En el momento en el que los rayos del sol penetraron por la dichosa ventana, la cual, alguna genia había decidido que sería mejor no cerrar las cortinas anoche. Mis ojos empezaron a querer cerrarse mas y mas fuertes, pero al parecer eso no funcionaba para volver al modo Trance-No-Me-Entero-De-Nada . A si que me levanto poco a poco, dándome cuenta de que solo quedo yo en la cama.

Miro la hora del móvil y me sorprendo al ver que son las once menos veinte de la mañana. Tengo alguna llamada perdida que otra de Nico, el chico tatuador, el cual quedé ayer por la noche en que iba a ir hoy a hacerme nuestra obra de arte, pero al parecer, el sueño me ha ganado en este combate.

Le llamo de vuelta para ver si podemos posponerlo una hora mas, cosa que acepta tranquilamente con la excusa de que si soy amiga de Kathe, me tendré que parecer en algo a ella, si no, no nos llevaríamos nada bien por el carácter exasperante de los hermanos.

Salgo del molledito y fresco colchón y busco por este los calcetines para no pisar el negro y frío suelo de la casa de Katherine. Me los pongo y mientras voy a a hacer un pis, me hago un moño alto para no mojarme el pelo en la ducha.
Quisiera saber quien prefiere la ducha a la bañera. Siendo sincera, una fantasía muy nítida en mi vida es tener mi propia casa con mi vestidor, mi propio baño con bañera y mis productos para el cuidado de la piel. Sales de baño, mascarillas para la cara, exfoliantes para todo el cuerpo, etc. Toda una fantasía, pero la verdad, es que ahora mismo, no puedo permitirme perder el tiempo en una bañera.

¿Claro, por que tu educación te permite meterte en una bañera que no es tuya, llenarla de jabón, litros de agua tibia y gastarle las sales a la madre de tu amiga, verdad?.
Gracias conciencia.

La ducha no dura mas de cinco minutos, a lo que me sorprendo yo misma, ya que antes de mudarme a Murcia, mis encuentros con el agua duraban mínimo veinte minutos. Yo creo que es la edad, que comienza a hacer mella en mis acciones como una pre-adulta.
Me pongo mis converse a cuadros blancos y negros, mis tejanos azules que convino con la camiseta del mismo color con partes blancas de manga corta. En la habitación tengo un pantalón corto de chándal, como el de los boxeadores profesionales, el cual usaré cuando llegue al estudio de Nico para que le sea mas fácil trabajar.

Ahora si me suelto el pelo y lo peino de manera que parece desaliñado, pero es una estrategia de moda.
No tengo muchas ganas de maquillarme, por lo que hago uso de mis dones y me pongo solamente rímel, rubor y un poco de brillo en los labios.

Cuando termino, vuelvo al cuarto de Kathe y lo meto todo en mi mochila para no dejarlo revuelto. Ya no me agrada hacerlo el mi habitación, mucho menos en el ajeno.

Bajo a la primera planta para darme cuenta de que mi amiga no estaba. En su lugar, me encuentro con Okane, el hermano de Kathe, pero al pasar por mi lado, hace como si no hubiese nadie en casa, es decir, me ignora por completo.
Yo no se que problema tiene este chico conmigo, la verdad. Cuando lo conocí, me acuerdo perfectamente que me sonreía, fue simpático, pero a la vez desafiante. Bueno, desafiante, imponente, provocador, insolente, vacilón y todos los sinónimos que queráis llamarle. Pero ahora, es como si yo fuese un fantasma. No existo.

Decido ignorar al grandullón y me comienzo a encontrar un poco incómoda.
¿Dónde habrá ido esta niña?. Sin la castaña aquí, me da vergüenza casi hasta respirar. En una casa enorme donde no tengo ni idea de donde están ni los vasos. Aii, no, yo me voy de aquí.

Subo las escaleras a toda velocidad, como si hubiese visto el mismísimo diablo y cojo mi móvil. Meto mi teléfono en mi riñonera la cual aunque no pegue mucho y parezca que vaya a vender entradas ilegales, es útil y vuelvo a bajar con el dinero, carné, maquillaje esencial y las llaves de mi casa encima, por que en casa tengo la crema de los tatuajes y todo lo que necesito para la curación de mi próximo bebé.

Debo de admitir que estoy nerviosa, como siempre que me hago un tatuaje, pero las ganas de ver mi creación en mi piel, una vez más, es aun mas grande que el manojo de nervios que siento en la boca del estómago.

Mientras mi mente viaja por el pasado acordándome del camino hacia la tienda, mi móvil vibra dentro de la riñonera negra que hace juego casi sin querer con mis bambas. Y digo casi por que el negro y el blanco son los mejores colores para combinar.

Mensaje de K.Jones <3.

-Chinita, ¿Te despertaste ya?. Me fui a hacer algunas compras con James, avísame cuando vayas a hacerte el tatoo, quiero ir contigo.-

El mensaje de Kate me saca de mi nube de delirios sobre moda y colores.

