Capítulo 20

NARRADOR OMNISCIENTE

—Halston, es hora de ir a desayunar —dijo Alice moviendo el cuerpo de la castaña.

—No me siento bien Alice —susurró la chica y se cobijó hasta la cabeza.

Alice volvió a ver a Marlene y ambas se vieron extrañadas.

—¿Necesitas ir a la enfermería? —preguntó Marlene acercándose a ella.

—No, solo necesito descansar —murmuró.

Las chicas decidieron bajar, cuando pasaron por los sillones de la sala, una mano agarró el brazo de Alice.

—Alice ¿ya bajó Hals? desde hace rato estamos esperando —preguntó James frunciendo el ceño.

—No quiso alistarse, dijo que no se sentía bien —dijo Marlene haciendo una mueca.

Los chicos se vieron preocupados.

—¿Qué tiene? —preguntó Sirius levantándose.

—No nos dijo, nada más dijo que se sentiría mejor si se quedaba a descansar —dijo Alice.

—En realidad desde ayer se encuentra rara, no quiso cenar y ahora esto —Marlene vio al piso de forma preocupada.

—De acuerdo, gracias chicas —sonrió levemente Remus.

Los chicos se levantaron y caminaron a su habitación para agarrar la capa de invisibilidad.

—Vayan ustedes a desayunar, los veremos en la primera clase, si llegamos tarde inventen una escusa —dijo James y junto a Sirius se colocaron la capa para entrar a la habitación de las chicas.

Entraron suavemente a la habitación de la chica, esta estaba durmiendo.

—Halston —murmuró James y acarició el cabello de su melliza.

Esta abrió los ojos y al ver a su hermano trató de no llorar, los recuerdos del día anterior la tormentaban.

—¿Estás bien pequeña? desde ayer estás rara —dijo Sirius sentándose en la orilla de la cama.

La chica hizo una mueca y se sentó en la cama, sin tener una idea de cómo decirle a los chicos.




HALSTON POTTER

Los vi a ambos, no sabía como decirles esto, era demasiado para mí ¿cómo rayos le iba a decir a mi hermano que yo tenía que salvar el mundo mágico? ¿o a mi novio que su hermano quiere ser un mortifago?

—Estoy bien chicos —le reste importancia.

—Por Merlín, eres mi melliza Jade, te conozco muy bien ¿qué te preocupa? —me vio serio.

Lo vi triste y le di la profecía, ambos me vieron confundidos.

La profecía empezó a recitar lo de antes, al terminar los chicos estaban viéndome bastante impactados.

—Halston... —James se corto a sí mismo, se veía sin palabras.

Hice un puchero y lloré desconsoladamente, Sirius rápidamente me abrazó.

—¿Por qué? por Merlín ¿por qué me tiene que pasar esto a mi? soy una maldita estudiante, una bruja con muy mala suerte... pensé que ser atacada por un hombre lobo que resulta ser mi mejor amigo sería suficiente castigo... pero esto ¿qué diablos pasa con mi vida? —exclamé alterada.

—¿Por qué Halston Potter tiene que salvar el mundo entre tantos magos? tal vez porque es lo que el mundo necesita, a alguien como tú... valiente, muy inteligente, leal y siempre optimista, le ves el lado bueno a todo... maldición el día del ataque con todo y cicatriz sonreíste, trataste de sentir bien a Remus diciéndole que todo iba a estar bien, eres la mente brillante en nuestras bromas  y eres la persona más valiente que conozco en mi vida, literalmente te sacrificaste por Lily el día del ataque. Será difícil Halston, pero se que si alguien puede derrotar a ese monstruo, muñeca te aseguro que esa persona eres tu —dijo Sirius acunando mi rostro con sus manos.

—Canuto no pudo describirte mejor. Y tal vez no somos tu, pero te juro hermana... que no estarás sola salvando el mundo, te ayudaré, los merodeadores te ayudaremos... en cada paso, estaremos junto a ti —dijo James agarrando mi mano —. Ahora pequeña, respira profundo y secate esas lágrimas, porque es hora del plan de nuestras vidas... destruir a ese bastardo —dijo levantándose.

—¿En que podemos ayudar? —preguntó mi novio.

—Reúnan a los que ustedes crean los mejores estudiantes, leales y valientes... yo hablaré con el director —dije y me levanté más confiada.









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Pase —escuché que dijeron al tocar la puerta.

—Director —murmuré y entre, viendo aliviada que no había nadie más ahí —. Necesito hablar con usted, es un tema realmente urgente —dije y me senté frente al escritorio.

Él se quito sus lentes para leer y me vio curioso.

—Por supuesto señorita Potter ¿que sucede? —asintió.

—Sabe lo que está sucediendo con el señor tenebroso... bueno al parecer el mundo quiere joderme, porque me llegó esto —hice una mueca y saque la profecía.

Cuando esta termino de hablar, Albus me vio impactado.

—Señorita Potter... —dijo con clara pena, pero lo corté.

—Estoy tan sorprendida como usted, pero ya pase toda mi mañana deprimiendome y creo que es suficiente, decidí hacer algo al respecto... director necesito que me ayude a crear un ejército para vencer a Tom Riddle, estoy lista —dije y me levanté, colocando mis manos en su escritorio —. Reclutare a estudiantes con grandes habilidades y usted me ayudará a entrenarnos —dije y él sonrió orgulloso.

—Hagamos esto señorita Potter —dijo y colocó su mano en mi hombro.














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