-¿Que te ha pasado maldita loca?.- me pregunta Nuria nada más entrar por la puerta.

Si ella supiera que llevo veinte minutos secándome al poco sol que quedaba por la parte de detrás de la casa, para poder ponerme los pantalones del entreno, asquerosos pero necesarios. No me miraría con esa cara, me miraría con una peor.

-Es que vengo de entrenar madre.- me excuso. Realmente no era del todo mentira, pero es mejor que omita que he entrenado con el muchacho de enfrente, que me metí en la piscina con el y que casi me lo como.

-Ajam. - me estudia con la mirada sin terminar de creerme. -Va sube a ducharte y a cenar. Y hazme el favor de poner eso a lavar, anda, que huele a rayos.- hace una mueca de asco cuando paso por su lado para subir por las escaleras.

Su reacción es de lo más entendible, pero su manera de decírmelo es única.
Siempre ha tenido esa manera tan cercana de hablar conmigo, es algo que la caracteriza. Le da igual que sea pequeña o grande, suelta lo que piensa y cuando lo piensa. Realmente me parezco a ella.

Tras una ducha relajante y un poco de escroleo en YouTube, me tumbo en la cama y me giro hacia la ventana, donde puedo ver a Kora, la perra de James, corriendo de una punta a otra del jardín detrás de unos gorriones.

Doy un brinco en la cama, acelerando mi ritmo cardiaco cuando me acuerdo de que yo ahora soy madre de una criatura también.
Muy bien Charlotte, admirando la perra del vecino buenorro de enfrente pero no le prestas atención a tu propio bicho.

Salto de la cama bajando a toda prisa las escaleras y me tiro al cuello de Sebas, abrazándolo y comiéndomelo a besos.

-Para para, exceso de amor. Enserio Charlotte para.- me repetía una y otra vez intentando deshacerse de mi, pero no lo iba a lograr y menos después de regalarme a mi peludita, que ya estaba saltando a mi alrededor e intentando alcanzar el borde de mi camiseta 3XL mientras soltaba ladridos agudos y estridentes.

-Gracias gracias gracias.- beso aquí, beso allá, beso en la frente.

-La devuelvo eh.- amenaza viendo que no paro quieta y ya empieza a agobiarse.

Detengo mi ataque de amor en agradecimiento hacia Sebas y miro a mi madre y a su marido con cara de loca de película de terror. Sonriendo poco a poco, logrando de esta forma una sonrisa un poco diabólica.

-A nosotros no nos mires, es solo cosa suya. Hasta nos convenció para conseguir el permiso que necesitaba para comprarlo.- Nuria mira a David, el cual se hace el distraído intentando disimular su sonrisa  que decía claramente estar encantado con la perrita mientras la miraba jugar con nosotros, o intentarlo.

-A si que de verdad ha sido cosa tuya...- lo miro con los ojos empañados y le sonrío volviendo a abrazarle. Pero este gesto, ahora es mucho más sentimental y verdadero que todos los que le di antes.

- Es que la vi en el escaparate y como siempre me has dicho que querías uno, me acordé de ti. No sabía si me dejarían o que, a si que primero los llamé sin irme de la tienda, cuando aceptaron después de media hora insistiendo, preparé todo.- explica el rubio devolviéndome el abrazo y suspirando sobre mi cabeza con su barbilla apoyada en mi coronilla.

-De verdad, gracias. Solo vosotros sabéis lo mucho que me gustan los perros.- les digo a todos separándome al fin de mi hermanastro.

-Si, lo sabemos pesadita.- se ríe el rubio dándome la razón. -Por cierto. Este es mi regalo de cumple adelantado, el 10 de mayo no quiero reclamos, eh.- me advierte levantando el dedo índice y apuntándolo a mi cara.

Todos reímos por ello y tuve una sensación de plenitud que hacía tiempo no sentía.

Llevarme bien con Sebas tal vez me había hecho sentir esa sensación, o el cómputo de todos los hechos.
Entreno, chapuzón, ducha, mi perrita, la familia al completo... ¿Que más podría pedir?.

Un novio.

Vale, conciencia gracias por recordarme que estoy más sola que la una.

Después de charlar un rato mientras yo cenaba, fuimos menguando y desapareciendo poco a poco debido a los niveles de sueño de cada uno.

Sólo quedábamos Sebas y yo, junto con Rowdy que se había quedado dormida en mis piernas. 

Dejó a la bolita blanca a un lado con cuidado y voy a la cocina para mirar en la nevera, a ver qué podría comer de postre.
La verdad que me apetecen crepes, pero me da mucha pereza ponerme a hacer toda la parafernalia, a si que abro el congelador y cojo un par de Almendrados. No son crepes pero tenía chocolate por lo menos.

-Oye Sebas, ¿Puedo preguntarte algo?.- le digo tirándole su helado haciendo que sus reflejos se activen por un momento. Esperando una respuesta, abro mi postre y  vuelvo a colocarme en el sofá, cosa que mi bolita blanca detecta y se vuelve a acomodar en mi regazo.

