Templo Lin Kuei////

Sub Zero POV:

Llevo aproximadamente 10 horas entrenando con mis estudiantes, no tengo tiempo para otra cosa más que para mi templo, apenas si como o tengo tiempo para pensar, me siento tan extenuado, enojado, no se que me pasa, pero desde hace ya dos meses que me siento diferente, Frost ya no me habla y a mis hijos ya no los veo, creo que sin querer me estoy alejando de mi familia, iré a buscar a mi mujer, necesito decirle que la amo y que me perdone.

Kuai Liang caminaba por los jardines atravesando uno y otro, sus pisadas resonaban por los fríos pasillos, hasta dar con una pareja la cual estaba abrazada frente a él, eso le rompió en mil pedazos el corazón, ya que se trataba ni más ni menos de su amada esposa Frost y Smoke, Sub Zero el cual llevaba un rosa de hielo en sus manos, del enojo la hacía trizas al contemplar tal acto de su enamorada y su mejor amigo, la mandíbula del gélido se tensaba y sus ojos se tornaban de un color blanco centelleante.

Sub Zero formaba un hacha de hielo en su mano izquierda, estaba listo para arreglar el asunto como los hombres lo hacían, según él.

-Padre- Resonaba atrás del gélido haciéndolo soltar el hacha causando que el arma se hiciera en mil pedazos al chocar con el frío concreto.

Frost se giraba de entre los brazos de Enenra, observando a su hombre de barba negra y manos de hielo mirarla con desprecio y enfado, era como si algo dentro de él se hubiera extinguido, o mejor dicho, roto.

-Kuai yo- Soltaba la fría mujer acercándose al gran maestro, tomando su mano entre las suyas

Kuai Liang presionaba con fuerza la mano de Frost mientras se acercaba a su oído -No quiero que me toques- Susurraba con voz ronca mirando a los ojos a la mujer.

-Aww- Frost se sacaba del agarre de su esposo observando su mano enrojecida por el descortés agarre de este.

-Niños, siganme......saldremos de aquí- Sub Zero caminaba a pasos furiosos alejándose de su esposa.

Los jóvenes gélidos no sabían lo que pasaba, sólo observaban los ojos cristalinos de su madre y a su furioso padre alejarse, por otro lado Enenra miraba con sorpresa todo lo ocurrido.

-NIÑOS- Gritaba Kuai Liang llamando la atención de los jóvenes.

-Con permiso madre- Soltaban al unísono los herederos.

Frost se soltaba a llorar en su lugar mientras Smoke acariciaba su hombro y la abrazaba nuevamente en tanto la mujer de poderes invernales se dejaba envolver por los brazos de su acompañante.

(...........)

Reino de Edenia///

Hanzo llegaba al castillo en su usual torbellino de fuego, este observaba todo a su alrededor, mirando a varios de los aldeanos hacerle una reverencia en tanto este los imitaba, mostrándoles el debido respeto a su pueblo, el ninja caminaba a pasos decididos hacia la entrada del castillo, varios de los sirvientes se acercaban al rey, colocándole su corona entre otras cosas de la realeza.

El gran maestro entraba al castillo encaminándose hacia la arena,  la reina estaba sentada sobre su trono mientras uno de los múltiples aldeanos le contaba sus disgustos y penurias.

-De mi cuenta corre que tu hijo estudie.........ahora, ¿que otro disgusto tiene?- Cuestionaba Kitana sin mirar a Hanzo acercarse con cautela.

-Seria todo majestad, con su permiso y muchas gracias-

-Gusto en verle- Terminaba la edeniana con una sonrisa observando al aldeano irse.

El gran maestro sin más tomaba asiento a lado de su reina llamando la atención de la susodicha.

-Pensé que seguirías en el templo- Soltaba el ninja sin mirar a su mujer mientras otro edeniano llegaba.

-Para nada Hanzo.........traje a Edenia a su clases...- Kitana miraba al hombre frente a ella hacerle una reverencia.

-Majestades, buen día, han robado en mi tienda y los guardias no me solucionan nada- Hablaba el hombre frente a ella con un semblante de preocupación.

-Buen día.........me gustaría que me diera los nombres de los guardias que no han hecho nada al respecto- Soltaba el guerrero de fuego mientras el hombre asentía dictando algunos nombres hacia uno de los consejeros del reino -¿Estas molesta?- Cuestionaba el gran maestro mirando a su reina seria.

