Conociendo a su hija (Moon boys x hija)
Prólogo: Tu mamá demandó a Marc y ganó tu custodia legal cuando eras bebé. Años después ella lo contacta para que te cuide mientras ella trabaja y los chicos se enteran de algunas cosas sobre ti.
Advertencia: menciones dicción y abuso de alcohol y drogas, negligencia por parte de la mamá de la rayis, insultos, y ya no recuerdo qué más.
Probablemente la tristeza más grande de los chicos siempre iba a ser el hecho de que no pudieron estar contigo durante tu vida, o al menos hasta que cumpliste dieciséis.
Tu mamá pidió la custodia total tres meses después de que naciste al enterarse de la existencia de Steven. Para ese entonces, Marc no sabía de Jake. Aunque trataba de mantener a Steven fuera de su vida para que no se enterara.
Finalmente tu mamá ganó la custodia, y Marc no te pudo ver nunca más. Mucho tiempo después cuando Steven ya sabía de Marc, y luego se enteraron de Jake, Marc les confesó acerca de que tenían una hija.
Un día, tu mamá llamó a Marc por teléfono y le dijo que debía de irse en un viaje de negocios y debía dejarte con alguien pero no tenía a nadie, así que ésta era su oportunidad de ser un buen padre.
Los tres estaban muy emocionados, a pesar de que los otros dos no te habían conocido nunca, lo cual los ponía algo nerviosos.
Jake le dijo a Marc que fuera a recogerte en la limusina para dar una buena primera impresión. Y a pesar de que él quería ir, sería mejor si primero conocías a Marc antes que a los otros dos.
Cuando te fue a recoger, llevabas puesta ropa holgada y estabas escuchando música con ambos de tus audífonos puestos. Y a pesar de los intentos de Marc de iniciar una conversación, ni si quiera te molestaste en saludar.
El viaje al departamento fue silencioso. Marc tampoco quería incomodarte, y los siguientes días fueron así también.
Steven se preocupó de arreglar el departamento para tu comodidad. Despejó una zona y puso una cortina para que pudieras tener tu privacidad. También compró algunas cosas que pensó tal vez te podrían gustar y además una cama propia para ti.
Jake y Steven también tuvieron su oportunidad de presentarse, y Marc trató de explicarte acerca de ellos y su pequeño sistema, pero simplemente parecía no importarte. Lo cual les partía el corazón pero sabían que era cosa de que aprendieras a confiar en ellos.
—————
Ya llevabas más o menos tres meses con ellos, y aún no sabían mucho de tu mamá. Te llamaba al menos una vez cada dos semanas, y tampoco sabían cuándo tendrías que volver con ella. Aunque tampoco les molestaba tenerte ahí.
Una noche, Jake se despertó para ir al baño y antes de volver a dormir, se asomó con cuidado por tu cortina para revisar que estuvieras bien, pero en lugar de verte a ti ahí, descubrió que habías dejado tus almohadas para simular tu cuerpo bajo las sábanas.
Los chicos entraron medianamente en pánico, y Jake tomó las llaves de su taxi y se fue en tu búsqueda, lo cual no le fue tal difícil dadas sus habilidades y en lo que trabajaba.
Llegó a una casa bastante lejos de su departamento donde había una fiesta, y te encontró sentada en el porche fumando un cigarro y se notaba que estabas bastante drogada y ebria.
Jake te subió al coche y ambos se fueron callados durante el camino, aunque a él se le escaparon un par de lágrimas.
Te quedaste dormida en el coche camino a casa, asi que Jake te tomó con cuidado y te llevó a tu cama, para después conversar en la mañana.
Al día siguiente despertaste más o menos a las dos de la tarde, y te levantaste para ir a la cocina donde Steven te había preparado algo de comer y lo había dejado en la mesa, junto con una taza de té y una pastilla para el dolor de cabeza.
–¿Cómo te sientes, T/N?–Te preguntó sentándose frente a ti, pero no respondiste, provocando que Steven soltara un prqueño suspiro.–Solo intento ayudarte... eso es lo único que queremos. Los tres hemos intentado de todas formas poder acercarnos a ti, conocerte, tal vez de alguna manera recuperar todo el tiempo que perdimos durante todos estos años, pero si no pones de tu parte, entonces ya no sé qué más podemos hacer.
