--Olvide presentarme, que mal educado de mi parte.--el señor Jeon (si es que podia decirle asi) sonrio ameno. Yo por el contrario, sentia mi espalda dura y erguida, presa de los nervios-- Soy Jeon Donghae. Padre de Jungkook.

Ofrecio su mano en un gesto que fingió ser calido, a la cual acepté debilmente y temerosa.

--No esperaba encontrarlo aquí, señor Jeon.

--No es lo que acostumbro hacer, perdone mis modales.--dicho eso, me sente en el asiento de en frente de la limusina. Estaba petrificada del miedo.

--¿Que lo trae por aqui?--indagué, impaciente y ansiosa.

No dijo nada. Simplemente abrio un maletero a un costado suyo (sin percatarme yo, de que él lo tenía) y de pronto pude ver unos billetes en cantidad ocupando toda la maleta.

--¿Que le parece esta cantidad? ¿Se adapta a sus necesidades, señorita Manoban?

--¿Como dice?

El sonrió como si fuera un chiste interno.

--Sabes a que me refiero.--había comenzado a tutearme.

--Yo...

--La condición para que tengas esto es sencillo. Y no requiere de esfuerzo:  que te alejes de Jungkook. Y para siempre.

Mi corazon comenzo a bombear mas rápido conforme pasaban los segundos. Mis manos, apretadas en puños, comenzaron a sudar.

--¿P-porque haría eso?

--Eres inteligente. Y tienes muchos secretos ocultos. Eres peligrosa para esta familia. --comentó el señor Jeon, impasible.

--¿Que...?

De pronto, me entregó un archivo que le dio el mismo chofer. Lo sujete con desconfianza y mire su interior.

Nombre: Lalisa Manoban
Nombre anterior: Panpriya Manoban
Nacionalidad: Tailandia, Bangkok.
Estudiante de Letras en la Universidad de Seúl.
Antecedentes medicos: Alcoholica, suicida y con enfermedades mentales tales como la depresion y ansiedad. (Ver archivos en la pagina 4) aborto espontáneo a la edad de 21 años.
Padres y hermanos: fallecidos (Ver detalles de cada integrante de familiar pagina 6)

Visitar pagina 7 para ver en detalle a Kim Haneul.
Visitar pagina 8 para ver detalles de Kim Jennie.
Visitar pagina 10 para ver detalle de Kim Taehyung
Ver pagina...

Y luego fotos mías en todos los lados que estuve desde que conocí a Jungkook.

--¡Esto es acoso!--grité, colerica. Enloquecida.--¡Esta investigando todo a mi alrededor! ¡Incluido gente que no esta implicada!

--De eso se trata tener el control, señorita Manoban.

--¡Está demente!

Agarre las hojas del cuaderno y comencé a romperla en pedacitos, mirando furibunda a la imagen de Jeon Donghae.

--Tengo copias.--sonrio ladino y se acerco unos centimetros hacia mi colocando un semblante amenazante--pero piensa mejor tu siguiente accion, Lisa. Porque yo no soy de dar advertencias, ni segundas oportunidades. Alejate de Jungkook, es lo mas sano para todos.

--No me iré a ningún lado, Donghae.--hablé armandome de valor.

El me miro por unos cuantos segundos llenos de tensión. Su rostro estaba tranquilo, impasible. Quizas esa debio ser mi advertencia de que algo estaba terriblemente mal. De que detrás de esos ojos se escondía el diablo.

--Bien.--dijo finalmente. La puerta del vehículo se abrió y dijo--puede retirarse, señorita Manoban.

Me quede congelada pensando en la conversación mientras iba de camino al autobús. Como si fuera poco, el mismo me echó de la limusina de donde se suponía que era mi lugar de transporte en primer lugar. Asi demostraba él cuando poder tenia sobre la situación.

No podia negar que realmente estaba asustada. No era una advertencia, ni una amenaza. Me había declarado la guerra y me había dicho entre lineas que no importa cuando yo hiciera por ignorarlo, el estaba dispuesto a hacerme la vida un infierno.

Al dia siguiente me duche y me alisté para ir a la oficina. Tenia ojeras prominentes bajo los ojos y mi semblante era somnoliento. No habia dejado de darle vueltas al asunto. Algo se avecinaba y me inquietaba demasiado.

Toque la puerta de Jungkook dos veces con mi puño y un "pase" débil sonó en la instancia.