-Dispara hermanita. Y gracias por esto.- me contesta sin mirarme a la cara y nisiquiera inmutarse por mi pregunta.

- No es nada muy importante o existencial. Pero al fin y al cabo, ya no hablo con mamá sobre chicos y el único que puede darme tal vez un buen consejo, eres tú. Aprovechando está tregua peluda que nos hemos tomado para ser hermanos normales he decidido  preguntarte.- yo estoy sentada en el sofá a su izquierda, pero él está sentado al estilo indio en el suelo, haciendo de esta velada, espaciosa y respetable. Le pone pause a su serie y se gira para mirarme fijamente.

-Dime. No soy el mejor en las relaciones, pero si puedo darte un consejo, lo haré.- me dice apoyándose sobre su codo en el sofá y apoyando la cabeza en su mano, expectante mientras que con la otra come su helado.

-Hay dos chicos que me atraen físicamente. Me gustaría decirte que son buenísimas personas, pero debo admitir te que apenas los conozco. Sólo se que me entran cosquillas en todo el cuerpo nada más acercarme a ellos. - hago una pausa esperando que diga algo, ¿Pero que va a decir, si aún no hice la pregunta?. - Hay uno de ellos, que ya me lo he comido, pero me enteré que tiene novia, a si que me estoy intentando alejar. Pero lo peor no es eso. El sigue buscándome a pesar de que ambos sabemos que no podemos. - aireo las manos frustrada y resoplo al final de la oración.

-¿Y el otro tiene novia?.- pestañea realmente interesado esperando a que suelte prenda.

- Supuestamente soy yo. Pero soy una novia falsa para joder al primer tío del que te hablo. El problema es que mañana he quedado para ir con él segundo y sus amigos a la piscina, pero no me puedo sacar de la cabeza al primer tío. ¿Que hago?.- suspiro aliviada al notar que he escupido todo lo que tenía en mente.

Me mira unos instantes y se rasca la nuca bufando, pero no creo que el sople por alivio, si no por qué ahora tiene las mismas dudas que yo en su cabeza.

-Lo que yo haría es dejarme fluir. Eres joven Char, disfruta tu juventud. Si quieres algo ahora, hazlo, por qué después, cuando eches la vista atrás, te arrepentirás de no hacer ese algo que querías.- hace una mueca, haciendo que sus labios se tiren hacia adentro, pareciendo un pececillo experimentado.

Asiento comprendiendo lo que quiere decirme y tiene sentido. Si en un momento me apetece besar a Min-ho, lo haré. Si me apetece besar a James, lo haré. Y si mañana conozco a otro chico y me gusta, haré lo que quiera.

-Gracias hermanito.- le sonrío y le doy un beso en la frente. -Ojala tuviésemos más días de hermanos en paz, me gusta.- sin quitar la sonrisa de mis labios, me levanto del sofá con cuidado y Rowdy en brazos, para despedirme de Sebas. - Buenas noches Bro.-

-Buenas noches Sis.- me contesta haciéndome reír con sus palabras y con su poca vergüenza. Buen consejo para solteros me dió.

Mensaje WhatsApp

Mona:
Naranjita🧡, perdón por olvidarme de ti esta mañana y por no cogerte las llamadas, es que Noa me necesitaba en casa de sus padres. Ya sabes, temas suyos personales. ¿Cuando nos vemos?. ¿Haces algo mañana?.

Me quedo mirando la pantalla del móvil mientras subo las escaleras y un plan se traza en mi mente.

Me llevaré a Katherine mañana a la quedada con Min-ho, nos lo pasaremos brutal y no pensaré en nada más. Sólo teníamos que comprar otra entrada.

Mensaje WhatsApp:

Yo:
Mona😏, mañana he quedado con Min-ho para ir a la piscina, pero quiero que vengas conmigo, solo necesitamos una entrada más y ya está, será fácil. Te veo mañana a las 8 de la mañana para ir a por la entrada.  Bonanit fea🥰.

Dejo el movil en la mesita del escritorio cargando y aún con Rowdy en brazos, rebusco en mi armario algo que me de menos calor esta noche.

Mi bolita de pelo blanca estaba medio dormida, a si que ni se inmutó cuando la dejé sobre la cama para cambiarme de camiseta XXL  a una de tirantes semi transparente.
Saco por mi cabeza el saco de patatas enorme, sin acordarme, claro, de que mi ventana estaba abierta y trás ella, había un espectador con la boca abierta.

James.

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De nuevo haciéndolo otra vez!!!. Vamos a darle la vuelta a la tortilla, por qué si no es muy aburrido, si no, no sería una novela juvenil +18. Vamos a subirle el tono a esto chic@s!!!.

Espero que os estén gustando estos capítulos esta semana y recordaros que serán 1 al día hasta el domingo.

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Si veis alguna falta de ortografía corregirme porfis.

Votad si os gustan los capítulos y comentad que os va pareciendo!♥️.

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-Em!🌸.