— ¡¡¡¿¿¿ QUE ESTÁS QUÉ???!!! —Las integrantes del club seguían incrédulas ante las palabras de su compañera.

— ¡¡¡Estoy saliendo con Jin!!! — Pesé a qué, algo así se veía venir, las palabras de la castaña, en especial Akemi, quién, no tenía mucha idea de lo que pasaba, pero, al escuchar sobre una relación amorosa no pudo evitar emocionarse.

[N.A: Olvidé decir que la personalidad de Akemi es ligeramente parecida a la de Albedo]

— ¡¿Eso significa que se aparearon?! — Las palabras de Akemi resonaron en todo el lugar haciendo sonrojar a todas las presentes, aunque el rostro de tomate que se cargaba Hitomi era el que más resaltaba, al parecer las demás integrantes pensaban lo mismo solo que ninguna se atrevió a preguntarlo.

Hitomi se quedó muda ante la pregunta, se limitó a ver el suelo de forma nerviosa mientras jugaba con su cabello. Eso fue todo lo que las demás necesitaron para responder sus duda, cosa que, hizo que a Kurumi comenzase a bajarle un pequeño hilo de sangre por la nariz.

— ¡¡¡¿Pero cómo fue? ¿Romántico? ¿Inesperado? ¿Dominante???!!! ¡Necesitamos detalles mujer! Y pensar que…. Un macho tan desinteresado y cruel con las mujeres… se le haya declarado aún chica como tú…. —

Más que las palabras de Akemi, sus acciones dejaron confundidas, pues, mientras decía eso se abrazaba a si misma con una cara que dejaba poco a la imaginación de que estaría pensando. Tras eso y la petición de Ranka y Kurumi utilizando “la mirada” Hitomi no tuvo de otra más que acceder.

[Flash Back: 1 semana antes de la llegada de Ejiro]
[N.A: Siendo más exacto, el día que Mei Mei entró al club]

---- Hitomi ----

Había sido un día bastante enérgico, Mei Mei llegó a la academia y pasaron un sinfín de desventuras, aunque al parecer a Jin no le agradó mucho y terminamos por meterla en una jaulaa para que pudiera llevarse bien.

Siempre me había preguntado el porque era así con los animales. Dejé de pensar en eso cuando la imagen de Jin pasó por mi mente y noté por una de las ventanas que mi cara estaba completamente roja, con la vergüenza me tapé el rostro y llegué a mi habitación corriendo lo más rápido que pude.

Cuándo llegué tomé un baño y me puse ropa más cómoda, como eran las 8:50 y no tenía tareas decidí revisar mi celular y me di cuenta que tenía un mensaje de Jin.

“Hitoimi, ¿Podemos vernos en el patio a las 9:00? Hay… algo que quiero decirte”

Me quedé congelada unos segundos hasta que vi la hora en que había puesto en el mensaje. ¡Era en 10 minutos!. El patio estaba algo lejos de los dormitorios femeninos así que no tenía tiempo ni de acomodar mi cabello, lo amaré en una cola de caballo baja y salí corriendo de mi habitación.

Llegué un poco tarde (debía de mejorar mi resistencia corriendo ). Cuando entré al parque vi unas señales extrañas pero de alguna forma sabía que eran de Jin, comencé a seguirlas hasta llegar a una banca donde estaba Jin, se había arreglado un poco formal, eso solo hizo que mi mente comenzara  a formular un millón de posibles explicaciones.

---- Narrador ----

— ( Realmente Jin se ve apuesto cuando se arregla ) —
La joven castaña se detuvo en seco observando al joven, quién, acababa de notar su presencia

— Hi...Hi... Hitoimi-chan, perdón por no notarte (¡enserio soy un idiota! Y aunque esté usando ropa deportiva se ve hermosa!) — El castaño que normalmente tenía una actitud un poco arrogante ahora se mostraba completamente opuesto a lo usual, como si Hitomi lo convirtiera por completo en otra persona.

— N...no...no te preocupes Jin-kun... es mi culpa por llegar tarde —

— Nada de eso... creo que fue demasiado inesperado... —

— No hay problema, dijiste que había algo que me querías decir —

Pesé a qué ambos jóvenes hablaban sin tartamudeos, sus rostros se encontraban al rojo vivo y ambos estaban nerviosos por las próximas palabras del otro, este momento cambiaría sus vidas de una forma u otra.

