Liam estaba sentado en el suelo de una habitación vacia, a su lado Connor estaba dormido con una venda en su nariz.

No tenia experiencia como medico ni nada por el estilo pero cuando lo golpearon con la tabla y calló al suelo ya sabia que tenia la nariz rota, a fin de cuentas el también habia roto una el año pasado.

Lovie trataba de mantener la calma pensando que si todavia no les habian hecho nada malo no empezarian ahora.

"Incluso le vendaron la nariz a Connie" pensó tratando de verle el lado positivo a la situación.

La habitación era de cemento, no tenia ventanas, solo un foquito servia como unica luz en el lugar, y solo habia una puerta.

-¿Crees que tenga algo que ver con...ya sabés que?. Le dijo Lovie con algo de preocupación.
-Da igual el motivo, lo importante es; ¿como mierda salimos de aquí?. Le repondió el otro, parecia cansado.
Lovie solo suspiró y se puso a jugar con el pelo de su hermano menor.

-¿mmm??...
Lovie solo sonrió y esperó a que Connor se despertara.
-¿que...pasó?. Dijo Connor todavia adormilado.
Rapidamente recordó por qué estaba ahí.
-Oh...no era un sueño. Dijo algo cansado.

En ese momento la puerta se abrió y un hombre con una larga barba y lentes oscuros entró a la habitación.
-Vengan, su padre los espera. Les dijo y sin más salió esperando a que lo siguiesen.

Los tres cruzaron una mirada y se levantaron aunque Connor tenia las piernas dormidas por lo cual tuvo que usar a sus hermanos como muletas.

Salieron del lugar y vieron que el hombre los esperaba unos cuantos pasos más adelante, el hombre a penas los vió siguió caminando por el pasillo que había del otro lado de la puerta.

El pasillo, por el contrario a la habitación, tenía baldosas blancas y grandes tragaluces en el techo que daban la sensación de que estabas en un dia como cualquier otro en un parque.

Los chicos lograron alcanzar al hombre cuando se detuvo frente a una puerta.

Una vez que los vió para constatar que estaban los tres, tocó la puerta tres veces y una voz le dijo que podia pasar.

Los tres chicos entraron en el despacho.
-Señor, aquí estan los hermanos Blake.

El señor que estaba del otro lado solo asintió con la cabeza y sonrió.
Los hermanos vieron que en el despacho se hallaba su padre y el reciente presidente.

Ellos tomaron asiento, algo nerviosos.
-Hola chicos, buen dia, lamento mucho la forma brusca en la que vinieron en especial el señorito Connor, asi que dime ¿cómo estás de la nariz? Hoy a la mañana tuvimos que operarte y tuvimos que sedar el doble de tiempo a tus hermanos. Les dijo el presidente, Charlie Underwood.

Los chicos se quedaron callados.
-Niños, por favor respondanle. Los animó su padre pero el presidente intervino.
-No, no tienen por qué responderme despues de todo, solo soy un extraño para ustedes.
-¿Nos va a separar de nuestro padre porque somos híbridos?. Dijo Liam tratando de sonar serio aunque al final se le quebró la voz.
-¿Qué?, no, por dios si se van a separar de su padre pero no de manera permanente. Les dijo.

-¿Entonces por qué estamos aquí?¿por qué nos trataron de secuestrar?. Le preguntó Lovie hecha un manojo de nervios.
-La razón por la que tratamos de secuestrarlos, por así decirlo, fue porque no me puedo aparecer por ahí tocando las puertas de las casas, la gente llamaria a la prensa y ahora lo que menos quiero es llamar la atención lo que me lleva a responderte la primera pregunta; los convocamos porque, precisamente, son híbridos verán no lo declaramos a los medios pero estamos en constante riesgo de superpoblación: ,a pesar de la legalización del aborto y de la selección de bebés que vivirán para cumplir un año, no se puede detener este riesgo y Oceania y America ya no son suficientes territorios necesesitamos un poco más, pero me temo que les he pedido a todas las razas una porción de sus territorios, sin embargo sus repuestas son negativas y, si esto sigue así, nos veremos obligados a iniciar otra guerra. Dijo con semblante preocupado.
-Es todo muy interesante señor presidente, pero...¿dónde entramos nosotros?. Le preguntó Connor.
-Llamame Charlie, y a eso estaba por llegar, resulta que nos enteramos de la existencia de cinco híbridos en este continente por lo cual ustedes serán nuestra ultima carta; van a pedir ustedes mismos una porción de un territorio y, a cambio, tenemos planeado formar una escuela para todas las razas y unificarlas. Dijo esto último con una gran sonrisa.

Los tres chicos quedaron perplejos ante semejante información.

-¿Es mucho para digerir?. Les preguntó.
-No...es solo que...es una misión muy importante. Dijo Liam perplejo.
-Nos dijiste que había cinco híbridos, nosotros somos tres ¿cuales son los otros dos?. Preguntó Lovie.
-Una es una chica mezcla de Elfo y Humano y el otro es un chico mitad Humano, mitad Silfo.
-¿Silfo?. Le preguntó Connor.
-Es un ser que maneja el aire aunque- buscó algo entre los cajones- esto te puede ayudar. Y le entregó un libro de tapa dura.
-Es sobre todas las razas, mi abuelo y mi padre participaron en la guerra y pudieron dar detalles físicos de algunas criaturas.
Connor abrió el libro con ojos brillantes y se puso a leer el capitulo uno.

-Es muy amable de su parte el libro pero no se olvide que todavia son niños. Le Dijo el padre de los hermanos a Charlie.
-No lo dudo señor, yo también soy padre y lo entiendo, pero los chicos irán equipados con alimentos, ropa y un botiquín de emergencia, todo eso para dos meses si se les llega a acabar antes de tiempo, nos tendrán que avisar por una radio, que deberán llevar en todo momento, y entonces los pasaremos a buscar. Le dijo Charlie apoyandole una mano en el hombro.

El padre solamente asintió y les preguntó a sus hijos:
-¿Quieren ir?.
-Si, pá. Le contestaron los dos mayores Connor, en cambio, solo asintió con la cabeza metido en el libro.

-Muy bien, los espero el sábado
Salieron del despacho y el mismo hombre que los había traído se encargó de llevarlos a su edificio.
Cuando entraron a su apartamento vieron que Carolina le había dejado una tarjeta a Connor en la cama.
Connor la leyó y por un momento sus hermanos presintieron que se iba a largar a llorar, sin embargo no lo hizo y se fué a continuar leyendo el libro.
Los otros dos estuvieron preparando sus mochilas para el viaje en avión y vieron algo de tele hasta la noche y cuando fueron a llamar a comer a Connor lo encontraron dormido con el libro parado en el capitulo 12 donde había una imagen de un hombre con patas de cabra.

Los chicos le sacaron el libro y volvieron para cenar, aunque a penas pudieron tocar sus platos los nervios les había hecho perder el apetito.
Después de todo solo faltaban dos dias para el sábado.

¿Que les podria pasar?.