🎭32🎭

Jimin se sentía como una muñeca mientras tenía a una mucama sobre él, acomodando cada uno de sus cabello, aplicándole toques de polvo en el rostro y pasando un pincel lleno de tinta rojiza sobre sus labios.

No había movido un solo dedo desde que había llegado a ese lugar (literalmente, había tratado de alcanzar su té mientras cepillaban su cabello y la chica se lo acercó de inmediato).

Era tan extraño.

Extrañamente agradable.

"Listo señor Park" La mujer le sonrió mientras apretaba sus hombros y le dejaba mirarse en el espejo. "¿Qué le parece?"

Jimin se miró en el espejo, pasando sus dedos sobre su mejilla con suavidad mientras sus ojos se paseaban por todo su rostro.

Era como si fuera a dar una presentación (el maquillaje de ojos no era tan dramático, pero aún así).

Una parte de su flequillo cubría ligeramente su ojo izquierdo mientras su cabello estaba hecho hacia un lado para dejar ver su ojo derecho.

Ya portaba el traje que había sido hecho a su medida, y una gardenia estaba en la solapa.
El delicioso aroma de la flor llegando a sus fosas nasales.

Se sentía como un príncipe, o un ángel.

Sentía que estaba jugando a ser otro personaje en el ballet. Porque Park Jimin nunca se había visto así de bien, siendo el mismo.

"Me encanta"

La mucama ensanchó su sonrisa antes de soltarlo.

"Bien, pero falta un toque"

La mujer abrió una cajita que estaba frente a ellos.

"El señor Kim las envió para usted. Quiso prestárselas para la ocasión"

"¿Qué co-"

El menor se quedó sin habla al ver los pendientes y el collar de perlas dentro de la delicada caja.

"Es para que combine con su anillo de compromiso" la mujer estiró el collar frente a su cuello "Espero no importunar, pero he visto a su prometido, el señor Min, un par de veces. Y debo decirle que es un hombre muy apuesto, y realmente le felicito por su compromiso"

"Gracias..." Jimin se atrevió a tocar las perlas "¿Enserio puedo usarlas?"

"Uhm, las escogieron especialmente para usted. Se verá encantador con ellas" La mujer estiró bien el collar "¿Puedo?"

"Claro" Jimin alejó su mano y se dejó acomodar las perlas sobre él.

También los pendientes fueron colocados con delicadeza en sus orejas, quedándose más perplejo ante su reflejo.

"Increíble señor Park" la mujer aplaudió para si "Es bello como una flor"

"Dime Jimin" el chico le sonrió a través del espejo "Perdón, es que es raro toda la... formalidad. Todos me dicen Jimin"

"Me disculpo señor- Jimin" la chica rio nerviosa "Los invitados del señor Kim nunca me dejan llamarlo por su nombre"

"¿Cuál es el tuyo?"

"Wonyoung"

"Me agradas" Jimin la miro bien "No te había visto por aquí antes"

"Ayudo más a limpiar. Pero ahora con los invitados, me asignaron para ayudarle a usted. Solo los he visto a usted y al señor Min entrar y salir un par de veces"

"Me hubiera gustado conocerte antes, eres muy amable. Mucho más que el idiota que está en la puerta"

La chica solo rio.

"Vamos Jimin. Es hora de que tome su carruaje a la iglesia"

Wonyoung le hizo una seña para que se levantara.

"Ah ¿Como va a ser todo esto?" Pregunto Jimin mientras se ponía de pie.

"Irá a la iglesia en el mismo carruaje que el señor Min. Y verá al resto de las damas y al señor Kim allí. Después de la ceremonia, será la cena y fiesta en el jardín de la mansión" La mujer señaló a la ventana "Los preparativos están casi listos"

Jimin observo de reojo, viendo a montones de mozos acomodar mesas y flores.

"Bien, bien es que..." Jimin exhalo antes de sonreírle ligeramente "Estoy nervioso, nunca he... Nunca he hecho esto"

"¿Ir a una boda?"

"No, no. He ido a dos. De mi tía en Francia y otra de una maestra de la primaria. De donde soy, todos nos conocemos por lo pequeño que es" Jimin negó la cabeza al darse cuenta que estaba parloteando sin sentido alguno. "Hablo de... todo esto. El traje elegante, las perlas prestadas, el carruaje, la boda de un duque y toda esa gente que... Ya sabes"

Wonyoung asintió, antes de extenderle sus manos, Jimin tomándolas con duda.

"Tranquilo" la chica apretó sus dedos con gentileza "Estaré a su lado. Tengo que cumplir todas sus necesidades mientras esté aquí. Así que lo dejaré en su carruaje, lo veré allá. Y cuando volvamos aquí, estaré a unos pasos de usted en la fiesta. Solo tiene que llamar mi nombre y le asistiré con lo que sea ¿Si?"