— S...si, verás, hace tiempo quería decirte algo... no es cualquier cosa y quiero que sea algo especial que decirte a solas —

La joven se sonrojó por completo y su corazón comenzó a latir a mil por hora, se estaba imaginado el rumbo de todo y mientras más lo hacía más nerviosa se ponía al respecto.

— Desde que te conocí... sentí algo extraño en mi, era algo nuevo y que no pensaba sentir por alguien que conocí en el último año de secundaria. Mientras más hablábamos y nos conocíamos más fuerte se volvía este sentimiento... —

— !Yo siento lo mismo! —

El castaño fue interrumpido por la chica, quién, estaba sonrojada por completo y mantenía sus manos sobre su pecho, justo en el lugar del corazón.

— Siempre estuve sola, los únicos humanos que conocía eran mis padres y nunca encajé del todo con los animales, siempre daba mi mejor esfuerzo para agradarles a todos pero no siempre funcionaba, hasta que... te conocí... no te improtaban cosas superficiales y siempre me defendías en todo lo que podías incluso si llegaban a amenazarte machos más grandes y fuertes que tú...
Por eso... yo también siento lo mismo por ti.... —

— ¿E...en...entonces? —

— ¡Acepto tus sentimientos Mazama Jin! ¡Y por eso mismo tengo que negarme! —

Es castaño estaba destrozado después de que su corazón sientiera un pequeño rayo de felicidad.

— Inicié el club de cocina para poder unir a todas las especies porque sabía que podían llevarse bien e incluso volvernos todos amigos.
Ranka-chan, Miyubi-chan, Yukari-chan, Kurumi-chan y Mei Mei-chan, todas ellas son mis amigas y las únicas que tengo, formamos una manda junto a Ranka y a ella le gustas tú, s...si... nosotros pondríamos en peligro todos los recuerdos que hemos creado juntos —

El castaño comprendía las palabras de  la chica eh intentaba no llorar ante su rechazo tan repentino y directo.

— Y...yo lo entiendo... Si... si te sientes así supongo que está bien, solo quiero verte feliz Hitomi-chan —

Con la cabeza baja y el corazón partido, Jin se dió media vuelta y se dispuso a irse dejando en la banca un broche color rosa con forma de flor el cual pensaba darle a Hitomi. Su camino fue detenido algunos metros más adelante por unos brazos que se aferraron a su pecho desde la espalda.

— Aún así.... tampoco quiero perder a la persona que amo.... —

— ...... —

— S...so...solo estoy diciendo que, su supiera de alguna forma... diría que sí —

Un par de susurros se escucharon entre ellos, acto seguido, Jin volteó a ver a Hitomi mientras está aún lo abrazaba, ambos terminaron la espera de sus corazones cerrando la distancia entre sus labios a la luz de la luna.

[Fin del Flash Back]

Las presentes miraban a Hitomi completamente sonrojadas ante tal historia.

— ¡Es muy romántico! — con la extentricidad que la caracterizaba y las chicas comenzaban a conocer, Akemi comenzó a interrogarla

— Pues... por las prisas olvidé las llaves y Jin me dejó pasar la noche en su cuarto, pero me mojé por accidente con té así que tomé un baño y... una cosa llevó a la otra. —

"¿Y como terminaron apareándose?" Fue la pregunta que obligó a Hitomi a contar eso y dar algunos detalles más ante los cuales, Miyubi murió por sobrecalentamiento y las demás chicas tenían hemorragias nasales algo notorias.

— ¡Entonces yo tampoco pienso perder a la persona que amo! —

Una Ranka completamente decidida se paró sobre la mesa y apuntó a Akemi, lo cual dejó impactadas a las integrantes del club

— ¡Akemi-san, aunque Eji-kun es tu hermano me quedaré con el como la Alpha que soy y el será mi Beta!

[Las manadas de lobos se dividen en una jerarquía de 3 bases comunes:
El Alpha, este es el líder de manada y su voluntad es absoluta, este título puede ser arrebatado por un miembro más fuerte de la manada

Beta, algo así como los segundos al mando, suelen dirigir cacerías o quedarse a cuidar el territorio cuando el líder se ausenta, estos pueden, al igual que el Alpha, ser machos o hembras, estos también son los que se suelen reproducir los Alpha

Omega, miembros comunes de la manada que siguen órdenes de los Beta y el Alpha, pueden subir de rango pero no es demasiado común]

Todas quedaron confundidas por las palabras de la lobo peli-rosa y Akemi puso una cara decidida estrechando la mano de Ranka

— Entonces que la mejor gane —

— Pero, ¿Ranka-chan tú no? — Hitomi estaba lidiando con demasiadas emociones al mismo tiempo y justo ahora eran de alivio y condición para se exactos

— Me di cuenta pronto, me dolió mucho al principio y pensé que moriría — pero después de conocer a Ejiro lo acepté mejor y tomé mi decisión

[Los caninos, principalmente los perros y lobos dóciles pueden morir por depresión y soledad]

Las demás chicas también pusieron sus manos sobre las de Ranka y Akemi (dejando a Miyubi al último para no matarla del esfuerzo), se entendieron muchas cosas con solo una mirada.

