0.
Un hermosa tarde, que podía cambiarse en cuestión de segundos. He aquí con nuestros protagonistas "Los Sobrero de Paja" que disfrutaban cada uno en sus actividades, siendo mecidos por el barco, antes de que la densidad aumentara.
Todos ensimismado en sus cosas.
Luffy pescando con Brook, Usopp y Franky en el taller, Chopper en su consultorio estudiando los libros de la última isla con Zoro -este durmiendo en la camilla de la enfermería-, Nami y Robin conversando en el acuario de los recientes mapas de la navegante, Jinbei de vigía y Sanji en la cocina con un buen humor -lo que sería probable un almuerzo delicioso y lleno a especias de la última isla-.
Definitivamente tranquilo. Eso solo puede significar una cosa, nuevos problemas.
Nami lo sintió, el barco se sentía extraño, así que salió a la cubierta con su compañera.
- ¿Navegante-san? ¿Qué sucede?. - Pregunta con cautela la mujer con un semblante calmado aunque con su instinto en alerta.
- El mar... - Nami a lo lejos como había nubes de tormenta, pero estaban estáticas. - Si no nos acercamos a eso, estaremos bien, eso creo.
- ¿Crees? - Observa a la más joven.
- No lo sé, me da un escalofrío horrible, con solo sentir su densidad es bastante aterrador. - Cruza sus brazos para tomarse por lo hombros en un señal de 'tengo frío'.
- Entiendo. - Si seguían las instrucciones de su nakama, nada malo pasará. Esta conocía su campo, igual que ella.
Todo va estar bien.
Algo se estrelló contra el barco Sunny Go, no fue muy sordo, obviamente sin romper nada, el material que tiene el barco del futuro rey de los piratas es muy resistente. Por lo que apenas escucharon la mayoría desvío su atención de su quehacer al sonido.
Y al ser bastante sospechoso de inmediato todos dejaron sus ocupaciones para ir al lugar donde se dió tan dichoso ruido, ¿la marina?, si fuera así sería mejor una emboscada en grupo, ¿bandidos?, ¿otros piratas?, de todo lo que conocen, esto estaba muy fuera de su imaginación.
Encontraron a un muchacho, joven, de ropaje elegante, con el cabello negro corto a excepción del fleco que no dejaba a vista su ojo izquierdo. Piel tostada y bajo, un poco más bajo que Luffy.
-¡Demonios! Es si que dolió como un carajo... - Exclamó adolorido, sobándose en donde fue el golpe que fue en la parte superior de su espalda.
Los primeros en llegar eran el capitán y el músico del la tripulación.
-¿Hola? - Luffy, sin ninguna pizca de miedo y de manera juguetona, saluda a chico. Pone su mano sobre su cabeza, donde se ubica el sombrero para evitar que se escape con el viento.
Sus demás compañeros llegaron al momento rodeando al joven que acaba de aparecer.
Este solo con verlo se levanta del piso y se coloca recto. Parpadea y observa a su alrededor, con asombro en su rostro, hasta fijarse en un rubio cocinero en específico. Su cara cambió, como intentando reconocer a su objetivo -entrecerrando los ojos-.
-¿Viejo pervertido?
Un silencio sepulcral, solo interrumpido por-
- ¿¡A QUIÉN CARAJO LE DICES "VIEJO PERVERTIDO"!? ¡Te voy a moler a patadas! - Gritó, poniéndose en alerta, alternaba una pierna por delante de la otra.
- ¿¡Pues quién más aquí es un pervertido!? - copiando el acto del rubio. ¿Realmente lo estaba copiando?
Luffy y Robin, se estaba riendo, uno más escandaloso que la otra. Chopper y Usopp estaban perdidísimos. Franky, Jinbei y Brook, estupefactos. Nami y Zoro solo levantaron la ceja de la izquierda, buscando respuestas.
Una risa en particular fue lo que hizo que el pelinegro se parara en seco. Una mujer, la risa refinada de una mujer. Girando levemente la cabeza encuentra a la belleza personificada; -según sus palabras- cabello pelinegro, ojos verdes-azulados, figura de un reloj de arena, labios finos con un toque de labial rosado, escote obscuro, shorts celestes que combinan con sus ojos. Sus pómulos son rojo vivo con solo contemplarla.
- Hermosa... - Suspiró. Era la palabra ideal para esa bella mujer. De un momento a otro siente un golpe en la cabeza. - ¡Merde! - Maulló de dolor - ¡¿Pero qué carajo?!
El rubio de la tripulación baja su pierna con gracia. - ¡NO TE MERECES MIRAR A LA BELLA ROBIN-CHWAAN! ¡NIÑO BASTARDO! - Grita de golpe y apretando los dientes, matando con la mirada al intruso. Ese mismo no dejó intimidar y copia la mueca de del más alto.
