Capítulo 7: No son dos
Jin se encontraba en frente de lo que eran dos enormes rinocerontes negros los cuales miraban con desprecio a la loba que se encontraba riéndose frente a ellos y delante del humano que miraba la situación preocupado no por que pudieran perder sino porque sí les seguía provocando seguramente entrarían en estado de cólera, y sí se les escapan podrían ocasionar un gran daño.
Akarui: ... Jajajajajajaja entonces el otro rinoceronte le dice "no es un maní, es mí cerebro" y el otro le contesta "pensé que lo habías perdido la semana pasada" y el otro le responde "¡No, ese fue el tuyo!" ¡¡Jajajajajajajajaja!!
Jin: Oye...
Akarui: No, no, no, no... Tengo uno mejor ¿Cómo le llamas a un rinoceronte inteligente? ¡Imaginario! ¡Jajajajajajajajaja! Esperen, esperen... ¿Qué consigues poniendo un rinoceronte en una caja con un agujero? ¡Un perchero! ¡¡Aaaah jajajajajaja! ¿Entienden? Porqué lo único bueno que tienen es su cuerno para colgar la ropa jajajajaja aaah~ que divertido [se limpia una lágrima por haber reído tanto]
Rinoceronte 1: [con varias venas marcadas en la cabeza y brazos] ¿Ya acabaste de burlarte de nosotros? [le preguntó con gran furia en cada palabra]
Akarui: ¿Bromeas? Podría burlarme de ustedes todo el día jajajajaja
Rinoceronte 2: [en el mismo estado que el otro] yo tengo una adivinanza para tí... ¿Qué es azul y blanco y manchado de rojo?
Akarui: No sé, ¿Yo bañada en la repugnante sangre de ustedes? [le contesto a modo de pregunta burlona tronando se los nudillos mientras sonreía]
Jin: Sería genial sí midiera sus palabras... Oh qué sus chistes fueran buenos...
Akarui: ¡Te oí!
Jin: Era mí intención {saca una de las canicas de acero que llevaba] {je... Quién diría que realmente las usaría tan pronto, debí meter en mí bolso también unas bombas de humo por sí a caso, espero esto sea suficiente}
Como el chico esperaba los dos se arrojaron al mismo tiempo a modo de envestida, uno contra ella y el otro con él, pero esté rápidamente le disparó.
Pero su brazo apuntaba al suelo, el rinoceronte que se había detenido unos instantes comenzó a reír por su débil puntería.
Jin: Oh. No era un tiro, era una distracción para que te detuvieras [con la vista le indica que mire atrás]
El rinoceronte confundido miró atrás y lo que vio no lo podía creer la loba había cogido del cuerno a su compañero levantándolo e inclinándose logró tirarlo sobre él.
Akarui: ¡Kyaaaa~! Me duele la espalda por más rápido que fuera puse demasiado esfuerzo en ese movimiento... [mencionó con pesadez frotándose la espalda y luego uno de sus hombros]
Jin: Solamente estás algo oxidada, no hemos peleado enserio desde el año pasado y además ni siquiera calentaste
Rinoceronte 1: Ma-malditos...
Jin: Ah se ponen de pie ¿Seguimos?
Akarui: ¡Claro, es hora de ir con todo!
Los dos rinocerontes puestos nuevamente en pie se arrojan nuevamente hacia cada uno, pero para sorpresa del que embistió a Jin el chico logró esquivarlo de un salto con el cual logró sujetarse de una rama con el brazo y con un balanceo subirse en está.
Jin: ¡Listo aquí!
Akarui: ¡Muy bien que comience el espectáculo!
La loba que también había esquivado el ataque de otro estudiante ahora sacaba sus garras mostrando sus colmillos y erizando su pelaje para mostrarse más amenazante por lo que sabiendo que ella a diferencia del humano sería un problema decidieron atacarla primero sin saber que esto era lo que ambos querían pues mientras la loba esquivaba él les atacaba y cuando ella golpeaba él la defendía.
Ver a ambos era como presenciar un baile a la distancia entre dos personas que sincronizaban sus movimientos, uno atacaba y el otro defendía, uno esquivaba y el otro atacaba.
La loba se movía con gracia a través de ambos rinocerontes debes en cuando dándoles un golpe en el rostro o el estómago e incluso deteniendo sus ataques con algo de dificultad, pero usaba esa misma fuerza que empleaban para luego arrojarlos contra la pared o el suelo.
