La glamorosa cena navideña de los empleados de la empresa Dragneel, por supuesto celebrada en uno de los clubes más exclusivos de la ciudad.

Juvia Restaurant & Bar, ubicado en Miami Beach; todos estaban ahí, íncluso el que tenía como dos años de no asistir, lo que hacía a los presentes preguntarse ¿qué hace en la fiesta? ¿por quién habrá venido? ¿porqué ha venido?

Aunque el pelirosa solo se ha dedicado a pasar sentado en su mesa asignada en la zona VIP, él no ha apartado su vista de Lucy, quien esta hablando muy animada con Levy, Erza, Jeral y Mavis.

Entre tragos y pensamientos, Natsu se preguntaba ¿porqué ella?, ¿qué tenía la rubia de diferente para que le consumiera tanto sus pensamientos?

Ella es una mujer con sus atributos, eso cualquier persona se da cuenta pero él siempre ha estado rodeado de mujeres bellas; entonces, ¿qué la hace diferente?

Aún recuerda el día que lo encontró dormido en la oficina y lo mando a casa a descansar. En verdad lo necesitaba, por que luego de 4 horas de descanso se sentía renovado para seguir trabajando en los proyectos.

Ella es muy maternal o al menos eso piensa él. Ella siempre anda preocupandose por los demás, animandolos y haciendolos reír pero a la vez ella lloraba por todo. Nunca él había conocido una mujer que llorara en cualquier momento, íncluso si esta feliz.

El día que Erza anunció su embarazo, la rubia la abrazó muy fuerte y lloraba de felicidad en los brazos de su amiga. Lucy, lloraba por todo y como su padre Igneel diría: "Necesitas tener una mujer fuerte a tu lado si quieres que te ayude a dirigir una empresa". Ella no es fuerte si es que llora por todo.

Sin embargo, cuando ella lloraba algo en su pecho se encendía, una necesidad de protegerla y hacer que sus lágrimas se vayan. Es extraño, él siempre ha estado con mujeres de carácter fuerte, como: Kagura, Kyoka o Minerva. Mujeres que le enseñarón que el amor es algo muy vanal para concentrarse en ello, que lo importante era construír un sólida base económica para las empresas.

El problema con mantener esas relaciones era que siempre estaban muy ocupados para verse o invertir tiempo en construír una relación seria; por lo que eventualmente el encanto acababa y terminaban.

Él nunca había invertido tanto tiempo pensando en una mujer tampoco, siempre ha querido convencer a su padre de su capacidad como empresario, eso es lo más importante pero desde que la rubia aparecio es como si su mente no podía concentrarse en algo más.

Lucy no es una mujer convencional, su padre la definiría como "una esposa de vitrina" esas que se tienen solo por que son hermosas y no sirven para nada más que presumirlas con los compañeros de negocios.

Pero Lucy no es tampoco una mujer superficial, ella es diferente, ella no teme decir su opinión, siempre busca la manera de que su trabajo sea de la más alta cálidad, ella no teme a mostrar sus sentimientos, ella siempre ofrece su hombro para llorar y lo más importante que ella parece hacerlo de todo corazón.

La fortaleza de la rubia era mostrarse al mundo tal y como ella es. Si quería llorar lo hacía, sin importar que piense la gente; si quería reír lo hacía, sin importar si era un momento serio; si quería bailar lo hacía, no le importaba si era en la calle o en la oficina.

Sin duda, Lucy es una mujer rara y loca. Una mujer que se había preocupado por él solo por que no quiere que alguien pase lo que vivió su abuelo y su madre. Ella era una mujer dulce y sentimental. Era una mezcla de algo mágico que simplemente él no podía explicar.

Por que, ¿qué demonios hacía él en la fiesta de la empresa, cuando tiene mucho trabajo por terminar? Ni siquiera él mismo podía explicarselo pero su hermano interrumpió sus pensamientos.

Zeref: Me alegro que al fin hayas decidido venir.

Natsu: De vez en cuando necesito relajarme.

Zeref: Me alegro escuchar eso de tí y me alegro que ya tienes dos semanas de no fumar.

Natsu: ¿Cómo lo sabes?

Zeref: Siempre estoy pendiente de tí.

Natsu: Oh! Bueno, gracias por preocuparte.

Zeref: ¿A qué se debe el cambio?

Natsu: Este... no lo sé, simplemente me nació, supongo.

Zeref: Cual sea el motivo me alegro por tí. Y, ¿estás listo para ver a papá para las fiestas?

Natsu: Creo que si.

Zeref: Hermano, esta vez lo convenceremos para que por fín te deje dirigir una de sus empresas. Creo que con el proyecto Dreyar, lo haremos.

Natsu: Por supuesto que si, estoy convencido de eso.

