mentes, al darse cuenta de lo sucedido se apresuró a ir detrás de Solar, no logrando su objetivo por cierta rubia que con furia lo atacó. En el hogar, Carlisle pensaba acerca de lo sucedido.

—¿Hay alguna forma de evitarlo?—Esme se sentó, sintiéndose mal por su hija. El hombre rápidamente la abrazo apoyándola.

—Depende de lo que haga Edward—Jasper le miró y asintió, sabiendo que era su responsabilidad.

—Esa chica está tras él.

—Dejaremos que Edward decida—Sin dudarlo, el empático esperaba que no eligiera erróneamente. Salió del hogar caminando. Se sentía mal por su hermana, siendo la más cercana a él.

Después de andar por varios minutos, el chico llegó al tronco grande de un árbol caído y se sentó, siendo consciente de que Solar iría con él, lo cual supo que era así al sentir a la chica. Las horas pasaron dejando que el cielo se tiñera de una noche oscura, el rubio recargándose en el árbol.

—¿Jasper?—La mirada del aludido fue hacia la violinista rápidamente. La chica se acercó a paso lento hacia el empático; se aproximó hasta estar cerca de él, este mirándole mientras asentía. Rápidamente la tomó entre sus brazos y la dejó sentarse junto de él.

—Jasper, tengo miedo—Los ojos de Solar se llenaron de lágrimas, estás siendo retenidas por la ponzoña; su respiración se cortó. El corazón del empático se contrajo al verla.

—Tranquila, Sol...—Jasper le acarició el cabello, sabiendo que la chica había desaparecido para ocultar sus pensamientos y comportamiento con los demás. Aunque la noche había caído, no se había ido de su lugar siendo consciente de que la chica lo necesitaría.

—¿Tú crees que Edward se enamore de esa humana?—Aquello era algo que se cuestionaba. La mirada del rubio fue a un árbol y suspiró suave, evitando molestar a la chica en sus brazos.

—No lo sé, pero si sé que te ama, Sol. Nada cambiará el tiempo que han estado juntos—Le acarició el cabello suavemente, escuchando sus sollozos.

—Pero ella es humana...—la chica susurró —. Ella puede darle esa inexperiencia, ella es pura todavía.

La voz de la chica se rompió al final ocasionando que el empático rápidamente tomará su rostro con firmeza.

—Lo que te hicieron antes de que estuvieras con Edward no significa nada—Solar estuvo a punto de protestar, pero al ver la mirada del chico se quedó callada—. Eres pura, Sol. Eres la mejor chica que Edward puede tener a su lado, y si él no lo ve, tranquila, se lo pierde—La suave risa de la chica hizo que el rubio sonriera.

—Si no tuvieras a esa chica... Leire, pensaría que me coqueteas—La mirada del chico cambió al escuchar el nombre de la castaña. Rápidamente, Sol le pinchó el estómago divertida.

—Eh, que tú también eres suficiente para ella—El empático le sonrío suavemente—. He visto cómo evitas ir con ella, no la dañara, Jazz.

—No sé si pueda...

—Claro que puedes—La violinista le miró molesta—. Eres Jasper Hale, sobreviviste a una loca que quería conquistar territorios, a vivir una vida que no querías, a soportar la sangre cuando habías vivido solo de ella—el tono asombrado de parte de su amiga hizo que soltara una risa divertido—. Jazz, tú puedes.

La sonrisa de ambos fue suave. La chica se pasó una mano por los ojos. Jasper suspiró abrazándola nuevamente, sabiendo que eran los más cercanos.

—Jazz—Un sonido del chico hizo que ella continuara—, debes pedirle una cita.

—Lo haré—Sol se separó rápidamente del empático, mirándolo emocionada—. Solo si tú dejas esos pensamientos de Edward.

—Lo prometo, pero debes traerme a mi cuñada.

