Capítulo 12:

Ilenna abrió una nota púrpura y leyó:

Un corazón débil revelará los miedos que se ocultaron.
Una imagen de este cielo con la tierra ha revelado que el futuro está trazado.
Mundos en línea, atrapados, lo real o lo virtual, la tecnología no va a parar.
Los recuerdos volverán cuando el mal sea enfrentado.
Quien por proteger ha sufrido, por cuidar ha destruido,
Deberá pasar la prueba está decidido.
El mal sucumbirá si lo logra o emergerá si falla.

Todos se quedaron en silencio, al escuchar la predicción me quedé helado, se podía interpretar de muchas formas. ¿Cómo sabía Scott que se refería justamente a mi hermano y a mí?

—Amor... —Armin lo miró, le dijo algo con la vista y él únicamente agachó la mirada—. ¡Ay, mi ángel! —Hizo por moverse en su dirección, pero Kolie la detuvo con un grito.

—Armin, mantente en tu lugar. Debemos decidir qué hacer. Yo no entendí nada de la profecía.

—Kol, cariño —habló Joseph—, ¿no es evidente? Miedos ocultos... Tecnología que no va a parar... Recuerdos... Proteger... Scott debe pasar la prueba y romper el sello en los recuerdos de su hermana.

—Eso jamás. ¡Primero doy mi alma antes de que ella vuelva a pasar por toda esa mierda! —rugió.

—¡Basta de protegerla Scott! —Chilló Armin—. Te has martirizado con esos recuerdos que no son tuyos por más de diez años—. Mientras...

—¡Armin! —la interrumpió—. Es mi hermana, la amo y si debo volver a hacer lo que hice, lo haría no una ni mil veces, lo haría siempre que fuera necesario.

—Scott, Sunny sabe cómo murieron tus padres y quién los mató. ¿Qué está oculto? —Interrogó Kolie que estaba tan perdida como yo.

—La forma en que murieron —contestó Joseph—, ella vio todo. Sunny tenía ocho años cuando mataron a sus padres, pasó dos años sin poder decir ni una sola palabra, no se relacionaba con nadie, nada, estaba muerta en vida por el trauma. Scott descubrió que podía arrancar el dolor, absorbiendo los recuerdos y sufriendo él en su lugar.

—Todo este tiempo ha cargado con un trauma que no era suyo —explicó Armin, se notaba que usaba todas sus fuerzas para mantenerse en su sitio sin correr a su lado—. ¿Nadie se ha preguntado por qué a pesar de estar feliz jamás muestra que lo está? ¿Por qué es tan amargado y frío?

—¡Vaya! —Exclamé inconscientemente y todos voltearon a verme—. Ese es un sacrificio enorme —pensé en voz alta—. Yo... No, mejor dicho, mi hermano jamás haría algo así por mí. Borró mis recuerdos del accidente por conveniencia y para mantenerme como su marioneta. Scott, lo siento.

Algo muy extraño ocurrió, la cámara simplemente salió disparada por la ventana.

—Mucha debilidad —espetó Armin y corrió a abrazar a su novio, quien se desplomó en la silla detrás del buró.

Sunny entró corriendo una vez el campo de protección se evaporó. No es necesario decirles que me ignoró por completo y corrió a su hermano. Por primera vez no sentía celos de que lo hiciera. Jamás podría hacer por ella lo que él había hecho. Sacrificó su felicidad para ayudarla a seguir adelante y eso no cualquiera lo hace. El amor debe ser infinito para sacrificarse de esa forma.

—Estoy bien, mírame —repetía a punto de llorar, seguro pensaba que su hermano estaba en ese estado porque la había lastimado—. La tía me curó, no dejó marca, Scoty, por favor

—Sunny —Joseph habló.

—¡Cállate! —Rugió Scott y se puso de pie—. Me vale poco la predicción, los recuerdos, incluso el dolor. Haré lo que tenga que hacer para proteger a Sunny.

—Regresaré a Lyuvov —susurró ella secándose el rostro.

Me sentí muy mal por hacerla llorar, sabía que mi debilidad había provocado todo eso. Deseaba hacer algo para ayudar, ser inútil es uno de los peores sentimientos que se puede experimentar. Poco a poco te desgarra por dentro.

—No, no te vas a esconder —negó con la cabeza y la abrazó—. No voy a permitir que sigas ocultándote como si hubieses hecho algo malo. Sun, mi peque, debes ser feliz.

