Capítulo 4

Paso, tras paso, fué como comenzó un nuevo día en aquella isla en mitad de la nada...

Pequeños que jugueteaban por todos lados sin preocupación alguna; adultos que observaban con interés cada pequeño mercadillo; o jóvenes que paseaban tranquilamente por los senderos de allí; eran apenas unas pocas características que definían al ya antiguo mercado del pueblo ubicado a las orillas del océano.  Pequeños estruendos de miles de voces de voces charlando entre sí, o pequeñas risas de pequeños que jugueteaban por los alrededores, era la misma vieja rutina de siempre a los que los aldeanos estaban acostumbrados, caminando por todos los senderos de la zona, gran variedad de especies charlaban entre sí como siempre fué por allí, zorros, lobos, hasta inclusive grandes toros visitaban aquél lugar por las mañanas en búsqueda de alimentos u otros utensilios para su día a día.

Obviamente, aquello incluía también a cierta familia de zorros que caminaba tranquilamente en el interior de este, una joven vulpina que tomaba de la mano a su pequeña y un alto zorro de pelajes oscuros que miraba cada uno de los mercadillos que se encontraba sus alrededores, era lo que conformaba a la familia en sí, aunque estuviesen también acompañados de cierta especie sin pelaje ni garras.

-"Megan...".-Musitaba el azabache en voz baja.

-"¿Si? ¿Sucede algo pequeño?".-Preguntó esta confundida.

-"N-No, la cosa es que...Ahg, es difícil explicarlo con palabras..".-Contestó un tanto nervioso.

-"Oye, si es por la presencia de los otros animales entiendo si eres algo tímido o introvertido, pero es muy extraño ver a un zorro joven estando tan cerca de su madre de esta forma..".-Recalcó observando unas zanahorias.

-"L-Lo siento...".-Musitó en voz baja el humano. -"Muchas gracias de nuevo por el disfraz de zorro, así quizás me evite muchos problemas".

-"Descuida pequeño, siempre estoy dispuesta a ayudar a los demás, aunque me corten la cola por ello".-Rió en tono de burla mientras meneaba con suavidad su cola. -"Tienes suerte de que el agua del mar hizo que tú olor fuese algo parecido al nuestro, aunque debes tener cuidado de que no se rompa el disfraz y trata de no tentar mucho a la suerte ¿De acuerdo?".-Comentó tomando cuidado una zanahoria para verificar su estado.

-"E-Entendido...".

-"Mami...Tengo hambre...".-Interrumpió la menor viendo a su madre. -"¿Puedo comer algo..?".

-"Lo siento mucho hija, todavía no, tendrás que esperar un rato más o ir con tú padre para preguntarle si compró algunas manzanas o algo para comer".-Musitó acariciándole la cabeza a la pequeña.

-"Pero...Enserio tengo mucha hambre...".-Excusó esta erizando su cola.

-"Bueno, debiste pensarlo dos veces antes de darle parte de tú desayuno a las aves, ahora te tendrás que esperar un rato".-Reprochó la zorra con cierto tono firme. -"Diablos...No encuentro zanahorias en buen estado por aquí y si sigues así tendremos un par de problemas mas tarde..".

-"P-Podría acompañarla yo Meg...".-Ofreció el azabache. 

-"No lo sé pequeño, podría ser algo peligroso...".-Dijo alzando una ceja pensativa.

-"A-Aún así, les debo mucho por haberme ayudado cuando estaba en la playa inconsciente, esto es lo mínimo que puedo hacer para compensarselos".-Comentó este tomando con cuidado la pata de la menor.

-"Bueno...Preferiría que esperaran un poco mas, pero si Yeima enserio tiene tanta hambre pues...Supongo que estaría bien si está contigo".-Musitó con una leve sonrisa alegre.

-"¡Gracias mami!".-Agradeció la pequeña tomando del brazo al humano. -"¡Vamos! ¡Papá está mas adelante, en marcha!".

