Oyakoshipping [III]
"Todo va a estar bien."
[...]
Observa con emoción el mar que va y viene, el silencio a su alrededor, la tranquilidad de los Pokémon de tipo agua moviéndose por todas partes, puede sentir, casi al instante, como un peso que no había notado se desvanece de sus hombros, sintiéndose más ligero que antes y finalmente capaz de caminar menos encorvado, como si hubiera tenido un problema, pero nunca lo hubiera notado.
O realmente lo vio, pero prefirió fingir que no para estar ligeramente más tranquilo de lo que estaría con aquel conocimiento.
—¿Te gusta?
Se gira levemente para ver a un hombre adulto, mucho mayor que él, caminar hasta ponerse a su lado, antes de pasar un brazo por encima de su hombro y acercarlo a su pecho, de lejos, mucha gente podría decir que eran padre e hijo, de no ser por la manera tan intensa que se miraban mutuamente, podrían haber intentado mantener aquella farsa, pero, no es como si realmente la necesitaran, estaban ya tan acostumbrados a ser mal vistos por la gente, la sociedad en sí, que preferían simplemente pasar de ellos. Si hicieran todo lo posible por hacerlos felices, entonces, ¿Dónde quedaría su felicidad?
—Me encanta, ¿Cómo conseguiste este lugar?
—Hable con unos conocidos, y me ayudaron un poco.
Regresa su mirada hacia el mar, antes de volver a echarle un vistazo a todo en general, no hay gente afuera y las pocas casas a su alrededor casi no tienen ventanas en cada uno de sus lados, por lo que no tienen que preocuparse de ser vistos o señalados, sin duda alguna, Pacifidlog Town era un muy buen lugar para vivir, sobre todo para ellos dos, que no eran conocidos y mucho menos tenían intención alguna de darse a conocer.
—¿No tendrás problemas para llegar a tu gimnasio?
Reclina su cabeza para acomodarse contra el firme pecho del adulto, sintiendo como lentamente las olas del mar lo estaban arrullando, como si la presión que recientemente se había desvanecido hubiera sido algo que no lo dejaba dormir bien días atrás, el cambio de aire, realmente era muy agradable.
—No te preocupes por eso, Brendan.
Da un paso hacia atrás, agachándose lo suficiente como para tomar en brazos al más joven, alzándolo con facilidad y seguridad, sonriendo al ver su rostro soñoliento y la leve sonrisa que aparece de inmediato cuando se miran a los ojos, su tranquilidad y mejor semblante en cuestión de minutos, es lo único que necesita para saber que hizo bien en buscar una casa en ese lugar, la mejor decisión que podría haber tomado.
—Ven, vamos a dormir, todo va a estar bien, y cuando despiertes, seguirá así.
Dio la vuelta sobre su propio eje, sonriendo el también al sentirlo acomodarse en sus brazos, tan tranquilo. Estaba seguro, que ninguno de los dos, tendría ningún problema en llamar a este su nuevo hogar.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top