—Si haces una estupidez, mataré a Cloudin —amenazó Joseph.

—No te preocupes, no tendrás que hacerlo —respondió y me relajé esperando que mi castigo no fuera tan cruel, aunque lo mereciera.

—¿Me explican el plan? —Pidió Kolie cargando a Joseph que amenazaba con dar una pataleta.

—No se preocupe mi reina, yo me encargo.

—No te estaba dando a elegir, Scott. El plan... ahora.

—Pero...

—¿Llevo esta mole de mil toneladas en la cabeza por gusto? —Señaló con la mano libre a su corona—. No voy a preguntar de nuevo.

—El niño puede salir de la cámara con el último ingrediente, agua de Valsania. Si lo hace estará indefenso por unos años porque le ocurrirá como a Joseph, su poder contenido se irá revelando a medida que crezca. Ahora logra explotarlo todo a través de Cloudin que es un adulto.

—¿Y si me usa? Digo, ¿si vuelve a manipularme y no logro detenerlo? —Pregunté previendo lo peor.

—No lo hará... Un alma no se puede utilizar algo que no existe.

—¿Me vas a matar?

—Peor —Una espiral púrpura se abrió detrás de él y lo absorbió.

Todos los seres mágicos presentes intentaron detenerlo, pero no llegaron a tiempo. La espiral se cerró justo cuando se lo tragó.

—¿Hizo lo que creo que hizo? —Kolie se cubrió los labios y puso a Joseph en el piso que parecía más conmocionado que ella.

—Yo creo que sí —balbució el pequeño.

—Mi hermano, ¿va a cambiar el pasado? Eso no...

—Exacto, Sunny, Pronto veremos las consecuencias de sus actos —Armin comenzó a caminar de un lado a otro mordiéndose el labio inferior.

—¿Me explican? —Tensé los dientes ante las miradas reprobatorias de todos.

—Cloud, a ver, yo te explico —Sunny se acercó—. Dado que aún no ocurre nada, no podemos definir a qué momento exacto viajo mi hermano ni qué va a cambiar. Las espirales de tiempo ayudan a los seres mágicos a viajar en el tiempo hacia el lugar e instante justo que necesitan. Modificar el pasado siempre tiene un precio mayor que el motivo por el cual deseabas modificarlo en primer lugar. Es una herramienta útil y extremadamente peligrosa.

—¿Todos los seres mágicos pueden usarlas?

—Sí.

—Si los lleva a donde deben ir, tal vez Armin pueda llevarnos con Scott.

—Hay un 10% de probabilidades de que eso ocurra —hizo una pausa—. ¿Armin? —la miró buscando una respuesta positiva.

—Podemos intentarlo, vamos —afirmó la aludida y una espiral se abrió, a diferencia de la de Scott, la de Armin lucía como un agujero negro.

—Yo debo regresar a Lyuvov, mi misión aquí ha finalizado —informó Ilenna atravesando las puertas y perdiéndose en ellas.

—¡¿Finalizó?! Esto acaba de empezar, ya conozco bien las consecuencias de cambiar el pasado —Se escandalizó Kolie.

—No la necesitamos —apremió Armin para que entráramos de uno en uno a la espiral.

Aparecimos frente al aeropuerto de mi ciudad, milagrosamente nadie notó que cinco personas habían salido de la nada. Todos pasaban corriendo rodeados de maletas y globos de corazón, parecía ser 14 de febrero. Embelesado con un globo, distinguí a Sunny junto a Scott avanzando hacia las puertas automáticas. Me giré, pero también había una Sunny a mi lado.

—Hermana, ahí está Scott con Sunny —Joseph señaló en dirección a los hermanos.

—Sin dudas estamos en el futuro, ¿qué haríamos en un aeropuerto? —interrogó Sunny al viento.

—Ocultémonos, no deben vernos —sugirió Kolie y todos la siguieron para ocultarse detrás de una pancarta con un corazón gigante.

Ahí vi la fecha, 14 de febrero de 2022. Poco más de un mes después de la fecha en que estábamos en nuestro presente.

Noté que la Sunny del futuro discutía con su hermano, como si no quisiera ir con él, a pesar de que no podía escucharlos, esa fue mi teoría. No la había visto ser rebelde, así que corrí hacia los hermanos ignorando lo que había dicho la reina.

