cuarenta y dos
Estaba desmayada en un profundo sueño cuando oí que alguien golpeaba violentamente mi puerta. Me levanté de golpe de mi sueño y Pansy hizo lo mismo. Las dos nos miramos preocupadas antes de saltar de la cama, asegurándonos de coger nuestras varitas y abrir la puerta lenta y cautelosamente. Ambas gruñimos al ver a Malfoy y a Nott de pie.
-¿Están los dos jodidamente locos? - Grito. -¡Nos habéis dado un susto de muerte!
-Tenemos que irnos. Ahora. - Dice Draco mientras me toma de la mano y trata de arrastrarme fuera de la habitación.
-¿Qué? - Pregunto pero no responde, así que me obligo a dejar de moverme. Se da la vuelta para mirarme.
-Dime qué está pasando. No me iré sin Theo y Pansy. - Le digo. Él mira más allá de mí a Theo y luego asiente.
-Bien, pueden venir. Blaise ya está en la sala común esperando. - dice Draco. Parece tan... ¿asustado?
-¿Qué pasa? - Pregunta Pansy detrás de mí.
-Os lo contaré cuando lleguemos allí. - Dice Draco mientras vuelve a tomar mi mano. Esta vez le sigo, y también lo hacen Theo y Pansy.
Llegamos a la sala común para ver a Blaise paseándose por ella. Empiezo a preocuparme de verdad... ¿qué está pasando para que los tres chicos estén tan asustados?
-Theo y Blaise, tenéis que ir vosotros y las niñas a casa de mi tía. Os he dado la llave del puerto y ella está al tanto de que venís. - Dice Draco. Evita mirarme mientras habla.
-Sí, estamos listos para irnos cuando tú digas. - Dice Theo, dándome una expresión de tristeza.
-¿Por qué nos vamos? - Pregunta Pansy pero nadie le responde.
-¿Lo hiciste? - Pregunto. -¿Será esta noche? - Draco se vuelve hacia mí y asiente con la cabeza.
-No quiero dejarte aquí... - Digo pero él niega con la cabeza.
-Tienes que prometerme que te irás con Theo y Blaise. Se me ocurrió la manera de llevarlos a todos a casa de mis tías porque te conozco. - Hace una pausa. -No es seguro que estés aquí cuando suceda.
-¿Vas a venir a casa de tu tía... después?
-S-sí. - Dice mientras se acerca a mí y me rodea suavemente con sus brazos, atrayéndome hacia su pecho.
-No quiero dejarte sola. - Lloro en su pecho.
-No estaré sola. - Lo dice para tratar de hacerme sentir mejor, pero no funciona.
-Soy técnicamente un mortífago, ¿no estaré a salvo? - Pregunto.
Blaise suelta una pequeña carcajada y me giro para ver que está sonriendo.
-Sabía que diría eso. - Dice Blaise con orgullo.
-Maya... No quiero que veas lo que tengo que hacer. No quiero que la gente piense que tienes algo que ver con esto. - Dice pero nada de eso me importa.
Sacudo la cabeza y me vuelvo hacia Theo que ya está asintiendo.
-No voy a ir contigo, T. - Le digo. -Pero tienes que irte y nos reuniremos contigo más tarde.
Theo se acerca a mí y me besa la frente.
-Te lo dije, Malfoy. - Me dice. -Cuídate, Maya. ¿Nos vemos en un rato?
Asiento con la cabeza y me giro hacia Draco, que niega con la cabeza a Theo. Sabe que es inútil discutir conmigo sobre esto.
-Bien...
Le cojo la mano y entrelazo nuestros dedos. Está muy tenso y sus ojos son oscuros. Me doy cuenta de que está asustado y, si soy sincera, yo también lo estoy. De hecho, estoy aterrorizada. Sé que no puedo dejarlo solo.
-Vayan. - Dice Draco a nuestros amigos y todos cogen la llave del puerto y se van.
-Vamos a la sala de requisitos. Snape me dijo que solo tenía 20 minutos para sacarlos de aquí. - Dice Draco mientras me saca de la sala común y se va por el pasillo, sin soltarme la mano ni una sola vez.
-Mi tía y un montón de mortifagos van a salir de ese armario, Maya. - Dice mientras entramos en la habitación. -Vas a tener que hacerles creer que estás aquí para ayudar al señor oscuro.
-Lo sé. - Digo.
-¿Estás listo? - Él pregunta.
-No. - hago una pausa. -¿Lo estas?
-No. - él dice.
-Hagámoslo. - digo.
Hubo un momento, después de que hiciera el hechizo, en el que ambos no estábamos seguros de que hubiera funcionado. Ese momento no duró mucho cuando la puerta se abrió y Bellatrix y algunos otros mortífagos salieron a rastras del armario.
-Estoy impresionada, Draco. No pensé que lo tuvieras en ti. - Bellatrix se burla. Sus ojos se posan en mí y sonríe.
-Tienes una amiguita-. - dice bellatrix mientras intenta acercarse a mí pero Draco la detiene.
-Ella está con nosotros. - Dice con firmeza. -Ella está aquí para ayudar.
-¿Ah sí? - Pregunta Bellatrix. -No estoy segura de que lo esté.
-Enséñale. - Me dice.
