Cuando desperté la busqué desesperadamente, salí de la cama y la encontré en la cocina, me alivié en cuando vi su figura ahí.

-Buenos días - dijo al verme, me acerqué y la abracé, siempre hacia lo mismo ¿será que siempre sentía este alivio al verla ahí, aunque no me daba cuenta?

-Buenos días - besé su cabeza - huele rico el desayuno

-Gracias - sirvió el desayuno y nos sentamos en la mesa

Otra vez comía muy poco, debía hacer algo con eso, no quería verla enferma.

-Oye Yon - ella alzó la vista - creo que deberías comer más - frunció el ceño

-Lo intento - ¿qué quería decir eso? se levantó de la mesa, no me había fijado en su ropa

-¿Vas a salir? - esperé a que saliera de la cocina

-Universidad - contestó simplemente, lo había olvidado por completo

-¿Paso por ti? podemos ir a comer - asintió tomando su mochila

-Salgo a las 3 - iba a salir del departamento pero se acercó a mi y besó mi mejilla - cuida la casa

Y se fue corriendo, podía vivir siempre así, los dos juntos cada mañana, yo trabajando y ella estudiando, lo malo fue que olvidé algo importante.

****

-¿Desorden alimenticio? - pregunté de nuevo, Jin asintió, antes de que fuera por Yon a su escuela pasé a ver a los chicos, me encontraba hablando con Jin cuando le mencioné lo que había notado

-Sí, me dijo que no te dijera nada pero sabía que lo notarías - sonrió - por algo eres su mejor amigo - su mirada de volvió seria - no me sorprende que ella desarrollara algo así, ya sabes, todo lo que le ha pasado - asentí

-¿Qué debería hacer? Yo no sé nada de esas cosas y para ser sincero, no sé mucho sobre Yon ahora, siento que si hago algo mal la romperé - él suspiró, al parecer estábamos igual

-Hazle entender que te preocupas por ella, creo que lo mejor sería vigilar que coma bien - asentí, era lo mejor que podía hacer

Me despedí de él y me fui a su universidad, iba con unos lentes negros y gorra esperando que no me reconocieran, por suerte ya estaba esperándome en la entrada.

-¿Qué quieres comer? - pregunté, la anterior Yon hubiera pedido lo que más se le antojaba pero esta Yon dijo otra cosa

-Lo que tú quieras, me da igual - asentí levemente evaluándola

-Vamos por unas hamburguesas - tomé su mano y la llevé

No podía dejar de notar como había cambiado, antes comía dos hamburguesas enormes pero ahora apenas si comía la mitad de una.

-Yon - empecé a decir pero ella frunció el ceño

-No tienes que decírmelo, ya lo sé - se puso mis lentes y se quedó cruzada de brazos

-¿Y si ya lo sabes por qué sigues sin comer? - miró hacia otro lado con los lentes puestos

-No lo sé, quisiera saberlo pero la comida ya no me gusta, detesto comer - quería llorar porque la conocía bien o había conocido muy bien, amaba comer y verla comer era adorable 

-¿Y si piensas que la comida soy yo? - ella sonrió - me harías feliz si comes como antes - tomé su mano que estaba muy lejos de mi

-Lo intentaré - dijo por fin con una pequeña sonrisa

****

El problema era que yo no estaba ahí siempre, luego de eso tuve que irme a una gira y no pude seguir vigilándola por varias semanas, todos los días hablaba con ella para asegurarme que estuviera bien, siempre contestaba diciéndome que lo estaba y que comía bien, ¿entonces por qué estabas tan mal cuando llegué?

Ese día la vi más pálida, más delgada y con una sonrisa más pequeña.

-¿Quieres comer? preparé algo que te gustará - dijo entrando en la cocina, me estaba quitando la gorra que andaba cuando escuché como se caí una cuchara al piso, corrí a ver que era y en ese preciso momento ella caía al suelo

-¡Yon! - logré atraparla antes de que su cabeza golpeara contra el suelo, la moví para que despertara pero no lo hizo, seguía respirando así que intenté calmarme, la llevé hasta la sala en donde la dejé en el sillón, llamé a emergencias

Luego de eso pasaron muchas cosas más que mi mente ha olvidado, sólo recuerdo la desesperación que sentía al verla desmayada, su piel pálida y yo llamando a Jin para que llegara, me estaba rompiendo por dentro.

En el hospital esperaba en emergencias cuando llegaron los chicos, no me dijeron nada simplemente se sentaron a mi lado sintiendo mi dolor conmigo. Al fin pude entrar a verla, el médico me explicó la mala condición de Yon, había desarrollado anemia debido a su mala alimentación, ya que no había otro familiar más que yo me pidió que cuidara su alimentación o podía acarrear más problemas en su salud, me senté a su lado y tomé su mano.

-¿Por qué Yon? - murmuré viéndola en la cama blanca, su otro brazo tenía un suero en alguna de sus venas, sus ojos se veían bastante hundidos en su rostro - debí quedarme a tu lado - sin poder evitarlo las lágrimas bajaron por mis mejillas - te cuidaré

Pronto acabaría la gira, sólo un poco más y estaríamos juntos. Sólo que seguía olvidando un pequeño gran detalle.

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