Del gran cielo azul, se abriría un agujero de color amarillo, así viéndose como alguien caía de ese agujero, la persona gritaba del miedo por caer de una gran altura, esta persona era nadie más y nadie menos que el castaño llamado "Yahir", que caía con rapidez, pero antes de dar un gran y posiblemente doloroso golpe, el chico seria rodeado de un aura dorada que lo haría levitar por unos segundos...para así desaparecer el aura y caer al suelo, así su cabeza quedando atorada en la arena, el chico con algo de esfuerzo sacaría la cabeza de la arena, para después mirar a su lado derecho y ver la espada "Excalibur" clavada en el suelo. El castaño se acercaría a la espada y la sacaría del suelo.

-Vaya, si que caer de tan alto me asusto.-diría el castaño con un pequeño escalofrió- Sera mejor que busque algo para lavarme la cara.

El chico estaría caminando por la zona buscando algo para lavarse la cara, y en eso, encontraría un pequeño charco de agua, así bajándose a la altura del charco y empezaría a lavarse la cara...pero al mirar su reflejo en el agua, se vería muy diferente, su cabello ahora estaba más diferente, su aspecto físico también era diferente...incluso su ropa era diferente, Yahir quedaría sorprendido al ver que su aspecto era de su avatar, de un personaje que el había editado, era el mismo, su pelo, los ojos, la ropa...todo era igual.

-Wow, esto es genial, no solo tengo la "Excalibur" de Sonic y los poderes de Sonic, también tengo el aspecto de mi avatar...¡Esto es genial!- diría Yahir con emoción en su voz- Eh...¡Cierto! Si esto es un mundo medieval, debe haber algún gremio o algo por aquí- se diría a si mismo mientras empezaba a caminar.

Yahir estaría caminando durante minutos, sin encontrar nada a su al rededor, estaba cansado, un poco hambriento y sediento, no sabia que haría o a donde iba...hasta que desde lo lejos logro ver un gran gremio, este con una gran sonrisa y olvidándose del cansancio, saldría corriendo al lugar, mientras aguantaba su espada con fuerza. Ya después de unos minutos, el chico llegaría al lugar y empezaría a mirar todo a su al rededor, así viendo tiendas, personas comprando y ect.

El chico estaba algo maravillado, ya que nunca había visto un lugar tan medieval, en eso, el castaño vería un local que decía "Inscripciones", allí podías inscribirte para ser un caballero o un mago, aventurero, lo que quisieras  esto llamaría mucho la atención del joven, que rápidamente se metería al local, donde solo vería un pequeño bar, habían hombres bien "intimidantes" para el castaño, así que este solo estaría caminando para ver si encontraba el lugar para inscribirse, y al llegar al mostrador, lo atendió una linda chica, de cabellos negros azabache, unos lindos ojos color violeta y una sonrisa que transmitía tranquilidad.

-Buenas tardes joven, ¿en que puedo ayudarte?- preguntaría la chica con una sonrisa.

-Ehm, quisiera inscribirme para ser algo, ya sabe...esas cosas jeje- le contestaría Yahir algo nervioso.

-¡Claro! Pero necesita pagar para eso señorito- mientras lo miraba a los ojos.

-Ahm...no poseo dinero en estos momentos, ¿no tienen algún trabajo o algo?- preguntaría el castaño mientras sus expectativas bajaban.

-Bueno, si te interesa, puedes trabajar en construcción, buscan a alguien más y supongo que puedes ayudarlos- mientras le sonreía.

-Muchas gracias señorita, iré ahora mismo...¡hasta pronto!- mientras se marchaba.

El chico castaño iría caminando por la ciudad y con la espada excalibur, ya después de unos minutos, encontraría el lugar donde daban el empleo, Yahir aunque no sabia mucho de eso, igual pediría el empleo, teniendo algunas complicaciones al principio, pero después lograría hacer que lo acepten en el trabajo. El chico empezaría ese mismo día...y para el fue un infierno total, cargar cosas pesadas y trabajar bajo el gran sol, le era muy difícil, pero aun así no se rendía.

Las horas pasarían y se haría de noche, el chico estaba durmiendo en un granero, Yahir se encontraba mirando su jaquet que estaba en el suelo. Se sentía frustrado, no sabia que hacer con un trabajo así y para colmo no tenia ni idea de como usar sus poderes, así que con algo de enojo lanzaría su jaquet al pasto...pero escucharía como algo duro chocaba.

