[Palacio Park] [3 días después]

-¡Jiminie!- Ni bien bajó del lomo de su Alfa, corrió a los brazos de su mejor amigo como ya era costumbre. Sonriéndole y revolviéndole el cabello en tanto aprovechaba para darle algún que otro beso en la mejilla.
-Dime que si te gustaron los trajes para tu boda.

-Aun no los he visto porque esperaba a que llegaras para hacerlo ¿Te divertiste con Jungkook?

-Sí, me llevó a un lugar muy hermoso. Quizá podamos ir los seis juntos alguna vez- Y al decir seis estaba incluyendo tanto a su cachorrito como a Min Yoongi y a Holly.

-Siete...- Confesó finalmente con una sonrisa mientras colocaba una mano en su abdomen.

-Jiminie...- Nuevamente lo abrazó pero esta vez de una forma más delicada, deslizando su mano por debajo de las prendas del príncipe Park, buscando sentir a la pequeña vida que allí residía.

-Lamento no haberlo mencionado en mis cartas pero... quería decírtelo personalmente.

-No tienes que disculparte, esto es un precioso regalo del cielo. Nuestros cachorritos tendrán prácticamente la misma edad y estoy seguro de que serán inseparables así como nosotros.

-Y como sus padres...- Mencionó en voz baja al observar Yoongi y Jungkook hablar mientras este último terminaba de abotonar su camisa.

-Tienes razón- Fue inevitable sonreír al percatarse de ello y tan solo pudo elevar su rostro hacia el cielo para poder agradecer por disfrutar de momentos tan valiosos como ese, para pedir por un futuro brillante junto a sus seres amados.

-¿Y para mí no hay un saludo pequeño?- Park Seojoon había esperado pacientemente en la entrada del palacio hasta que los dos Omegas tomaran un poco de distancia para poder acercarse, ignorando completamente la presencia del otro Alfa Puro y llegando directamente junto a Taehyung.

-Seo hyung- Dado que había transcurrido cuatro meses desde la última vez que lo vio no fue capaz de contenerse y saltó hacia él para que este lo cargara de la misma forma en que lo hacía desde que era un niño pequeño.

-¿Estás más alto? Y también un poco más pesado- Soltó un pequeña risa elevando el Omega en sus brazos mientras lo estrechaba contra su cuerpo, mientras percibía ese encantador aroma a fresas y cítricos que tan bien conocía. En esos días había intentado convencerse de que la esencia de Taehyung habría sufrido cambios ya que estaba marcado y embarazado, cambios que a su Alfa le desagradarían y eso le haría más sencillo dejar de pensar en él sin embargo... era todo lo contrario, su fragancia era incluso más intensa y su mirada tenía un brillo que jamás había visto, él incluso era más precioso que antes.

-Quizá tenga un kilo más por mi cachorrito ¿Es molesto?

-Claro que no mi pequeño, solo bromeo contigo. Luces tan encantador como siempre.

-Ya está bien, harás que comience a avergonzarme.

Toda esa escena no pasó desapercibida por Jungkook quien se mordía el labio inferior y movía la lengua dentro de su mejilla en un claro gesto de disgusto. Sin embargo decidió no accionar sino hasta el mismo momento en que su Omega le pidió que se acercara para presentarlo. Park Jimin por su parte regresó junto a Yoongi luego de que este lo mandara a llamar, probablemente porque logró descifrar lo que estaba pensando.
-Es un gusto conocer al mismísimo Park Seojoon.

-Lo mismo digo- Estrechó la mano del azabache pero no de una forma amistosa sino que fijando su mirada en él y desafiándolo con la misma. Jeon Jungkook jamás se presentó en la reuniones diplomáticas, por ende era la primera vez que lo veía y vaya que le sorprendió el aspecto de ese rostro que a su parecer era bastante femenino y delicado para ser un Alfa Puro, justo lo mismo que sucedía con Min Yoongi. El problema real de ambos era que pesar de su semblante, eran extremadamente peligrosos pero también comprendía que si Jimin y Taehyung los habían escogido tan solo podía ser porque estaban unidos por un fuerte lazo, muy a su pesar.

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Pasado el mediodía Taehyung se encontraba junto a Jin y Jimin en la habitación de este último haciéndole unos ligeros ajustes al traje de bodas puesto que al confeccionarlo no sabía que su mejor amigo estaba esperando un cachorro. No significaba que el traje no le quedara pero este era algo ceñido en la parte del abdomen y era algo incómodo que la ropa ajustara allí, lo sabía por mano propia.
-Listo...

-Gracias pero te dije que no era necesario.