Las puertas automáticas del aeropuerto se abrieron, del otro lado estaba ella: mi amor virtual, con esa sonrisa pícara y tierna que adornaba, su perfecto rostro de nube blanca, su radiante cabellera similar al sol cuando amanece y sus ojos, dos esmeraldas, que chocaron con los míos con la fugaz esperanza de que estuviese allí para rescatarla. Noté un brillo especial iluminar su rostro. El viento rebelde hizo travesuras con su cabello mientras ella luchaba por mantener un mechón detrás de su oreja. Hermosa, perfecta, mi Sunny, y yo un cobarde inservible incapaz de amarla a plenitud.

El espectáculo visual terminó abruptamente cuando él la agarró por el brazo y la arrastró a su lado, transmitiendo ese aire dominante e impenetrable que lo caracterizaba. Quise correr, soltarla, gritarle a ese imbécil que nos dejara en paz, pero no hice nada. Me quedé mirando mientras se alejaba junto a él.

Repitiendo en mi mente: «Es lo mejor para los dos.»

—Cloud —susurró la Sunny del pasado acercándose—. ¿Te vieron?

—Tú sí, Scott como siempre arrastrándote para todos lados ni te dejo venir.

—Scott no me arrastra, yo lo sigo.

—No entiendo por qué estamos aquí —Armin mariposeaba en sus pensamientos.

—Se supone que debíamos venir aquí, aunque no sé en qué afectará esto al pasado —Kolie se encogió de hombros.

—Mejor regresemos —sugirió Joseph.

Volvimos a atravesar la espiral y justo al lado de nosotros salió Scott por otra.

—¿A dónde fueron? —Preguntó estirando su camisa arrugada.

—Eso mismo queremos saber nosotros —Armin se colocó frente a él con los brazos a ambos lados de la cintura, esperando una explicación.

—Creo que resolví el pasado, nuestro presente y el futuro —sonrió satisfecho.

—¿Cómo? —Preguntó Kolie.

—Mi reina solo le revelaré los hechos a usted. Si alguien más lo sabe podría modificar el curso de los hechos —salieron juntos del despecho.

Pude ver la rabia materializarse en los dedos de Armin como fuego, pequeñas chispas calientes que derritieron parte del escritorio.

—Control —pidió Joseph y tiró de su vestido, ella se calmó, pero no lo suficiente porque su rostro seguía contraído.

Se sintió desplazada, después de todo, por lo que tenía entendido, ella también fue reina. ¿Por qué la diferencia?

—¿Qué acaba de pasar? —Sunny parecía asombrada con la actitud de su hermano.

—Ya averiguaré más detalles, de eso no tengas dudas —respondió Armin y salió disparada detrás de Scott y Kolie con Josh en brazos.

Sunny y yo nos quedamos solos, un silencio incómodo se estableció entre los dos.

—Yo... —dijimos al unísono.

—Tú primero —le cedí la palabra.

—Por favor, dime lo que ibas a decir.

—Yo quiero saber la posición de las reinas, digo: ¿Armin fue reina, Kolie la liberó y ocupó su lugar?

—¿En serio? Creí que hablarías de tu hermano, de nosotros... Yo, realmente... no me gustaría preguntar esto, pero, debo hacerlo. Me asusté mucho al ver la cámara, sombras rojas se apoderaron de mi mente, si Scott no me hubiese lanzado lejos... No sé qué hubiese ocurrido —sobó sus brazos—. ¿Qué piensas hacer con la situación de tu hermano?

—No sé cómo puedo ayudar, lo siento, tienes razón, debo centrarme en que recibiré un castigo.

—No lo creo, si mi hermano hizo algo y tú sigues aquí es probable que la modificación no te afecte. Yo por lo menos tengo todos mis recuerdos intactos, excepto uno.

—La muerte de tus padres.

—Ya lo sabes. Espero que ahora no vuelvas a enfrentarte a Scott.

—La verdad siempre pierdo, pero esta vez mi derrota fue aplastante. Él te salva y yo te pongo en peligro.

—Eso es cierto. Cloud, por favor, sé fuerte, no dejes que tu hermano lo destruya todo.

—Pondré todo mi empeño en ello —prometí—. Ahora sí, ¿me explicas la posición de las reinas? Digo, ¿Armin fue reina, Kolie la liberó y ocupó su lugar?