Por otro lado Jin desde el árbol les golpeaba en zonas vitales para que perdieran el equilibrio se distraigan o se asusten. Por esto uno de los rinocerontes aprovecho la distracción que generó su amigo para así arremeter contra el árbol que se encontraba el chico, pero esté cambio de proyectil por una pelota saltarina pequeña la cual arrojó contra una de las paredes mientras esté daba un salto hacía el otro árbol.
El rinoceronte al ver esto fue hacía el árbol que saltó, pero en el momento que se ponía en posición para cargar contra el árbol con toda su fuerza la pelota le dio en el ojo impidiéndole ver correctamente cosa que el chico aprovecho para cargar está vez una canica de acero y disparar la directo a su estómago.
Jin: {maldición le di en el ojo creí que atacaría de inmediato, pero cargo su embestida... Realmente son de los animales que menos han cambiado su piel conformada por una gruesa capa de colágeno dispuesta en una estructura red es como sí llevarán una armadura natural sobre ellos, pero... Sí logró dar en el mismo lugar varias veces incluso las mejores armaduras pueden ser atravesadas, solo debo enfocarme en puntos donde Rui-chan pueda golpear...} ¡Aaaaah!
Akarui: ¡¡Jin!!
Rinoceronte 1: ¡¡No te disteaigas!! [arremete contra ella de un puñetazo para luego darle un cabezazo tirándola al costado de su amigo]
Jin: ¿Te encuentras bien?
Akarui: No espera que fueran tan fuertes...
Jin: Los rinocerontes son pacíficos, pero aunque el rinoceronte blanco es más grande, el rinoceronte negro es más agresivo aunque ambos tienen mala visión... {maldición me siento mal por darle directo en el ojo...}
Akarui: ¡Cuidado!
La chica le gritó, sacándole de sus pensamientos mirándola por inercia a ella y esté igual gritó.
Jin: ¡Detrás de tí!
Sorpresivamente al advertir ambos aunque se miraron dieron un gran saltó esquivando a sus agresores, pero los rinocerontes no se rendían, el que peleaba con la chica intentaba darle una estocada con su cuerno aunque está sin problemas esquivaba y le golpeaba en la cabeza cada vez que lo intentaba.
Por otro lado el que luchaba con Jin intentaba embestir lo, pero el chico sin problemas entre saltos y fintas lograba evadirlo a la vez que continuaba sus tiros e incluso tenía tiempo para ayudar a su amiga de vez en cuando.
Jin: ¡Está listo! Vamos
La exclamación de su amigo hizo sonreír a la chica que inmediatamente corrió hacía él, esté también corrió hacia ella sujetándose del brazo ella arrojó a uno de los árboles para luego darle con golpe contundente al rinoceronte contra el que luchaba Jin, esté golpe lo hizo caer de rodillas para sorpresa de su compañero que no entendía como la loba podía ser tan fuerte como dañarlos de tal forma, pero ella sin darle tiempo a pensarlo comenzó rápidamente una serie golpes consecutivos hasta finalmente tumbarlo, el otro que iba ayudar a su amigo fue detenido por los proyectiles que arrojaba Jin con gran precisión a su cabeza, espalda y brazos por lo que ya hartó también se estampó contra el árbol y al igual que con el otro Jin dio un salto, pero no contó con que esté reaccionó mucho más rápido o más bien sabía que el humano volvería a hacer eso así que rápidamente arremetió contra el otro árbol logrando que el chico perdiera el equilibrio cayendo al suelo adolorido.
Rinoceronte 1: Ahora sí humano, pagarás por meterte con nosotros
El chico intentó rápidamente alejarse para aprovechar la mala visión de estos, pero él rápidamente comenzó a seguirle por lo que se metió entre lo árboles, pero el animal sin problemas pasaba entre ellos como una fuerza imparable por lo que salió teniendo ya preparado un tiro gracias a que aún sí podía pasar entre los árboles de frente; esto lo hacía más lento dándole la oportunidad de cargar su slingshot con una canica de acero, aún con su mala visión fue capaz de verlo por lo que para sorpresa del chico arremetió a mayor velocidad, pero antes de que pudiera darle una cornada el chico dió un gran saltó hacia atrás contra la pared y usándola como impulso de inmediato dio otro gran salto de está forma evitando el impacto del ataque provocando que él chocará contra la pared mientras el chico con su tiro preparado lo arrojó contra el otro rinoceronte al que la chica le dio una gancho derecho a la mandíbula haciéndolo retroceder entonces la canica cayó justo donde él piso provocando que perdiera el equilibrio cayendo de espaldas cosa que la loba aprovecho para darle un poderoso golpe en su estómago sacándole el aire y dejándolo desmayado.
