51
Después de cinco meses ocultándose y tomando el control, Eve por fin ha encontrado un buen lugar con la ayuda de un viejo lobo.
—Hoseok. Jimin nuevamente se quedó dormido mientras lloraba. Debes hablar con la chica y pedirle que haga algo —le suplica la señora.
—Vere que puedo hacer —susurra el humano.
—Ella está maldita, haz que le realice algo. Hablé con Kari y dijo que podía realizarle algo con magia a mi Jimin —le comenta.
—Bien, iré con Eve —dice el castaño.
El chico se pone en pie y se dirige hasta la esquina de la enorme cueva en la cual Eve, suele ir a practicar su magia.
—Lamento la interrupción —se disculpa el castaño al ver que la bruja y el el viejo lobo conversan.
—Descuida, solo hablábamos de nuestros antepasados —verbaliza Kari.
—¿Qué quieres, Hoseok? —lo cuestiona la castaña con ahora mechones más platinados que meses atrás.
—SunHee me comentó que Jimin una vez más se durmió llorando. Quiere que hagas algo con tú magia, teme por su sobrino y el bebé. Yo también temo que le suceda algo —expone el castaño.
—Lo siento, no puedo hacer nada —verbaliza la bruja.
—Si puedes —espeta Kari.
—No.
—Sí —afirma el lobo—. Tú sabes cómo borrar recuerdos, Eve.
—Kari, no conozco bien el hechizo —replica la chica. —Puedo borrar todos sus recuerdos si no lo hago bien. El lobito me matará más rápido si su humano no logra recordarlo —agrega.
—Ya estás muerta, Eve —suelta de sopetón, Hoseok. —Jungkook va a matarte, aunque Jimin no lo recuerde —le recalca.
—El chico tiene razón —concuerda el gran lobo—. Jeon va a matarte de todos modos. Por otra parte, eres una bruja fuerte y para nuestra buena suerte tengo el libro de hechizos de tu madre. Práctica y luego debes hacerle el hechizo a Jimin.
—Kari, tú no entiendes —replica Eve.
—La que no entiende eres tú. Tú responsabilidad es proteger a ese cachorro, actúa tal cual y para lo que fuiste traída a nuestro mundo. Concéntrate, práctica y cuida del humano y el cachorro de Jeon —exige y expone el viejo lobo.
—No podemos seguir viviendo aquí, somos humanos. Y el día que el bebé quiera salir, todos sabemos que no es buen lugar —agrega Hoseok.
—Todos los cambia formas viven en estas condiciones y los omegas...
—El chico es un humano, no un omega —la interrumpe Kari. —Es humano al igual que la mujer y él —verbaliza, molesto el gran lobo mientras señala al castaño.
—¿Entonces qué sugieres? —indaga la bruja, molesta.
—Sugiero que hagas lo que te dije, yo buscaré un lugar para que podamos vivir —propone. —Cuando regrese, debes saberte ese maldito hechizo de memoria —la sentencia.
—Regresa con SunHee y empaca las pocas cosas, ya escuchaste lo que dijo Kari —se dirige Eve a Hoseok.
El castaño asiente y luego le da la espalda.
—Lo siento, Hoseok —se disculpa.
El chico se detiene, la mira sobre su hombro izquierdo y dice.
—Un lo siento, no le devolverá a Jimin y Jungkook todo el tiempo que no estuvieron juntos mientras su bebé crece. Tampoco me hará sentir mejor a mí y a SunHee, después de vivir en una puta cueva hechizada por ti.
La castaña con mechones platinados se queda estática, quiere decir algo, pero no puede. Sus ojos se llenan de lágrimas y cuando se percata se gira dándole la espalda al humano.
Sin añadir más nada, Hoseok va directo hacia SunHee.
—¿Qué dijo? ¿Por qué el lobo abandona la cueva? —lo interroga la tía de Jimin.
—Le hará un hechizo para no recuerde. Y Kari va en busca de un lugar mejor para quedarnos —contesta el castaño.
—Si Jimin no recuerda nada, él... —titubea SunHee.
—Ella será cuidadosa, Kari le advirtió un par de cosas, así que hará las cosas bien —la tranquiliza Hoseok.
—¿Podemos confiar en el lobo? —inquiere la señora mientras limpia sus lágrimas.
—Eso creo. Tal parece que solo quiere cuidar a Jimin y al cachorro como ellos lo llaman —acota el castaño.
—Y Jungkook, él también se transforma.
Hoseok asiente.
—Son buenos, no te preocupes.
La señora Park no dice nada, coge una de las manos de Jimin y luego lo mira fijamente.
Horas más tarde un lobo gris con blanco aparece en la cueva, Jimin lo ve fijamente y un recuerdo de Jungkook lo embarga una vez más.
—¿Cuánto durará esto? —pregunta con voz entrecortada el humano—. Necesito estar con Jungkook.
—Cálmate cariño —le pide su tía.
—Es solo que yo... —solloza y luego rompe en llanto nuevamente.
Kari vuelve a su forma humana y camina desnudo frente a todos. Se coloca una bata y luego va directo hacia Eve.
