Ho Seok

Mi mente aun divagaba por todos lados. Los estúpidos de mis amigos seguían burlándose de mí, "¿Cómo haría para conseguir una prueba?", ellos tenían razón al decir que era casi imposible. Tal vez si me acercaba a Kim, este solo me mandaría a rodar cuando se enterara de que había tenido sexo con él por conveniencia, aunque Tae Hyung no parecía ser del tipo de persona que me daría un golpe en la cara. Después de todas las cosas horribles que le habían hecho durante todos los años de escuela esperaría aunque sea una mínima reacción, pero él siempre se mantuvo calmado, aun después de la vez en que accidentalmente alguien logró que la punta de sus lápiz terminara incrustada en una de sus manos, que debía admitir, eran realmente hermosas, o la vez en que le hicieron una zancadilla y su rodilla terminó con cinco puntadas en el hospital, o incluso la vez en que alguien lanzó un balón de baloncesto y cayó directo en la mitad de su cara, causando que su camiseta tuviera una enorme mancha de sangre que caía desde su nariz.

Si yo hubiera estado en su lugar habría partido la cara del imbécil que me golpeó, pero sin duda él no haría eso, porque... simplemente no somos iguales...

[♥]

Dos meses después

Había pensado mucho en cómo lograr tener el dinero en mis manos, y sabía que solo había una manera, debía hablar con Kim y por desgracia siempre sabía en dónde encontrarlo.

Tomé mi mochila con fuerza en mi hombro y me dirigí hacía la sala de química, mis manos sudaban, no había pensado exactamente que debía decirle y tampoco que reacción esperar, solo rogaba para que aceptara y no me mandara al diablo.

Abrí la puerta y como era de esperarse estaba solo, escribiendo algunas cosas en una pequeña libreta, tenía una bonita pluma en la mano derecha, en la punta se podía ver la cabeza de un osito marrón claro, la luz entraba por la ventana cayendo directo contra su piel, haciéndola ver radiante. Golpee suavemente la puerta para llamar su atención, y lo hice, ya que su rostro se giró para mirarme algo sorprendido.

-¿Puedo pasar?- el asintió algo ido, cubriendo la libreta con sus manos, mientras yo caminaba para sentarme frente a él- Hola- dije tratando de sonar amable, lo observé pasar las páginas de la libreta hasta las últimas de esta y escribir con su pluma rápidamente para enseñármela.

- Yo... quería hablar contigo sobre lo que pasó hace unos meses- dije desviando la mirada, no me sentía orgulloso de lo que había pasado, pero debía decírselo, la culpa me estaba matando. Antes de que pudiera continuar, me mostró la libreta nuevamente.

"¿Vas a decirme que todo fue por una apuesta, verdad?"

Mi sangre se congeló por completo, sentí como si me hubiera caído una cubeta llena de hielo o como si me hubiera estrellado contra el iceberg que hundió el Titanic. Él lo sabía y lo peor es que no era por boca mía.

- Y-yo... t-tú... ¿lo sabías?...- el asintió, mostrándome la libreta por tercera vez.

"Te oí cuando hablabas con tus amigos."

Me sentí aun peor que antes, él se había enterado y no parecía enojado, ni mucho menos me había golpeado. De inmediato bajé la cabeza, no sabía qué decir. A estas alturas yo mismo me habría golpeado por todo esto. El silencio se hizo presente hasta que pude sentir una mano moviendo mi rostro suavemente, mostrándome la libreta.

"No te preocupes, lo entiendo. Si yo fuera tú, tampoco me fijaría en alguien como yo, no tienes que sentirte mal, incluso puedo ir con tus amigos y afirmar lo que pasó entre nosotros, para que recibas tu dinero."

No podía creer lo que estaba viendo, llevé mi mirada atónita hacia él, notando como veía hacia la ventana distraídamente.

- Yo... gracias...- dije finalmente sintiéndome avergonzado- ¿No...no estás enojado?... Realmente lamento lo que pasó, no quería que todo terminara así... - el me observó unos momentos antes de tomar su libreta y comenzar a escribir en varias hojas. Lo observé con detenimiento hasta que terminó y me mostró los papeles uno por uno.

"Yo también tengo algo que decirte"

"Es algo vergonzoso y tal vez me odies, pero de cualquier forma creo que tienes derecho a saberlo"...

"Yo estoy embarazado... y tú eres el padre"

- ¿Qué?- fue la única palabra que salió de mis labios. El silencio apareció de nuevo, mientras mi cerebro intentaba asimilar la situación, ¿Yo? ¿Padre?... esto no podía ser verdad- Tae Hyung, yo...- al instante vi como escribía un último papel antes de dejarlo sobre la mesa, recogió sus cosas y me miró a los ojos directamente, y movió sus labios diciendo algo que no logré entender. Tomé el papel en mis manos cuando mi presencia fue la única en la habitación y comencé a leerlo.

"Ho Seok, entenderé si no quieres saber nada de mí, no te arrastraré en esto conmigo, siéntete libre de seguir con tu vida"

-Mierda. — susurré.

[♥]

Era la quinta vez que llamaba y ella no respondía el teléfono, necesitaba hablar con ella y no se dignaba a contestar. Una vena empezaba a crecer en mi cabeza de tantos sentimientos juntos, lo iba a intentar una vez más y...