Akarui: ¡Buen tiro!
Jin: Rayos ¿Podrías buscar oponentes que no requieran tantos problemas? Me siento inútil contra animales con piel tan gruesa... [le respondió con una sonrisa aliviada de que todo terminará o eso pensó pues cuando miro a su amiga está iba alzar la voz, pero no le dio tiempo está vez]
El rinoceronte que había quedado estampado contra la pared había recogido sin que se diera cuenta uno de los trozos que se desprendieron y se lo arrojó directo a la cabeza, afortunadamente como no alcanzo a voltearse le dio al costado, pero aún así el impacto fue suficiente para tirarlo al suelo cayendo desmayado.
Rinoceronte 1: ¡Jajajajaja! ¡¿Te gusta arrojar cosas a la cabeza, qué se siente humano?!
De pronto un escalofrío recorrió todo su cuerpo, el rinoceronte es de los pocos animales que no poseen un depredador natural, pero en aquel instante se sentía como un ratón a merced de un gato o una cebra a merced de un león pues la presencia que de pronto apareció era la más aterradora que jamás haya sentido, era una sensación escalofriante, superiora, imparable y que parecía que podría agarrarlo con la palma de su mano.
Era el miedo de la presa ante su inminente muerte a manos del depredador. El rinoceronte temeroso giro lentamente su cabeza por el miedo, sus piernas no le respondían, era como sí su cuerpo se hubiera rendido antes de pelear y solo aguardará su final, entonces vio que le provocaba tal miedo.
Akarui: ¡¡¡Te mataré!!!
Fue lo que gritó la loba con una postura totalmente enfurecida y eufórica, estaba completamente fuera de sí apuntándole con sus garras mostrando sus colmillos, no sólo se podía sentir su sed de sangre, se sentía su deseo de matar.
En una fracción de segundos le atacó y lo único que se pudo escuchar fue el gran gritó agónico del animal por toda la academia.
Minutos más tarde.
Jin se encontraba en la enfermería de la academia mientras que la loba en lugar de estar en una silla o encima de la cama estaba sentada en el suelo a cuatro patas al costado de la cama esperando a que despierte, igual como un perro espera pacientemente que su amo despierte ella con las orejas caídas le miraba atentamente preocupada, luego estiró su mano para sujetar la suya cerrando los ojos unos segundos, solamente deseaba sentir el contacto con su piel o tal vez era al miedo de que sí no hacía no se percataría que su cuerpo estuviese frío, pero afortunadamente no era el caso, su mano era tan cálida y suave como siempre lo había sido. Así se quedó unos minutos.
Luego de aquello comenzó a despertar lentamente con un dolor en la cabeza.
Jin: Maldición... [sentándose en la cama se intenta sobar la cabeza, pero al hacerlo da un grito de dolor y recuerda lo ocurrido] maldito rinoceronte de mierda a veces olvidó que estos animales no son tan estúpidos, me agarró desprevenido... [se da cuenta que no puede mover su otra mano y al voltear a ver nota que era porque su amiga se la sujetaba con fuerza estando recostada al borde de la cama] tonta... Debiste acostarte, no quedarte allí arrodillada [acerca su otra mano para acariciarla] creo que nos falta práctica pasamos todas las vacaciones sin problemas nosotros dos, pero en verdad quisiera que...
Akarui: Jin...
Jin: ¿Eh? ¿Estás despierta?
Akarui: No me dejes Jin... [apretá más su mano con un rostro que parecía estar asustado y triste]
Jin: Ya veo, sigue dormida... Je de verdad que eres tonta, jamás dejaría a mí más grande tesoro, Rui... Eres maravillosa no lo olvides
Inconsciente aún dormida la loba sonrió y esto produjo una sonrisa también en el chico que se volvió a acomodar en la cama.
Jin: No hará daño faltar a clases un día [se dijo a sí mismo cerrando los ojos con una calmada sonrisa] espero Hitomi-chan pueda darme los apuntes... [fueron las últimas palabras que mencionó antes de quedarse dormido]
<Sueño>
Un pequeño de Jin de cinco años se encontraba en el patio del preescolar jugando solo como habitualmente lo hacía, pero tenía un claro objetivo en mente, hoy sería el día en que lograría que la chica más genial que había, una pequeña y adorable loba gris que tenía un carácter agresivo con tendencias muy violentas al punto que prácticamente incluso los maestros le tenían miedo por lo que siempre estaba sola, pero él lleno de confianza se le acercó.