—Ay, no, Cloud. ¿Cómo crees? A ver esa historia es muy, pero muy, larga. Intentaré resumir un poco. Hace unos años Kolie no vivía en Lyuvov, sino aquí en la tierra, tras la muerte de su abuelo ella recibió de herencia el collar. Las reglas aclaraban que nadie debía usarlo, pero ignoró todo y se lo puso. El resto fue complicado, ella desató su magia que estaba sellada, fue a Lyuvov, descubrió secretos muy oscuros de su familia y al final destruyeron al principal enemigo, DARD. El mismo hombre que mató a mis padres. ¿Entendiste algo?

—Sí, creo que sí, fue un resumen bastante conciso —me rasqué la nuca—. ¿Cómo terminó una por encima de la otra?

—Armin decidió dedicarse a criar a su hermano, quien había reiniciado su vida antes de tiempo, como ves, volvió a ser un niño, y bueno, Kolie asumió el trono como la heredera de Lyuvov.

—Supongo que es una historia muy interesante y hay patrones de relación con la mía. Sin embargo, mis padres me entregaron la cámara, pero nadie dijo que no debía usarla.

—El hechizo de tu hermano fue diferente al de Armin. Él solo se libera si cambias a alguien que te importa por su alma. Los hechizos iníciales son extremadamente importantes porque otorgan las reglas para controlar a los seres dentro de los objetos.

—Claro, entiendo. Por cierto, ¿qué querías decirme?

—Te pido que cuando ellos terminen su conversación debemos hablarles. Estás dispuesto a traicionar a tu hermano, ¿realmente?

—¿Qué harías en mi lugar?

—Nunca estaré en tu lugar. Scott vive para protegerme, ya te lo dije. No veo a tu cámara por aquí defendiéndote. ¿Tú sí?

—No, a la primera oportunidad que tuvo escapó.

—Ahí está mi respuesta, traicionar a mi hermano jamás será una opción. Espero que te quede claro. ¿Por qué preguntas eso? Jamás te he mentido con respecto a lo inigualable que ha sido para mí.

—Lo sé, hoy escuché lo que fue capaz de hacer por ti. Ahora entiendo mejor por qué es así.

—Me alegra que lo sepas. Es extraño que tu hermano no me esté atacando, pero regresaré a Lyuvov mientras lo atrapan. No quiero cruzarme con la cámara de nuevo. Espero que entiendas.

Sonaba tan fría y distante conmigo, aunque no era para menos. El único alivio era lo que vi en el futuro, ella estaría radiante en muy poco tiempo, lo daba por hecho, a pesar de que su unión con Scott seguía siendo la misma incluso allí, tal vez un poco rebelde, solo un poco.

Al día siguiente regresé a casa, sin Sunny nuevamente, y sin idea de a dónde se había ido mi hermano. La verdad no quería saberlo, deseaba que se perdiera y no regresara más. Estaba harto de ser su juguete, deseaba libertad. En la primera sesión con la psicóloga delo año le conté lo que había sucedido en Valsania.

—¿No le parece raro? —pregunté ante la posición relajada de la psicóloga.

—Soy una hechicera, ¿se te olvidó? Como bien te contó Sunny ese el funcionamiento de las espirales. Todo ser mágico que la usa va a donde necesita ir, jamás falla. Scott dijo que tenía un plan y que se revelaría, solo te resta esperar.

—Me desespera. Sunny no me llama, ni responde mis mensajes en el chat. Ni hablar de Armin, Kolie o Scott, de ellos no tengo ni el contacto.

—Cloudin, enfócate en tus estudios. Pronto presentarás tu tesis, ¿no? —Cambió de tema radicalmente.

—Sí. Pero eso no me importa mientras no sepa qué va a ocurrir.

—Los humanos nunca saben que va a ocurrir. ¿Qué cambió ahora?

—No sé. Quiero ser parte, que no me dejen de lado.

—Los traicionaste, ya no confían en ti. No puedes esperar que te cuenten los planes como si nada hubiese ocurrido.

—Volví a quedarme solo —admití cerrando los ojos y hundiéndome en el sofá.

—Lo siento...

—No me tenga lástima, eso no me ayuda.

Esa fue mi última sesión, no volví a visitarla. Estaba peor que al principio, me había quedado solo, mi abuela era la única que me quedaba.

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