Después de aquel beso, todo transcurrió con normalidad, sin embargo fue incómodo dormir en una misma cama, por lo que me ofrecí a dormir en el sofá, a lo que Baekhyun accedió sin problema alguno ya que de esta manera tendría más espacio para él solito.

Sin embargo el mayor problema era cuando tuve que irme a trabajar ya que al revisar si todo estaba bien con Baek, fue inevitable acercarme y depositar un beso en la frente de este, a lo cual reaccionó con un abrazo y un "te quiero mucho, Chanyeol".

Antes de salir, dejé una notita pegada en la refrigeradora, donde anoté todas indicaciones que le servirían a Baek para sobrevivir sólo unas cuantas horas.

♡.~

Cuando finalmente la jornada terminó me apresuré para llegar a mi hogar, ya que debía admitir que estaba preocupado por Baek.

Al llegar finalmente a la casa, fui muy bien recibido por aquel cariñoso pequeño.

Sin embargo aquel buen genio que tenía no duró mucho...

- ¡Chaaaaaan! ¿Cuánto falta?

Preguntó el pequeño retorciéndose en el mueble debido al hambre que "inundaba su ser".

- Apenas empezaré a cocinar.

Mencioné llevando las verduras recién lavadas junto la tabla para picar al mesón.

- Pero cocina rápido pues, psss.

Dijo sin ninguna pizca de vergüenza mientras apagaba el televisor, en el cual hace un rato irónicamente estaba viendo un programa de cocina.

- Tal vez terminaría más rápido si alguien me ayudara por aquí.

Pareció comprender mi indirecta, ya que en cuestión de segundos, tenía a Baekhyun metido entre el pequeño espacio que yacía entre el mesón y yo al cortar las verduras.

- A ver, enséñame.

Mencionó mirándome a los ojos con una amplia sonrisa para luego voltearse quedando de espaldas hacia mí, logrando desconcentrarme un poco ya que a pesar de que mis brazos eran largos tenía que apegarme más si quería cortar las verduras, quedando en una posición algo incómoda debido a la cola de Baek, la cual después de unos segundos envolvió mi pierna, logrando así sacarme un sonrojo.
Al no obtener una respuesta de mi parte, tomó el cuchillo de mi mano y comenzó a cortar la zanahoria como le dio la gana, sin embargo lo hacía con rapidez.

Diablos, aquello sonó mal.

Dejando de lado mis perversos pensamientos, tomé nuevamente el cuchillo para así corregir los errores de Baek.

- Es así.

Mencioné cortando unas rodajas de zanahoria, por lo cual Baek me arrebató el cuchillo de las manos para así cortar él. 

- ¿Lo estoy haciendo bien, Yeol?

La inocente voz de Baek estaba comenzando de una manera extraña a incomodarme, o mejor dicho a incomodar mi pantalón.

Baek lo notó, y por esta razón se giró quedando frente a mí nuevamente.

- ¡Estás...!

- Shhhhh.

Tapé su boca ante la vergüenza que tenía, ya que no es un tema normal para hablar, menos con la persona causante de tu... eso.

- P-pediré comida.

Tartamudeando me alejé hacia mi cuarto para así pedir una pizza desde mi celular.

♡.~

Cuando finalmente me digné a salir de mi "escondite" al ya estar calmado del todo, Baek ya estaba devorando de pie los pedazos de pizza desde su caja, al parecer le había dado pereza de tomar un simple plato.

Aún con vergüenza me senté frente a él en el taburete que se encontraba del otro lado del mesón.

- Yeol, yo.

Apenas pudo hablar ya que tenía la boca llena de pizza.

- Lamento lo que pasó hace un momento, no sé qué, argh. ¿Puedes olvidarlo? Por favor.

Realizó un sonido de afirmación, sin embargo levantó su índice, dando a conocer que había una condición.

- Pero pediré algo a cambio.

- ¿Qué cosa?

- Te lo diré después.

Mencionó moviendo su cola elegantemente, siempre que hacía eso era capaz de sacarme una sonrisa.

- De acuerdo.

Mencioné bajándome del taburete para así tomar dos platos y ponerlos en el mesón para así comer mejor.

Cuando terminamos la pizza Baek se ofreció a lavar, secar y acomodar los platos, en lo cual terminó siendo bueno ya que no demoró.

- Gracias, Baek.

- ¿Cómo que gracias? ¿Y mi premio?

Preguntó cruzado de brazos apoyándose en el lavabo.

- ¿Y qué quieres de premio?

Al preguntar, me miró con una pose pensativa, analizando bien lo que pediría.

- Quiero un beso.

Por suerte no pidió algo difícil de cumplir, sólo quería un... ¡¿Beso?!

- ¿Qué?

- Sí, quiero un beso, o si no te molestaré todo el día con lo que pasó hace un rato.

Ok, me la estaba poniendo difícil. Aunque pensándolo bien, era un simple y casto besito, el cual no iba a dañar a nadie.

- Bien, tú ganas.

Al estar de acuerdo, Baek cerró sus ojos, abultando levemente sus labios con sus manos en forma de puños pegadas en su pecho mostrando la imagen más tierna que pude haber visto en mi vida.

Tomé del mentón a Baek para así posar mis labios sobre los suyos, cumpliendo con el acuerdo.

Al separarme, Baek me miró con desagrado.

- ¿Y qué fue eso?

- El beso que pediste.

- Pssss, así mejor no me des nada.

Cruzó sus brazos nuevamente, levantando levemente su cabeza demostrando indiferencia.

- Pero si...

- ¿Sabes? No creí que llegaría a esto, pero debería enseñarte a besar.

Dijo descolocándome en un principio, sin embargo después comprendí al ser sorprendido por un encendido beso proporcionado por el pequeño.

Colocó sus manos sobre mi nuca, apegando su cuerpo al mío para así profundizar el beso pidiendo entrar su lengua en mi boca, a lo cual accedí sin ningún problema tomándolo de la cintura, sin embargo cuando traté de juntar más nuestros cuerpos, Baek se alejó un poco con una sonrisa coqueta.

- Eso. -Depositó un último 'piquito' en mis labios para alejarse por completo.- Fue un beso.

Se retiró moviendo sus caderas junto a su cola de un lado hacia el otro, dejándome con el deseo de seguir con aquel beso.

Aún no podía creer cómo aquel chico era capaz de ser una persona adorable y tierna pero a su vez sexy y tentadora, siendo capaz de enamorar a cualquiera... Incluso a mí.