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He cometido muchos errores a lo largo de mi vida, y de los cuales, algunos no tienen solución y se quedan para siempre haciéndote la vida imposible.
Recuerdo perfectamente aquel día como si hubiera sucedido hoy mismo.
Había recibido un extraño mensaje de Jungkook cuando estaba de la universidad. Decía lo siguiente: Perdón si te hice sufrir, Lili. Siempre serás unas de las personas más importantes en mi vida. Tenlo presente, por favor. No le había tomado atención. Él era el tipo de persona que era sensible hasta el mínimo acto que hacía, por lo que no me fue extraño. Le respondí con un Emoji de corazón más un te amo.
Ese fue mi error.
Aquel día recibí la noticia que había arruinado mi vida por completo. Habían encontrado su cuerpo inerte en el baño. Infarto agudo de miocardio por cocaína.
Mi pregunta seguía viva después de cuatro años: ¿Jungkook quería morir o fue producido por accidente?
Cuando lo vi en el ataúd, sin su sonrisa ni sus ojos brillantes, supe que estaría destinada a sufrir las consecuencias de su fallecimiento.
Jungkook siempre había sido especial. Mi chico especial. Atento, frágil, inteligente y mi ángel. Preocupado por los demás y para nada egoísta para haber nacido en cuna de oro. Sus padres eran exitosos empresarios y dueños de la mayoría economía coreana. Tenía una hermana de unos veintitantos años y un perro llamado "Gureum".
En una de las cartas que encontré divulgando entre sus cosas, tenía escrito pequeños fragmentos dolorosos que había marcado su salud mental. Sus padres eran los principales culpables. Ambiciosos, egoístas, vanidosos y los peores padres que había conocido. Siempre rebajando sus logros y comparándolo con los demás. Las constantes críticas, peleas y bullying que sufría dentro de esa casa fueron el detonante de su adicción a las drogas.
Rompí en llanto cuando encontré una carta donde escribía palabras hacia sí mismo. Tratándose de las peores formas posibles.
Me sentí tan mal. ¿Cómo no había sido capaz de ayudarlo? ¿De hacerle saber que era una persona especial? ¿Unas de las mejores? ¿Que era lo suficientemente valioso para amarlo?
Ese día le suplique a Dios que mantuviera a salvo a Jungkook. Sabía que ya no estaba sufriendo.
Un año después de aquel suceso, decidí mudarme con mi abuela en Tailandia. Una forma de escapar del sufrimiento que me provocó perder a Jungkook.
Ahora, los recuerdos de Jungkook los mantengo en un cofre con llave cerca de mi corazón. Haber escrito mis recuerdos con él en papel fue una forma de nunca olvidarlo. Incluso me había robado una chaqueta que le pertenecía, porque tenía miedo de olvidar su perfume.
Llegué a la lápida y me puse de rodillas ante ella.
Jeon Jungkook
H
ijo y hermano.
1997 – 2015
Había fotos, cartas y flores a su alrededor. Me sentí feliz de nadie lo olvidará.
Suspire en una forma de evitar que mis lagrimas cayeran, fallando en el intento. Me dedique a llorar mientras sostenía una de sus fotos.
— Eras demasiado para este mundo, ¿sabes? —musite. — Ojalá Dios me diera otra oportunidad para volver a ver tu rostro y escuchar tu vos, al menos por última vez.
Mis lágrimas no cesaron, y no quería que se detuvieran.
Anhelaba, con todo mi corazón, que él volviera estar conmigo. Que volviera para abrazarme y besarme. No podía soportar su partida.
Canté su canción favorita en forma de consuelo, y volver a tenerlo conmigo. Y sonreí, en medio de las lágrimas, sabiendo que, en alguna parte del cielo, él estaba cuidando de mí.un
De pronto, un recuerdo de los dos apareció en mi mente. Era navidad, 2014. Mis padres habían invitado a Jungkook para cenar y abrir regalos. Conocían el tipo de relación que tenía con sus padres. Yo estaba ordenando los regalos cuando apareció a mi lado. Sonreía de forma cálida y cuando sus ojos me mantuvieron en su red, juntó nuestros labios en un beso lento y lleno de amor.
Al separarnos, besó mi mejilla.
— Feliz navidad.
Él sonrió y sacó una caja de terciopelo de su bolsillo del pantalón.
— Por favor, siempre tenme en tu corazón... incluso si llegamos a separarnos.
Yo no supe como reaccionar. Abrió la caja y dentro de ella había un brazalete dorado, habían dos iniciales colgando de el.
J&L.
Me di cuenta que lo que sentía por Jungkook era más fuerte que cualquier sentimiento pasado. Y sonriendo, aquella noche le confesé lo que tanto había escondido.
— Te amo.
Jungkook me miró con ojos vidriosos y volvió a besarme. Nos separamos unos milímetros, y murmuró:
— Te amo más.
El recuerdo desapareció de repente y suspiré, durante el llanto. Jungkook era muy importante y era una pieza clave dentro de mi vida.
Me hubiera encantado haber formado algo más grande con Jungkook. Haber comprado un departamento o casa juntos, haber adoptado alguna mascota, haber viajado por todo mundo a su lado.
— Te amo.
No sé que sucedió, pero sentí como una brisa cálida rodear mi cuerpo. Pude sentir a Jungkook abrazándome y como si fuera un sueño, sentir su voz muy cerca de mí... pronunciando las mismas palabras que yo.
— Te amo más.
Sonreí como nunca. No solo porque sintiera su presencia conmigo, sino también porque sabía que estaba en paz. Que sus piezas rotas estaban curadas.
Sé que estas escuchando esto, Jungkook. Y me gustaría que supieras que siempre fuiste la mejor parte de mi vida, no hay día que no te piense.
Me levante del suelo, más relajada y feliz de saber que Jungkook esta sintiendo lo que nunca pudo sentir en este lugar: felicidad.
Tú eras mi felicidad, Lisa.
© ONE SHOT.
Con en este One Shot no quiero tomarme a la ligera el tema de las adicciones a las drogas, al contrario, quiero ayudar a las persona que están sufriendo y las quienes no encuentran solución y deciden tomar el camino de las drogas. Si necesitas ayuda, si te sientes ahogadx: ¡DA AVISO!
No estás solx, nunca lo estarás. Hablen con personas de confianza e incluso escriban, todo es mejor que guardar su dolor.
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