-Y yo te dije que lo arreglaría de todas formas ¿Vas a negarme que te sientes más cómodo ahora?

-Me siento más cómodo pero no quería causarte molestias.

-Nunca lo haces ¿Cierto Hyung?

-Exacto, somos tus amigos después de todo- Respondió el mayor de los tres antes de sentarse en la cama.
-Hablando de eso, deberías soltarlo todo y decir que estás muy nervioso.

-Sí, lo estoy y no imagino como estaré ese día. No sé que haría si no estuvieran conmigo.

En ese momento escucharon que alguien llamaba a la puerta y por ende Taehyung fue quien se asomó para verificar que se trataba del soberano de la dinastía Park quien le dedicó una cálida sonrisa al verlo.

-¿Tienes algo de tiempo libre?

-Sí, ya terminé con los arreglos del traje de Jiminie ¿Qué necesitabas?

-Hablar contigo claro está.

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Algunos minutos después caminaba tranquilamente junto al mayor de los hermanos Park por el extenso rosedal en la parte externa del palacio, dirigiéndose hacia un sector de recreación en donde usualmente disfrutaba a gusto de la lectura junto a su mejor amigo o bien con el Alfa con quien ahora estaba tomando asiento.

-¿Y sobre qué querías hablarme hyung?

-En primer lugar que ya he terminado de leer la última novela que me enviaste y que como siempre quedé fascinado con ella.

-Sabes que me gusta que me des una crítica constructiva y no solo que me halagues.

-Es un poco complicado considerando lo buena que es pero si debo decirte algo es que como siempre la idea de amor que plasmas en ellas en un poco irreal, es lo único que deberías corregir.

-Prometo que la próxima será diferente, puede que ahora pueda hablar sobre el amor sobre otra perspectiva ahora que... lo he vivenciado.

-Eso es sobre lo otro que quería hablar ¿Cómo te encuentras con todo esto? A decir verdad aun no asimilo que Jimin espere un cachorro y vaya a casarse pero me sorprende más viniendo de ti.

-¿Cómo me siento? Me siento muy feliz de haber encontrado a mi Alfa y de estar esperando a nuestro cachorrito. En el fondo de mi corazón siempre tuve el anhelo de que alguien me amara por quien realmente soy y no porque yo fuera un Omega Sagrado, un descendiente de nuestra Diosa..

-Taehyung, tu familia y tus amigos te amamos realmente también. No me gusta que hagas parecer como si antes no tuvieras a nadie.

-Lo sé, lo lamento pero también comprendes a qué clase de amor me refiero. Jungkook es diferente a todos los Alfas que he conocido, es un persona realmente maravillosa. Es un chico sensible, le gusta cantar, pintar y cocinar, es tan independiente que no le gusta solicitar al personal de servicio, se ocupa de lavar su propia ropa y ahora lo hace incluso con la mía. Eso no es algo que se esperaría del príncipe del clan Jeon ¿Cierto? Sobre todo con su reputación.

-Su hermano mayor es bastante amable así que quizá tenga que ver con eso también y tal parece que Min Yoongi es igual, ayer preparó el desayuno para todos. Sé que puede sonar algo ilógico pero aunque se muestren inofensivos algo en ellos me molesta mucho, no sé si comprendas lo que digo.

-Lo comprendo, Jiminie y yo sabemos que no son unos tiernos cachorritos pero ese es otro aspecto en de su personalidad. Siempre he creído firmemente en que todos tenemos aspectos positivos y negativos pero... eso es algo normal en las personas.

-Tal parece que pensaste mucho al respecto y es un alivio pero ten en cuenta que aun así les voy a dar una golpiza a esos dos si los hacen sufrir.

-Y que cuides tanto de nosotros es algo que en verdad te agradezco hyung.

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Las siguientes horas las pasó junto a Seojoon intercambiando opiniones, reseñas y reflexiones sobre los nuevos textos que habían leído desde la última vez que se vieron. Si algo tenían en común era que ambos compartían la misma pasión por la literatura, más bien ese Alfa era quien le había inculcado ese gusto a él y a sus hermanos mayores durante los tiempos de guerras en que la familia Park se refugiaba en su palacio. Todos habían crecido juntos y era por ese motivo que se sentía tan a gusto a su lado como para tener la confianza suficiente de dormir sobre su hombro, esto último era consecuencia de su embarazo que le provocaba algunas veces tener sueño a horas que antes no.