Jimin asintió, antes de tragar duramente saliva.

"¿Crees que... les agrade?"

"Claro Jimin. Usted es un encanto. Además, tiene al señor Kim de su lado, jamás olvide eso"

Si, eso debía ser una ventaja.

Tomó otra bocanada de aire y luego asintió.

"Hagamos esto"

Woyoung asintió, antes de soltarlo y abrir la puerta para él.

Jimin avanzó entre los pasillos, tratando de no pensar.

Podría hacer esto.

Era hacer un perfomance, tenía que pensarlo como tal.

Siempre era bueno poniendo un show.

Esto era lo que era.

Debía cumplir su papel, padrino de bodas, y lo haría a la perfección.

Debía fingir que era de aquí, que entendía todo el lujo y protocolos.

Aquí no era Park Jimin de Castle Cove que robaba champaña.

Era el padrino de bodas del duque Kim Seokjin.

Debía entrar al papel y ejecutarlo a la perfección.

Dios le ayude.

Yoongi suspiró mientras se acomodaba de nuevo dentro del carruaje.

Llevaba un tiempo sin tantos tratos especiales.

La casa de Namjoon y Jin podía ser más grande, igual que la importancia de su título. Pero su estilo de vida no era muy diferente al de Taemin.

Miro por la ventana a todos esos sirvientes y la enorme mansión que ahora se veía aún más decorada (como si necesitaran más flores por todos lados).

Extrañaba un poco esto.

Tal vez, técnicamente, nunca había pertenecido a ese mundo de verdad. Él era un invitado, que por pura suerte pudo echar más de un vistazo a toda la comodidad y brillo que tenía aquella vida.

Y daría lo que fuera por volver a ella de nuevo.

Más por...

Sus ojos se encontraron con Jimin saliendo por la puerta, sonriendo mientras hablaba con su mucama.

Su chico se veía como un ángel, un espejismo demasiado bueno para ser verdad.

Le quedaba estar allí.

Jimin merecía todo esto y más.

La puerta del carruaje fue abierta de nuevo por el lacayo, dejando entrar la voz de Jimin.

"Gracias Wonyoung, te veo allá"

Jimin entró con un salto y le sonrió a Yoongi.

"Que hermoso está usted hoy, señor Park"

"No es demasiado ¿Verdad?" Jimin apartó un poco de su flequillo de sus ojos "Nunca había traído tantas cosas fuera de un escenario"

"Te queda genial cariño" Yoongi extendió su mano, Jimin entrelazando sus dedos, y cambiándose de asiento de inmediato y sentándose a su lado. "Y este ángel es solo mío"

Jimin rio antes de besar su mejilla.

"Tu también te ves muy guapo" Jimin pasó sus manos por las mejillas de su prometido "Deberías peinarte más seguido hacia atrás"

"¿Enserio?"

"Te hace ver muy atractivo"

"¿Qué tanto?"

"Si no fuéramos en camino a una iglesia, te lo demostraría"

"Oh, pero seguro tenemos tiempo" Yoongi atacó sus labios, la risa de Jimin escapando entre cada beso mientras trataba de alejarlo.

"Ya- Yoon-" Jimin al fin logró escapar, poniendo su brazo en el pecho del pálido para detenerlo "No hay que arruinar el trabajo duro de las mucamas. No tendrán tiempo para repararlo después"

"Ah, entonces tendré que esperar hasta la noche para estropearlo"

Jimin quito su brazo, para luego recibir un beso en la nariz.

"Te amo"

Una sonrisa amplia se formó en sus labios.

"Yo más"

Jimin no quería separarse de Yoongi, pero parecía que tendrían que pasar toda la misa lejos del otro.

"Novios diferentes" soltó Yoongi antes de que se lo llevaran al otro lado de la iglesia.

Jimin entendía.

Pero Yoongi era la persona que le inspiraba algo de confianza en ese lugar.

Yoongi conocía a este tipo de gente, sabía como guiarle.

Le había dado una clase rápida de modales, como comer, que esperar, y cómo reaccionar.

Pero ahora estaba caminando detrás de Woyoung por un laberinto de pasillos, pensando que aquella catedral era enorme.

Por ahora, solo tenía a la chica.

"Conocerá a las damas del señor Kim" le indicó la castaña. "Su antigua institutriz, la señorita Park Bom. Y su prima segunda, Moon Byul-yi. La primera es algo seria, pero siempre será cortes con usted. La señorita Moon es un encanto, siempre es tan dulce"

Jimin asentía ante la información, tratando de recordar los nombres.