Jin: ¡Hola Kamiryu-chan! Mí nombre es...
Akarui: Largo
Sus contundentes palabras fueron rápidas y dichas con mucha seriedad asemejándose más a una amenaza que a una orden pues estaba harta de está rutina.
Jin: Mí nombre es Jin Mazama, pero puedes...
Sin darle tiempo a responder la pequeña loba rasgo su camiseta haciendo que el chico cayera sentado en el suelo.
Akarui: E dicho... ¡Largo!
La loba con una expresión intimidante le gritó para luego voltearse e irse hasta un árbol donde se recostó.
El chico volvió a acercarse la loba, está sin moverse con su oreja pudo escuchar sus pasos y como se quedaba frente a ella.
Jin: Puedes llamarme Jin
Akarui: [sin mirarle] ¿Eres tonto?
Jin: No, solamente quiero ser tú amigo
Akarui: Eso es tonto, ve con otros
Jin: Pero yo quiero estar contigo...
Ante las palabras del chico la loba se paró y con fuerza lo empujó volviendo a tirarle al suelo está vez por completo haciendo que se raspe los codos al caer. El pequeño dio un pequeño grito de dolor.
Akarui: ¿Ahora en... ¿Eh?
La loba quedó mirando como el chico se levantaba para sacudirse y tenderle la mano.
Jin: Por favor seamos amigos
La loba irritada con una tick nervioso en la ceja además de varias venas marcadas por la rabia se le acercó cosa que emocionó al circo hasta que vio como ella acercó su rostro a su mano y la mordió de tal forma que parecía haberla engullido.
El pequeño gritó por el dolor, pero rápidamente cerró la boca mordiéndose los labios para evitar gritar nuevamente. Luego de unos segundos ella lo soltó.
Akarui: Ahí tienes tú respuesta, ahora vete
Jin: No
Akarui: ¿Perdona qué dijiste?
Jin: Quiero que seamos amigos
Akarui: ¿Eres masoquista o solo estás tonto? ¿Porqué los humanos son tan raros?
Jin: No soy raro, ni eso que dices, solo quiero ser tú amigo y no me rendiré
Akarui: Jajajajajaja ¿Con qué no lo sabes? Pues tal vez deberías leer más cosas que esos cuentos
Jin: Pero yo leo de animales y fauna
Akarui: [con el dedo índice en su sien mirándole con burla] ¿No te entra en la cabeza o qué? Son sólo cuentos, los animales no necesitamos esas cosas, lo que queremos lo tomamos y lo que no nos gusta lo dejamos...
La chica se sorprendió pues de pronto el chico le tomó la otra mano.
Akarui: ¿Qué demonios haces?
Su pregunta iba acompañada de una expresión de furia y parecía desprender un aura de fuego de su pequeño cuerpo.
Jin: ¡Entonces te tomaré!
Akarui: [completamente roja] ¡¿Q-qué has dicho?!
Jin: Te tomaré para que seas mí amiga y no te soltaré nunca [le respondió con total seriedad y determinación]
La chica completamente roja y confundida sin saber que hacer optó por si mejor opción mordiendo le el brazo, pero esté sorpresivamente no rompió su agarre, la pequeña aplicó entonces más presión ya incluso podía comenzar a ver hilos de sangre brotar de su brazo, pero esté aún lo sostenía de forma temblorosa, al verle de reojo pudo notar que quería llorar, se estaba conteniendo como podía y finalmente lo soltó ocasionado que el chico involuntariamente la suelte cayendo de rodillas mientras se soplaba la herida con lágrimas en los ojos.
Akarui: ¡Espero hayas aprendido!
La loba se marchaba cabizbaja, realmente no quería hacerle sangrar, pero no le dejó más opción y a pesar de ello.
Jin: ¡Volveré a intentarlo mañana!
Fue el gritó que escuchó para su sorpresa dejándola perpleja y volteando solo para ver como el chico se iba corriendo.
Jin estaba corriendo al lavado para atender su herida conteniendo como podía las lágrimas, pero finalmente rompiendo en llanto pues de verdad le dolía mucho, pero no tanto la herida como el haber fallado aún así alzó la vista al espejo con determinación.