-Hmn...- Pese a dormir profundamente, un cosquilleo en la zona de su entrepierna logró perturbarlo, un cosquilleo que luego fue seguido por una sensación tibia y húmeda pero lo que terminó de despertarlo fue percibir que algo que se adentraba en el interior de su cuerpo. Por demás sobresaltado abrió los ojos encontrándose con la imagen de Jeon Jungkook lamiendo su hombría en tanto lo penetraba con dos de sus dedos.
-Ahh... Kookie... qué estás...- Su Alfa elevó la mirada ante esa replica y fue allí que notó la expresión en el rostro de este, una que denotaba que para nada estaba de buen humor.

-¿Esperabas que acaso fuera otra persona Taehyung?- Y al decir eso se mordió el labio inferior y presionó con mas fuerza dentro de su Omega a quien hizo soltar un fuerte gemido.

-No, no es eso... ahh... es solo que... este lugar... no es... adecuado.

-¿Por qué? ¿Porque Park Seojoon puede regresar y verte? Después del desastre que hicimos esa vez en la cocina pensé que no te importaba- Después de que Taehyung se fue de su lado en la mañana estuvo vigilando sus movimientos desde la distancia, ocultando su presencia tal y cual solía hacer en las misiones de infiltración solo para comprobar que sus sospechas sobre aquel Alfa eran ciertas, lo peor de todo era que su Omega le permitía tomar demasiadas atribuciones. Era imposible no sentirse molesto, así que esperó pacientemente durante horas a que el líder del clan se apartara a hacer quien sabe qué cosa para ocupar su lugar junto al menor, para desnudarlo en el mismo sofá en donde dormía y así comenzar a jugar con el cuerpo de este.

-No es... lo mismo...- No estaba del todo seguro de qué era lo que pasaba por la mente de su Alfa pero de momento a otro este se apartó un poco para desnudarse también, dándole espacio como para que pudiera escapar pero en cuanto intentó levantarse el mayor lo sujetó de la cintura y lo presionó boca abajo en el sofá.

-Taehyung... por si no lo notaste yo soy tu Alfa, no puedes simplemente dejar que otro te tome en brazos, que te cargue de esa forma ni mucho menos puedes dormir en su hombro. Si tanto querías hablar de literatura yo también puedo hacerlo- Se posicionó sobre el cuerpo de Taehyung antes de besarle la espalda, antes de apegarse más a él y hacerle sentir que ya su miembro estaba erecto pero sintió el rechazo de su Omega quien intentó darle un golpe con el codo incluso desde esa posición. Esa acción fue suficiente para él, odiaba sentirse tan frustrado y haciendo toda una escena de celos incluso peor que la de una niña adolescente, su lobo estaba inquieto, triste a la vez y no sabía como lidiar con esas emociones que lo llevaron a ponerse de pie e intentar alejarse del otro joven finalmente.

-Kookie... espera...- Si bien intentó alejarlo en un principio, la forma en que Jungkook lo hizo fue algo precipitada. Él usualmente no se habría rendido tan fácilmente y el que lo hiciera denotaba que estaba dolido, algo que desde luego provocaba que también se sintiera de la misma forma. Rápidamente abrazó por la espalda al mayor para retenerlo pero no dio resultado porque lo apartó de todos modos. Decidió entonces implementar toda la fuerza que tenía y empujó a su Alfa al sofá, aprovechando ese momento de distracción para sentarse sobre él.
-Kookie...- Quería establecer contacto visual con el azabache, por ende afirmó la manos en sus mejillas y lo obligó a que lo viera sin embargo... nunca imaginó descubrir angustia en su mirada, como si... estuviera conteniéndose para no llorar ¿Qué era lo que le ocurría?
-Kookie... lo lamento...

-Es humillante no poder controlar mis emociones- Confesó al ser descubierto por su Omega que como siempre podía ver el interior de su alma.
-Me siento frustrado de que prefieras pasar el día con él, de que compartas cosas que conmigo no. Puedo soportar que me ignores por Jimin pero no con otro Alfa, no con un Alfa que también está enamorado de ti...

-Él no...

-Lo está Taehyung, te mira de la misma forma en que yo lo hago pero no vas a creerme así que solo haz de cuenta que no dije nada y ponte algo de ropa antes de que él regrese.

-Jungkook, no importa si él o cualquier otro me mira de esa forma, yo solo te quiero a ti...- Hasta entonces no había considerado que un Alfa, y mucho menos uno de Raza Pura, podría sentirse herido e inseguro de tal forma, de una tan profunda como para llegar a soltar una lágrima incluso delante de su Omega. Lejos estuvo en sus intenciones lastimarlo de ese modo así que ya sin pensar en más nada descendió con besos por el pecho del mayor a quien sintió tensarse con sus toques y más aun cuando apresó la intimidad de este en su boca.