"¿Seokjin ya está aquí? No he podido verlo"

"Si, aquí preparan a los primogénitos de los duques. Parte de la tradición. Deben estar terminando con él"

Una puerta fue abierta, y Jimin tragó duro mientras dos mujeres se volvían a él.

Una más baja, con un vestido azul celeste lleno de florales bordadas. Se veía demasiado pesado, y ese alto sombrero con más flores y el peinado le hacían pensar a Jimin como mantenía el equilibrio en esos tacones.

La otra, más alta, traía un traje parecido al de él, pero el tono era incluso más pálido. Una coleta simple y pendientes que seguro costaban más que el apartamento de él y Yoongi.

"Señoritas, el señor Park Jimin"

El chico no tardó en hacer una reverencia, mientras ambas chicas hacían lo mismo.

"Les dejo" Wonyoung paso a su lado, susurrando "Estaré fuera de la puerta"

Un guiño y la chica se fue.

Jimin les sonrió, sintiendo su estómago ser un manojo de nervios.

"Buen día... Soy Jimin"

Te acaban de presentar, idiota.

"Park Bom" la mujer más baja ni siquiera sonrió.

"Moon Byul-yi. Pero puedes decirme Moonbyul" la más alta le sonrió ampliamente "Todos los amigos de Jin son mis amigos"

"Un gusto" Wonyoung no mentía para nada. "¿Como han estado?"

"Bien"

"Esplendido, esperándote cariño" Moonbyul se acercó a él "Seokjin no dejaba de preguntar por ti"

"¿Enserio?"

"Esto algo nervioso" La chica le señalo la puerta a su derecha. "Dijo que te hiciéramos pasar apenas llegarás"

"Oh, bien... gracias"

Jimin camino con duda hacia la puerta, antes de dar dos toques suaves.

"¿Seokjin? Soy Jimin. Ya estoy-"

La puerta se abrió de la nada y una mano lo jalo dentro, un chillido escapando de sus labios antes de que la puerta se cerrara de nuevo.

"¿Qué? ¿Qué? ¿Qué fue-" Jimin vio al chico con un puchero "¿Qué pasa?"

"Perdón, perdón. Es que técnicamente, solo el padrino o dama principal puede verme. Los demás tienen que esperar a la ceremonia" Seokjin soltó su brazo.

Seokjin dio un paso para atrás, dejando verse en su traje blanco, el gran velo que llegaba al suelo y montones de joyas.

Collares, su anillo de compromiso, unos pendientes que se veían pesados y montones de broches que parecían insignias de algo en sus dos bolsillos del traje. Otra gran gardenia en su solapa.

"Wow, te ves... te ves increíble Seokjin"

"Gracias. Tú también" Seokjin le mostró una pequeña sonrisa "Ah, si te quedaron bien"

Seokjin señaló las perlas.

"Oh, si. Perfectas. Muchas gracias no tenias que-" Jimin resoplo antes de negar con la cabeza "A ver, primero. Me dijeron que estabas nervioso ¿Por qué? ¿Algo pasa? ¿Estás-? .... ¿Estás teniendo dudas?"

"No, no, no. Eso jamás" Seokjin se alejó un poco se sentó en el tocador que había en la habitación. "Es Namjoon, por Dios. Jamás tendría dudas de él. Es algo... Es algo diferente"

"Bueno" Jimin alisó su traje antes de pararse detrás de él, viéndolo desde el espejo. "¿Qué pasa? Mi trabajo en esto es ayudarte ¿Qué tengo que arreglar?"

"Sonara muy tonto, muy bobo. Pero... Ah" Seokjin cubrió su cara con sus manos.

Murmuro algo que Jimin no pudo entender.

"Perdona ¿Qué?"

Seokjin volvió a decirlo, pero sin subir el volumen ni retirar las manos de su rostro.

"Necesito que me lo digas, más fuerte si es posible."

"Ah" Seokjin resoplo antes de quitar sus manos "Tengo pánico escénico"

"¡Oh!" la boca de Jimin formó una perfecta O

"Mi madre me hizo invitar a todo el mundo. Sus amigos, gente que he visto dos veces. Al menos la reina no apareció porque tenía algo que atender en Escocia"

"Espera ¿La reina tenía una invitación a tu boda? La reina, la reina Victoria"

"Si" Seokjin masajeo sus sienes "No va a venir, gracias a Dios"

Si, gracias Dios, la maldita reina hubiera hecho todo esto peor para Jimin.

