6
Una semana más tarde, mientras Off estaba sentado en su escritorio mirando fotos de hombres desnudos, escuchaba música proveniente de la ventana de su dormitorio. Off no llevaba nada. Sostenía su polla con una mano y hacía clic en las fotos con la otra. A pesar de que nunca había estado con otro hombre, había estado aliviando su tensión sexual de esta manera desde que había aprendido a utilizar un ordenador. No iba a los sitios de porno duro sólo para hombres. Había algo en ellos que le dejaban una sensación de frío y soledad. Pero disfrutaba de los sitios Web que se centraban en los hombres desnudos que no participaban en la actividad sexual. Los modelos en estos sitios Web no se veían como si estuvieran siendo explotados u obligados a hacer esto por dinero, donde los modelos en los sitios del porno duro siempre parecían tan infortunados.
La música venía de la escalera de incendios fuera de su dormitorio. Era una de esas noches de brisa, que presagiaban días más cálidos por venir. Alguien tocaba una vieja canción de los Beatles en un teclado. Era una canción lenta, y el volumen no era muy alto. Cuando Off respiró hondo y contuvo el aliento, casi podía oler el mar.
Así que dejó de masturbarse y cerró el ordenador portátil. Sacudió su polla un par de veces y la presionó. Luego se levantó de su escritorio y tomó un par de pantalones de chándal azul pálido que había arrojado sobre el respaldo de la silla del escritorio. Se los puso rápidamente y se dirigió a la ventana, comprobando su pene una vez más para asegurarse de que no estuviera duro como una roca. Cuando apartó las diáfanas cortinas para ver quién estaba tocando, miró a su derecha y sonrió. Gun estaba sentado en su alféizar de la ventana con un teclado pequeño en su regazo y su pequeño perro a sus pies. Miraba fijamente al teclado y cantaba la canción sin música. Sus labios estaban apretados, y estaba tarareando en voz baja.
Off se quedó ahí sin hacer ruido. Gun estaba vestido con su corta bata blanca y sus piernas se separaban lo suficiente para que Off pudiera ver la parte más interna de sus muslos. Off se apoyó en la pared y cruzó los brazos sobre su pecho. Mientras que Gun se quedó mirando el teclado, Off inconscientemente lo estaba mirando, sonrió y miró los delicados dedos de Gun deslizarse a través de las teclas, tenía los más suaves y delicados dedos que Off había visto nunca. En ese momento, quería apoderarse de esas manos y lamerlas a la vez.
Cuando Gun terminó la canción, miró a su perro y frunció el ceño. Todavía no sabía que Off lo estaba observando. Palmeó la cabeza del perro, tomó un poco de aire y suspiró tan fuerte que el tímido pequeño perro se levantó y corrió de nuevo al apartamento.
Un momento después, miró hacia arriba y vio a Off de pie en la ventana. Pero no estaba asustado o molesto. Sólo sonrió.
—Hey. — le dijo.
—Hey.
—¿Llevas ahí mucho tiempo?
—Apenas unos minutos.
—¿Quieres un trago?
Off se encogió de hombros.
—Voy a coger una camisa.
—No —dijo Gun—. No necesitas camisa. Estás bien de la manera que estás.
Off vaciló un momento y luego metió la pierna a través de la ventana y salió de la escalera de incendios. En el momento en que llegó a la ventana de Gun, Gun estaba de pie. La bata blanca que llevaba no estaba atada con tanta fuerza como podía haber estado. El cinturón caía por debajo de su cintura como si estuviera listo para desatarse y los bordes de la bata se separaron alrededor de media pulgada por la mitad de su cuerpo. Tenía en la mano el teclado enfrente de sus partes privadas y estaba sonriendo. Cuando se volvió y levantó la pierna para subir a su apartamento, perdió el equilibrio y cayó hacia atrás.
Off estaba detrás de él, se acercó y puso sus brazos debajo de los brazos de Gun. Cuando Gun cayó hacia atrás, aterrizó en el pecho de Off. La bata se deshizo y se abrió completamente. Cayó a los costados y expuso su cuerpo entero. Gun cubrió sus partes íntimas con el teclado y levantó la cabeza. Miró a los ojos de Off.