-"¡B-Bueno, bueno, calma! ¡H-Hasta luego Megan!".-Despidió alejándose el humano

-"¡Hasta luego!".

Una leve risita salió del hocico de la zorra y continuó dirigiéndose hacía otros mercadillos, por su parte, el azabache siguió a la pequeña de cabellos rubios durante cierto rato entre las multitudes de animales que veía a cada rato, con ciertos nervios recorriendo sus venas, este siguió al lado de la menor, viendo gran variedas de animales de distintos colores y tamaños rodeandole por doquier, hasta que finalmente se detuvieron al frente de un pequeño puesto de manzanas un tanto apartado del resto, con cierto felino que parecía ser el vendedor..

-"¡Tío Hispo!".-Alzó la voz la menor.

-"¡Yeima! ¡Cuanto tiempo sin verte, estás enorme!".-Comentó alegre el que pareció ser un clásico tigre bengala mientras se levantaba para abrazar a la pequeña. -"¡Owen, no me dijiste que tú pequeña había crecido tanto, se parece a su madre!".-Mencionó dirigiéndose al otro.

-"Perdona bro, últimamente no hemos tenido tiempo de nada y me ha costado siquiera hablar un poco con mis viejos colegas, pero me alegro mucho de verte nuevamente ¿Como sigue el negocio?". -Preguntó este cruzado de brazos mientras posaba su codo en el mostrador

-"Meh, mas o menos, esto de trabajar honestamente es algo difícil, pero vale la pena de cierta forma".-Respondió el tigre dirigiendo su mirada hacía el azabache. -"¿Y quién es él? Nunca lo había visto por aquí..".

-¿Él? Descuida, solamente es un joven zorro que Meg y yo encontramos en las orillas de una playa, es algo miedoso con los demás pero hoy mismo partirá y volverá a su hogar ¿No es así?".-Sonrió el zorro, mostrándole levemente los colmillos.

-"¡S-Si! ¡H-Hoy mismo me voy a m-mi casa!".-Replicó un tanto asustado este.

-"¿Se irá? Pero papá...".-Se quejó la menor viendo con tristeza a este.

-"Lo siento hija, pero él tiene que volver a su hogar original, no hay de otra".-Concluyó cruzándose levemente de brazos.

-"No lo sé Owen, quizás no sea una buena idea dejarlo a su suerte con todos los escándalos que han ocurrido últimamente alrededor del bosque...".-Replicó el rayado mientras rascaba su mentón.

-"Vamos, estará bien ¿Que es lo peor que podría pasarle?".

-"Que se caiga de una cascada, se rompa el cráneo, llene el agua de sangre, que su cuerpo se pudra en el agua llenándola de sus restos, y que curiosamente sea el agua que todos tomamos a diario...".-Contestó irónico viendo al humano. -"En fin...¿Cuál es tú nombre?" .-Preguntó dirigiendo su palabra hacia este.

-"¿E-Eh?...¿M-Mi nombre...?".-Tartamudeó viendo con temor al zorro. -"B-Bueno...".

-"¿Si? Venga, no me digas que tienes amnesia o memoria a corto plazo...".-Rió golpeándolo levemente el brazo. -"Vamos, no seas tímido, yo no muerdo...Aunque si desgarro".-Sonrió burlón.

-"Enserio, no has cambiado en lo absoluto desde que te conocí hace ya varios años, Hispo".-Rió el zorro por su parte de manera burlona. -"Venga, déjalo así, mejor vayamos directamente a lo que nos importa...". -Tosió cambiando su actitud a una mas seria.

-"Me imaginé que tarde o temprano me dirías algo así...".-Suspiró, viendo a todos lados. -"Veamos...¿Quieres las rojas o las verdes?".-Preguntó metiendo su mano en una clase de caja de madera.

-"Tú sabes que las rojas, las de color verde nunca me gustaron en lo absoluto".-Mencionó asqueado este.