-¿Bueno? - se escuchó su voz desde el otro lado.

- ¡JiWoo! ¡Maldita sea! ¡Hasta que respondes! - un quejido se escuchó desde el otro lado.

-¿Qué quieres Ho Seok? Estaba trabajando-

-Tener sexo no es trabajo- dije serio.

- Lo es si te pagan por eso- dijo con el mismo tono que el mío- Pero dime ya que querías ¿Ha pasado algo? ¿Te encuentras bien? - respiré hondo.

- JiWoo necesito que regreses a casa, tengo que hablar contigo de algo muy importante, es urgente, y no, no estoy bien, por favor regresa... - dije sosteniendo mis cabellos con fuerza, incluso podía sentir las lágrimas acumulándose en mis ojos.

- Tranquilo hermanito, ¿Por qué tanto drama? ¿Mataste a alguien? o ¿A quién embarazaste?- me hubiera encantado contestar esa pregunta burlona con una respuesta igual de bromista, pero esta vez, estaba nervioso y fuera de lugar.

- Kim Taehyung - dije directamente, causando que la risa del otro lado callara.

- ¿Qué? ¿Ho Seok? ¡No estoy para bromas! ¡Ho Seok, responde! - su voz sonaba algo dudosa, como esperando que le dijera que era una mentira.

- JiWoo, por favor... estoy desesperado.- mi voz sonó completamente derrotada.

- No te muevas, llegaré en veinte

[♥]

- ¡Ho Seok! ¿Puedes quedarte quieto? - la voz de mi hermana resonaba en mis tímpanos.

- JiWoo no lo entiendes, seré padre y... y yo no quiero eso

-Debiste pensar eso antes de meter la polla donde no debías.

- Lo sé, soy un idiota- dije tirándome en el piso, ella se quitó los zapatos altos que traía y se sentó junto a mí en el suelo.

-¿Sabes? Aun no le encuentro el problema ¿Qué es lo que no quieres exactamente? ¿Hacerte cargo del bebé o tener que vincularte con aquel chico? ¿Cómo dices que se llama? -suspiré rendido.

-Su nombre es Tae Hyung, Kim Tae Hyung. Te he hablado sobre él, pero tal vez estabas tan pendiente de la polla de tu novio en turno en lugar de escucharme

-Espera, ¿hablas del mismo Kim Tae Hyung?- asentí lentamente- ¿Del Kim al que todo el mundo humilla en público y que se la pasan casi toda la vida haciendo imposible desde que ingresó a la escuela?- asentí nuevamente, tal vez ella si me prestaba atención.

-Sí, JiWoo, ese Tae Hyung

-Tal vez me esté equivocando, pero... ¿Acaso no me mencionaste alguna vez que ese chico era mudo?- asentí una vez más.

-Sí, es mudo- ella puso una expresión extraña, jamás la había visto en su rostro- ¿Qué sucede?

- Ho Seok, él... ¿en algún momento te pidió ayuda para poder cuidar del bebé?- en ese momento me levanté y busqué en el bolsillo de mi chaqueta la última nota que me había entregado la vez que hablamos. Ella la tomó, leyendo el contenido y dejando la nota a un lado, doblada delicadamente -creo que deberías intentarlo- me dijo finalmente.

- ¿Qué?- dije sorprendido.

- Dije que creo que deberías intentarlo

-¿Hablas en serio? - ella asintió.

-Mira Ho Seok, creo que no hace falta decirte lo difícil que es criar un niño solo, yo te crié aunque solo eres mi hermano, pero siento que eres como un hijo para mí. Ahora piensa en cómo debe estar sintiéndose este pequeño chico, está solo y antes de si quiera decírtelo, el ya suponía que tú lo rechazarías, creo que deberías intentarlo con él. - La miré extrañado, mi hermana me había cuidado desde muy pequeño, cuando mis padres murieron y la entendía, ella habría hecho lo que sea por mí.

-Yo... no lo sé... -dije inseguro, esto no estaba dentro de mis pensamientos, jamás habría pensado en tener un hijo y mucho menos a esta edad.

-¿Te sientes atraído hacia él?- dijo mirándome fijamente.

-Bueno, creo que es un chico muy hermoso, sus... sus ojos son hermosos, también sus manos y su cuerpo... su cuerpo es perfecto, tan formado que... - mi hermana me miraba con algo de burla - ¡Yah! ¡No me veas así! - ella solo rió.

-Bueno, al menos te sientes algo atraído, ¿Qué hay de su forma de ser? ¿Te gusta como es él?

- No lo conozco demasiado, solo tuve sexo con él- me encogí de hombros, para luego sentir un golpe en mi nuca.

- Ho Seok deja de actuar como un niño, quieras o no tendrás un hijo y como tu hermana mayor no permitiré que seas un irresponsable ¡Sé un hombre y no actúes como un cobarde! - suspiré resignado.

-¿Qué debo hacer hermana? Ayúdame- ella sonrió acariciando mi cabello.

-Creo que deberías enamorarte... Inténtalo, intenta enamorarte del pequeño, él necesita de ti ahora, protégelo, después de todo él está cargando a tu bebé, hermanito - cerré los ojos lentamente relajándome con las caricias de sus manos - Quién sabe, Ho Seok... tal vez encuentres al amor de tu vida...

Tengo sueño, pero aquí estoy, dándoles un capítulo editado y nuevo.♥