Im Inmortal



La noche cayendo de repente, dejando a su esplendor aquellas brillantes luces que adornaban aquel oscuro cielo. Sin dejar ver la luna desde el balcón de su apartamento, Sehun esperaba el día en el que todo acabara, en el que ya no habité un monstruo dentro de el y sólo esté el.

Hace dos noches había tenido su primera vez con Luhan y cada vez que se veían sentía algo extraño dentro de el. Se sentía vivo, olvidaba todo su alrededor y olvidaba que era un monstruo. Sin importar que el intentaba cambiar y Baekhyun y Chanyeol lo estaban logrando al igual que el.

Aquellos sueños, tan reales para el no lo han vuelto a atormentar las dos noches siguientes más sólo se ha intentado tranquilizar; ver a Luhan cada vez en los vestidores y besarse con el no es lo correcto, pero cada vez que lo hace siente algo tibio en su corazón que lo motiva a seguir.

La suave brisa golpea su rostro de nuevo y las suaves hojas de los árboles comienzan con su canto que no tiene final. Cierra los ojos dejándose llevar por la tranquilidad, nadie habita en el más que su monstruo; familiarizares con el no fue fácil hasta cuando Baekhyun se íntegro a ellos pudo llevarse con su monstruo.

Es muy doloroso recordar el como logró se familiarizaba con el, ya que por poco como dijo Chanyeol, estaba apunto de matarse. Siempre fue frío y cortante con la gente, tranquilo y algo antisocial con los demás. Reservado a la hora de estudio.

Recordar, no es momento de hacerlo.

Entro a su cuarto y se quitó la suave manta que traía encima; dormía en bóxers, se le hacía más cómodo. La manta callo al suelo dejando ver su cintura y sus curvas, la línea que comenzaba en el inicio de la espalda y terminaba antes del coxis. Su tersa piel y sus piernas bien torneadas.

Se acostó y minutos después callo en un sueño profundo.






No sabía como había llegado a esa situación. Lo mejor que había echo era escaparse de clase ya que un maestro no había llegado. Había decidido ir hasta las canchas de fútbol pero a la mitad del camino la puerta de la bodega se abrió un poco y alguien lo jalo del brazo.

Sabía que estaba haciendo mal, que no era buena idea estar con el pero siempre que Luhan pegaba sus labios a los de el, simplemente no podía dejarlo; se dejaba llevar.

Sus manos no dejaban de jugar con los cabellos de Luhan mientras que se besaban y Luhan lo cargaba logrando hacer que Sehun enredara sus piernas a su cintura.

Baekhyun había seguido a Sehun y se quedo viendo lo que hacia entré las sombras. Una sonrisa tierna de asomo por sus labios al ver como Sehun le sonreía a Luhan, este le sonrió de la misma forma y volvieron a juntar sus labios. Baekhyun quería saber que se sentía besar a alguien, tener su primera vez pero no se detenía confiado de su mismo.

Una lágrima traicionera descendió desde la orilla de su ojo, recorriendo su mejilla y cayendo al suelo. Estaba feliz por su menor, el saber que tal vez había encontrado a la persona correcta; el volver a verlo después de muchos años. Los monstruos, todos como ellos; sólo querían ver a su líder feliz, sabiendo que 94 jamás tubo una vida como los demás. Sufrimiento era lo único en la vida de Sehun.

Pero... Hubo una vez en la que Sehun veía todo de color rosa, donde no podía dejar de sonreír, donde había alguien que lo quería tal y como era, donde no sentía asco hacia el y que... No le temía.

Los besos terminaron cuando el sonido de la última clase se escucho por los pasillos, Luhan sólo le beso los labios una vez más para agarrar su mochila y la de Sehun que se había llevado el menor.

—¿El viernes en la noche?—Pregunto Luhan en un susurro que sólo Sehun pudo escuchar.

—A las 9.—Concluyo Sehun, hubo una vez más donde se besaron pero el beso duró más, como si ninguno de los dos quisiera despedirse. Después de que Luhan se fuera, la luz estaba apagada así que los ojos escarlata de Sehun brillaron y vieron un lugar en específico.—Sal de ahí 04.—Sehun estaba enojado y Baekhyun lo sabía.

Salió de las sombras y con una sonrisa picarona chiflo y aplaudió pausadamente.

—Vaya, pero si nuestro líder ya tiene a alguien.—Sehun estaba por hablar pero su enojo se fue después de que la sonrisa de Baek se esfumó dejando sólo una mueca de preocupación.—¿Qué harás cuando lo mates?, ¿Porqué lo haces?

—Es completamente imposible que lo logre matar ahora, algo me esta sucediendo Baek y no se que es.—Salieron de la bodega y la soledad de los pasillos los golpeo.

Caminaron hasta la salida donde se encontraron a Chanyeol con un puchero meciendose con sus talones.

Aunque eso lo vio Baekhyun porque lo que Sehun vio a Luhan dándole un casto beso a Krystal para esta sonreirle y los dos irse en la moto del mayor. Se sintió triste, pero lo disimulo.





—Me estas diciendo que está con el, ¿pero el no sabe nada?—Chanyeol pregunto en un susurro sentado desde su cama viendo a Baekhyun jugar con algo. Este asintió logrando hacer que soltara el menor un suspiro.—Somos los únicos, ¿verdad?

—No se puede enterar nadie, y menos el... Es por su bien pero... Como dijo "MNo.21", Pronto el lo encontrara.—Chanyeol se levantó y se acostó al lado de su mejor amigo, donde los dos se quedaron viendo el blanco lienzo que estaba encima de ellos.

—Baekhyun... ¿Tu crees que nosotros encontremos a las personas correctas?—Pregunto Chanyeol cerrando los ojos.

—No lo se Chanyeol.







Estaba en su habitación, sólo; bajo la oscuridad de la habitación, lanzando dardos al círculo donde sólo habían foros de sus siguientes víctimas, todas caían en casi toda sus víctimas menos en... Su última víctima.

Vio hacia la ventana, la tenue luz de la luna siendo descubierta de las suaves y esponjosas nubes grises. Parpadeó unas veces y vio las estrellas, más allá estaban las constelaciones y un sin fin de planetas o galaxias. La vida de Sehun se asemejaba a una vida sin fin. Como el espacio.

Sentía que era inmortal, no había ninguna pista de cambio en el, sentía que sería un chico de 19 años siempre; sabía que jamás moriría después de todos los experimentos que usaron en el, lo convirtieron en alguien que no tenía un mapa sin final alguno.

El espacio. Era un mundo sin fondo, sin un final; ya que cada vez más encontrabas más estrellas, nuevos planetas; nuevas cosas pasaban a lo largo de su vida, nuevos descubrimientos, nuevas experiencias se asomaban cada vez mas; pero sólo una quería experiencia quería tener por siempre: sentir el cuerpo de Luhan junto a el, que este no lo suelte ni un sólo momento porque si sucede eso... Sentirá que esta cayendo en un barranco, el cual no tiene fin.

Estaba decidido a seguir cambiando, sentía que lo estaba logrando pero siente que algo o más bien alguien se está interponiendo en su objetivo de matar.

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¡Estoy en vacaciones! Actualizare tanto como pueda esta historias como otras.

Adiosito, hasta la siguiente actualización.

-Les deja una fotito antes de irse-

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