---- ARON ----

- Sí, mamá. Ya voy por mi esposa, y luego iremos a casa para comer contigo. - Le hablaba a mamá por teléfono.

Mi hermano Baekho vendría a casa, desde Estados Unidos. Mamá había preparado una comida especial para recibirlo.

Llegué a la empresa donde Alex había pedido trabajo. Ella tenía que estar en nuestra reunión familiar. Entré y la vi de pie. Me acerqué.

- Bebé, ya vine por ti. ¿Te dieron el trabajo? Hoy salí temprano y decidí venir a verte... - dije, pero ella miraba a alguien. Observé hacia la misma dirección y ahí lo vi a él.

No pude evitar admirar tal belleza frente a mí. Sus ojos, su cabello bien acomodado, pero, sobre todo, sus labios. Él dirigía su vista hacia donde me encontraba.

- Sí me dieron el trabajo, bebé. ¡Estoy emocionada! - me habló Alex.

Aquel sujeto se acercaba más a nosotros. Empezaba a ponerme nervioso. Mis piernas se paralizaban.

- ¡Hola! Debes ser mi nueva asistente... Alexandra, ¿Cierto? Soy Hwang Minhyun - habló finalmente ese hombre, dirigiéndose a mi amiga.

- Sí, soy Alexandra Robinson. Puede llamarme Alex, jefe. - respondió Alex, haciendo reverencia.

- Y... ¿Quién es él? - le preguntó a ella, refiriéndose a mí. Sus ojos se clavaban en los míos.

- Oh, él es Aron Kwak, mi mejor amigo - respondió Alex. - Aron, él es mi jefe Minhyun - nos presentó.

- Mucho gusto - respondí haciendo reverencia.

- El gusto es mío - habló él, sonriéndome. - Señorita Alex, la quiero mañana temprano. Tenemos mucho trabajo. Y si quiere, no me incomoda que la acompañe su amigo - habló Minhyun.

- Por supuesto, jefe. - respondió Alex.

En todo el camino a casa, no dejaba de pensar en Minhyun.

- ¡Aronie! ¡Te estoy hablando! ¿A dónde vamos? ¿Por qué vienes por mí? - Alex interrumpió mis pensamientos.

- A casa.

Llegamos a la mansión. Ahí estaba toda mi familia, incluyendo a Baekho. Nos sentamos todos en la mesa.

- Por cierto, muchas felicidades, hermanito. Por fin sentaste cabeza con alguien - me habló Baekho sonriendo.

- Muchas gracias, hermano - respondí algo tímido.

- Ya me estabas asustando. Pensé que no te gustaban las mujeres - habló, y escupí la sopa.

- ¡Qué tonterías dices! - habló Alex, riendo como para intentar calmar el ambiente.

- Es la verdad, cuñada. Casi no le conozco ninguna novia a mi hermano. Excepto tú. Pero pensé que sólo eran amigos - respondió Baekho.

- Sí, pero...al final nos gustamos, ¿Verdad mi amor? - me preguntó Alex sonriéndome. Acarició mi barbilla.

- Sí, cariño - respondí tomando su mano.

- Mucho amor, ¿Y para cuándo los hijos? Ya quiero ver un nieto. - habló mi madre. Alex y yo nos quedamos viendo.

Nos fuimos a dar un paseo al parque, en familia. Alex y yo debíamos ir tomados de la mano. Todo parecía tranquilo, hasta que un hombre joven estaba a punto de atravesar la carretera como si fuera inmortal. El semáforo ya estaba en verde, y aquel hombre iba con audífonos, en su mundo.

- ¡Hey! ¡Cuidado, amigo! - grité soltándome de Alex. Ella se echó a correr hacia ese hombre.

- ¡Cuidado! - gritó ella.

Alex abrazo al chico por la espalda y lo jaló hacia ella. Ambos cayeron y él cayó de espalda encima de Alex. Corrí hasta ellos.

- ¿Están bien? - pregunté ayudándolos a levantarse.

- Creo que me fracturaron toda - respondió Alex, algo adolorida.

- Lo siento - dijo el chico que salvó. Él hizo reverencia a ella, en muestra de agradecimiento. - Gracias por salvarme.

- No fue nada. Pero a la próxima, quítate los audífonos - respondió Alex, con una sonrisa al final.

El hombre la quedó viendo como embobado con ella. Se veía guapo, pero no más guapo que Minhyun. Tenía lentes y parecía un chico común.

- Gracias nuevamente - dijo él, sonriendo también. - Soy Cha Eun Woo.

- Yo Alex, y él es Aron - nos presentó ella.

- ¡Chicos, ya debemos regresar a casa! - gritó mi madre a lo lejos.

Había pasado unos días, y cada vez me enamoraba de Hwang Minhyun, el jefe de Alex. Era tan especial para mí. Aún no le decía lo que sentía a ella, no podía, porque...a ella le gustaba también. Un día decidí recogerla del trabajo. En realidad, quería invitarla a beber, para contarle lo que sentía por su jefe.

- ¿A quién buscas? - me preguntó Minhyun, quien iba saliendo de quién sabe dónde, porque se apareció de repente.

- A mi amiga, Alex - respondí titubeando un poco. Su presencia me hacía sentir nervioso.

- ¿Te gusta?

- ¿Qué?

- Alex. ¿Te gusta ella?

- No, señor. Sólo somos amigos.

- Me da gusto escuchar eso. Quiere decir que...tengo oportunidad - sonrió.

Me detuve a pensar un instante. ¿Será que a Minhyun le gusta Alex?

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- Lalastar95

Nota: Espero les siga gustando la historia :3 Háganmelo saber en los comentarios y con sus votos, es importante para que pueda mejorar mi historia. Gracias por leer :3