VII. Vida Anterior.
VII. Vida Anterior.
... ... ...
... ...
... ... ...
Realizar misiones junto a Eris y el señor Ruijerd era como hacer trampas. Gracias a la gran experiencia de nuestro amigo Superd y la capacidad de Eris con la espada, éramos capaces de completar misiones de increíble dificultad, en poco tiempo nuestro rango avanzo, pronto nuestra reputación fue tan conocida que incluso nos requerían en otras ciudades para trabajos exclusivos.
No tomó mucho tiempo para que juntáramos el dinero con el que compraríamos nuestros pases al continente central, incluso la gente del mar hizo una excepción dejando que nuestro barco navegará por su territorio. Todo era genial, solo un par de semanas y estaríamos de vuelta.
«Gatito, gatito, ven aquí gatito.»
Eris tenía que interrumpir mi relato a la par de la Odisea. ¡Obvio nada de eso pasó!
Maldito gremio y sus reglas para deforestados mentales. "No pueden hacer misiones más difíciles que su rango" ahhh, si esa recepcionista no tuviera ese tercio de grandes y firmes...
«Rudeus, date prisa. Llevas cinco minutos buscando en ese lugar.»
Podría volver a morir y todo sería medianamente bueno.
«Si, si, ya voy.»
Le respondí dejando de remover la ropa del cesto en el que buscaba, ojalá haber encontrado una sofisticada ropa interior, pero creo que eso era mucho pedir en una época como esa, quizá debería hacer diseños de lencería, podría llegar a ser el Victoria's Secret de este lugar. Rudy's Secret, no suena bien, pero tampoco mal, debo anotar está idea millonaria.
(...)
«Debimos usar mi tercer ojo desde el principio»
Nos dijo Ruijerd mientras estábamos en el precario lugar donde nos alojamos para poder descansar. Solo había paja mal acomodada en el suelo, pero sería suficiente para dormir, los tres días que llevábamos ahí lo demostraban.
«No quería causar problemas, todos saben sobre la joya en la frente de los Superd y la habilidad que tiene, encontrar rápido a las mascotas pudo haber llamado la atención de manera innecesaria. Además, creo que deberíamos dejar de lado eso, recuperar mascotas apenas nos deja dinero, lo mejor será comenzar con otra clase de encargos.»
Les dije y ambos parecieron comprender, sin embargo, pude ver como el señor Ruijerd parecía reacio a dejar ese trabajo, supongo que el hecho de que son niños quienes publican anuncios de mascotas perdidas debe hacerlo sentirse mal.
«Aunque, ya son pocos encargos, supongo que podemos encontrar a los que faltan y después cambiar a otros encargos.»
Supongo que eso los hizo sentir mejor, sus sonrisas eran muy obvias.
(...)
Y ahora ¿Cómo llegamos a este punto? ¿Cómo es que deje que Ruijerd matará a ese sujeto insecto? Debo pensar mejor en las acciones que tomamos de ahora en adelante. Entiendo que Ruijerd nos quiera proteger, pero matar a alguien es ir muy lejos, no estoy lastimado ni mucho menos, claro que me dolió, pero ya estoy acostumbrado a recibir golpes.
En verdad debo medir bien las consecuencias de las acciones que tome de ahora en adelante, Ruijerd puede ser alguien capaz de entregar su vida por nosotros, pero si vamos en contra de sus ideas, estoy seguro que su cariño por los niños dejará de importar y nos podría llegara dañar.
«Rudeus, entiendo la idea de cooperar con esos criminales, se que lo haces por el bien de la reputación de los Superd. Lo siento por como actúe.»
«Yo también lo siento, se que debería consultar las decisiones, pero será para bien. Tomar los trabajos de su rango nos beneficiará, mientras ellos hacen recados, nosotros nos encargamos de misiones más complicadas. Y de paso, generamos más dinero para poder seguir nuestro viaje.»
«Entiendo.»
«No te preocupes Ruijerd, confía en Rudeus, es muy inteligente, ya verás que todo saldrá bien.»
El apoyo de Eris fue eficaz, el señor Ruijerd solo relajo la mirada y dio un leve suspiro para después sonreír.
«Claro, gracias niños.»
A Eris le causaba un poco de disgusto que nos tratara como niños, pero cuando agitaba sus cabellos eso poco parecía molestarle.
Ahora solo debemos evitar que nuestra treta sea descubierta.
[...]
Mi cuerpo aún se sentía pesado, ni siquiera sé cómo es que fui capaz de quedarme dormido, aunque si tomo en cuenta el dolor, creo que lo más probable es que me haya desmayado. Me senté sobre el césped en el que estaba, la tarde ya estaba presente y lo que llegó a mis oídos fue el tronar de leña ardiendo por lo que mi ojo se dirigió a la fogata donde pude ver dos figuras preparando todo para comer.
No tuve que decir nada ya que una de esas figuras volteo para ver en mi dirección, se trataba de la más pequeña, usaba una máscara totalmente blanca, solo con hendiduras para sus ojos y nariz, su cabello era largo y negro, sin dejar de mirar en mi dirección, se puso de pie y caminó hacia mi mientras buscaba algo en sus ropas.
Al estar cerca de mi se colocó sobre sus rodillas y se acomodo para después extender sus manos donde había una hoja.
