⏤͟͟͞͞★Cambio Repentino༊·˚

Caminaba con rumbo a la oficina de su esposo estaba enojado con el como se le ocurría dejar que su hijo menor fuera a las instalaciones.

Ya había hablado muchas veces con los tres y por los tres eran nada más y nada menos que Dazai, Atsushi y fumiya, su hijo menor.

Abrió la puerta de un portazo mirando al castaño suicida desparramado sobre el escritorio mostrando aburrimiento y cabe recalcar que todavía tenía aquellos papeles para firmar qué aun no hacía ni pensaba terminar, por lo que veía - ¡Chuya! - toda su emoción se fue por la borda al ver a su pareja cruzado de brazos con una expresión de enojo

- hemos hablado de esto - exclamó lanzando le aquellos papeles que le llevaba para que fueran firmados. El castaño hizo un puchero dejando escapar un largo suspiro

- no es mi culpa.. Fumi heredó tu terquedad.. Como manejo su carácter cuando es igual a ti.. - exclamaba en reproches mientras su pareja masajeaba el puente de su nariz

- ese no es el caso.. Tu lo permites

-¡no lo permito! - intento defenderse de aquella acusacion

- ¡tu fuiste el que dijo que debia iniciar su entrenamiento!

Allí Dazai solo le quedo guardar silencio por que el pelirrojo tenía razón y si decía algo en contra estaría en abstinencia durante un año, la puerta se abrió dejando ver al rubio con sombrero quien también traía papeles en mano. Más trabajo maldición....

-lamento interrumpir sus planes de divorcio pero -

-¡Verlaine! -grito el pelirrojo mirando al contrario quien dejó escapar una pequeña risa - ya ya solo es broma.. Dazai te traigo más documentos para que los firmes..

- olvidense qué soy el jefe por un rato.. No an hecho nada más que traerme informes y papeles.. Quiero morir

El pelirrojo contó hasta diez mentalmente para luego darle un golpe en la cabeza para que se arrepienta de las idioteces que decía el rubio con sombrero por su lado, decidió retirarse dejando así a ambos esposos pelear a gusto.

Dazai suspiro profundamente estaría apunto de pedirle a su amado dejar de lado la pelea cuando la puerta fue abierta de un solo golpe miraron a él joven albino de ojos heterocromaticos quien entró - ¿mamá papá donde esta Fumiya?

Ambos se miraron a las caras, había escándalo afuera incluso el rubio con sombrero volvió para decir que estaban atacando les. Y no había rastro del joven pelirrojo - Atsushi, busca a tu hermano y evita que use la face corrupta de su habilidad..

Con la orden dicha fue a buscar al menor, en medio del caos se enfrentó a algunos tipos tratando de abrirse camino para seguir buscando al pelirrojo menor..

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El día parecía estar tan aburrido al parecer, no habían casos recientes y hasta ahora no habían visto la presencia de Atsushi, Dazai preguntó a sus demás compañeros acerca de la desaparición de este pero el resto ni cuenta se había percatado de ello..

- lo envié a comprar unas cosas para mi - exclamó Ranpo sentado en su silla comiendo galletas como siempre hacia..

- Jumm.. Quería que me ayudara hacer el papeleo - volvió a quejarse el castaño recibiendo un golpe en su cabeza de parte de su pareja quien le veía enojado..

- deja de decir idioteces y termina tu trabajo..

- oigan - miraron a Ranpo quien les miró levemente-¿y su hijo?.

- ¿Fumiya?.. El deberia estar en la escuela - suspiro el pelirrojo sentandose nuevamente en su lugar para terminar el papeleo..

- por que preguntas ¿Ranpo-kun?

El contrario dejo escapar un suspiro negando con la cabeza, volvió su mirada a la ventana dejando sus botanas en la repisa para hacer un berrinche.. Después de que todo estaba en paz venían más problemas cuando podrían estar en tranquilidad..

El resto solo le miró sin entender el por que de su comportamiento y es que no era para menos.. Si apenas habían derrotado a Fyodor y nuevamente tenían que pasar por más situaciones molestas..



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Despertó con un horrible dolor de cabeza, ¿que había pasado exactamente?, miro a todos lados a su al rededor notando aquel hombre de cabellera azabache con mechas blancas este también le analizaba con la mirada.

No era la única mirada que tenía encima, estaba en una habitación la única cara conocida fue la mujer de pelo rosa, suspiro sintiéndose más tranquilo oh eso quiso aparentar - veo que el pequeño despertó - miro al centro de la habitación aquel hombre, este tenía cabellera azabache sus ropas parecía a las mismas qué usaba su padre solo que a su padre le quedaba mejor

- ¿quienes son ustedes?

Se levantó de la cama y el hombre se lo impidio, por alguna razón ese sujeto le daba mala espina- ¿donde estoy?.

- estas en las instalaciones de la port Mafia.. Soy Mori Ogai el jefe..

Pestañeo un par de veces al escuchar su argumento y luego se hecho a reír, era la cosa más absurda que había escuchado antes, se levantó negando con la cabeza para encarar al hombre - se equivoca..

- ¿me equivoco?

- mi papá es el jefe de la port Mafia

Todos se miraron a las caras ante sus palabras, no esperaron que este dijera semejante tontería a su parecer, el contrario le dio una mirada seria y el por su puesto no se quedo atrás dándome una mirada fría sin expresión alguna - y dime ¿quien es tu padre?

- Osamu Dazai.. Nakahara Chuya es su mano derecha, no se quienes son ustedes pero son una farsa..

Todo se sumio en silencio, ahora solo se miraban entre si murmurando, el azabache iba a tocarle pero fue más listo sacando una daga para rozar le el brazo. Se abrió paso gracias a su habilidad escapando por la ventana.

¿Que rayos había pasado? ¿Quienes son ellos? ¿Sus padres le abandonaron? Debía encontrarlos de inmediato para saber sus repuestas..

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