Capitulo 41.

Habían pasado horas desde que el castaño junto a la peli-negra habían llevado el pescado para que todos pudieran comer sin problemas. Todas se encontraban haciendo lo suyo, unas hablaban tranquilamente entre ellas, otras solo se mantenían descansando y otras se mantenían entrenando físicamente. Por otro lado cierto castaño se encontraba en la colina donde había estado con Akame, el se sentía tranquilo y calmado, sintiendo el viento en su cara, el sol iluminándolo mientras se escondía lentamente en un hermoso atardecer.

Al lado de este, se encontraba el pequeño dragón el cual había sido nombrado por este con el nombre "Roi". Yahir acariciaba al pequeño animal con dulzura y tranquilidad, las alas del animal se estiraban un poco y sus escamas se moverían por unos momentos ante los estiramientos del animal, dando así un ambiente lleno de paz y tranquilidad. El castaño cerro sus ojos y sintió una brisa correr por su cara, para cuando este mirara el cielo, no pudo evitar dar una gran sonrisa. Mientras tanto en la gran casa, Akeno se encontraba sentada en el techo como siempre hacia, sintiendo el cálido atardecer y el fresco viento, por un momento ella imagino al castaño estando con ella y no pudo resistir dar una sonrisa que reflejaba amor, a su vez miro el cielo y en un ligero susurro diría el nombre de aquel chico del que estaba enamorada para luego imaginarse la sonrisa del castaño y sin poder evitarlo sonreiría junto a un leve tono carmesí en sus mejillas.

En otra parte de la enorme casa cierta peli-celeste estaría verificando el correo del hogar. Tenían cartas que no importaban tanto y que eran problemas o cosas menores, pero había una que sorprendería un poco a Rem, así esta empezaría a correr un poco hacia donde se localizaba la peli-negra. Akeno solo estaría disfrutando de la vista, pero escucharía una pequeña toz y sin voltear, ya sabría que se trataba de la demonio peli-celeste.

- ¿Ocurre algo? Rem -pregunto Akeno con una sonrisa.

- De hecho si Akeno-San, nos llego esta carta y es importante -diría Rem mientras entregaba la carta.

- Veamos que dice...-comento la peli-negra mientras comenzaba a leer y su expresión era de sorpresa- Vaya, con esto...se complicaran las cosas ahora -diría en un tono serio.

- ¿Que haremos Akeno-San? ¿A quienes mandaremos? -pregunto la peli-celeste confundida.

- Se a quienes mandar...solo esperemos hasta la noche para decirles -contesto Akeno seriamente para luego mirar que en la nota decía algo de ataques y desapariciones en un bosque y que la principal sospecha eran “demonios”.

La noche comenzó a caer poco a poco, Yahir seguía en la colina mirando las estrellas, su corazón sentía paz total, el viento chocaba con su rostro y por un momento se levanto y estiro sus manos para sentir el viento sobre su piel. Mientras que detrás de el, cierta chica de pelo negro y ojos rojos se estaría acercando a el. Akame veía lo feliz y calmado que se veía el castaño en esos momentos y una sonrisa se escaparía de sus labios. A lo que esta poco a poco se acercaría para después sentarse y así poder apreciar por completo al chico.

Yahir solo daría un suspiro enorme, para luego sentarse. Pero estuvo tan concentrado que ni siquiera se había dado cuenta del ki de Akame, así que cuando este se sentó y miro a su lado izquierdo, se asustaría tanto que hasta asustaría al pequeño dragón. Akame primero se asustaría un poco junto al chico, pues esta habría dado un mini salto por la sorpresa de ese susto...pero luego ambos empezaron a reír un poco por esa escena "cómica" que habían tenido.

- Lo siento si te asuste, no era mi intención -diría Akame mientras reía un poco.

- Jeje, no te preocupes, solo no me di cuenta de tu presencia -contesto Yahir con una sonrisa, mientras se rascaba la nuca.

- Ya veo, ¿que haces aquí tan solo de todos modos? -pregunto la chica mientras abrazaba sus piernas.

- Bueno, es que me gusta salir y sentir la naturaleza, por así decirlo -contesto algo tímido el castaño.

- Eso es algo lindo y la verdad igual pienso que es algo tranquilo estar con la naturaleza -comento Akame mientras miraba el cielo- Eso me hace pensar...¿porque no estas transformado como lobo? -pregunto algo confundida.

