Estaba ya listo para lo que se aproximaba, siendo sinceros, Cross estaba masque nervioso, ansioso, pero ya no había vuelta atrás, actuar debía pero ya.

Arrojó un poco de tinta y agua por todo el suelo color blanco cegador, sintiendo un poco de paz por tener más coloración ante sus vacías cuencas. Dudó por unos momentos lo que estaba a punto de hacer, parte de su vida estaba en riesgo.

─ ¡Ink! –gritó fuerte y claro–

No pasó mucho tiempo para que aquel charco de tinta comenzara a tener forma que, al principio fue deforme, pero en cuestión de segundos ya era un esqueleto casi en su totalidad

─ Me has invocado, dime que dese–

Hubo un silencio algo incómodo entre ambos esqueletos, Ink escupió unos pequeños chorros de tinta negra, Cross no sabía sí era por la emoción de volver a verlo, o porque lo había olvidado y creía que era un nuevo universo vacío que rellenar, pero no esperaba que este revisara su larga bufanda y sonriera enternecido.

─ Pero si el pequeño Cross por fin decidió aparecer –dijo para después soltar unas cuantas carcajadas– ¿Me extrañaste crucecita? ¿O te gustan más tus nuevos amigos destructores y estorbosos?

─ Todo lo contrario, ya me han aburrido

─ Que suerte, yo también estoy aburrido de que ustedes malditos destruyan todo lo que se cruce en su camino y yo tenga que reconstruirlo siempre.

Un escalofrío recorrió los huesos de Cross ante tal comentario, peor aun cuando notó que su sonrisa no desapareció en ningún momento, sus comentarios sentimentales que había preparado anteriormente se vieron arruinados ante tal respuesta, tuvo que improvisar.

─ Sii, pienso dedicarme a algo más –dijo Cross con un hilillo de voz, carraspeó tratando de recuperarse– ahora quiero ser pollero y, ¿sabes quién, de entre todos, será el mejor?

Ink frunció un poco su ceño, creía saber cuál sería la respuesta.

─ ¿Quien?

─ Po' yo (Pos yo, po'llo)

Ambos rieron ante tal chiste tan malo, Ink pensó que tal vez podría quedarse por un rato con él, no perdía nada al hacerlo, al contrario, salía ganando al tener con quien compartir sus chistes y que alguien más lo hiciera con él.

Entre chistes, anécdotas y demás el tiempo fue pasando, para Ink iba pasando rápidamente mientras que para Cross era un completo infierno que pasaba lentamente, el tener que soportar tantas cosas absurdas que (a veces) no le causaban gracia era realmente pesado para él.

De repente, Ink sintió una punzada en sus huesos junto a un escalofrío en sus costillas, eso significaba que algo andaba mal con alguno de los UA. Rápidamente se levantó del suelo y empuñó su pincel con fuerza, al principio no sospechó nada de Cross hasta que este se aferró a su pierna y le impidió hacer movimientos correctos.

─ Cross suéltame –pidió amablemente–

─ No quiero, después de mucho volvemos a hablar, y sé que si te vas me olvidarás

Cross enrolló sus piernas y brazos en las piernas de la tinta haciéndolo quedar completamente inmovilizado de estas. Ink sintió de nuevo aquel escalofrío en sus costillas aumentar hasta su columna, definitivamente debía irse ya, trató de mover ambas piernas y de suerte logró zafar una, movió frenéticamente la restante tratando de empujar al contrario, pero este no cedía, pudo haber tratado de zafarlo con más delicadeza pero el dolor se extendía rápidamente por todo su cuerpo desesperándolo.

Debía apartarlo sí o sí.

Darle un buen pincelazo fue lo primero que se le ocurrió, y obtuvo lo que quería, ser liberado. Se apresuró a hacer un pequeño manchón de tinta en el piso por el cual se dejó caer. Cross se también se apuró en crear su propio portal con su arma. Ambos llegaron casi al mismo tiempo al Universo que se encontraba en peligro. Las cuencas de los dos esqueletos estaban completamente abiertas ante la escena que estaba frente a ellos, Flowerfell era un completo desastre, si bien no había ni un monstruo muerto, deseaban estarlo.

Ink se giró en dirección a su "amigo".

─ Pero que bonito, ¿no?

Enseguida varios ataques fueron enviados a Ink, quien enseguida abrazó a Cross y creó con su pincel barreras de tinta, algunos huesos puntiagudos pudieron atravesar esta y llegaron hasta los huesos de Ink y Cross, por parte de la tinta no había problema, pues él estaba muerto ya, pero Cross no. No hubo piedad alguna para aquellos esqueletos abrazados. Hubo un momento en el que Ink reunió la fuerza suficiente como para teletransportarse junto con Cross en un lugar "seguro". La camilla de flores doradas, cerca de la barrera que dividía a los monstruos de los humanos.

Fell!Sans los veía con rabia, mantenía a su Frisk detrás suyo dispuesto a reaccionar de manera agresiva ante cualquiera que se acercara. Con otro pincelazo Ink pudo apartar a Fell, tomó entre sus brazos a Frisk delicadamente y formó otro charco de tinta en el suelo.

─ Es la única esperanza de este Universo, gracias Cross, viejo amigo –le sonrió gentil– al menos la pasamos bien unos minutos.

El ambiente se sintió considerablemente pesado, significaba que Nightmare no estaba tan lejos, se acercaba rápidamente. Sin decir más Ink se sumergió en la tinta llevándose con él a una Frisk moribunda y dejando a Cross casi en las mismas condiciones que ella. No pasó mucho para que finalmente llegaran los demás echando carcajadas, sin embargo, Nightmare tenía un claro enojo.

─ Lo dejaste irse con ella –dijo, su cuerpo comenzaba a deformarse–

─ Mi parte solo era distraerlo antes de que llegara, no después –se excusó para, quizás, salvar su esqueleto–

─ De entre tantas cosas en las que puedes servir creí que esta podía estar incluida –dio un largo suspiro– evitaré hacer rabietas contigo.

Sin previo aviso, Nightmare enrolló un tentáculo en las costillas de Cross con tal fuerza que todos los presentes pudieron escucharlas crujir, lo estrelló contra todo lo que se encontraba a su alrededor, incluso contra Fell. No paró ni con las suplicas de Dust, quien desesperado intentó, en vano, provocarle daño a Nightmare.

Cuando supo que su HP ya estaba lo suficientemente bajo lo dejó caer entre las flores.

─ Agradece que morirás entre lo que más te gusta –dijo Nightmare refiriéndose a las flores–

Durante unos segundos observó lo que acababa de hacer y sonrió satisfecho. Desapareció junto con los demás, a excepción de Dust que corrió a su lado. Tampoco cruzaron palabras. Ni siquiera un "Te amo" pudo decir Cross, ya era polvo.

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Me emocioné aqui xd