-"¿Q-Que tienen de diferente?".-Interrumpió el azabache algo confundido. -"A-Ambas son manzanas igualmente...".

-"Oye...".-Musitó tranquilamente el zorro viendo al humano.

-"¿S-Si?".

-"No me importa..".-Escupió este en forma de burla.

-"Como dije, no has cambiado en lo absoluto".-Se rió entre dientes el tigre mientras dejaba una bolsa de manzanas en el mostrador. -"Descuida chico, él es bueno a su manera, no te imaginas lo agresivo que era a los 16".-Carcajeó nuevamente mientras cargaba a la menor en su espalda.

-"Tsk...".-Apartó su mirada Owen observando a otro lado.

-"Pero bueno...Bro, serían 50 monedas por todo lo que te vas a llevar a casa".

-"¡¿Como?! ¿¡Como que cincuenta monedas!?".-Preguntó exaltado mientras miraba al contrario. -"¡¿Y que hacen?! ¿¡Te limpian las patas acaso!?".

-"Escucha, sé que el precio es muy alto y también sé que son simples manzanas, pero mis proveedores últimamente han subido bastante de precio y yo también necesito comer ¿Sabes?".-Replicó el tigre con ironía.

-"¡Para eso me voy a recolectar manzanas personalmente al bosque, es demasiado caro Hispo!".-Recalcó este sin creer una palabra.

-"Y es precisamente por eso que es mi momento para vender y obtener una buena ganancia Owen, hace ya un mes que la temporada de manzanas se acabó y actualmente es muy difícil obtener manzanas en por cuenta propia , así que aprovecho la oportunidad y vendo lo mas que puedo para así obtener la mayor cantidad de monedas posibles".-Explicó dejando a la zorrita en el suelo.

-"Suenas como si fueses un viejo avaro que trata e conservar su fortuna a toda costa...".-Refunfuñó cruzándose de brazos. -"Aparte, si vamos al caso ¿Como es que tú conseguiste manzanas en tan buen estado si según tú no es posible conseguir ninguna en todo el bosque?".-Interrogó este con una mirada fija.

-"Ahí es en donde entran mis proveedores, usualmente les suelo comprar cierta cantidad de manzanas a un par de tipos que merodean la zona a veces cuando buscan recursos para la capital, ya sabes, esos que parecen sacados de una película del futuro y que usan algo llamado "Eltrapos" o algo así...".-Contestó con sinceridad mientras se rascaba la barbilla.

-"Debes dejar de ver películas antiguas...En fin, mira bro, no puedo pagar tanto por unas simples manzanas, es demasiado hasta para alguien con bastantes monedas..".-Comentó viéndolo con algo de vergüenza. -"Tú sabes que te cuido las espaldas y todo, pero si aumentas el precio tanto muy probablemente dejen de verte como alguien honesto...".

-"Lo entiendo Owen, pero ponte en mí lugar también, si no vendo no obtengo ganancias y como dije, yo también necesito comer al igual que todos, aparte de que ya no está permitido comer carne de res...".

-"¿Y eso? ¿Que tiene de malo? Es comida al fin y al cabo...".

-"Owen ¿Te das cuenta que tanto tú como tu esposa van a un mercado en donde también van toros, rinocerontes y cualquier cantidad de herbívoros que prácticamente pueden aplastarlos como insectos verdad?".-Mencionó este alzando una ceja.

-"Em...No..".

-"Eso pensé..".-Suspiró tocando levemente el mostrador. -"Mira, podría hacer una excepción de que me pagues la mitad de precio por las manzanas, pero a cambio necesito a alguién que me haga un pequeño favor a cambio..".-Concluyó este poniendo una caja en el mostrador. -"Necesito que alguién lleve esto a la orilla de la playa para que cierto cliente se la llevé dentro de unos minutos, así que si me hacen el favor de entregarla por mí pues...Digamos que les haré un descuento solo esta vez".

