El hombre... tenía ¿miedo? ... ¡Vaya!, esa palabra jamás le había pasado por su cabeza en su vida, siempre lo tuvo todo, creció en una familia rica y su padre le heredó el negocio familiar para que hiciera con él lo que quisiera; ganándose el respeto y el amor de mucha gente, pero también el odio y envidia de mucha gente; consiguió muchas mujeres hasta encontrar matrimonio correcto y formando una familia con ella; iba a la iglesia, con amigos poderosos y ricos, una casa bonita, criados, auto del año, etcétera. Pero ahora... ¿Qué chiste tener todo esto?  

Sentado en una silla, trata de ponerse cómodo; su piel desnuda se ponía de gallina al momento de sentir el metal de nuevo, sangraba por todos lados, estaba vendado de los ojos y atado de tobillos y muñecas contra las patas del y el respaldo de la silla; tenía frío, su cuerpo temblaba, ya se había orinado dos veces ahí, y las heridas y fracturas del cuerpo se hacían más intensas; la incertidumbre y el pánico era lo único que estaba en su cabeza, y lo único que lo mantenía alerta, y lo peor, no sabía cuánto tiempo llevaba ahí; la gran pregunta de este desafortunado evento es... ¿Cómo llegó ahí?

Una noche estaba cenando con varios "compañeros" del negocio, tal vez había bebido demasiado y le que habían llevado a su casa, pero ¡qué equivocado estaba!, así de un momento a otro estaba atado a esa silla sin poder ver nada; al principio pensó que era una broma de mal gusto que le hicieron sus "compañeros", pero después de unos cuantos minutos, el hombre empezó a desesperarse y a gritar que, quien fuera que estuviera ahí, parará de una vez con esto, o si no, las consecuencias serían graves; pasaban las horas y días, y una que otra vez una persona le daba una que otra golpiza por cualquier cosa, no sabía lo que quería con exactitud, le suplicaba que le dejará ir a cambio de lo que fuera, dinero, poder, ¡NO! ¡¿Entonces qué?!, lo único que podía escuchar, era la risa histérica y excitada de aquella persona...

Sumido en sus pensamientos, quiere volverse a desvanecerse, pero ¡se escucha que abren la puerta!; el hombre chilla bajito, y empieza a temblar de nuevo con terror, por lo que seguiría después; los pasos de la persona no parecían de un calzado conjunto, más bien como si fueran chanclas...

La persona se acercó y rodeó la silla, con sus dedos finos que se encontraban bajo un guante de cuero. La persona recorrió con cautela su hombro izquierdo, después su cuello, la oreja izquierda y la cabeza. Hizo lo mismo del lado derecho, con tanta calma, suavidad y afecto que, al momento de su tocar, se le enchina la piel. La persona suelta una risa bajita al darse cuenta de la situación.  

—Por favor ya te lo dije todo— con una voz cansada y suplicante —yo no hice nada, lo juro, por favor tengo familia, mi hija, mi niña...— la persona lo detiene poniendo su dedo índice en los labios del hombre.

—¡Shhh!— se acerca a su oído derecho, el hombre podía sentir el aliento de la persona y su perfume... ¡Espera! ¿Perfume? ¿Acaso era una chica? —Eso lo hubieras pensado antes de cometer tus pecados, cariño—

El hombre estaba en lo cierto, era la voz de una chica, se escuchaba joven, y con un acento muy inusual; el hombre no puede evitar soltar unas cuantas lágrimas... ¡Golpe!, siente que le dan un puñetazo en la mandíbula, haciendo que esta se rompa, ¿cómo es posible que una chica tenga tanta fuerza para hacer eso? Era imposible; la chica, en un movimiento brusco, sujeta la cara del hombre, apretándola con una sola mano, en la mandíbula, haciendo que el dolor sea más agudo; su voz era amenazadora y áspera, transmitía rabia y asco por él.

El hombre ya no podía más y desesperado empieza a llorar y a gritar.

—¡POR FAVOR, POR FAVOR! YA DEJAME IR, NO HE HECHO NADA. TE LO SUPLICO, TE LO SUPLICO. ¡DÉJAME EN PAZ! — apenas podía gritar, tratando de no ahogarse con su sangre.

Otro golpe, y otro, y otro, y otro, el hombre no paraba de sentir golpes en toda la cara, siente como la chica se sienta encima en él, tirándolos al suelo, sin pararlo de golpear...

En su mente pasaba la última pregunta antes de que la chica acabará con este trágico final.

"¿Cómo una chica puede tener tanta fuerza?"