Jin: Mañana... Mañana la convenceré y seremos amigos
El chico desde que había llegado al preescolar aunque tenía muchas expectativas sobre los animales que conocería y los amigos que haría desde que entró a la tierna edad de tres años había permanecido solo la mayoría del tiempo, al inicio pudo convivir con los conejos, pero estos le dejaron de lado, luego lo intentó con los caballos, pero estos solamente se reían, luego fue con los monos, pero estos se burlaban y así paso entre los grupos hasta quedar completamente solo, por más que intentara aprender de ellos, la mayoría parecían temerle o mirarle en menos, otros le pusieron pruebas imposibles o solamente como burla para ser aceptado en el grupo, pero una vez lo finalizaba se iban entre risas, eso realmente le dolía y lo detestaba.
Hace unas semanas atrás mientras jugaba solo en la caja de arena pudo escuchar cómo unos coyotes molestaban a una pequeña canguro que entre sollozos les pedía que pararán, el pequeño armado de valor quiso enfrentarlos, pero ellos solo se rieron y le golpearon hasta dejarlo tirado muy mal herido. Sin embargo, él no dejaría que otra persona pasará por está clase tratos sin importar si era humano o animal, él no dejaría que los tratasen como lo trataron a él, pero la convicción del chico sólo hizo que le golpearán más aunque la pequeña canguro quería decir algo cada vez que lo intentaba Jin le gritaba a esos animales para evitar que concentrarán su atención en ella, insultando los, burlándose o amenazándo los, todo lo que se le ocurriese hasta que de pronto se detuvieron y solamente pudo escuchar los gritos de dolor de cada uno, como pudo intentó levantar la cabeza y ahí fue cuando la vio por primera vez, una loba gris de espaldas que estaba justo en frente de él.
Akarui: ¡¡¿Quieren callarse estúpidos idiotas miserables?!! ¡¡No puedo dibujar sino me concentro y con tanto mugre grito no puedo!!
La loba gruñó amenazante aunque estos solamente se alejaban arrastrándose asustados, ella sin voltear a vernos solamente se marchó, pero en eso uno de los coyotes tomó un camión de juguete y lo arrojó hacia la loba, el chico sin perder tiempo tomó una piedra que encontró y la arrojó con todas sus fuerzas.
La loba pudo escuchar al juguete acercarse, pero cuando volteó a ver esté cambio su trayectoria debido al impacto con una piedra cayendo al lado suyo, ella se giro para ver quién fue y vio que era el pequeño niño humano que había recibido la paliza.
Ese cruce momentáneo de miradas fue como una especie de carta conexión entre ambos o al menos así lo veía el chico, la loba que le salvó a él y a la canguro era una realmente genial e increíble, ella sin problemas los atacó, era asombroso, pero ella pareció darle la misma importancia y se dispuso a sentarse bajo un árbol a seguir dibujando sin notar que el chico se le había quedado mirando.
Entonces se le acercó y le extendiendo su mano a la loba sentada bajo el árbol le dijo.
Jin: Quiero que seamos amigos
La pequeña impactada se le quedó mirando confusa ante su petición, pero poniéndose de pie le dio una patada que le tiro al suelo y sin más se marchó, pero el chico poniéndose de pie jamás se rindió.
<Fin del sueño>
Lentamente el chico volvía a despertar algo confundido, pero rápidamente recordó todo lo ocurrido.
Jin: Que recuerdo... [mira como ella seguía dormida en la misma posición] más preciado... [dijo con una sonrisa en voz baja]
Por su parte la loba como si sus lentes estuvieran conectadas también recordaba en su sueño aquellos días que para ella fueron tanto tristes como felices, los días en que descubrió lo que era la amistad, la fidelidad, fuerza y la voluntad de un pequeño niño que vio en ella más que un animal al cual tener, un amiga en la cual confiar.
Akarui: Jin... [susurró entre sueños con una sonrisa]
______________________________________
Espero les haya gustado esté capítulo no estaba seguro sí poner el suelo completo se haría muy largo y de momento quiero mantener el formato (la cantidad de palabras) aunque igual aquí la supere jejeje además de que creo que de momento no es necesario ahondar más de lo necesario en su pasado, después de todo como Jin ya le mencionó a Hitomi él tardo mucho en lograr llevarse bien con ella, pero como le recordó a su amiga loba al final lo importante fue el resultado.
Sin más que decir me despido por el momento con un gran saludo a todos, nos vemos pronto.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top