— Entonces chicas, convocando a las reglas del club de cocina les propongo un juego —

Yukari habló bastante decidida y las demás asintieron

— Veremos quien logra enamorar primero a Ejiro utilizando sus encantos femeninos, las reglas serán que:

1 La ganadora de este juego tendrá una pequeña ventaja de 2 días dónde las demás no intervendrenos más allá de interacciones cotidianas, solo Ejiro puede cambiar esto con sus acciones.

2 La ganadora no puede burlarse de las perdedoras, de lo contrario se revelará todo a Ejiro.

3 está prohibido interferir de cualquier forma si Ejiro y alguna de las demás tienen una cita o algo parecido, esto será conciderado trampa y las demás castigarán a la infractora o infractores de forma contundente dentro de las normas morales y escolares.

4 Si alguna de nosotras llega a aparearse con el no puede decir nada a las demás.

5 La decisión de Ejiro es definitiva.

6 Si alguna chica que no seamos nosotras se enamora de Ejiro también debe aceptar estas reglas o podremos saborear sus citas.

7 Pase lo que pase seguiremos siendo amigas.

Ahora, si alguien quiere retirarse o unirse que lo diga ahora o calle para siempre.... —

Algunos rostros inesperados y otros no tanto se aparecieron, al parecer habían estado escuchando la conversación desde hacía un rato y accedieron a entrar, ahora eran 14 contendientes en esta guerra amorosa, cada una con sus motivos y sentimientos, algunas con cierta ventaja y al final todas darían lo mejor de ellas jugando limpio en esto.

— Solo nos queda decidir el juego — decía Yena bastante decidida a ganar al final

— Pues, ¿Que les parece tirar una moneda? — habló una figura de cuernos pequeños y redondeados

— Me parece una buena idea dejarlo a la suerte, ¡Yo tengo de sobra! — una figura de orejas largas y separadas añadió con bastante razón

— Yo puedo decidir el orden — Hitomi, aunque nerviosa y preocupada por la situación quería ayudar a sus amigas con tal gran dilema amoroso

— ¡Ashete! —

Aquella palabra dejó confundidas a las 13 restantes así que Akemi explicó que, Ejiro leyó un libro sobre culturas antiguas y culturas fantásticas, y que en una de ellas "Ashete" era una forma de jurar ante el dios único y verdadero de ese mundo que los tratos eran definitivos, a las demás les pareció bien y aceptaron usarla solo porque a Ejiro le gustaba bastante decirla antes de sus juegos.

Las hembras aceptaron y por medio de pedazos de papel decidieron quien se enfrentaría con quién, y al final, la ganadora no era ni más ni menos que la 3 veces "Señorita hembra" Kuromi Nekomai.

Si bien no todas estaban conformes, las reglas eran claras así que solo les quedaba aceptarlo.

Todas se despidieron de forma amistosa de las demás, está que, era una guerrera amorosa y ninguna tenía pensado perderla .

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[Autor: Jajaja, bueno, espero que les haya gustado, parecerá que la mayoría o todo el capítulo es relleno pero no es así

Anónimo: Se supone que las chicas del club son 5 sin contar a Hitomi, si Akemi jugó serían 6 ¿Porque son 14 las jugadoras?

Autor: Bueno, eso tendrán que averiguarlo, yo solo les di pequeñas pistas, lo demás y el porque deberán averiguarlo leyendo los próximos caps.

Si quieren que escriba un cap del delicioso entre Jin y Hitomi....
Lo haré cuando la historia alcance las 800 vistas.
Bueno, me voy a actualizar que si no me va a dar síndrome de lagartija con lentes y voy a comenzar a matar personajes

* Voz de narrador mamalona *

Ejiro y Jin se enfrentan
¡Una batalla de intelectos con un final inesperado!

¡Nos vemos en la próxima!
¡Ashete!