-Taehyung... mhn...

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Al ser el Rey de la dinastía Park tenía asuntos que atender y ante el llamado de su primer oficial no tuvo más remedio que abandonar a Taehyung, podría haberlo despertado pero al verlo dormir tan pacíficamente optó por no hacerlo y procurar volver con él antes de que notara su ausencia. No obstante cuando estaba emprendiendo regreso notó en la lejanía algo que lo dejó completamente estático, algo que alteró hasta el último de sus sentidos. Podía ver perfectamente la piel desnuda en la espalda del príncipe Kim, el mismo que daba pequeños saltos sobre el cuerpo de otra persona, un joven que luego pasó a estar sentado y abrazado al cuerpo del menor. Jeon Jungkook lo estaba observando, estaba clavando su mirada en él y enseñándole una sonrisa perversa en tanto embestía dentro del Omega. Ese Alfa estaba disfrutando de mostrarle ese espectáculo, de demostrarle que Kim Taehyung le pertenecía solo a él. Ahora no tenía la menor duda de que ese sujeto era un completo cínico.

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-Ahh... Kookie... ya casi...- Gimió en el oído del azabache, sintiendo como este golpeaba frenéticamente en su interior y a la vez ayudándolo al empujar las caderas hacia abajo en las estocadas finales que precedieron al orgasmo. Una vez más los colmillos de su Alfa se clavaron en su piel, consumando definitivamente ese encuentro de la mejor forma posible antes de que ambos cayeran rendidos en los almohadones.
-Te amo... te amo mucho Jungkook, no hay nadie mejor que tú...

-Lamento... haber actuado tan infantilmente, no quería hacerte sentir mal ni a ti ni a nuestro cachorrito- A modo de disculpa, en tanto esperaba que su nudo se deshiciera, repartía pequeños besos en toda la superficie del rostro de su Omega.

-No tienes que disculparte, puedo reconocer mi error. Fui desconsiderado con respecto a tus sentimientos y te lastimé sin notarlo. Siempre... eres amable conmigo pero yo no actué en consecuencia. Ya no volverá a suceder, porque eres lo más importante para mí, porque eres lo que más amo en este mundo Jungkook...

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Pasada la media noche, su Omega descansaba junto a él en una de las habitaciones de invitados. Pensó que él dormiría con Jimin al igual que siempre, pero al preguntarle al respecto dijo que eso no era necesario, que sentía deseos de sentir su calor en la noche. Más que feliz por ese hecho, permaneció contemplándolo y haciéndole caricias hasta que este concilió el sueño, aguardando con calma hasta asegurarse de que no iba a despertar para levantarse de la cama.

Su destino no había sido otro que el cuarto de Park Seojoon al cual desde luego ingresó por el balcón. Ya suponía que ese sujeto no dormía y también que lo atacaría apenas si pusiera un pie en ese lugar así que fue sencillo esquivarlo cuando se abalanzó hacia él.

-¿Quién diablos te has creído maldito idiota? Este es mi palacio, no puedes simplemente hacer lo que te venga en gana.

-Hablas de meterme en tu habitación o acaso... ¿De Taehyung?

-Precisamente, que te eligiera como su Alfa no te da derecho sobre él ¿Piensas que es alguna de las zorras con las que te acuestas?

-Ya que nos viste debiste saber que no lo forcé a que lo hiciéramos en un lugar así, él lo estaba disfrutando tanto como yo- Le enseñaba una sonrisa al mayor que lo estaba haciendo enfadar a tal punto de mostrar un aura amenazante, como si estuviera a pocos segundos de perder la calma y transformarse.

-Cometí el error de atacar a Min Yoongi desprevenidamente y no lo haré contigo- Él no era ingenuo y la sonrisa del príncipe de la dinastía Jeon delataba sus intenciones, hacerlo perder la calma.

-Veo que te subestimé, eres de la misma raza de Alfa que yo después de todo. Solo vine a saludarte y también a decirte que si es verdad que tanto amas a Taehyung deberás colaborar con nosotros a menos que quieras que le ocurra algo malo. Y no malinterpretes eso, jamás le haría daño a mi Omega ni a mi cachorro.

-¿A qué quieres llegar? No comprendo cuál es tu juego Jeon.

-Una vez que Jimin se case con Yoongi dejarás que él intervenga en tu corte.

-Como si fuera a hacer algo así.

-Puedes hacer lo que te venga en gana pero no sé cómo lidiarás con el cargo de conciencia de no haber ayudado a Taehyung cuando aun pudiste hacerlo. . .

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