El pelinegro miró en dirección a la mesa donde estaba Mavis.

Zeref: Mira Mavis, me encanta cuando se ríe de esa manera.

El pelirosa pudo ver como su cuñada y Lucy hablaban con mucha confianza.

Natsu: Mavis se lleva muy bien con la nueva ¿verdad?

Zeref: ¿Con Lucy? Por supuesto que si. Mavis me contó que la Srita. Heartfilia fue muy buena con ella. La carta de recomendación que Mavis escribió de ella la describe como una mujer que se entrega en cuerpo y alma a lo que le apasiona, buscando siempre que los clientes se sientan felices con su trabajo por que el trabajo de la rubia se basa en poner amor a cada proyecto.

Natsu: ¿En serio eso escribió Mavis?

Zeref: Tú sabes que Mavis es muy poética a la hora de escribir recomendaciones pero es la primera vez que describe a una persona de esa manera y creo que hasta ahora Lucy lo ha hecho genial.

Natsu: Si bastante...

Zeref: Lástima que no le interese una plaza fija en la empresa, ella lograría mucho.

El pelirosa no respondió, ese era un pequeño detalle, ella se va en unos meses y eso por algún motivo lo hacía sentirse triste.

En ese momento Mavis se incorporó a ellos.

Mavis: ¿Pasa algo? Los veo muy serios.

Natsu: Papá viene para las fiestas y ya sabes como será esto.

Mavis: Ni me lo quiero imaginar. ¡Hey ya se dierón cuenta que muchos chicos han tratado de sacar a bailar a Lucy!

Zeref: Pero a todos a rechazado, ¿crees que esta esperando por alguien en específico?

Mavis: ¿Quién sabe? Sácala a bailar tú, cuñadito.

En ese momentos el rostro de Natsu estaba completamente rojo. Primero que todo, él no sabe bailar y segundo, si ella ha rechazado a todos es lógico que lo rechazará a él también.

Natsu: Muy graciosa pero cuñadita, yo no bailo.

En ese momento Zeref se retiró ya que vió a uno de los clientes de la empresa en el club.

Mavis: Ok, no debes fingir más Zeref ya se fue, yo sé que te gusta mi amiga.

Natsu: ¿Estás loca?

Mavis: Huy si, estoy lo suficientemente loca para notar que no le has quitado la vista desde que llegaste y que cada vez que un chico se le acerca tu mirada asesina aparece.

Natsu: ¡Yo no estoy interesado en ella!

Mavis: No tiene nada de malo que te guste, Lucy es linda.

Natsu: No es eso... es que yo... no sé, ¿porqué ella? Mavis, nunca había conocido a alguien tan... tan...

Mavis: ¿Tan Lucy?

El pelirosa apenado solo afirmo con su cabeza. Era inevitable negarlo, si Mavis ya se había dado cuenta de ello, ¿para qué negarlo?

Natsu: Es todo lo contrario a lo que estoy acostumbrado.

Mavis: Quizas por eso tu corazón se fijó en ella. Lucy es una bueba chica.

Natsu: Pero se va a marchar y yo tengo mis propios planes tambien.

Mavis: Si tienes razón, tu padre. No puedo creer aún que Igneel no te da una empresa, trabajas muy duro, lo mereces.

Natsu: Al parecer mi padre cree que me falta algo y aún no descubro que es.

Su cuñada quizo cambiar de tema rápido, hablar del suegro es como hablar del diablo.

Mavis: ¿Porqué no la invitas a salir?

Natsu: No creo que yo le guste, ella me mira como su jefe.

Mavis: ¿Crees?

El pelirosa no se quería hacer ilusiones pero a pesar de todo, Lucy siempre le preguntaba como estaba, si había comido y a veces le llevaba galletas hechas por ella pero igual le daba a los demás en la oficina.

Natsu: Si lo creo. Además, ella merece alguien que le dedique tiempo y eso es lo menos que yo tengo.

Mavis: Bueno si estas esta noche en el baile quiere decir que ella te importa mucho. Cuñado, el tiempo se hace para la persona que en verdad te importa pero espero no llores cuando la veas con otro.

Sin decir más y sin dejar que él respondiera, Mavis se fue a lado de Zeref. Déjando al pelirosa muy pensativo, ¿porqué ella? Miró de nuevo en dirección a Lucy, viendola sonreír con sus amigas.

Era su sonrisa, ella era muy sentimental pero no débil. Al contrario, ahora la considera valiente por que sin importar que digan de ella, Lucy siempre mostraba sus verdaderos sentimientos, no escondía nada y lo que a él más le intrigaba era que no sabía como ella reaccionaría ante la situación que se le presentaba, eso la hacía interesante y por ende, perfecta.