-"¡Perfecto! ¡Ya tengo al indicado aquí mismo!".-Sonrió Owen tomando del hombro al azabache. -"Este chico estará encantado de ayudarte bro, además estoy seguro de que esta de acuerdo con ello ¿No es así chico?".-Preguntó dirigiéndose a este con una sonrisa.

-"¿¡E-Eh!? ¡C-Claro, con gusto!".-Aceptó este con algo de temor.

-"De acuerdo, por cierto ¿Cómo te llamas chico?".-Pregunto Hispo viéndolos a ambos.

"¿Cómo te llamas chico?"...Esas palabras resonaron profundamente a través de este.

Algo nervioso, este trató de decir una simple palabra, pero aún así no salía ni una sola palabra de su boca, ya para ese entonces era algo difícil para él siquiera hablar con naturalidad con la pequeña Yeima, digo, se podría tomar como algo normal sabiendo todo lo que había pasado hasta ese entonces y la confusión y el temor que se producían en este cada vez que observaba a cualquiera de aquellas criaturas a la cara, aunque muy en el fondo, sentía que había algo además de temor..

-"C-Chris..".-Musitó este con suavidad.

-"¿Te llamas Chris?".-Preguntó el tigre con curiosidad.

-"S-Si...".

-"Jum...Pues en todo caso es un gusto conocerte Chris, puedes llamarme Hispo si así lo deseas, siéntete bienvenido a venir si quieres manzanas".-Le sonrió de manera simpática mientras le entregaba la caja. -"Toma, ya mi cliente debería estar cerca de donde acordamos, dile que vas de mí parte y que disculpe las molestias".

-"D-De acuerdo, me iré entonces..".

-"¡Espera!".

-"¿S-Sucede algo?".

-"Olvidé mencionarte que tengas cuidado con ciertas especies que te encuentres por ahí en la playa, suelen ir animales como serpientes o leopardos por esas zonas, así que trata de ser discreto".-Advirtió este con naturalidad.

-"E-Em...¿De acuerdo...?".

-"¿Entonces que haces aquí todavía? ¡El tiempo es dinero, en marcha!".-Le alzó la voz este.

Aún nervioso, este rápidamente comenzó a correr hacía la orilla de la playa como si no hubiera un mañana mientras tomaba con cuidado aquella caja que parecía estar repleta de grandes y jugosas manzanas en muy buen estado, por un momento pensó en agarrar una manzana para comer, ya que de hecho no había desayunado nada en la mañana, pero rápidamente recobró la cordura y siguió caminando hacía las orillas de la playa..

-"C-Creo que debería ser por aquí...".

Miró a sus lados, en búsqueda de cualquier cosa o persona, pero simplemente no había nadie en ese entonces..

-"Debe ser una broma...".-Pensó este viendo al agua. 

Vió su reflejo un poco, con un par de pantalones algo maltrechos, una túnica larga que lo cubría casi completamente de brazos y torso, una bufanda rodeando levemente su rostro y un par de orejas de zorro falsas era lo que conformaba su disfraz, en parte se sentía profundamente agradecido con aquella zorra que decidió ayudarle dándole aquellos ropajes, pero por otra se sentía como si se fuese a derretir allí adentro, el calor era bastante alto y digamos que el tener tanta ropa puesta en ese entonces le dificultaba bastante las cosas para este joven humano. Aunque algo es mejor que nada ¿No?.

-"Demonios ¿¡Donde está!?".

Una mueca de frustración se formó en su rostro, según aquél tigre ese supuesto cliente debería de haberse aparecido en el instante, pero ahora estaba ahí parado como un tonto recibiendo sol como si fuese una brocheta humana.

-"..."

Esperó y esperó...Oía las olas del mar chocando entre sí las unas con las otras, el suave vaivén de estas rosando la suave costa de la orilla, y claro, el gran canto de las gaviotas por encima de este.

-"Bueno...Al menos nada me puede atacar ahora...".-Pensó levemente aliviado. -"Además...Al menos sé ahora que me llamo Chris..".