«Pregunta... ¿Eres de ellos uno?»
Parecía torpe al hablar, lo cual me causo mirarla mientras mi ceño estaba fruncido. Cómo no podía ver su expresión, solo suavice la mia y miré el papel, pero no pude leerlo.
«Lo siento, no entiendo que dice.»
Emitió un sonido ligero de frustración y guardó el papel en sus ropas para comenzar a levantarse.
«Disculpa.»
Fue lo único que dijo para dar medio giro, pero cuando estuvo por irse, le expliqué porque no entendía lo que estaba escrito en el aquel papel.
«Eso es ¿Japonés? No sé leer los kanji, creo que así se llaman.»
Ella hizo un sonoro gemido de sorpresa y se volvió hacia a mi de nueva cuenta para volver a colocarse de rodillas.
«¿Inglés, lo entiendes?»
Me preguntó con un fluido acento americano, yo solo asentí y ella retiró un poco su máscara para acallar unos leves sollozos llevando sus manos a su boca.
«¿Estás bien? ¿Acaso ...tu también volviste a nacer aquí?»
Le pregunté y ella retiró su máscara por completo dejando ver su expresión de sorpresa, sus ojos eran rasgados, tenía labios delgados, eso combinado con su largo y liso cabello negro me dictaron que era una chica asiática.
«No, yo aparecí aquí, hace muy poco tiempo.»
Ella respondió y comenzó a pensar mientras yo vi por sobre su hombro solo pare ver como aquel hombre que la acompañaba miraba en nuestra dirección, cuando lo hizo pude sentir agresividad en su mirada, pero eso era lo que dejaba ver de manera superficial, si, estaba molesto, pero no era contra mi.
«Entonces ¿Tu naciste en este mundo?»
Me preguntó y yo volví a mirarla.
«Si, hace diez años.»
«Ya veo, pero, entonces esto es bueno. Viaja con nosotros, hay que aliarnos para poder volver a nuestro mundo.»
Dijo mientras sonreía esperanzada, yo solo la mire y baje mi vista para notar como ahí estaban mis espadas. Cómo mis heridas habían sido curadas por completo. Suspiré y miré de nuevo a la chica.
«No quiero volver.»
Le respondí y ella pareció confundida.
«Mori de viejo en el otro mundo, así que no hay razón para que pierda está segunda oportunidad. Pero si tú quieres volver, supongo que solo fuiste traída aquí, que no moriste, así que supongo que puedo ayudarte, aunque no se cómo podría.»
Esta vez sonrió con cierta calma y solo asintió.
«Entiendo, gracias. Pero no pensé bien lo que dije, debes tener familia ¿Verdad? ¿Esta bien que viajes con nosotros?»
De nuevo mire las espadas, el golpe de Ghislaine vino a mi memoria, sin notarlo, lleve mi mano a la mejilla que había sido golpeada, la derecha, cuando noté que mi brazo faltante estaba ahí de nuevo, miro estupefacto a la chica quien solo sonrió para indicarme a su compañero con la mirada.
«El lo hizo.»
Fue lo que respondió a mi pregunta no hecha y yo solo tragué saliva para tocar mi recuperado brazo con mi antigua extremidad.
Mis labios temblaron, amenazaba con llorar, pero presioné mis puños para evitar hacerlo, miré de nueva cuenta a la chica y luego las espadas las cuales recargue en el árbol.
«Hubo un incidente que transportó a las personas a lugares desconocidos, no se la ubicación de mi familia, pero se que si están con mi padre estarán seguros. Así que si quiero encontrarlos, lo mejor será viajar con ustedes.»
Creo que ella estaba más interesada en que los acompañará para poder ayudarla a volver a su mundo que mi familia, pero si podía viajar con alguien con la capacidad de regenerar un brazo, entonces yo también podía aprovechar está oportunidad.
«Entiendo. Entonces hay un par de cosas que debo decirte antes. Primera; mi nombre es Shizuka Nanahoshi. Y en segunda ...yo estaba en el centro de aquel accidente.»
«¿Apareciste en este mundo cuando eso ocurrió?»
Ella solo asintió.
«Tiene sentido. Fuiste transportada aquí y eso causó el accidente de transportación. Si se reunió mucho mana para un hechizo posiblemente también tuvo consecuencias, y esas fueron que aquellas en el rango fueran afectados.»
«Parece que serás de más ayuda de lo que pensé.»
Me dijo, ahora agradezco haber pasado tanto tiempo leyendo en la biblioteca de los Boreas.
«¿Puedo preguntar algo también?»
Ya que era de mi mundo, creo que sería correcto saber cuáles eran sus capacidades.
«Si, claro. Pregunta.»
«¿Que habilidad tienes?»
Ella pareció confundirse y solo se quedó en silencio para después rascar su mejilla con cierta vergüenza.
«Ninguna. No sé porque, pero no tengo una sola pizca de mana.»
«¿Eh? N-No, no me refiero a la magia de este mundo. Me refiero a la magia del nuestro ¿Cuál es tu habilidad innata?»
«¡¿Q-Q-Qué?!»
... ... ...
... ...
... ... ...
Nuevo capitulo, a qué no esperaban ese final xD. Comiencen a hacer teorías.
Espero les guste el capítulo, nos leemos la próxima.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top