—Sal de ahí y hazle el hechizo —demanda, ganándose la atención de los humanos.
La bruja sale de dónde se encuentra y lo primero que hace es ver a Jimin llorando.
—Mas vale que lo hagas —la reta el lobo—. Ahora date prisa.
La bruja niega, Kari la ve, bufa y la coge de su brazo derecho con fuerza y la arrastra hasta quedar frente a los tres humanos.
—Hazlo —brama el lobo.
Los ojos llorosos de Park la ven, asiente y luego intenta poner sus manos sobre la cabeza del rubio.
—No, no me toques —reprocha el chico con voz gangosa.
—No te hará daño, si lo hace la golpeare —asevera Kari. —Solo quitará esa sensación que te hace infeliz —intenta explicarle.
—¿Quitar? —duda Jimin.
—Será temporal, colocaré un recuerdo que desbloquee todo lo que haré que olvide —musita Eve.
—Olvidar —verbaliza Park—. ¿Olvidar el qué?
—Sosténganlo —pide la bruja.
SunHee suelta a su sobrino y quién lo toma es Kari junto a Hoseok.
—Tía, ¿qué ocurre? —pregunta con preocupación.
—Estarás bien, Jiminie. Solo tranquilízate y mírame —le indica la señora.
El rubio torpemente asiente.
Eve se acerca a él de nuevo, al verla tan cerca comienza a removerse para que no lo toque.
—No, aléjate de mí. Déjame en paz —protesta Jimin.
La bruja consigue posar sus manos en la cabeza de Park, cierra sus ojos y ante la atenta mirada de Hoseok y Kari comienza a recitar entre murmuros un sinfín de palabras que ambos desconocen.
La chica se marea y luego se aleja de Jimin, el rubio la ve y luego se desmaya.
—¿Estará bien? —indaga Hoseok.
—Sí —es lo único que responde, Eve.
—Yo lo cargo, tú trae las cosas y ayuda a la señora —da las indicaciones Kari.
—Haré hechizos para que no nos encuentren —balbucea la bruja luego que ha tomado sus cosas.
Jimin es cargado por el fuerte y viejo lobo, mientras Hoseok ayuda a SunHee y carga un par de cosas. Eve se encarga de que ningún lobo los rastree para no ser encontrados.
La bruja se detiene al ver la cabaña a unos kilómetros del despeñadero.
—Estamos cerca —dice la bruja.
—Exacto. Así Jeon podrá encontrarnos con más facilidad —verbaliza Kari.
—Nos encontrará cuando estemos seguros —replica la chica.
—Por supuesto —se limita a decir para luego entrar a la cabaña más grande. —Entremos —se dirige a los humanos.
La bruja realiza un par de hechizos y luego entra a la cabaña.
—Si vuelves a lastimar a una humana, voy a torturarte —la amenaza Kari.
—No he hecho nada —parlotea Eve.
—Sí, si lo hiciste. Mandaste a la humana a la reserva con el mensaje del humano de Jeon. Tú lastimas a otro humano y vas a conocerme, brujita —espeta entre gruñidos el lobo.
La chica no dice nada, se suelta del agarre del lobo y luego se aleja de él con rapidez.
Headwaters
En la reserva se encuentran todos descansando de sus actividades, hasta que el silbato suena.
Jeon y el resto de alfas se pone en pie y caminan hasta la reja.
—Vengo en busca del alfa a cargo —habla un hombre de avanzada edad.
—Soy yo —dice el pelinegro, con un trozo de carne en su mano derecha.
—Un par humanos presentaron quejas contra su raza —expone sin vueltas el hombre.
—¿Qué tipo de quejas? —pregunta Jeon, acercándose a la reja.
—Quejas que hacen querer romper el tratado —responde el humano, acercándose al igual que el cambia formas a la reja.
—Romper el tratado —repite Jeon. —Creo que ha habido un mal entendido —agrega el alfa.
—Sí, eso es lo que yo pensé, pero tienen pruebas. Entonces, quieren que abandonen la reserva —les hace saber el humano.
—No haremos eso, de ninguna manera nos iremos —aclara Jungkook—. No hemos atacado a humanos.
—Ellos los consideran una amenaza —dice el hombre. —Dicen que el tratado entre ambas especies pronto llegará a su fin, porque no pueden convivir —le explica.
—Pero si podemos —dice Jeon. —Puedo probarlo, pero necesito tiempo —añade.
—¿Cuánto tiempo? —inquiere el humano.
—No tengo idea —contesta el alfa. —Pero sé que podemos convivir, lo puedo probar, pero necesito tiempo —insiste.
—Haré lo que pueda, Jeon —verbaliza el humano. —Lo haré por tu padre —agrega, luego entra al auto y se marcha.
Jungkook se gira sobre sus talones, pasa de largo frente al resto de alfas y luego ve a sus amigos y a la bruja.
—El tratado está por finalizar, necesitamos encontrar a Jimin —les indica a sus amigos.
El beta y la alfa se miran, ven a la bruja y luego siguen a Jeon muy de cerca.
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