Fijando su mirada en el agua, este suspiró un poco y se quedó estático durante unos instantes. Tal parecía que el sonido del agua del mar lo tranquilizaba en gran parte, no sabía por qué, simplemente se sentía de cierta forma relajado a las orillas del océano, sin nada mas que ver u oír..

-"Aún me preguntó como fue que acabé en las orillas de esa playa..".-Susurró este para si mismo. -"O mas importante aún...¿De donde fue que vine?"..

Otro suspiro salió de su boca y pateó con suavidad una roca que estaba cerca de este. Realmente no tenía ni la mas remota idea de que hacer en ese entonces, no tenía nada de donde apoyarse, y tal parecía que se vería obligado a irse por su cuenta a partir de aquél día, vaya que su suerte mejoraba notablemente a cada instante..

-"Espera...¿Que es esa cosa a lo lejos...?".

Confuso, este se frotó los ojos con cuidado y nuevamente se fijó en el agua..

-"¿Que demonios era eso...?".-Susurró este con confusión.

Pronto, una sombra comenzó a distinguirse en las lejanías del agua mientras las olas de a poco comenzaban a aumentar la fuerza de las olas que se chocaban entre si o contra las rocas del alrededor, dando un paso hacía adelante con curiosidad, el azabache sintió el agua acariciando con suavidad las plantas de sus pies y sintió una suave relajación combinada con un sentimiento de nostalgia algo efímera..

-"Esto...Se siente muy bien de hecho..".-Suspiró relajado. -"Demonios...Ese cliente si sé está tomando su tiempo...".-Quejoneó acomodando la bufanda que traía consigo. -"Me pregunto que cosa será ahora...¿Un lobo? ¿Un tigre? ¿Otro zorro acaso?".-Reflexionó tomando con cuidado su mentón. -"Bueno, sea lo que sea, al menos espero que no coma carne...".

Acto seguido, este retrocedió un poco esperando que el dichoso cliente llegase de una buena vez por todas, pero en cambio fue sorprendido por algo mas que un simple ladrido o gruñido..

¡Splash!

Dándose la vuelta con lentitud, el humano volvió a mirar hacía el agua, pero un frío viento sopló por su nuca en respuesta a su curiosidad, se giró nuevamente a sus alrededores, viendo con detenimiento que era lo que tenía a los lados, pero nuvamente...No había nadie.

-". . .".

Algo confuso, este se alejó otro poco de la orilla, casi pisando el césped del campo nuevamente, pero pronto se dió cuenta de que algo le estaba faltando en ese entonces y que yacía casi a flote en el agua de la orilla..

-"¡La bufanda!".-Pensó este caminando hacía el agua.

Dejando a un lado la caja, este acercó su mano a la bufanda y la tomó velozmente para evitar que se mojase mas de lo que estaba ya, pero pronto, notó que había algo mas adelante de él en ese entonces..

-"Es la misma sombra de antes...".-Mencionó colocándose nuevamente la bufanda alrededor del cuello. -"Supongo que comenzará a llover pronto si es una nube de lluvia...".

Sin darle mas importancia al asunto, sacudió con cuidado la dicha bufanda y le sacó la arena que traía por encima para que luego no molestase con aquél calor..

Aunque ya no era eso de lo que tenía que preocuparse ahora..

Tomando nuevamente la caja en sus brazos, este comenzó a oir un breve burbujeo proveniente de las orillas de dicha playa, pero nuevamente al cabo de unos segundos terminó rodeado de otro frío silencio incómodo sin una explicación posible a la mano..

-"Esto ya se puso muy extraño...".-Pensó con ironía mientras observaba al agua. -"¿H-Hola? ¿Hay alguien aquí?".-Musitó sin acercarse al agua.