—Me alegro de que estuvieras ahí. Podría haberme roto algo.
Off colocó ambas palmas de las manos sobre el pecho desnudo de
Gun y sacudió la cabeza.
—Eres más peligroso ahora en esta posición que yo conduciendo a través de Manhattan, en una camioneta.
—No sé nada de eso. En realidad soy bastante inofensivo. Pregunta a cualquier persona.
Off tenía una erección de nuevo. Su corazón latía rápido y su pecho comenzó a jadear. Tomó un poco de aire y exhaló. Miró a los ojos de Gun y le preguntó.
—¿Te puedo besar?
Gun levantó la cabeza. Sus labios se separaron.
—Tú no tienes que preguntarlo.
Cuando Off bajó la cabeza y sus labios se encontraron con los labios de Gun, una sacudida de entusiasmo se disparó a través de todo su cuerpo. Los labios de Gun eran suaves y calientes y estaban listos para aceptarlo. A pesar de que nunca había besado a otro hombre de esta manera antes, se sentía tan natural, que metió la lengua en la boca de Gun y la presionó contra su lengua. Por un segundo o dos, el mundo dejó de moverse y todo se quedó en blanco. Todas las fantasías que Off había tenido alguna vez de estar con un hombre se hicieron reales. La canción que Gun había estado tocando en el teclado comenzó a repetirse dentro de la cabeza de Off. Él nunca había probado nada más dulce o más satisfactorio que el interior de la boca de Gun. No podía tener suficiente. Cuanto más profunda su lengua iba, más quería.
Incluso no se dio cuenta de que sus manos se deslizaban arriba y abajo en el torso desnudo de Gun hasta que Gun se retiró.
—Vamos a entrar. Alguien podría vernos aquí fuera. El Sr. Gordon gritará y llamará a la policía.
Off aún lo sostenía en sus brazos. Le ayudó a ponerse de pie, y luego besó la parte de atrás de su cuello.
—Nunca he hecho esto antes. —Quería ser honesto. En el caso de que no fuera bueno en eso, quería que Gun supiera que había una razón.
Gun se volvió hacia un lado y abrió más los ojos.
—¿Eres virgen? —Su voz era suave. Parecía sorprendido, pero no alarmado.
—No exactamente —dijo Off—. He estado con mujeres. Me casé una vez y ahora estoy divorciado. Pero nunca he estado con un hombre.
Gun se agachó entre las piernas de Off, y cuando deslizó su perfecta mano abajo por la delantera de sus pantalones deportivos, Gun envolvió sus dedos alrededor de la erección de Off, sonrió y dijo:
—Si te hace sentir mejor, no he estado con un hombre en más de tres años.
—¿Tres años? —Off sonaba curioso.
Gun pasó la punta de su dedo índice hacia arriba y abajo del eje de
Off. Se encogió de hombros.
—Me tiene que gustar el hombre primero, y a mí simplemente no me han gustado muchos hombres lo suficiente como para hacer algo con ellos durante tres años. Y por lo que he visto a mi tío pasar con el VIH / SIDA, no tomo riesgos con nadie. Siempre he sabido lo que he hecho, con quién lo he hecho, y dónde lo he hecho.
—Pero soy mucho más viejo que tú —dijo Off—. Tengo cuarenta años de edad. ¿No te molesta que nunca haya estado con un hombre antes? Me ha molestado durante mucho tiempo. Es algo que debería haber hecho hace años.
Gun sonrió y cerró los ojos por un segundo.
—No me molesta en absoluto —dijo—. Si acaso, me siento halagado. Nunca olvidarás tu primera vez, y ahora nunca me olvidarás a mí.
—Lo haces sonar como si nunca fuera a verte después de esta noche
—dijo Off. Su voz era débil por entonces. Con los dedos de Gun a tientas sobre su pene, tenía problemas para formar una frase coherente.
Gun apretó más fuerte y le dijo
—Insisto en una regla. Sólo somos amigos que se gustan mucho el uno al otro. No quiero estar seriamente involucrado con nadie. Yo no estoy buscando amor o una relación a largo plazo.
