Montserrat0-0

STEVEN GRANT🪞

Aquel día Steven y tu habían salido a almorzar juntos en un restaurante que a ambos les gustaba en sus horarios de colación en el trabajo, por lo que en eso se encontraban.

–Uy ya me tengo que ir, mi siguiente tour va a llegar dentro de poco y aún me tengo que lavar los dientes.–Dijo buscando su billetera en su bolso del trabajo.

–Tranquilo mon cher, yo te invito. Después me lo puedes pagar con otra cosa.–Le dijiste con una sonrisita posando tu mano sobre la suya y guiñándole un ojo.

–Okey... me parece una excelente idea, mon amour.–Respondió con una sonrisa boba viendo hacia tus labios antes de acercarse para besarte.–¿Nos vemos más tarde entonces? ¿Me vienes a buscar?

–Siempre.

–Bien... te amo.–Dijo dándote un último beso en la mejilla y poniéndose de pie.

–Que te vaya bien.–Le dijiste con una sonrisa bebiendo lo último de tu refresco.

Steven se quedó ahí parado jugando con sus manos algo confundido, y sin realmente saber qué hacer.

–¿Estás bien?

–Yo si... ¿Tú...?

–También...–Dijiste con una pequeña risita viéndole volver a sentarse.

–¿Y entonces por qué...? Amm... te amo querida.–Dijo algo confundido antes de verte a los ojos ligeramente preocupado.

–Yo también te amo mi vida.–Le dijiste tomándolo con una mano apretando sus mejillas y acercándote para besarlo, sin dejar pasar el suspiro aliviado que soltó.–Ahora mejor vete o se te va a hacer tarde.

–Okey... nos vemos.–Dijo más contento besando tu mejilla y abrazándote por la espalda antes de salir del lugar, mientras tú reías ligeramente.

MARC SPECTOR🌙

Marc venía recién despertando por lo que poco a poco se sentó en la cama y pasó ambas manos por su rostro aún procesando el trauma de despertar.

–Buenos días mi amor, ¿Cómo dormiste?–Le saludaste con una sonrisa llegando a la habitación con una bandeja y su desayuno en ella.

–¿Y esto?–Te preguntó con una sonrisa a la vez que dejabas la bandeja en su regazo y él su brazo alrededor de tus piernas para acariciarlas con ternura.

–Tú desayuno, hoy nos merecemos quedarnos en la cama.–Le dijiste con una sonrisa inclinándote para dejar un beso en su frente.–Voy a ir a buscar el mio.

–Gracias mi amor... ¡te amo!–Dijo mientras te alejabas, sin embargo luego de unos segundos frunció el ceño al no escuchar nada de vuelta.

Marc se quedó en su lugar confundido, y cuando volviste con tu propia bandeja y te sentaste a su lado como si nada hubiese pasado, se cruzó de brazos viéndote mal.

–¿Por qué me ves así?

–¿Ya no me amas?

–¡¿Qué?!–Exclamaste soltando una pequeña risita.

–Te dije que te amo y no respondiste nada.–Se quejó tomando su taza para beber un poco de café, mientras tú comenzabas a reír.

–¿Marc de qué hablas? ¿Cómo no te voy a amar? No seas bobo.–Reíste acercándote para besar su mejilla haciendo que se volteara hacia ti.–Claro que te amo, muchisisisisimo.

–¿Segura?

–Muy segura.

Una sonrisa se formó en el rostro de Marc y se acercó para besarte haciéndote reír, antes de que los dos comenzaran a comer.

JAKE LOCKLEY🚬

–Chingada madre... es el colmo que uno haya sido traído a este mundo en contra de su volunta' y pa' variar tenga que mantenerse solito y trabajar pa' comprar todo.–Se quejó Jake en voz baja haciéndote reír mientras se ponía su chaqueta.–Dama ya me voy.

–Que te vaya bien, te dejé algo para comer y un café ahí en esa bolsa.–Le dijiste desde tu lugar en el sillón señalando hacia la mesa.

–Gracias mi dama, nos vemos más ratito si no está dormida. La amo.–Dijo acercándose para besarte y luego ir a la puerta.

Jake sacó sus llaves y se volteó a verte que estabas usando tu teléfono, y frunció el ceño.

