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Chaeyoung era consciente de que su enamoramiento por Mina podría ser algo temporal, un hecho causado debido a que esa mujer era la responsable de haberle robado el primer beso y de alguna manera también la culpable de que por fin hubiese reunido el valor suficiente para escabullirse de su casa para descubrir qué era lo que realmente le sucedía

Mina sabía que lo que sentía por Son Chaeyoung era simple atracción, le gustaba la forma en la que las caderas de la chica formaban curvas o lo carnosos y coloridos que eran sus labios, también le gustaba verla vestir de negro porque resaltaba mucho más su piel totalmente blanca. Pero atracción y amor era algo que difícilmente había logrado apartar en el pasado, Mina era una esclava en lo que concernía al amor.

Y aún conociendo sus pensamientos, sabiendo que lo que estaban haciendo podría ser uno de sus mayores errores... Simplemente decidieron dejarlo todo para guiarse por los instintos.

Mina aumentó la presión de sus manos sobre la cadera de Chaeyoung pegándola contra la barra del bar a medida que caminaban, entonces, cuando la muchacha parecía a punto de rogar por un poco de atención, la besó de nuevo. Los labios de Chaeyoung todavía se sentían torpes y aún así cada roce hacía que Mina se regocijase en la sensación de mariposas volando en su estómago.

Las manos de Chaeyoung estaban posadas sobre los hombros de Mina, pues ni ella misma sabía qué hacer o reaccionar, se limitaba a tratar de seguir la intensidad del beso mientras luchaba con el oxígeno por ganar la batalla.

— ¿Estás segura de esto? — Mina había introducido sus manos bajo la camiseta de Chaeyoung para acariciar la suave piel de esta.

Chaeyoung echó la cabeza hacia atrás sintiéndose perdida en ese toque tan sumamente nuevo y de sus labios se escapó un gemido inevitable cuando sintió la lengua de Mina jugueteando con la piel de sus clavículas y dejando un rastro de húmedos besos hasta su barbilla. En ese instante, automáticamente, sus manos habían pasado de posarse sobre el hombro de esta a prácticamente abrazarla mientras enterraba los dedos en su cabello.

— Mina...

Una sonrisa se escapó de la boca de Mina antes de morder levemente la piel del cuello de Chaeyoung dejando una marca que tardaría en desaparecer varios días.

— Es una pena que seas menor de edad. No puedo tocarte mucho más que esto.

Chaeyoung negó acercando de nuevo a Mina cuando esta parecía convencida de que era el momento indicado para apartarse.

— Te estoy dando mi consentimiento, con eso debería llegar.

— ¿Para qué me das tu consentimiento exactamente, Chaeyoung? ¿Para llegar hasta dónde? ¿Quitarte la virginidad? Créeme, la gente dice que no tiene por qué ser un momento especial, pero sí debería serlo, ya que será un recuerdo que permanecerá siempre en tu mente y marcará las experiencias que tengas más adelante.

Chaeyoung suspiró y miró a Mina

— En realidad tienes razón, me gustas pero ni siquiera sé el motivo. Tal vez solo me haya fijado en ti por lo que pasó aquel día. Eres una persona irascible a veces, sin embargo cuidas mucho a aquellas que amas y quizás eso también motivó lo que me sucede contigo.

— A veces no hay que tener un porqué para que te guste alguien, pero cuando conoces en profundidad a la persona que te atrae puedes llegar a darte cuenta de que en realidad no es lo que estás buscando. A muchas les ha pasado conmigo, la gente no quiere una heroína. — Mina se basaba en su propia experiencia para decir aquello.

Chaeyoung sonrió levemente y miró a Mina, le gustaba por aquel primer beso, pero también porque desde el día que le abrió las puertas de casa la había cuidado y ayudado. No veía nada malo en las heroínas normales y corrientes, no hacía falta una capa o superpoderes. Para Chaeyoung, las heroínas eran aquellas que ayudaban sin pedir nada a cambio.

— A veces la gente quiere heroínas, lo que no quiere es a protagonistas — Chaeyoung sonrió levemente ante la confusión de Mina — El protagonista vive en una burbuja en la que todos le dicen que es la mejor, la elegida, la que llega para salvar la historia. La heroína, en cambio, es la que realmente hace posible que todas estén bien sin entrometerse demasiado o destacar.

Mina sonrió levemente ante lo que había dicho Chaeyoung, para ser una chica con tan poca información del mundo sus ideas parecían estar bien formadas y cada vez que tenía dudas se limitaba a preguntar o leer sobre el tema hasta crear su propia opinión. Esa había sido una de las cosas que más le había llamado la atención a Mina, Chaeyoung era un foco de curiosidad al que le gustaba conocer historias o cultura de todos los lados del mundo, desde música hasta la realidad más triste. Eso la convertía en una persona preciada para Mina, pocas escuchaban lo que tenía que decir como lo hacía Chaeyoung. Nadie apreciaba su opinión acerca de un tema como ella.

— ¿Luzco como una heroína para ti? — ambas se separaron. Chaeyoung se había sentado sobre uno de los taburetes mientras Mina comenzaba a limpiar la barra.

— De alguna forma salvas a la gente de sus entornos tóxicos, ¿no haces eso?

— Antes lo hacía más que ahora, pero sí intento ayudar en lo que puedo a la gente que pasa por lo que yo pasé en su momento. Por lo que tú también estás pasando actualmente. — Mina sonrió. No podía mentir, la idea de que Chaeyoung tuviese tan buena opinión sobre ella la animaba. Nadie le había dado las gracias en el pasado y sentía que con esa pequeña chica las cosas serían diferentes.

Chaeyoung se acarició la zona del cuello que Mina había marcado con un chupón ante la mirada de esta.

— Eres una heroína a tu forma Mina y en el futuro espero que mi opinión no cambie, creo que eres una buena persona de la que enamorarse. Todo lo que busco es a alguien con buen corazón.

Mina sonrió, no podía evitar sentirse enternecida ante el concepto tan puro que Chaeyoung tenía del amor.

— Por desgracia muchas veces el amor es tóxico Chaeyoung, hay pocas personas que logran estar con quien realmente quieren o con el tipo de persona que sueñan. Hay personas que no saben estar solas y las hay que no saben convivir con alguien a su lado. Sea como sea limítate a conocer bien antes de elegir amar. Hasta que sepas cómo es la persona esta solo te gusta, sabes que amas si al conocer sus defectos estos no suponen el final sino solo un obstáculo que superar.

— Supongo que tendré que conocerte bien entonces Mina.

Ambas sonrieron. Por algún motivo estaban ilusionadas la una con la otra.

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