Cuando vio que aquel imperio se alejó, usa. Pudo corre tranquilamente por las casas chinas destrozadas mientras buscaba a su pareja.

China nacionalista  y el habían estado en una relación secreta que pocos sabían , era para no meterse en problemas. 

Cuando se enteró que el no era el único no sería atacado por el nipón corrió pidiendo o preguntando por la salud y bienestar se su amante  que no estaba nada bien.

Apenas llego a nanking  pudo ver a mujeres  escondidas y también a niñas violadas,  era un asco pero sobre todo terror. ¿ Porque harían algo como eso?.

Tan solo se imaginó que  su pareja fuera tocada por el japonés lo ponía nervioso  por la China.

No pudo encontrarla ni nadabaporte el estilo pero sin embargo vio a una niña  con pesar en su caminar, nanking, cuando la inspeccionó  vio mordeduras y problemas al caminar.

Le dolió el alma ver aquello.

– Tranquila pequeña no soy japonés soy un Norte americano–.

– Ma-mi el ..–, podía sentir que la pequeña estaba tensa y nerviosa pero como  o estarlo al ser violada por el japonés.
– ¿ Me podrías decir que te hizo el nipón?.

Sonaba algo cruel que relatará su violacion  pero así tendría pruebas contra el imperio.

La dejo recostada en una casa vacía prometiéndole volver.

– ¿ Tu vas a salvar a mami?–,  aquella pregunta lo atacó.

Se recordó a el mismo cuando pequeño, cuando su querida madre  cuando estaba viva.

Dios.

– Prometo traerla viva por ti pequeña–, aún no seguro de si mismo se fue directamente  hacía  donde estaba su amante.

Su corazón latía con fuerza y su mente le entregaba los peores pensamientos.

Cuando tenía un mal momento recordaba la canción que su madre  le cantaba.

Cuando usa estaba mal siempre  recordaba a su madre.

Ya saben dónde termina esto.