La risa de Jasper no se hizo esperar, ocasionando que rieran y la chica invitará al lector de sentimientos a cazar. Ambos se abrazaron notando cada pedazo de su corazón unirse; se sentían bien con el otro.

Simplemente un momento juntos ayudaba.




El empatico caminaba lentamente, escuchando los ruidos a su alrededor. Entró al aula donde tomaría su primera clase y sonrió al notar a la invidente esperándolo. Se acercó caminando y grabó en su memoria la expresión que Leire tuvo al reconocer su presencia.

—¿Hoy tampoco hubo cupos?—Una mueca suave de parte del rubio no se hizo esperar. Miró a Leire, la cual sonrió dejando ver un par de hoyuelos que hicieron que el empático le mirara curioso.

—No, no había, desafortunadamente—La chica suspiró pareciendo resignada y miró a su compañero. El texano tomó lugar a un lado de ella.

—¿Entonces tendremos que vivir con esta clase aburrida?—la voz perezosa y arrastrada en sus palabras ocasionaron que el mayor le mirara sintiendo algo indescifrable.

—Lamento informarle que así es, señorita—Sonrió ante sus palabras. Le gustaba como se escuchaba la forma en que se dirigía a ella.

Habían sido varios días donde el chico había comenzado a tratarla como lo hubiera hecho en tiempos atrás; aquellas formas de cortejarla habían logrado que se hablaran más.

—Entonces, Mayor... me acompañará en este sufrimiento—La sonrisa de ambos era una imagen tierna.

Suspiró fuerte el empático. Decidió ignorar aquel sentimiento extraño girándose hacia su compañera, observándola escribir en aquella máquina que le causaba curiosidad. Como otros días, se permitió contemplará, recorriendo suavemente con sus ojos el fino rostro de su compañera.

Se sintió agradable al notar que su sangre había comenzado a ser algo recurrente en su olfato, por lo cual ya no ocasionaba un descontrol en él, o al menos, no tanto como antes. Observó la sonrisa que inevitablemente Leire tenía al teclear sobre un tema que le gustaba.

Notó que en sus mejillas había color rosado, lo cual ocasionó que suspirara suavemente. Siguió admirando, notando que se formaban pequeñas líneas debajo de su barbilla. Vió como en sus ojos las marcas de su sonrisa hacían que hubiera líneas, de esta manera delatándola. Nuevamente miró la sonrisa que tenía, sintiéndose avergonzado por el pensamiento ocasionado de verla.

Sin evitarlo, sus orbes pasaron a su cuello delgado, notando que en el también había cicatrices que se veían algo borrosas. tragó suavemente al sentir como su garganta se secaba. Siguió recorriendo con la mirada su cuello, notando que la blusa que usaba dejaba ver sus clavículas y parte de sus hombros.
Después detalló con sus ojos el collar que portaba; tuvo la necesidad de tomarlo un segundo para dejar en él su aroma al detectar el olor de cierto moreno en él.

—Jasper, ¿puedes ayudarme?—Rápidamente le informó sobre las cosas que ella no podía ver, sintiendo las emociones de la chica. El sentimiento de paz y ciertamente de amor le sorprendieron, era imposible. Con la respuesta esperada por Leire, señaló y explicó lo que necesitaba.

Le observó al finalizar con su ayuda, los cabellos castaños de la chica cayeron por su rostro, cubriéndolo un poco. El empático quiso pasar una mano para quitar aquellos mechones, pero logró detenerse. Finalmente se giró, decidiendo evitar seguir observando a Leire.
Ambos miraron al profesor, el cual hablaba sobre lo que harían en unos días.

Sin dudarlo, de parte de ambos había aquel sentimiento de paz, y tal vez, de amor.

➥Nota de la autora📦📝

O1. La relación se Jasper y Solar es una amistad preciosa❤️
O2. Adoro el avance de Jaire💙 ¿ustedes?
O3. Recuerden que los votos motivan a seguir escribiendo! 💛

JASPERHALE, 2024
© my eyes look at you fanfic

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top