El más joven gruñe, mirándolo con cólera. Luffy se estaba riendo fuerte junto a Franky y Brook, no se veía que fuera un mal muchacho. Chopper y Usopp estaban asustados por esa poderosa patada que no hizo más que un chichón pequeño en la cabeza del chico. Robin y Jinbei sonreían, Nami suelta un suspiro cansado y Zoro... Tenía un altas ganas de tomar.
- Al punto, ¿quién eres? - Exclama Nami, con sus brazos a las caderas en forma de jarra.
El pelinegro voltea tocándose el golpe reciente en la cabeza y vuelve a admirar a otra bella mujer, pero esta vez, siente que su cara es conocida. Su sonrojo bajo un poco, no duda que es hermosa, pero una duda en él crecía. Tampoco hiba a dejar a una dama con la palabra en la boca.
Con algo de esfuerzo y elegancia añadida, se levanta del suelo. Se sacude un poco su saco y pantalón de vestir y hace una reverencia dónde el brazo derecho toca la parte izquierda de su pecho. - Soy un sous-chef del Barati. Mi nombre es Sanju. Al servicio de todas las ladys et mon amis. - Se reincorpora brindando una sonrisa amable a la navegante y volteando su cabeza para sonreírle de igual manera Robin, pero de forma más coqueta.
- Bueno... - Con la mano en la barbilla Usopp da su opinión. - Te vez bastante joven. ¿Qué edad tienes? - Su curiosidad aumenta.
- Hace un mes cumplí dieciséis años.
- ¡Tienes casi mi edad! Yo soy un año mayor que tú. - Exclama Chopper con eufória, acercándose al joven intruso.
- ¿Dijiste Barati? - Tuvo un shock inicial con esa palabra. "¿El viejo buscó más empleados? Supongo que la edad le está afectando a ese cascarrabias. Simplemente no puedo creerlo." - ¿Desde cuándo trabajas ahí?
- Trabajo desde que tengo ocho años. - Ladea su cabeza. No entiende nada.
- ¡¿Ha?! ¿Me estás tomando el pelo? - Poniendo sus manos en los bolsillos tratado de relajarse, con una vena en la frente - Yo salí de ahí hace un par de años. - Lo mira con serenidad, como buscando una mentira en sus ojos.
El chico solo tenía sus ojos puestos en él, analizándolo. Cómo lo hizo con Luffy, Nami, Usopp y Zoro -conocería ese color de cabello a kilómetros- por ser las únicas caras que siente haberlas visto. Dió un paso adelante sin cortar la competencia de miradas.
- ¿Qué están haciendo? - Pregunta la navegante, están así casi un minuto.
- ¡Sh, Nami! - dice Usopp con un dedo en sus propios labios indicándole que guarde silencio. - ¡Esto es una batalla! - La misma mano que posó sus labios, lo ha convertido en un puño.
Nami no pudo evitar darle un puñetazo.
- ¡Usopp! - Da un gritillo Chopper al ver a su amigo en el suelo.
Brook, tomando un buen té de, quién sabe dónde.
Jinbei está estupefacto de la escena dónde golpean a Usopp que presenció estando detrás de ellos.
Zoro fue a buscar sake.
Franky a revisar el motor del barco, por cualquier cosa.
Luffy se reía ahora de Usopp.
Robin observa a dos cocineros, dándose cuenta de sus movimientos. Son parecidos...
- Disculpen, pero quiero saber sus nombres. - Habla de repente. - Si no es molestia para las damas - Haciendo una reverencia.
El primero que inició fue- ¡MI NOMBRE ES MONKEY D. LUFFY! ¡ EL FUTURO REY DE LOS PIRATAS! - Terminando de presentarse con un risa, característico de él.
- El gran Dios Usopp, el valiente guerrero del mar. - Con una mano en la cabeza por el reciente golpe.
Ahí es cuando el niño abre los ojos a más no poder.
- Chopper, médico.- Mirándolo emocionado.
- Nami, navegante de esta banda de idiotas. - Dando una sonrisa amplia y segura.
- Robin - Sonriendo también, teniendo una idea de que sucede en este barco.
- Jinbei - cruzándose de brazos.
- Brook, músico. - tomando una taza de té.
- Sanji. - sacando un cigarrillo, mirando al niño con determinación. Prende su vicio y lo lleva a los labios. - Ex-sous chef del Barati y actual cocinero de la tripulación.
- ¿Qué? - Estaba estupefacto, impresionado y nervioso. ¿Qué año es este? Porqué después de toda esa información, está totalmente mareado y con un pánico qué trata de disimular. Después de tratar de que no le tiemblen las piernas y respirar, balbucea - Gracias... E- Esto, sé que suena repentino, pero... ¿Me prestan su baño?
Chopper no tarda en ofrecerse, lo guía al baño de chicos y espera en la puerta -esto último indicado por Nami-, por si escapa.
Una vez dentro, su espalda se apoya a la pared de la habitación y se derrumbó. Su mano viaja a su boca ocultándose y de paso haciendo que un posible grito no salga de ahí .
Dios... ¿¡Estoy en el pasado!?
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[5:00 am. Lunes 6 de may. 2024]
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