-Para nada, creo que es todo por hoy- Kitana se ponía de pie saliendo de la arena en tanto tomaba su largo vestido para salir más rápido.

Hanzo arqueaba una ceja siguiendo a su esposa, este la tomaba con suavidad de un brazo haciéndola girar sobre sus talones.

-¿Que tienes?- Cuestionaba preocupado el ninja mirando a su mujer disgustada.

-Te dije que nada- Kitana se giraba enojada mientras Hanzo la regresaba besándola con suavidad.

Kitana alejaba a Hanzo del pecho mirándolo a los ojos para después alejarse rápidamente, el ninja estaba dispuesto a seguir a su mujer hasta que algo en su bolsillo vibraba como loco, este sacaba su teléfono dejando ver un nombre el cual le hacía torcer la boca levemente y suspirar pesado.

Hanzo se sorprendía al momento que abría el chat con su edeniano hijo.

Akiro salia con una mochila colgada en su espalda, este bajaba las escaleras con disgusto mirando a su padre frente a el.

-Perdóname hijo- Soltaba el gran maestro con una media sonrisa.

-Pensé que no te gustaba traer la corona al templo, padre- Replicaba el príncipe con algo de burla.

-Solo vengo por ti........ven, ya vámonos- Hanzo le tendía su mano a su hijo mientras este negaba.

-Amm oye.........este........invite a........Takahashi al castillo- Soltaba rápidamente el de cabello largo mordiendo con nervios su labio inferior para no dejar ver la larga sonrisa que se formaba.

-Esta bien, ¿Takeda esta de acuerdo?- Cuestionaba el rey mientras el príncipe asentía -Bien, ¿y donde esta?- Hanzo miraba a todos lados sin dar con la morena.

-NO ME DEJEN- La morena salía entre los pasillos con una larga sonrisa y cargando una pequeña valija -Oww, maestro Hasashi- Takahashi le hacía una reverencia al gran maestro.

-Gusto tenerte de visita hija, bueno, acérquense a mi- Ambos jóvenes asentía mientras desaparecían en un remolino de fuego.

(........)

Tokio////

Sub Zero y sus hijos caminaban por las hermosas y relucientes calles de la deslumbrante ciudad.

Los jóvenes criomantes bromeaban entre ellos y tomaban varias fotografías mientras su padre caminaba perdido en sus pensamientos.

-¿Quieren ir a comer?- Cuestionaba el gélido padre hacia sus crías de hielo.

-Si padre, vamos a mi restaurante favorito- Soltaba Sadashi con una sonrisa.

-Claro, ¿que me dices tu hijo?- Sushinko asentía con una leve sonrisa -Bien, en marchar- Sub se adelantaba mientras era seguido por su hijos.

-FOTO- Gritaba la joven criomante poniéndose frente a su padre mientras Sushinko sonreía tomando varias fotografías.

Kuai Liang parpadeaba varias veces mareado por el flash del teléfono.

-HAHAHAHA saliste muy gracioso pa- Soltaba la joven chica mirando las fotografías.

-Aghh, ya....dejen de jugar- Regañaba el Lin Kuei frunciendo el ceño.

-Padre, ¿porque mi madre no asistió?, recuerdo que también es su restaurante favorito- Cuestionaba Sushinko llegando junto a su familia al restaurante.

-Tu madre esta ocupada.............con Enenra-Susurraba lo último Sub Zero molesto.

La familia de criomantes entraba al lujoso restaurante mientras uno de los empleados les atendía, dándoles la mesa reservada.

Sub Zero tomaba asiento mientras sus hijos lo imitaban en una de las exclusivas mesas para la familia, Liang tomaba la carta para observar que se le apetecía comer en tanto sus hijos jugaban con las cartas, golpeándose con ellas.

-Basta, ya son mayores de edad, compórtense al nivel- Soltaba Sub Zero con molestia mientras sus hijos bajaban las miradas hacia la mesa.

Kuai Liang seguía observando la carta hasta que un flash le hacía parpadear varias veces y girarse hacia su joven hija.

-Ups- Sadashi estaba sonrojada y nerviosa mirando a su padre negar con la cabeza y seguir con lo suyo.

(........)

Reino de Edenia/////

-Diablos maestro, el castillo es enorme- Soltaba la morena con sorpresa.

-Espero que te la pases bien estos días aquí con nosotros Grisha- Contestaba el ninja de fuego mirando a su estudiante.