En ese momento, la cabeza de Off se echó atrás y su boca estaba entreabierta. Habría estado de acuerdo con cualquier cosa que Gun hubiera pedido. Así que asintió con la cabeza y soltó un gruñido.
—Sólo somos amigos.
Después de eso, Gun bajó la parte delantera del pantalón de chándal de Off y ajustó su mano para tener un firme control sobre su pene. Luego metió a Off en el apartamento, a través de la sala de estar, y de nuevo a la cama doble en su habitación. Cuando Off estaba de pie junto a la cama, Gun liberó su pene y se quitó la bata de baño. Agarró la cintura de los pantalones deportivos de Off con ambas manos. Cuando Gun bajó hasta las rodillas, los pantalones deportivos fueron con él. Guió a los pies de Off fuera del pantalón de uno en uno, y luego presionó las palmas hacia los fuertes muslos de Off.
Mientras Gun besaba el interior de los muslos de Off, justo debajo de sus bolas, el cerró sus ojos y extendió las piernas más ampliamente. Sus bolas descansaron en la suave mejilla de Gun. Acarició la parte superior de la cabeza de Gun con ligeros golpes y vio cómo Gun hundía el rostro entre sus piernas. No llevó mucho tiempo a Gun trabajar con la lengua hasta las bolas de Off. Cuando sus labios rozaron contra ellas, pegó su lengua y lamió desde el fondo del saco todo el camino hasta la base del eje. A continuación, Gun pasó la lengua por toda la longitud del eje hasta llegar al final. Cuando cubrió sus suaves y dulces labios alrededor de la cabeza, Off cerró los ojos y estabilizó sus piernas para que no se tambalearan.
Gun permaneció de rodillas durante mucho tiempo. Chupó a Off hasta que su rostro se puso rojo y sus labios comenzaron a hincharse. Su ritmo era uniforme y sus acciones eran gentiles y calmadas. Aunque su boca era húmeda y cálida, la barbilla permaneció limpia y seca. Mantuvo los ojos cerrados y los únicos sonidos que salían de su boca eran ocasionales suspiros y agradables gemidos. Mientras la cabeza se movía adelante y atrás y la cabeza de la polla de Off asomaba por la parte posterior de la garganta, no se ahogaba, tosía, o tenía arcadas. Y cuando Off llegó al punto en que no pudo contenerse un segundo más, Gun pareció saber sin preguntar, y dejó de chupar.
Su cabeza cayó hacia atrás y lamió una gota que se anticipaba de la punta. Tragó saliva y miró a Off con sus grandes ojos verdes.
—Métete en la cama y acuéstate sobre la espalda.
Mientras Off seguía su cariñosa orden, Gun metió la mano en una pequeña caja en su mesita de noche y sacó un condón pre-lubricado. Lo abrió con los dientes y tiró el envoltorio en el piso. Luego se inclinó y cubrió la polla de Off. Era rojo brillante, con pequeñas crestas en toda la cabeza. Gun hizo esto con tal toque ligero que Off se echó los brazos por encima de su cabeza y cerró sus ojos. Luego estiró las piernas y arqueó los pies. Todos los músculos, articulaciones y huesos del cuerpo estaban a punto de explotar. Trabajó duro para controlarse a sí mismo. Estaba dispuesto a llegar al clímax y no quería echar a perder el momento. Esto era todo lo que sabía. No había esperado que el sexo con un hombre fuera tan bueno. En el pasado, siempre había tenido que esforzarse para llegar al punto de clímax con imágenes mentales y fantasías sexuales. Y ahora, por primera vez en su vida, se estaba obligando a aguantar más, y la única fantasía en su mente era Gun.
Cuando el condón estuvo en su lugar, Gun subió entre las piernas de Off y se sentó a horcajadas en sus caderas. Abrió las piernas tanto como pudo, luego colocó una mano sobre el pecho de Off y se inclinó hacia adelante. Con la otra mano, agarró la polla de Off y la guió dentro de su cuerpo. Trabajó la cabeza en su apertura y esperó un segundo. Movió sus caderas un par de veces, arqueó la espalda, y luego bajó lentamente su cuerpo hasta el fondo de su culo que estaba presionado contra la carne de Off.