- Eso es porque no hay por el momento luna llena, solo me transformo en eso cuando la luna esta en su face completa -contesto el castaño tranquilamente.

- Ya veo, eso explica todo -comento la peli-negra en un suspiro.

- Por cierto Akame...tu querías hablarme de algo, ¿cierto? -pregunto Yahir sin mirarla.

- Si...así es, quiero contarte algo -dijo Akame en un susurro.

- Pues.. Cuéntame ahora, ya que estamos solos, tienes toda la privacidad para decirme -diría el castaño mientras la veía de reojo con una mini sonrisa.

Akame al escuchar esto comenzaría a sonrojarse, ella estaba determinada a contarle lo que sentía por el, pero era tan difícil para ella. La chica peli-negra solo se levantaría del suelo y se acercaría al castaño, para luego abrazarlo de la espalda de forma suave y delicada. Yahir se sorprendería un poco por la repentina acción de la chica y su ves se confundiría por esto, este podía sentir como la cara de la chica se recostaba en su espalda, pudo sentir el cuerpo de la peli-negra sobre su espalda y su corazón comenzó a latir algo más rápido.

Yahir pudo sentir como el corazón de la peli-negra palpitaba rápidamente y cuando este iba a preguntar el porque hacia eso, una mano tomaría delicadamente su mejilla y lo giraría lentamente, hasta encontrarse con la cara de Akame y como si fuese en cámara lenta, esta pegaría sus labios a los del chico, acción que tomaría por sorpresa al castaño y lo sonrojaría por completo. La fémina le había dado un lindo y profundo beso, un beso que transmitía los sentimientos de la peli-negra hacia el chico, pero que también demostraba su torpeza al besar, pues al ser el primer chico que besaba no le saldría tan bien y su inexperiencia era muy clara. Yahir con algo de impresión correspondería ese contacto labial y poco a poco la iría guiando para que esta fuese acostumbrándose al beso.

- A-Akame...-susurro Yahir con un sonrojo en sus mejillas.

- Yo estoy enamorada de ti...-dijo Akame sin rodeos- Nunca sentí esto, no lo entendía y aun estoy algo sorprendida por sentir este tipo de sentimientos -menciono con una mano en su pecho- Yo...tal vez no sea la única, tal vez me ponga celosa, si es que asi se le llama a cierta emoción...pero con que tu me quieras...y-yo puedo estar más que feliz -comento mientras se colocaba en frente del chico- Y-Yo...descubrí estos sentimientos, pero se volvieron más fuertes cuando tu me salvaste de ser herida por Kokabiel -diría mientras pequeñas lagrimas salían y su corazón empezaba a latir más rápido.

- Akame...-dijo el castaño mientras llamaba la atención de ella y limpiaba sus lagrimas- No se como responderte eso sinceramente... pero ¿aceptas esto como respuesta? -pregunto con un tono cálido.

Estas palabras confundirían bastante a la peli-negra, pero sus dudas se irían cuando el castaño la tomo de la corbata roja de su uniforme y la atraería hacia el, así plantándole un segundo, pero dulce y delicado beso. Akame correspondería de inmediato el beso, así tumbándose sobre el chico, donde colocaría sus manos al rededor del cuello de este y las palmas de sus manos estaban en los cabellos castaños y revoltosos del chico, así esta atrayéndolo más a ella. Por otro lado, Yahir tomaba la cintura de la chica para pegarla más a su cuerpo, también subiría una mano hasta el cabello de ella y lo acariciaría suavemente con la yema de sus dedos, dando una demostración de lo delicado que este era con esa clase de cosas, algo que pondría feliz a la chica internamente.

Luego de unos minutos de estar besándose, ambos se separarían por falta de aire y Yahir se sentaría para estar mejor acomodado, separando en el proceso sus labios con los de Akame. Ambos chocarían sus frentes mientras reían un poco ante tal escena que tuvieron para ellos dos solitos. Ya luego el castaño daría la idea de irse a la gran casa donde ellos vivían junto al resto de chicas. Esta vez Yahir haría que Akame se subiera a su espalda, así este empezaría a volar junto a su pequeño dragón de vuelta a su hogar, la peli-negra estaba muy feliz por ser correspondida y abrazaría un poco más fuerte al castaño, ocasionando una sonrisa cálida en el chico. Ya luego de unos minutos de vuelo, el chico aterrizaría y la fémina se soltaría de este, así poniéndose al lado de el, mientras que el pequeño dragón descendía poco a poco, hasta ponerse en los hombros de su dueño. Luego los dos estarían entrando al lugar con suma tranquilidad pero una vez dentro del hogar estos dos verían como todas se encontraban reunidas en la sala principal y con miradas ligeramente serias o al menos eso era en el caso de algunas feminas.