"Bien..." Jimin aclaró su garganta antes de volver a hablar "¿Pánico escénico? Pero... llevas un teatro"

"Lo sé, es irónico" El mayor resoplo "Pero todo lo que yo hago es detrás de escenas ¿Sabes? Me gusta no ser la persona con todas esas miradas sobre ellos pero ¿Sabes cuantas personas va haber allí afuera?"

"Unas... ¿50?"

"150, son 150 invitados"

"¿150? ¿Y todos en tu casa?"

"No todos, algunos solo van a estar en la ceremonia, otros tal vez ni se presenten, y muchos se irán temprano. Pero... ¡Ah Dios!"Seokjin volvió a cubrir su rostro con sus manos "Siempre me pongo nervioso con tanta gente mirándome. Siento que voy a vomitar, y ¡Tengo que hablar Jimin! Siento que voy a quedarme mudo en los votos. ¡Cuando me presentaron ante la reina me quede así! Solo le agrado porque le dio risa en ese momento ¡Tuve suerte! Pero ¡Agh! ¿Como lo haces?"

"¿Yo?"

"Si, tú te paras frente a montones de personas y... No sé, seguro para ti esto es absurdo y-"

"Hey, hey yo también me pongo nervioso" Jimin se puso en cuclillas a su lado y tomó su mano "Es normal, todo el mundo se pone nervioso ante un público"

"¿Enserio?"

"Tienes que pasar más tiempo detrás de la cortina de tu teatro Seokjin, es un caos antes de cada presentación"

"Pero... todos se ven tan relajados"

"Porque no tienes que enfocarte en toda la gente que te está mirando" Jimin apartó un mechón de cabello que había terminado frente a los ojos de Seokjin "Yo siempre tomó una buena bocanada de aire antes de entrar y me enfoco en lo que realmente importa. Que amo bailar"

Jimin estudio bien su rostro, tratando de encontrar sus ojos.

"Mira Seokjin. Lo que importa es que Namjoon va estar ahí. Namjoon, el hombre que amas va a ser tuyo para toda la eternidad ¿Qué importan todos los demás? Solo enfócate en que él va estar allí"

"No se si sea tan simple"

"Claro que lo es. Mira" Seokjin al fin lo miro a los ojos, viendo a Jimin sonreírle con calidez "Hagamos esto juntos, cierra los ojos y toma aire"

Seokjin siguió sus instrucciones, una gran bocanada de aire nutriendo sus pulmones mientras sus párpados le privaban de la vista.

"Respira hondo y mantenlo... ahora suéltalo lento" Seokjin lo hizo, abriendo de nuevo sus ojos. "¿Mejor?"

"Algo"

"Mira, quiero que pienses en Namjoon. En todo lo que quieres decirle en esos votos. Es para él, él tiene que saber cuanto lo amas. Es sobre ustedes dos, nadie más"

Seokjin asentía antes sus palabras.

Jimin extendió sus manos hacia él, entrelazando sus dedos para darle más confianza.

"Solo tienes que pensar en lo que amas Seokjin, y olvidarte de todo lo demás con eso. Y si algo pasa y te pones nervioso. Solo tienes que hacerme una señal. Si quieres que huyamos, te ayudaré a hacerlo. Si quieres que saque a todos de esa iglesia, lo haré" Seokjin no pudo reprimir una carcajada ante los disparates "Enserio lo haría. También, si quieres que yo finja desmayarme o algo parecido para desviar la atención de todos, lo haré."

"¿Enserio?"

"Lo que tú necesites" Jimin le sonreía, antes de apretar más sus manos "Tú solo da la orden y haré lo que sea necesario. Y si solo quieres apoyo, mírame y estaré allí, a menos de un paso. Y también Namjoon estará allí, no lo olvides"

Seokjin asintió, sintiéndose un poco más ligero, aunque con montones de mariposas en el estómago.

"Bien, bien... tienes razón. Solo debo enfocarme en él... Pero ¿Sigue en pie el que te desmayes si es necesario?"

"Si quieres que lo haga, solo mírame y asiente con la cabeza. Yo haré el resto"

"Bien... solo como plan de emergencia"

Jimin rio un poco, antes de ponerse de pie sin soltar sus manos, invitándolo a levantarse.

"Vamos, hay que casarte"

Siempre digo "No puede ser tan largo"

Y luego termino con 2700 palabras

Y SABEN LA CANTIDAD DE COSAS QUE PASAN EN ESA BODA PARA ESTOS CUATRO PERSONAJES!?!?

La cantidad de cosas importantes para desarrollo de personajes y trama que va a dejar esta boda.

AYUDA.

En fin, espero les esté gustando el fic.

Se los traigo con mucho amor, aunque con lágrimas, sudor y sangre.

Les amo.

-RainyNat🌻💙

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top