–La amo.

–Okey, que te vaya bien.–Respondiste levantando la vista hacia él con una sonrisa antes de volver a tu teléfono.

–'tá bien pero la amo.

–Mhm...

–Dama la amo.–Dijo acercándose a ti mientras tú tratabas de contener la risa.–¡¡¡T/N YO A USTE' LA AMOOOOO!!!

–¡Ya sé! ¡Ya te escuché!–Le dijiste soltando una pequeña risa.

–¡Pero entonces dígamelo de vuelta! ¡Yo vivo por su validación dama! ¡Yo vivo pa' uste' me diga que me ama también!–Se quejó antes de sentarse a tu lado y de brazos cruzados.–No me voy hasta que no diga que me ama. Ni con una grúa me sacan de aquí.

–Yo también te amo Jake, muchísimo.–Le dijiste acercándote para abrazarlo por el costado y besando su mejilla.

–¿Ve que no le costaba nada? Ahora si, me voy. LA AMO.–Dijo tomando tu rostro con si mano para besar tu mejilla con fuerza.

–Yo también.–Dijiste riendo con ligereza mientras le veías acercarse a la puerta, y antes de cerrar te lanzó un beso.

SANTIAGO "POPE" GARCÍA🧢

En ese momento estabas en tu trabajo, sin embargo te fuiste a algún lugar más apartado y tranquilo para poder llamar a Santi.

Después de que el teléfono sonara un par de veces, finalmente contestó.

–Buen día mi vida.

–Hola mi amor, oye te llamo para avisarte que cuando salga del trabajo voy a ir a cenar con unas amigas, así que quizás llegue un poco más tarde.–Le dijiste jugando con un lápiz en tu mano.

–Okey, 'tá bien. Avísame si quieres que te vaya a buscar, ¿de acuerdo?–Respondió del otro lado, y prácticamente podías imaginarte su sonrisa.

–Si, si, yo te aviso. Ahora me tengo que ir así que nos vemos más tarde.

–Ten un lindo día mi vida, te amo.

–Adiós...–Te despediste antes de colgar el teléfono.

No diste ni siquiera dos pasos, cuando tu móvil volvió a sonar y viste el nombre de Santi en la pantalla.

–¿Si?

–Te amo.

–Lo sé... ¿qué pasó?

–T/N te amo.

–Yo también te amo...

–GRACIAS. ¿Era tan difícil decirlo de vuelta?

–Ay Santiago eres como un niño chiquito, nos vemos más tarde.–Reíste escuchando como te lanzaba un beso y luego colgaste guardando tu teléfono volviendo a trabajar.

OSCAR ISAAC🍷

–Mi amor ya me voy, tengo que ir a recoger a Pedro y ahí nos vamos a la entrevista.–Te dijo Oscar llegando a la cocina de su casa donde tu estabas terminando de hacerte algo para comer.

–De acuerdo, ve con cuidado, nos vemos más tarde.–Le dijiste con una sonrisa acercándote para besarlo con ternura.

–Llámame o escríbeme si necesitas algo, te amo.–Dijo dándote otro beso rápido en la mejilla y tomando las llaves de su auto, teléfono y billetera de la encimera.

–Okey...–Respondiste volviendo a lo que estabas haciendo.

Oscar frunció ligeramente el ceño y levantó la vista hacia ti.

–Me voy... te amo...

–Nos vemos.

–¿Estás enojada?–Te preguntó acercándose a ti y dejando su mano en tu espalda baja quedando a tu lado inclinando su cabeza hacia el lado ligeramente para verte a la cara.

–¿No...? ¿Debería?–Reíste limpiando tus manos en un paño de cocina.

–Ah... bueno entonces me voy, te amo.–Dijo viéndote atento, sin embargo no se movió de su lugar ni tampoco quitó su mano de tu espalda.

–Yo también te amo, corazón. Mándale saludos a Pedro.–Le dijiste con una sonrisa besando sus labios una última vez y yendo a buscar algo al refrigerador.

Oscar inhaló profundamente y soltó un suspiro casi imperceptible con una pequeña sonrisa.

–Yo le digo, nos vemos más tarde.–Dijo más aliviado y ahora si fue hacia la puerta para irse.