- Ehm...¿Paso algo? -pregunto Yahir algo confundido.

- De hecho si y esperábamos por ustedes -dijo Akeno mientras los miraba a los dos.

- ¿Que ocurre? Akeno-San -pregunto Akame ahora con seriedad.

- Siéntense primero, por favor -pediría la líder con calma, así los dos sentándose con el resto del grupo- Bien...recibimos una carta donde nos piden ayuda, al parecer han sucedido muchos desaparecimientos de exploradores en un bosque -mientras se cruzaba de brazos.

- ¿Un bosque? -pregunto Lucoa confundida.

- ¿Que clase de bosque? -pregunto Medaka mientras abría un abanico de mano.

- Se refieren al bosque de los demonios -finalizo Akeno mientras cerraba sus ojos.

- Espera, ¿el bosque que esta lleno de demonios? ¿Ese bosque? -pregunto Asuka con sorpresa en su voz.

- Por favor, no debes ser alguien inteligente para saber que ese bosque es muy peligroso -comento Noelle cruzada de brazos.

- Qu-Que miedo, ¿para que nos piden ayuda? -pregunto Yunyun algo nerviosa.

- Me piden que mande un grupo a ese bosque a investigar, ya muchos grupos se han negado a esto y bueno…esperan que nosotros lo hagamos -dijo Akeno en un suspiro.

- No hablaras enserio o si? -pregunto Zero Two mientras comía una goma de mascar.

- Es una misión peligrosa, Akeno-San, ¿estas segura de esto? -diría Diane en un tono serio.

- Yo estoy dispuesto a hacer esa misión -dijo Yahir mientras se levantaba con un semblante serio en su rostro.

- ¿Planeas arriesgarte otra vez? ¿Acaso no le temes a la muerte o que? -pregunto Mio seria mientras se levantaba de golpe.

- No es eso, es solo que no me quedare de brazos cruzados mirando como gente desaparece en ese bosque -contesto el castaño con seriedad- Si puedo hacer algo para ayudarlos, entonces lo hare -finalizo con determinación el chico.

Un pequeño silencio se formo en la sala principal. Las miradas de las chicas solo estaban centradas en el serio y determinado castaño. Akeno solo daría un suspiro por esas palabras y daría una leve sonrisa, así levantando su mirada y viendo así directamente al chico.

- Nunca cambiaras, ¿eh? -pregunto Akeno con una sonrisa- Que se le va hacer, esta bien Yahi-kun, tu serás uno de los que ira -menciono mientras lo miraba a los ojos.

- E-Espere Akeno-san, ¿esta segura de lo que hará? -pregunto Iris nerviosa.

- Sip..y aunque tratase de negárselo, igual va a querer hacerlo -diría la fémina de cabello negro en un suspiro- En fin, ya se quienes irán a ese lugar -comento Akeno mientras se sentaba en un sillón- ¡Akame, Mio, Nezuko, Asuka, Hinata y Yunyun! Levántense por favor -pediría mientras las mencionadas se levantaban rápidamente- Ustedes son las que irán junto a Yahi-kun al bosque de los demonios...¿creen poder con esta misión? -pregunto con un tono serio.

- Es mi objetivo despues de todo, acabare con el de una u otra forma, Akeno-san -contesto Akame con seriedad y firmeza.

- Cuente con eso, Akeno-san -respondió Mio mientras se cruzaba de brazos.

- ¡Hmm! -diría Nezuko mientras se levantaba.

- Por supuesto que si, Akeno-san -comento Asuka mientras se levantaba rápidamente.

- Yo l-lo hare, ayudare en todo lo que pueda en esta misión -contesto Hinata con determinación.

- Y-Yo igual, daré todo de mi -diría Yunyun con una sonrisa nerviosa.

- Chicas...¡Ese es el espíritu! -comento Yahir con una sonrisa entusiasmada.

- Bien, en ese caso prepárense ahora mismo -dijo Akeno con seriedad- irán ahora mismo a ese lugar -finalizo mientras los mencionados se iban a preparar.