Nuevamente, ningún respuesta se le fué dirigida y un nuevo burbujeo brotó del agua. Ya algo irritado este se giró y se propuso a irse nuevamente con los demás, pero al apenas pisar con suavidad el césped, una fuerte ola chocó contra la orilla, mientras una gran figura salía del agua y le replicaba unas suaves, pero terminantes palabras..

-"Ya llegué, perdona la tardanza...".-Rió esta de manera burlona.

Por un breve instante, el corazón del humano se detuvo, mientras un escalofrío le recorría el cuerpo de arriba a abajo inmovilizandolo en el momento ¿Con qué se iba a encontrar ahora? Ya había visto a unas pocas criaturas en el mercado, pero ahora por alguna razón sentía el mismo miedo que sintió cuando conoció a aquella pequeña familia de zorros. Aunque de igual forma acabó dándose la vuelta, sintiendo su sangre helarse al instante..

-"E-Eres una...T-Tiburona...?".-Tartamudeó este con temor.

-"En carne y hueso, chico zorro".-Se río esta de manera burlona.

Sin mas, este comenzó a retroceder lentamente mientras su cuerpo temblaba un poco con temor, aquélla hembra por su parte le sonrió de manera burlona mientras poco a poco se acomodaba en la arena para levantarse..

-"¿Que sucede? ¿Nunca antes habías visto un tiburón en tú vida chico zorro?".-Rió nuevamente poniéndose de pié sin muchos problemas.

Algo confuso y temeroso, este se acercó con lentitud y extendió con cuidado sus manos entregándole la caja sin decir una sola palabra, aunque claro, no es como si tuviera alguna que decirle al fin y al cabo..

-"¿Te sucede algo?".-Preguntó esta dirigiéndose al chico.

-"E-Em, n-no, es solo que comí algo malo y-y me duele un poco el estómago".-Rió este por su parte de manera nerviosa.

-"Luces nervioso".-Replicó viéndolo con curiosidad. -"No me digas ¿Eres tímido o algo por estilo?".-Preguntó sonriendo en forma de burla.

-"U-Un poco supongo...".

-"Venga, no te lo tomes a mal pero pensaba que los zorros de por aquí no le tenían miedo a nada".-Rió esta otra vez mostrando sus colmillos.

-"B-Bueno, al menos estoy con v-vida, eso es algo".-Contestó este algo molesto.

-"Ya, ya, eso solo el tiempo lo dirá".-Recalcó abriendo la caja. -"Debes de ser nuevo por aquí, nunca te había visto en la zona".

-"S-Supongo...".

-"¿Y de donde eres?".-Preguntó nuevamente curiosa.

Tragando saliva, este apretó su puño y dirigió sus palabras con el valor que apenas tenía hasta entonces..

-"A-Acapulco...".-Susurró este de manera suave.

-"¿Acapulco dices?".-Sonrió esta viéndola con una sonrisa. -"No me estás tomando el pelo ¿Cierto?".

-"C-Claro que no, yo soy alguien que detesta mentirle a los demás...".-Comentó suspirando algo aliviado.

-"Bueno, entonces creo que por eso Hispo te encargó este encargo, por cierto, lamento la tardanza, tuve que lidiar con una pequeña limpieza se monos sin pelo y me demoré mas de lo debido".-Explicó comiendo una pequeña manzana.

-"D-Deben de ser un gran problema para ustedes ¿No?".-Sonrió este de manera algo forzada.

-"Ni que lo digas, son una peste para todos desde hace años...".-Musitó estirandose un poco. -"Pero bueno, al menos ya no hay ninguno en esta isla, eso es un punto bueno".-Sonrió nuevamente dándole un golpe en la espalda al contrario. -"Je, me empezaste a caer bien chico zorro, quizás te deje hablar conmigo en ocasiones".

-"B-Bueno, eso suena bien supongo...".-Comentó acomodando su bufanda.

-"¿Y por qué usas una bufanda por cierto? Hace mucho calor el día de hoy".-Preguntó esta tomando su bufanda como si nada.

-"E-Es que me gusta usarla siempre, n-no es por nada".-Excusó esté tratando de alejarse.