-Claro que si..........maestro, aunque es incomodo, digo, yo no se como comportarme en la alta sociedad- Hanzo soltaba una carcajada ante las palabras de su considerada hija.

-Sígueme Grisha- El rey caminaba rumbo a los jardines de Edenia seguido por la morena -Veras, no todos nacimos en cuna de plata, ser el rey de Edenia me costo mucho sabes- La morena miraba con intriga a su Sensei.

-¿Se refiere a que no sabia comportarse como rey?- Cuestionaba con admiración la joven.

-Efectivamente, mis primeros días como rey fueron muy duros, y a decir verdad, aun estoy aprendiendo los modales o los comportamientos que debo llevar- La morena sonreía ante la palabras del rey.

-¿Que fue lo mas vergonzoso que le paso?- Hanzo sonreía mirando al cielo, buscando entre sus memorias.

-Una vez, cuando me estaban coronando yo........estaba muy nervioso, y bueno, me estaban colocando la corona así que se la quite al tipo de las manos y le dije que prefería llevarla mas tarde, hasta la fecha no puedo dar crédito a la mirada del pueblo- Hanzo soltaba una carcajada mientras negaba con la cabeza.

La morena reía al imaginarse a su Sensei en una situación incomoda, a él, el señor seriedad -¿Que dijo su esposa?- Cuestionaba la morena entre risas.

-Sonrió y dijo que tampoco la llevaría.........mi hermosa Kitana, siempre me apoyo en todo- Hanzo sonreía embelesadamente mirando a la reina de lejos.

-Cuando me case, me gustaría tener un matrimonio como el de ustedes- Soltaba suspirando la morena.

-Me gustaría tenerte como nuera- La morena se sonrojaba mirando a su maestro a los ojos -Hahahha es broma......me tengo que ir hija, disfruta las exquisiteces que ofrece el castillo, con permiso- El rey salia de la vista de la morena dejándola en los jardines.

-HEY- Akiro salia del castillo a pasos decididos sorprendiendo a la morena.

-Wow, al niño de oro le pusieron su corona- Soltaba la morena mirando el aro de oro que abrazaba la cabeza de su mejor amigo.

-Esta mejor la de rey......pero bueno, no me quejo- Akiro tomaba de la cintura a la joven -Vamos, necesitó mostrarte algo- Takahashi asentía siguiendo al príncipe dentro el castillo.

Los jóvenes caminaban por los pasillos hasta dirigirse a unas largas puertas resguardadas por dos guardias.

-Retírense- Ordenaba el príncipe mientras los guardia le habrían la puerta de la habitación.

-WOW- Soltaba con admiración la morena observando la gran habitación del príncipe.

-¿Te gusta?........la de mis padres es mucho mas grande- Contestaba el príncipe dejándose caer en la enorme cama.

-Es muy grande Akiro- Grisha se sentaba a lado del príncipe dejándose caer de espaldas a la cama.

-¿Sabes que otra cosa tengo grande?- La morena se sonrojaba mientras mordía su labio inferior tapando con su antebrazo su sonrojo -¿Quieres jugar vídeo juegos?- Terminaba el príncipe mientras la chica asentía aun sonrojada.

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Kitana entraba a su enorme habitación, esta se desprendía de su espeso vestido de reina al igual que dejaba su corona en un cojín de textura muy suave, esta se despojaba de todas sus joyas quedando solo en un suave camisón de seda color blanca y su cabello atado en un chongo alto, la edeniana se sacaba sus tacones quedando descalza, esta se adentraba al baño lista para tomar una ducha hasta que de la nada escuchaba el agua del jacuzzi agitarse, la reina daba un ligero brinco observando a aquel hombre de torso desnudo y rostro sonriente.

-¿Quieres bañarte conmigo?- Cuestionaba el rey de Edenia con una larga sonrisa mientras con una rosa acariciaba su grande pecho -El agua esta hirviendo- Hanzo le guiñaba un ojo a la edeniana al observar sus piernas desnudas.

Kitana miraba a su hombre sonreír mientras la espuma no le dejaba ver ni un poco de piel de parte de su amado -No, creo que hoy no me bañare- Contestaba la edeniana haciendo que el ninja se sorprendiera y arqueara una ceja.

Kitana se giraba sobre sus talones saliendo del baño, dejando al gran maestro Hasashi solo con su rió de espuma y pétalos de rosa.

-AGHH- Hanzo se ponía de pie del jacuzzi mientras ponía una toalla alrededor de su cadera saliendo furioso de la pieza.

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