Yahir rápidamente entraría a su habitación y colocaría al pequeño dragón en la cama, para luego comenzar a colocarse su uniforme. El castaño miraría el guante de cabellera y lo tomaría para después colocárselo, seguido de tomar la Calibur y así dar un suspiro con una mirada de determinación. Akame solo entraría a su habitación y tomaría entre sus manos la "Murasame", así esta guardando su espada en su respectivo estuche y se la colocaría en la cintura para llevársela. Mio Naruse estaba en su habitación, colocándose su uniforme para salir en la misión. Se notaba seria y determinada a dar todo de si misma en esa misión tan importante y peligrosa. Hinata se estaría colocando una camisa de red, para luego colocarse unos pantalones largos de color azul oscuro. Seguido de unas cintas y algo para guardar sus herramientas ninjas y por ultimo, se pondría su jaquet purpura como usa de costumbre.

Asuka estaría tomando sus herramientas ninjas también y tomaría sus dos katanas, así guardando cada una en sus respectivas fundas. Por ultimo estaría Yunyun, quien se comenzaría a preparar para la misión. Se sentía nerviosa y incluso algo asustada, pero esta pensaría en sus amigas y en el único chico del grupo, así que daría un gran suspiro y colocaría una mirada de seriedad. Luego de que todos estuvieran listos, estos saldrían de sus habitaciones y Nezuko solo se metería a una caja, la cual seria llevada por Yahir en su espalda. Luego los siete estarían afuera y hablando con su respectivo grupo, que en esos momentos estaban muy preocupados y asustados de que les pasara algo.

- Cuídate mucho, por favor Yai-kun -susurro Uraraka mientras abrazaba fuertemente al chico.

- Por favor, vuelve sano y salvo con todas -dijo Hestia mientras de igual forma abrazaba al chico.

- Tranquilas chicas, volveré pase lo que pase -contesto el castaño mientras acariciaba la cabeza de ambas.

- Espero y sea así como dices -contesto Akeno mientras se acercaba al chico.

- Claro que si Akeno-San, confié en mi -dijo Yahir, para luego recibir un abrazo de la fémina de ojos violeta.

- No vayan a morir por allá, ¿okey? -diría Medaka mientras trataba de mantenerse firme y no demostrar su miedo.

- Vayan con mucho cuidado ustedes siete, ¿bien? Deben cuidarse las espaldas -comento Lucoa mientras miraba a las chicas y al castaño.

- No vayas a morir chico guapo, aun hay muchas cosas que hacer -dijo Zero two en tono burlón mientras le daba un pequeño golpe en el pecho al chico.

- Oye...-llamo Noelle sin mirarlo- Cuídense todos, ¿si? -fue lo único que dijo para no demostrar del todo su preocupación.

- Estaré rezando para que vuelvan sanos y salvos -dijo Iris mientras juntaba sus manos.

- Enserio, cuídense las espaldas todos ustedes -exclamo Diane mientras abrazaba a cada una y por ultimo al chico.

- Buena suerte chicas, Yahir -comento Lucy mientras levantaba el pulgar.

- Buena suerte chicas, Yai-kun, cuídense mucho -dijo Rem mientras abrazaba a cada una, incluyendo al chico.

- Mucha suerte, humano -susurro Vel mientras abrazaba la espalda del castaño inconscientemente.

- Jeje, tranquilas chicas -diría Yahir con una sonrisa- Volveremos sanos y salvos o al menos con vida, de eso no lo duden -finalizo mientras comenzaba a caminar.

Yahir miraría a su grupo y estas asentirían con la cabeza en señal de que estaban listas para irse. El castaño respondería de igual forma y empezaría a caminar junto a su equipo, para luego ir desapareciendo de la vista de las demás poco a poco. La sonrisa de las chicas seria cambiadas por una expresión de preocupación, tenían miedo de perder a su equipo, a las chicas y al castaño que habían ido. Pero todas tenían tres cosas en común en sus pensamientos y esas eran que todas esperaban que regresaran con bien, preocupadas por las chicas y por ultimo estarían muy preocupadas por el castaño, haciendo así que algunas se tocaran el pecho por la preocupación.

- Vuelvan...por favor -pensaron la mayoria al mismo tiempo mientras entraban a su hogar.

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Fin del Capitulo 41.

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