+¿Que cosas vas a comprar si no te cabe nada mas en la habitación muchacha? Jajajaja. Ya voy de camino a la tienda tía, no te preocupes si no puedes venir, creo que voy a estar tatuándome la mayor parte del día.+

Contesto su mensaje y vuelvo a guardar el aparato en su sitio, mentalizándome de nuevo de lo que estaba apunto de hacer.

* * *

-Vale Charlotte, ¿Estás preparada para la sesión mas larga y dolorosa de tu vida?- terminando de montar la máquina, Nico decide hacerse el gracioso poniéndome aun mas nerviosa de lo que estaba.

-Quisiera que tus palabras pudiesen tranquilizarme, no sacarme de quicio, gracias por eso, amigo.- le respondo irónica sabiendo que iba a pillar mi humor, ya que es parecido al de Kathe.

Suelta un siseo de manera divertida y me coloco de lado, sobre una de mis piernas, dejándole a la vista la zona de trabajo, la cual ocupa gran parte de mi nalga izquierda y otra parte de mi muslo.

-Vale, con tu permiso voy a manosearte durante unas siete u ocho horas gran parte de tu culo, a si que, de ante mano, disculpa. Pero antes de darte el gusto de que un tiarron como yo te manosee, te tengo que depilar la zona para que los pelitos que tengan no entorpezcan mi trabajo.- me explica medio jocoso el muchacho sin darle mucha importancia a lo calenturienta que seria esta escena en según que paginas adultas.

-Trabaja y calla anda. Ahora entiendo por que te llevas tan bien con la familia Jones. - me río ante el ruidito que sale de su garganta en forma de afirmación a las palabras que le acabo de decir.

-E vero.- me da la razón y comenzamos a reír mientras pasa su mano una y otra vez por mi pierna intentando notar los pelos en la zona y rasurarlos con cuidado. -Vale, chica sin pelos, comencemos con tu obra de arte. Mira si te gusta aquí arriba o mas abajo, tu decides. Donde te guste, planto el transfer.- me enseña el dibujo sobre mi piel. Apenas sin darme cuenta y con toda la confianza del mundo, cojo sus manos y las dirijo en la dirección en la que me gustaría tener mi gran diseño.

-Aquí está perfecto.- presiono el folio sobre mi piel ayudándolo a que no se mueva, facilitándole el trabajo al muchacho.

-Muy bien señorita, allá vamos.- retira poco a poco el papel lleno de tinta, dejándome ver media pierna llena de mi futuro tatuaje eterno. Coge un trozo de celo y lo pega en la esquina de su mesilla auxiliar. Me vuelvo a girar del todo en la camilla, cerrando los ojos a la espera de los primeros pinchazos dolorosos y comienzo a escuchar el sonido de la maquina torturadora. -Voy.- repite las mismas palabras que le dijo a Kathe cuando estuvo ella en el mismo sitio que yo.

Abro los ojos como platos al notar los primeros latigazos. La madre del cordero, no había sentido este dolor antes en ninguno de mis tatuajes. ¿Por que tuve que hacer un diseño tan grande?.

* * *

-Nico, o terminas ya o tu vida va a ser la que termine.- le amenazo después de siete horas de trabajo aguantando el dolor. -Me cago en la madre que parió al primer ser humano de este maldito mundo.- maldigo otra vez sintiendo como repasa el pétalo de una de las últimas flores.

-Estás aguantando mejor que muchos machotes, estoy sorprendido por tu aguante al dolor, pero como no quiero morir, vamos a hacer un descanso antes de terminar con las flores. Solo quedan tres, será una hora más mas o menos.- escucho como apara la maquina y siento paz en mis oídos y en mi pierna, la cual pensé que se hincharía mas, pero al parecer, las palabras del muchacho son ciertas y mi aguante es elevado, tanto como para que no se abulte en demasía. El ruido que los guantes deslizándose por sus dedos me da la señal que tanto había esperado.

Me incorporo en la camilla y me sorprende ver a mi tatuador con un paquete de tabaco en la mano.

-Vamos fuera a hacer el descanso, así te despejarás.- me dice haciendo un leve movimiento de cabeza.

Le sigo hasta la salida y me sorprendo ver como Katherine, James y otro chico llegan por la esquina dirección nuestra casa. En el momento en el que caigo.
Llevo media nalga al descubierto. En medio de la calle. Con James acercándose.

-No te creo.- me dice la morena mirándome el tattoo mientras se agacha de cuclillas al llegar a mi lado. -Está brutal Char, yo sabía que te iba a quedar rompedor, ya verás cuando te lo vea la gente en la piscina. Me pone cachonda y todo.- dice manoseándome la parte de la pierna que no está tatuada.

Abro mis ojos como platos y Nico se ríe a mi lado, notando el brinco que he dado antes sus palabras lascivas y calenturientas.

-Niña, no sabia que te iban las mujeres también.- se ríe el tatuador mientras se enciende su cigarrillo.

-No me van, pero no las he probado nunca, a si que nunca se sabe.- le guiña el ojo haciendo que ahora sea él el que se sobresalte de la impresión.

