El Último Deseo

Espero que les guste~

Nota: Ame la película de "El gato con botas: el último deseo" ^_^

Salvar a quien lo necesita era más un instinto a estas alturas de su vida. Ya sean demonio, humanos, animales, creía que todo merecían algo de ayuda cuando estaban en problemas. Así que cuando escucho un lloriqueo animal, de un perro estaba seguro, no dudo en correr para seguir el sonido, encontrándose con el causante enredado en unas cuerdas que colgaban de una rama alta de uno de los tantos árboles que había a su alrededor.

-¡No te preocupes, te voy a ayudar!- le mostró una sonrisa cuando los ojos celestes se encontraron con los suyos, sacando su bastón rápidamente y haciendo un brusco movimiento para cortar la rama con un destello dorado, guardando su bastón justo para poder agarrar al perro antes de que cayera. Se arrodillo para desenredar al pequeño, quien fue rápido en sentarse apenas tuvo la oportunidad.

-¡Gracias, nuevo amigo!- agradeció el perro, su sonrisa amplia y su corta cola moviéndose con ánimo. El animal tenía el pelaje corto, luciendo maltratado pero limpio al mismo tiempo, sus enormes ojos brillantes y celestes llenos de felicidad sincera, usando lo que estaba seguro era una media como ropa.

-De nada- un perro que habla ya no era una sorpresa después de todo lo que ya había visto. -¿Estas bien?- había un aire dulce y amable alrededor del pequeño perro, aunque también había algo de tristeza si mirabas bien las manchas de su ropa.

-¡Estoy muy bien!- sus patas se movieron, luciendo casi ansioso por correr y saltar. -Mis amigos me dicen Perrito- declaró con orgullo y felicidad, inflando apenas el pecho.

-Me llaman MK- sonrió ligeramente.

-¿MK?- ladeo ligeramente la cabeza, sus orejas moviéndose apenas. -¡Suena como un apodo genial! Dos super letras juntas- el movimiento de su cola aumento el ritmo, aunque de repente se detuvo, mirando a su alrededor como si estuviera buscando algo en particular. -Perdí a Gato y a Kitty- su voz se quebró un poco al final, un rastro de tristeza mostrándose en su rostro por un segundo antes de que desapareciera.

-¿Tus amigos?- se animo a preguntar.

-Vi una ardilla y la perseguí...- rio ligeramente, apenas avergonzado de admitir que se dejó llevar un poco por su instinto. -...pero creo que me adentre mucho al bosque y ahora, los perdí-

-Te ayudaré a encontrarlos- fue rápido en ofrecerse, especialmente porque no tenía idea de cómo volver a su hogar y quería ayudar al perro de sonrisa brillante.

-¡Asombroso!- y juntos, empezaron a caminar, Perrito divagando sobre lo genial que eran sus amigos y contándole sobre su aventura en busca de un deseó, sonando tan impresionante que era difícil no imaginarse todo aquello. MK no iba a admitir que aunque se estaban moviendo, sentía que no avanzaban, especialmente porque todo seguía siendo bosque y no había señales de una salida.

-¡Perrito!- el llamado fue repentino, con una voz masculina y con un asentó que no tenía idea de cómo identificar. Ahí es cuando pudo verlo, dos gatos parados sobre sus patas traseras y con zapatos incluidos, una blanca y negra, el otro de pelaje naranja.

-¡Gato!- el perro no tardó mucho en correr con emoción obvia y, aunque el gato no se veía como alguien cariñoso en opinión del sucesor, aún así se agachó y abrió los brazos para rodear a Perrito en un fuerte abrazo.

-Hola- sonrió con nerviosismo, sudando un poco ante la mirada fija y llena de sospecha que el par le estaba mandando, el inocente perro acunado protectoramente entre los brazos del gato de pelaje naranja.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top