-¿Eh? ¿Que fue eso? -se preguntaría el castaño mientras caminaba hacia su jaquet.

Al estar parado frente a su prenda de ropa, este la tomaría y sentiría algo duro y sacaría lo que seria...¿su celular? Consigo traía una nota que decía "Motívate" y al prender el celular, por obvias razones no tendría señal, así que lo abriría y al hacerlo...solo vería una foto de el con su madre, padre y hermana, los cuatro sonriendo y felices. Esa imagen tocaría mucho el corazón y sentimientos del castaño, haciendo que abrazara el celular mientras comenzaba a llorar, mientras repetía una y otra ves "Los extraño, los extraño".

Este solo volvería a mirar el celular con una sonrisa y lagrimas en los ojos...para después mirar el cielo y poner una mirada determinada.

- ¡Bien! Me esforzare...no importa cuanto tarde -dijo el castaño mientras se levantaba y miraba la luna- Yo seré el salvador de aquí...-mientras sonreía y se limpiaba las lagrimas.

Al amanecer, el castaño sin perder tiempo empezaría una rutina de ejercicios, así empezando a entrenar poco a poco y a cada hora, incluso en el trabajo, los trabajadores veían esto confundidos...pero empezaban a ayudarlo, para que el mejorara, así este empezando a practicar artes marciales, todo tipo de estilo de lucha que el recordaba. También entrenaba corriendo, para en algún momento poder activar la súper velocidad de Sonic, también golpeaba madera y cosas duras para hacer que sus puños y patadas tomaran más fuerza, a la ves hacia ejercicio para los brazos y las piernas, así viéndose el esfuerzo que le ponía a todo.

Después de unos meses, se vería mucho la mejora, Yahir en un momento estaría golpeando una tabla de madera...y de una fuerte patada la rompería, al igual que rompería otra tabla con un puñetazo, se vería como este cargaba más cosas pesadas y su cuerpo era cubierto por el sudor de su esfuerzo y sus músculos estaban más tonificados que antes y cuando empezaría a correr...hubo un momento donde rayos azules saldrían de su al rededor y correría a una gran velocidad, pero se agitaría a los pocos minutos. El castaño lo había conseguido...aumentar su fuerza, mejorar su condición física, correr más rápido y usar los poderes que tenia(*Sonic*)...aunque eso lo usaba en casos de emergencias.

A la mañana siguiente, el chico se levantaría súper temprano y se vestiría para salir para empezar el día, pero en eso, al salir vería a todos sus camaradas de trabajo, y todos tenían una sonrisa de orgullo y felicidad.

- Ehm...¿chicos? ¿Que ocurre? -preguntaría el chico algo confundido.

- Veras Yahir...todos lo pensamos y al ver tu esfuerzo y dedicación, pensamos que ya es momento de que vayas y cumplas tus sueños, chico -dijo uno de los que trabajaba, mientras extendía un saco con monedas.

- ¿Qu-Que? N-No puedo aceptar esto, no solo es dinero de ustedes, también es parte de su esfuerzo -diría Yahir nervioso al ver lo que ellos hacían.

- Tranquilo chico, tu mereces esto y nos enseñaste a dedicarnos a lo que queremos y lo mejor de todo...-mientras se ponía en frente de el y ponía una mano en su hombro- es que lo conseguiste...y nosotros también -diría con una cálida sonrisa.

El joven castaño sin contener las lagrimas y la emoción, les daría un abrazo a cada uno de ellos, para después ponerse la ropa con la que había llegado a ese mundo, también se pondría su guante de caballero y tomaría la espada y la bolsa de monedas, para después mirar hacia atrás y ver a todos sus compañeros.

- ¡Gracias muchachos! ¡les debo una a cada uno de ustedes! -mientras levantaba la mano y se despedía, al igual que todos.

El castaño sin perder tiempo, empezaría a correr y poco a poco aumentaba su velocidad a cada momento para así poder ir al pueblo y registrarse para convertirse en un caballero...y en un futuro, tal vez en un héroe. Ya después de unos minutos, llegaría al pueblo, donde rápidamente iría hacia la chica que conoció y pagaría para registrarse como caballero, a lo cual ella le daría algo como una "Licencia" y este solo se iría a caminar por un bosque de forma feliz.