Lo que hiciste anoche estuvo mal, nos preocupaste muchísimo, T/N.–Te dijo con expresión afligida.
–¿Por qué les intereso tanto ahora?–Le preguntaste sin interés, cruzándote de brazos y apoyando la espalda en la silla, viéndole a los ojos directamente.
–Porque es nuestra hija. Además, mija créame que si hubiésemos podido acercarnos antes, hace mucho tiempo que lo hubiéramos hecho. Pero su mamá no lo permitía.–Te dijo viéndote seriamente. Puede que no hablaras mucho con ellos, pero eras bastante observadora y ya habías aprendido más o menos a diferenciar cuando cambiaban y tomaban el control.
–Tal vez debieron esforzarse más.–Rodaste los ojos, tomando un sorbo de tu taza de té.
–¿A qué se refiere?
–Eres un hombre inteligente, Jake Lockley. Igual que Marc y Steven. Piensa un poco.–Le desafiaste apoyando ambos brazos en la mesa e inclinándote hacia adelante, viéndole seriamente.–¿De dónde crees que saqué el gusto por el alcohol y las drogas? ¿Dónde crees que aprendí a mentir y a escaparme?
Deben ser muy idiotas para pensar que la perra está en un viaje de negocios. Lleva casi un año entero sin trabajo, robando en las tiendas y yéndose de los bares con el primer hombre que le muestra una mínima fracción de interés.–Le dijiste con desprecio, volviendo a cruzarte de brazos y a apoyarte en la silla mientras él te observaba atónito, pero trataba de ocultarlo.–Ésta vez se fue con un tipo de por ahí para servirle como dama de compañía.
–¿Cuando probaste las drogas por primera vez?–Te preguntó sintiendo una mezcla de rabia y tristeza contra tu madre. De haber sabido el tipo de mujer en la que se convertiría, habría hecho mucho más para tener tu custodia.
–A los doce. Al principio dijo que era para mí depresión, después me dio a probar alcohol cuando me llevaba a las fiestas y bares con ella.–Limpiaste rápidamente una pequeña lágrima que cayó de tu ojo, apartando la vista de ellos.
Marc soltó un pequeño suspiro y se levantó de su silla para acercarse a ti y abrazarte, dejando tu cabeza en su pecho mientras lloraba en silencio.
Al principio te rehusaste a dejarle ver qué tanto te afectaba, pero ya no podías contener las lágrimas y le abrazaste de vuelta con fuerza.
–Perdóname, hija... debí haber peleado más por ti. Jamas debí dejarte sola...–Dijo con voz temblorosa, besando tu cabeza.
–Yo también lo siento... y-yo quiero acercarme a ustedes, de verdad que sí... jamás creí ni una sola palabra de las que dijo mamá acerca de ti o Steven. Y-y lo único que quiero es quedarme aquí con los tres... perdónenme...–Sollozaste apretando su playera en tus manos.
–No tienes porqué pedir perdón, querida... todo está bien. Te prometo que vamos a hacer todo lo posible para que te vengas a vivir con nosotros, ¿está bien? ¿Eso te gustaría?–Te preguntó tomando tú rostro con ambas manos, a lo que tu respondiste asintiendo con la cabeza.
Su expresión cambió y Jake se agachó para arrodillarse ante ti, tomando tus manos en las suyas y pasando un mechón de cabello tras tu oreja.
–Uste' princesa es nuestra hija, y jamás la vamos a vejar sola. Tal vez no podamos darle todas las comodidades que se merece, pero podemos hacer el mayor esfuerzo posible por hacerla feliz. Partiendo por asegurarnos de que su mamá no se le acerque otra vez. Ya después de eso se viene con nosotros.
Pero debe prometernos que va a intentar dejar las drogas y el alcohol, nosotros la vamos a ayudar. Podemos ir a terapia, la podemos acompañar, lo que uste' quiera, pero debe dejar eso que le hace un mal que ni se imagina.–Te habló con dulzura y lágrimas corriendo por sus mejillas, acariciando tus manos.
–Lo prometo, papá Jake... lo prometo.–Te acercaste para abrazarlo, y Jake lo devolvió dejando besos en tú cabeza.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top