Cuando la abri en su totalidad, visualicé para mi sorpresa a tres personas: Jungkook, a Lydia y a Donghae.

Endurecí la espalda al ver a este ultimo, él sin embargo se encontraba en absoluto silencio mientras sus hijos discutían. Ni se pasmó por mi presencia.

--¿Ella tiene que estar aqui, Jungkook?

Lydia farullo haciendo que Jungkook la ignorara. Se acercó a mi y me abrazó.

Yo como de costumbre entregué el café tal como a Jungkook le gustaba y unas donas. Me sentia incomoda y queria salir cuanto antes de las miradas furibundas de los Jeon, a como dé lugar.

--Jungkook, dile que se quede.--ordenó de repente donghae.

La estancia se unio en un silencio tenso. De todas las partes: tanto como de Jungkook, Lydia y yo misma.

--Ella no tiene nada que ver en esto.--Jungkook me defendió de inmediato.

Donghae no dijo nada, por lo que Jungkook comenzó a sentirse doblegado por su mirada penetrante y fulminante.

--Lisa... sientate.--finalmente cedió Jungkook.

Por un lado me senti decepcionada, pero no deberia estarlo. Jungkook ademas de tener un vínculo que lo unia como familia directa a Donghae, tambien lo unía en lo economico: para ganar dinero y tener un futuro, un futuro donde Taehyun estuviera en él. No podía ponerme a mi como su prioridad cuando tenía un niño a quien cuidar y lo entendía. Estaba a merced de su padre.

Entonces, me senté en silencio, esperando a que alguien comenzara a hablar.

--Jay Jordan quiere tus disculpas, y sólo asi su padre accederá a terminar los negocios contigo, Jungkook.

--Ni en sueños pediré perdón por algo que no es mi culpa hermana.--se negó Jungkook, con el entrecejo fruncido.--el se merecia ese golpe. Él me vio en la fiesta y por eso armo un escándalo.

--No me hagas reir. Si no lo haces ¿Como haras para no perder la producción que iniciamos con esta empresa? JyJ es una parte importante de tu entrada de dinero, Jungkook.

--Ya veré como solucionarlo, Lydia.

--No te mereces la paciencia que te doy.--Lydia tomó unos tragos de agua nerviosa.

--Lydia, confia en tu hermano. Hasta ahora no nos ha defraudado.--Donghae se incorporó de repente--Jungkook tengo que anunciarte algo importante. Por eso he venido.

--¿De que se trata, padre?

--Viajaras a Japón para un asunto de negocios. Nada esta planeado aún, solo sera una charla para acordar intereses.--de pronto le dejó una tarjeta encima de la mesa. "Enova Productions:-- estamos hablando de una empresa enorme en Japón. Podriamos expandirnos.

--¿Por eso viniste personalmente?--Jungkook se sentia cada vez mas confundido. Pero sabia que para su padre era como una broma interna en el que el chiste era yo.

--¿No puedo visitar a mi hijo de vez en cuando?--preguntó a modo de respuesta.

Jungkook enmudecio. Donghae me echó una ultima mirada a modo de advertencia antes de incorporarse y ser acompañado hasta la salida por su hija Lydia.

Tragué duro.

Una vez que ambos se fueron, solo entonces pude respirar con normalidad.

--Tu familia me odia.--comenté, como quien no quiere la cosa.

--No es que te odien, no confian en ti. Pero siempre fueron asi, desde que mi relación con Gyeong me consumió... o quizas en quien no confían es en mi realmente.

Jungkook se encogio de hombros y me dio un beso en la frente.

--Pero no importa. Porque tengo a la mujer mas bonita que podria existir aquí a mi lado.

Me sonroje inmediatamente al oirlo.

--Señor Jeon. --de pronto y sin avisar una chica pequeña y con rostro angustiado nos interrumpio en la instancia.

--¿Quien le dio permiso para entrar?

Jungkook volvio a su faceta dura y distante haciendo a la chica ponerse aun mas nerviosa.

--Me acaba de llamar una tal Jennie Kim. Lloraba y pedia tener comunicación con una chica llamada Lisa: se han metido a robar a la casa.

El nombre de Jeon Donghae se me vino a la mente de inmediato.

--Llama a un taxi de inmediato Hyuna. --ordenó Jungkook colocandose su saco.