-"Venga, hace demasiado calor para andar por ahí abrigado".-Rió tomando con cuidado la bufanda por un lateral.
-"¡L-Lo siento, pero me tengo que ir!".-Se separó este alejándose un poco. -"E-Enserio, tengo que irme, lo siento...".

-"Aguafiestas...".-Suspiró esta sonriendo un poco. -"Un consejo, deja de ser tan tímido con todos o tarde o temprano alguien se aprovechará de tí ¿De acuerdo?".

-"V-Vale...".-Tartamudeó acomodandose con cuidado la bufanda. -"P-Por cierto...S-Soy Chris, es un placer conocerte..".

-"Kira, el gusto es mío".-Se presentó esta peinando un poco su cabello. -"Soy una de las vigilantes de la guardia costera, así que no se te será problema buscarme si así lo deseas".

-"D-De acuerdo...Bueno...Adiós supongo...".-Se despidió este sonriendo levemente.

-"Hasta luego Chris".-Sonrió esta alegre mientras se alejaba.

Con un leve sonrojo, el chico vió como la criatura marina se zambullia nuevamente en el agua y se perdía de la vista de este al instante. Sin mas que hacer, este caminó todo el camino de vuelta por donde había venido mientras pensaba.

-"Me parece...Familiar todo esto...".-Pensó para si mismo.

Alzando su mirada, este observó el puesto a unos cuantos metros de él y se propuso a aumentar el paso hasta que finalmente llegó al lugar sin muchos problemas.

-"¿Que demonios...?".

Oyó un leve golpe proveniente del puesto de manzanas antes visto, confuso y algo temeroso, este se acerco y observó varias marcas de garras alrededor del puesto, aunque eso no fué lo que mas mala espina le dió al final...

-"H-Hispo...".-Musitó Chris viendo el interior del puesto.

-"E-Eres tú chico, gracias al cielo...".-Se quejoneó este adolorido.

-"¿¡Q-Que sucedió!? ¿¡Por qué estás ahí en el suelo!? ¿¡Donde están los otros!?".-Preguntó este preocupado mientras se acercaba al tigre.

-"N-No grites tanto chico, ellos ya no están aquí de todos modos...".-Contestó este débil. -"Se los llevaron y saquearon todo mi puesto esos malditos tejones mieleros...".-Gruñó este apretando su estómago. -"A-Auch...".

-"N-Necesitas ayuda, hay que llevarte a algún sitio para que te curen completamente...".-Comentó preocupado mientras lo tomaba con cuidado y lo cargaba en su hombro.

-"D-Descuida, puedo aguantar...P-Pero hay que buscar ayuda pronto, no podemos dejar que se salgan con la suya esas bolas de pelo...".

-"¿H-Hay algún lugar que nos ayude?".-Preguntó desconcertado.

-"P-Por aquí no...".-Confesó este con pesar.

-"Bueno...Quizás hay alguien que nos pueda ayudar...".-Mencionó el humano algo pensativo. -"¿La guardia costera estaría bien?".

-"La guardia costera...Hace tiempo que no hablo con uno de ellos, no sé si quieran lidiar con algo como esto...".-Replicó con debilidad.

-"¿Por intentar no perdemos nada cierto...?".-Musitó firme mientras lo veía. -"Además necesitas ayuda y quizá allí te den medicina...".

-"Suena bien pero...Una última cosa...".

-"¿Si? ¿Que sucede?".-Dijo dudoso el azabache.

-"¿Tú...Eres un humano, cierto...?".-Preguntó el tigre viéndolo fijamente..

Continuará...

Woola!! ¿Como están? Perdonen la tardanza en escribir, es que eh de decir que eh tenido mucha flojera y actualmente estuve en mis vacaciones, pero les traigo este capítulo para compensar todo ese tiempo, así que espero que sea de su agrado.
Sin más que decir, me despido!

Atte:SombraOscura.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top