Asiento con la cabeza y doy un paso adelante. Los ojos de Bellatrix se centran en mí mientras observa con curiosidad cómo me subo la manga. Sus ojos se abren de par en par cuando se revela la fea marca oscura y asiente con la cabeza.
-Muy bien, entonces, vamos. - Dice y Draco me coge de la mano antes de que nos dirijamos a la torre de astronomía.
-
-Está ahí arriba Draco... sube y hazlo. - Exige Bellatrix. Me agarra del brazo para evitar que vaya con él. -Solo.
Draco se detiene una vez que la oye decir solo y se da la vuelta para mirar a su tía.
-Se viene conmigo. - Dice mientras mira fijamente a su tía.
-Draco-
-No. Es mi misión. Ella viene conmigo. - Draco exige.
El agarre de Bellatrix se afloja en mi brazo y antes de que sepa lo que está pasando, me lanza hacia Draco.
-Sube ahí, ahora. - Ella exige.
Él toma mi mano y entrelaza nuestros dedos antes de comenzar a subir las escaleras.
-Parece que hay alguien más ahí dentro. - Digo en voz baja.
-Prométeme que te quedarás cerca de mí. - Él dice.
-Lo prometo.
-Y no lo mires... ya sabes. - Dice.
-No lo haré.
Abre la puerta y entramos los dos, con su varita ya sacada y apuntando a Dumbledore.
-Ah. Draco.. y Maya. Qué sorpresa. - Dice Dumbledore con una sonrisa.
-¿Quién más está aquí arriba? - Pregunta Draco. -Te hemos oído hablar con alguien.
-A veces hablo solo. - dice Dumbledore. Mira de Draco a mí y sonríe.
-¿Están juntos entonces? - Pregunta. Miro a Draco y veo que baja un poco su varita.
-Sí. - Digo con calma. El agarre de Draco en mi mano se aprieta un poco.
-Joven amor. - Dice Dumbledore. -Debes preocuparte mucho por el señor Malfoy, Maya.
-Lo hago.
-Soy consciente de por qué estáis aquí esta noche. - Dumbledore dice con calma.
-¿Q-qué? ¿Cómo? - pregunta Draco. Su voz es temblorosa y es muy fácil darse cuenta de que está aterrorizado.
-Puede que sea viejo, Draco, pero no estoy ciego. - Hace una pausa. -Puedo ayudarte... no tienes que seguir este camino. Ninguno de los dos tiene que hacerlo.
-Expelliarmus.
-No necesito tu ayuda. No necesitamos tu ayuda. - Dice Draco enojado. -He sido elegido. - Se levanta la manga y revela esa fea marca, pero Dumbledore no parece sorprendido en absoluto.
-¿Y usted, señora Potter? - Me pregunta. Draco me suelta la mano y me hace un gesto para que haga lo mismo que él.
Dudé por un momento pero luego me levanté la manga y revelé la misma fea marca que Draco hizo hace unos momentos.
-Las cosas que se hacen por amor. - Dice Dumbledore con calma.
Miro a Draco mientras estudia a Dumbledore cuando Bellatrix entra. Draco inmediatamente apunta con su varita a Dumbledore.
-Buen trabajo, Draco. - Dice Bellatrix al darse cuenta de que Dumbledore ha sido desarmado. -Ahora termínalo.
Por un segundo veo que los ojos de Draco cambian de aterrorizados a decididos. Está temblando mucho y quiero ayudarle pero no sé cómo. Mis ojos se fijan en Draco mientras está de pie con su varita apuntando a Dumbledore. Prometí que no miraría a Dumbledore cuando muriera pero me da miedo apartar la vista de Draco. Miedo a que desaparezca y no lo vuelva a ver.
-Vamos, Draco-. - Bellatrix se detiene a mitad de la frase cuando alguien entra en la habitación.
-Severus. - Dice con una sonrisa.
Lo siguiente que sé es que Draco y yo estamos corriendo de la mano por el colegio con el resto de los mortífagos. Severus Snape acaba de asesinar a Dumbledore por Draco.. ¿por qué haría eso?
-ÉL CONFIÓ EN TI. - Una voz grita detrás de nosotros y Draco y yo nos congelamos.
-¿Es eso...? - Comienzo.
-Harry. - Draco termina.
Joder.
-Él confió en ti. - Le grita a Snape.
-Chico estúpido. No tenemos tiempo para esto. - Snape le grita a Harry.
-Tú... - Dice Harry mientras se vuelve hacia mí. -Hice bien en no confiar en ti.
-Harry...
-No. Voy a asegurarme de que todo el mundo sepa lo que ha pasado aquí esta noche. - Dice.
-Vayan. - Snape se vuelve hacia Draco y hacia mí y nos exige. Draco asiente y comienza a alejarse, tirando de mí. Lo único que pude ver fue la cara de decepción de Harry cuando me doy la vuelta y empiezo a irme con Draco.
-Espera. Vamos con mis tías. - Dice mientras saca algo de su bolsillo y me acerca a él.
-¿Listo? - Me pregunta, pero es inútil. Yo estaba llorando y no podía contestar, así que coge la llave del puerto y lo siguiente que sé es que estamos de pie fuera de una pequeña casa.
Caigo al suelo y empiezo a sollozar. Draco se inclina y me atrae hacia su pecho y me deja llorar sobre él.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top