Gun cerró los ojos y apretó los puños. Mientras estaba sentado encima de Off, a la espera de que la primera incomodidad disminuyera, Off se agachó y agarró las caderas de Gun. Las acariciaba y apretaba suavemente, maravillado por lo suaves y firmes que eran, al mismo tiempo. Off nunca había entrado en nadie tan apretado, tan suave o tan cálido.
Un momento después, Gun abrió los ojos y se inclinó hacia adelante. Envolvió sus brazos alrededor de los hombros de Off y entrelazó los dedos detrás de su cuello. Cuando empezó a subir y bajar por el eje deslizándose todo el camino dentro y fuera de su cuerpo, besó con tanta fuerza a Off que sus dientes chasquearon juntos.
Un minuto después de eso, mientras continuó besando, Off comenzó a corcovear sus caderas con el mismo ritmo que Gun estaba usando para montarlo. Off apretó las caderas de Gun con sus manos fuertes y obligó al culo de Gun a subir y bajar más rápido. Sus cuerpos se abofetearon juntos, sus lenguas apretadas y enganchadas. Cuando Off no pudo contenerse ni un minuto más, se quejó, con su lengua profundamente dentro de la boca de Gun, y llenó el condón por valor de tres días en venirse. Fue tan grande la carga y tan intenso el clímax, que en realidad sentía la sensación en los dedos de sus pies.
Gun se sentó y sonrió. Ajustó las caderas, obligando a Off a permanecer en el interior de su cuerpo, y asintió con la cabeza a su propia erección.
—Tócame ahora. Masturbarme mientras estás todavía muy dentro de mí. —Le susurró esto; que era una petición, no una orden.
Cuando Off alcanzó la erección de Gun y la ordeñó, Gun cerró los ojos y levantó los brazos en el aire. En el momento en que lamió su estómago y arqueó la espalda, se vino por todo el estómago de Off con un grueso chorro.
Luego bajó los brazos y ajustó sus caderas. Se agachó y le dio un beso a Off en los labios.
—¿Estuvo bien? —Preguntó—. No quiero ser responsable de que la primera vez de alguien sea horrible. Eso me mataría. —Su voz era un susurro bajo ahora; aún respiraba con fuerza y sus labios aún estaban hinchados.
Off abofeteó el culo de Gun suavemente y le dijo:
—Fue genial. Todavía estoy disfrutándolo.
Todavía estaba dentro del cuerpo de Gun y su pene estaba demasiado sensible.
—¿Estuvo bien que no nos viniéramos juntos?
Off masajeó el culo de Gun, no podía mantener sus manos lejos de él.
—Infierno, ambos llegamos en cuestión de minutos el uno con el otro. ¿A quién le importa si nos corrimos juntos?
Gun suspiró y apoyó la mejilla en el pecho de Off.
—Me alegro de que te sientas así. Siempre estoy leyendo acerca de lo importante que es correrse al mismo tiempo, homosexuales o heterosexuales. Pero nunca pensé que fuera realista. Eso pone mucha presión sobre ambas personas. Y no debería haber ninguna presión cuando dos personas están haciendo el amor.
—¿Podemos hacer esto de nuevo esta noche? —Preguntó Off. Aunque nunca había dicho esto en voz alta, no podía esperar para inclinar a Gun sobre la cama y joderlo al estilo perrito. Había estado fantaseando hacer esto con Gun durante un tiempo.
Gun se sentó y movió sus caderas.
—Supongo que podemos. Pero no vamos a hacer un hábito de esto. Todavía somos sólo buenos amigos. ¿Somos claros en esto? —Su voz era todavía suave, pero había ahí un cariz que no había estado ahí antes.
Off sonrió y asintió con rapidez. A diferencia de la mayoría de la gente Off sabía, cuando Gun hablaba con un tono serio. Era difícil tomarlo en serio justo ahora, pero aun así...
—Somos claros. Sólo quiero follarte en tus rodillas una vez. Después de eso, nunca te lo pediré de nuevo.
Las cejas de Gun subieron y volvió su cabeza rápido. Pero no la giró lo suficientemente rápido. Off vio la enorme sonrisa en su rostro.
🔥 𝕭𝖑-𝖋𝖎𝖈𝖘
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