Varias semanas antes...

Aun estaba durmiendo en mi casa, pero gracias a los pequeños rayos de luz que se colaban por la parte descubierta de la ventana, comencé a despertar.

Abrí los ojos perezosamente para moverme a un lado de la cama y poder ver la hora que indicaba el reloj que estaba colocado en la mesita de noche...

8:45 am...

— Todavía es muy temprano... — dejé escapar en un pequeño susurro. Creo que empezaré el día dando varias vueltas a la ciudad.

Me senté en la cama, agachándome para poder sacar mis clásicas zapatillas de color rojo con blanco y un broche dorado que estaban debajo de mi cama. Una vez que me las puse, me dirigí al baño para poder lavarme los dientes y ducharme, la misma rutina de siempre.

Cuando terminé de bañarme, me remojé la cara varias veces para poder ahuyentar el sueño y estar despierto completamente. Cuando estaba dispuesto a secarme la cara con una toalla, escuche un sonido... tal vez alguien tocaba la puerta.

— ¿Eh? — No estaba seguro de que alguien tocara la puerta, no pude escuchar bien ya que al secarme, la toalla tapaba mis orejas — ... — me quedé en silencio para volver a escuchar tal sonido y probar que alguien estaba esperando en la entrada.

Sólo espere unos cuantos segundos y se escucharon varios golpecitos que provenían de la puerta principal.

— ¡Voy! — Comencé a caminar hacia la puerta y al abrirla, me encontré con mi mejor amigo.

— ¡Hola Sonic! Buenos días — me dijo con una gran sonrisa en su rostro, eso me alegró un poco.

— ¡Hola Tails! ¿Qué te trae por aquí? — Normalmente soy yo quien va a visitarlo a su taller, eso me extraño un poco.

— Oh, cierto, bueno solo quería entregarte esto — Sacó una bolsa en la cual había un aparato. Me lo imaginaba como un reloj ya que tiene la forma de una pulsera o algo así.

— ¿Y qué es esto? — De verdad, no tenía ni la más mínima idea de que era.

— Es un comunicador. Como la mayoría del tiempo te encuentras corriendo en lugares muy lejanos, esto facilitará nuestra comunicación o podremos avisarte de un ataque a Mobius — Bueno, al menos podré correr con más tranquilidad sin la necesidad de estar al pendiente de cualquier ataque — También podrás hablar con los demás... pero eso será cuando le entregue uno de estos a cada quien.

— De acuerdo, muchas gracias amigo — Me coloqué el comunicador en la muñeca de mi brazo derecho y lo apreté un poco, lo necesario para que no se fuera a resbalar o que no me fuera a incomodar.

— No es nada, si tienes algún problema con el comunicador... sabes dónde encontrarme — Cuando dijo eso me guiño el ojo y se fue alejando sacudiendo la mano de un lado al otro — ¡Adiós Sonic! ¡Nos vemos luego!

— ¡Esta bien Tails! ¡Adiós! — Una vez dicho esto, salí de mi casa para cerrarla con seguro he irme a dar una vuelta por la ciudad.

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Salí corriendo a gran velocidad de mi casa para recorrer la ciudad. Estuve un buen rato corriendo y sin querer me dirigí al gran bosque de la ciudad. Este lugar me tranquiliza mucho. Los inmensos árboles que con sus abundantes ramas cubren la superficie, creando gran infinidad de sombras; esto hace que el bosque sea un lugar muy fresco y agradable. Los pájaros cantando hacen un sonido muy relájate. Esto es simplemente bello. Subí a un árbol para poder acostarme en una de sus ramas. Tenía la vista del magnífico lago, es algo hermoso.

Tanta tranquilidad abundaba en este lugar que, sin darme cuenta, fui cerrando los ojos lentamente hasta quedar profundamente dormido...

(...)

¡¡BOOM!!

— ¿Pero qué... ¡¡AAAHHH!! — Demonios eso dolió. Esa explosión hizo que me cayera de la rama en la que me quede dormido. Me caí de espalda, lo que provocó que se me complicará un poco levantarme. Si que fue una caída dolorosa.

Cuando me levante, sobe un poco mi espalda — Agh... — quería descubrir que ocasionó aquella explosión. Alce mi vista y vi como faltaban algunos árboles a mi alrededor — ¿Qué rayos...? — a lo lejos, alcancé a ver como algo brillaba una y otra vez.

Fui acercandome lentamente por la inseguridad que tenía. Tal vez sea alguna criatura la que calló y no quería asustarla, también no quería problemas, o sólo sea un simple objeto.

Al estar tan cerca de aquella "cosa", di un gran suspiro de alivio. Sólo era un tipo de piedra preciosa que estaba en una cápsula. Bajé al gran hueco que la capsula creó en el suelo. Esa pequeña máquina debe de ser muy pesada, este hueco es muy profundo.

Ya una vez abajo, pude contemplar con más detalle aquel objeto. Era una máquina algo pequeña, casi como de mi tamaño. El color de esta es de un tono gris obscuro con pequeños detalles blancos. En el centro, tenía un vidrio agrietado, de seguro es por la caida, en él se podía ver esa hermosa gema. Parecía una esmeralda chaos pero ligeramente más grande.

Fui acariciando lentamente con mis dedos la máquina hasta que no me percate de que había llegado a la parte del vidrio — ¡Auch! — me hice una larga cortada en mi guante de mi mano derecha, haciendo que se rompiera — ¡Maldición! — Retiré mi guante con delicadeza para notar que de inmediato la sangre comenzó a brotar lentamente de mi mano. No pensé en algo mejor que en usar mi guante roto como venda y amarrarlo en la herida.

Otra vez miré la gema que estaba encerrada en la capsula. Tome una roca y la azote contra el vidrio para dejar un gran agujero en él. Estiré mi brazo para tomar la joya pero en el momento en que hice contacto con ella... — ¡Ahhh!... ¡agh!... — al sentir un fuerte dolor, caí de rodillas, sosteniendome con mis manos. Sentía como algo dentro de mí crecía. Mi cabeza me dolía, como si alguien la estuviera comprimiendo fuertemente. Pude sentir en ese momento como mi estomago y mi herida se quemaban, como si tuvieran contacto con algún ácido. También tenía la sensación de que mis huesos perforaban mi cuerpo — ¿Q-Qué... me esta.. pasando? Aghh! — ¡No puedo soportarlo! ¡Esto de verdad me duele!

Afortunadamente el dolor se detuvo. Con dificultad me puse de pie. Aquella gema radiaba su luz demasiado rápido — algo no está bien con esta cosa... — desaté el nudo del guante que le hice a mi mano para colocar la joya, sin hacer contacto con ella — Tails debe ver esto — salí a una super velocidad del bosque para dirigirme al taller de Tails. Él sin duda alguna debía saber que era esta cosa y de dónde vendría.