-Tu hermana esta desacatada hermano.- le codea el desconocido a James, el cual no ha apartado su oscura mirada de mi muslo. El muchacho, en lugar de contestarle, me mira a los ojos de una manera inquisidora, la cual hace que todos los vellos de mi cuerpo se pongan alerta ante este acto.

-Es coña, ella lo sabe.- bromea la castaña levantándose y abrazándome con un brazo mientras me da un beso en la sien. -Pero está buenísima, si fuese bisexual o lesbiana, le tiraría la caña fijo.- la sentencia de su aclaración, hace que el desconocido se ría entre dientes. Que su hermano le fulmine con su mirada matadora y que Nico bufe de desesperación. Supongo que se imaginó escenas X, ya que le da una calada al cigarro mas larga que el camino de Santiago mientras cierra los ojos.

Los hombres, hombres son al fin y al cabo. No importa quien seas, mientras seas un ser del sexo opuesto. O del mismo, según gustos.

-Bueno.- carraspea el desconocido mientras me mira fijamente. -Ya que nadie me presenta, lo hago yo. Soy Silver, el dueño de este local y el que te va a proponer algo para que te saques un sobre sueldo, si es que quieres.- me tiende la mano presentándose.

-Yo soy Charlotte, la que te va a escuchar esa gran propuesta para que gane mi dinerillo.- sonrío devolviéndole el saludo al coger su mano.

-Vale, nos conocemos todos. Vamos a seguir el tatuaje mientras el te explica, ¿Vale?. Es que si no se te va a enfriar mucho la zona y después te dolerá más.- me explica Nico dándome un toquecillo en el brazo para llamar mi atención.

-Vamos.- abro la puerta con total confianza y la mantengo así, dejando pasar a todos.

Por ultimo pasa James, el cual aprovecha que todos se han ido hacia la sala donde está la camilla para encararme.
Se me queda unos segundos mirando aguantando la puerta, apoyándose en ella con la mano, quedando como una persona muy interesante.

-Niñata.- me susurra a escasos centímetros de la cara mientras con su mano acaricia mi espalda baja casi llegando al trasero.

-Estúpido cascarrabias.- contrataco sintiendo como el corazón se me acelera cada vez más al punto de casi salirse se mi pecho.

Muerdo mi labio inferior para no soltar ningún suspiro y el lo nota.
Sonríe sobre mis labios y se aleja satisfecho.

Genial, sabe que me sigue poniendo nerviosa por no decir otra palabra. Sabe que me tiene en la palma de la mano, a pesar de que yo niegue todo. A pesar de que le diga que se aleje, que me deje en paz, que me invente relaciones. El sabe perfectamente que mi corazón y mis hormonas le pertenecen y eso le encanta.

-Bonito tatuaje.- cierra del todo la puerta y desaparece de mi vista. Dejándome atónita, con el corazón vuelto loco y inundando el local.

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LO SIENTO, LO SIENTO, LO SIENTO. SE QUE LLEGO TARDE AL CAPITULO DEL VIERNES. SE QUE ESTAMOS A SABADO Y TAL. PERO HE VUELTO AL CURRO Y ESTOY DE TURNO DE NOCHE, A SI QUE LA VERDAD, NO SE EN QUE DIA VIVO.
Debido a esto, este capitulo es mas largo, por que a pesar de que no he tardado mucho en actualizar, me sentía mal por hacer un capitulillo de 1.200 palabras, así que aquí tenéis la recompensa.

¿A que está jugando James con la pobre Charlotte?. Y lo que es peor. ¿La muchacha sabrá diferencial el deseo sexual al deseo de amar?.

¿Qué le querrá proponer Silver, el dueño de la tienda de tattos a Charlotte?.

¿Y que le pasa a Katherine con esas hormonas?. ¿Tal vez si esté embarazada, o es simplemente una salida:')?.

LA FOTO DEL DISEÑO DEL TATUAJE ES DE MI HERMANA, ES MAS, ES UNO DE MIS TATUAJES Y ESTA EN EL MISMO SITIO QUE EL DE CHARLOTTE. ( MI HERMANA PEQUEÑA ES TATUADORA), A SI QUE SI COGEIS EL DISEÑO, POR FAVOR DAR CREDITO.

SU PAGINA DE TATUAJES ES ESTA :

Aquí están algunos de sus diseños.

En fin, muchas gracias por seguir leyendo, apoyando y comentando.

Ya saben, en Halloween se vienen cosas jugosas, no aptas para gente frágil. Por otra parte, dado que 'Vida nocturna' no llegó a nada en los Wattys, subiré unos Shorts de cada personaje dentro de poco, que darán pie a la segunda parte del libro, la cual no tendrá mucho que ver con el primero, pero siempre hay cosas entre lazadas cuando se trata de la familia, ¿Cierto?.

Espero que les siga gustando esta novela y que pronto me apoyen por las otras cositas que están a punto de salir. Un gran beso y nos vemos pronto de nuevo.

✍️+⭐

Chaosiiiitooo, los quiero💕!.

💋🥥🍫🍍🐮

-Em!🌸.