- ¡Genial! Por fin tengo mi licencia -mientras la miraba con una sonrisa- ahora...¿que podría hacer? -se preguntaría mientras caminaba por el bosque.

Pero de la nada, este escucharía dos gritos de dos chicas...acompañado del rugido de un oso grizzly, este algo alarmado iría rápidamente a ver que ocurría, pero este solo vería como una chica castaña y una chica de pelo azabache, eran "atacadas por un oso grizzly". Ambas chicas se les hizo muy familiar al chico, ya que una tenia el cabello algo corto y de color castaño, unas mejillas llenitas con un sonrojo permanente, el traje que usaba le era muy familiar, mientras que la otra solo poseía un vestido de color blanco corto, con dos coletas y una cinta que estaba debajo de sus pechos, este solo le tomaría unos segundos para darse cuenta de quienes eran.

- Hestia...Uraraka -diría Yahir sorprendido...y automáticamente tomaría su espada.

Mientras que con las chicas, Uraraka trataba de alejar al oso con el bastón que tenia, que con el lanzaba pequeños hechizos, mientras que Hestia estaba detrás de ella asustada y con una canasta que poseía unas frutas.

- ¡Ochako! ¡Ten cuidado! -gritaría la peli negra asustada.

- ¡Eso intento, pero es más fuerte que yo! -dijo la castaña mientras trataba de hacerle frente.

Pero en eso, el oso le lanzaría un aruñazo que con esfuerzo se cubriría, pero seria mandada a volar y empujaría a la peli negra, así ambas cayendo al suelo, así el oso se pondría en dos patas y con su gran altura, este daría un rugido que asustaría a ambas chicas, al punto de hacer que ambas sacaran lagrimas del miedo. Y cuando el oso estaba por atacar...algo de forma rápida golpearía al oso en la cara, así mandándolo algo lejos, la persona caería en frente de ambas chicas y seria nada más y nada menos que el castaño, que solo miraba de forma seria al oso.

- ¿Que pasa grandote? ¿No puedes meterte con alguien de tu tamaño? -mientras tomaba la espada y se ponía a la defensiva.

El oso solo daría un rugido para después lanzarse en contra del castaño y este de igual forma se lanzaría al ataque en contra del grizzly. Las dos chicas que veían esto, estaban más que sorprendidas, no sabían quien era ese chico...y aun así sin conocerlas, estaba luchando contra el osos más fuerte...solo para defenderlas. Mientras que Yahir, logaría darle cortadas y puñetazos al animal, seguido de patadas que alejarían un poco al oso, pero el oso en un momento le daría un aruñado en el pecho, así rompiendo su ropa y sacándole algo de sangre, para que después el oso lo tomara con sus dientes y lo lanzaría fuertemente contra un árbol.

Ambas chicas al ver esto se asustarían y preocuparían mucho, mientras este estaba débil, y cuando vería un poco al frente, lograría ver como el oso se acercaba a ambas chicas.

- Y-Yo...-mientras tomaba su espada y rayos azules salían- ¡Y-Yo no dejare que les hagas daño! -gritaría mientras todo se detenía.

Yahir de forma rápida correría hacia el oso y se subiría en su espalda para después dar un salto y apuntar el filo de la Excalibur hacia abajo, y cuando todo volvió a la normalidad, el castaño clavaria su espada en el cráneo del oso, así acabando con su vida al instante y de paso cayendo al suelo junto al cuerpo del grizzly.

Ambas chicas impactadas verían como el pelaje del animal era manchado con su propia sangre y como la espada del chico estaba bañada en la sangre del oso. Este muy pero muy agotado más las heridas solo miraría a ambas chicas y se acercaría poco a poco a ellas...pero no lograría llegar y caería al suelo inconsciente.

- ¡Ahh! ¡¿estas bien?! ¡¿chico?! -preguntaría Uraraka desesperada mientras movía el cuerpo del joven.

- Mira eso, Ochako, el oso lo hirió -diría Hestia muy preocupada por el joven.

- ¡De-Debemos llevarlo con nosotras! Las chicas y nosotras lo ayudaremos -dijo la castaña mientras lo tocaba con sus dedos...y este comenzaba a flotar.

- ¡S-Si! Tienes razón, vamos rápido -dijo la peli negra mientras se iba corriendo detrás de su amiga, que sostenía el cuerpo del castaño.

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                 Fin del Capitulo 2.