En 3 días mis hijos cumplían 15 años, me parecía imposible verlos crecer tan rápido. Sonreía al ver a Harper emocionada, probándose vestidos, justo ahora tenía uno de un color morado, con flores en el borde.

— Este es el indicado, mamá— dijo girándose para que la viera.

— ¿Segura?— alce una ceja.— Yo en tu lugar no sabría cuál elegir— me levanté y caminé hasta quedar a sus espaldas.— Pero con todos te ves hermosa.

— Igual a su madre— escuché esa voz detras.

Luke entraba con una amplia sonrisa. Se acercó hasta mi y me beso tiernamente, para después acercarse a Harper y besar su frente.

— Chicas, ya es hora, tenemos que irnos y preparar todo para el fin de semana— apresuró Luke mirándome con atención— Y tenemos que ir por... por cosas a casa de mis padres.

Luke era muy malo para esconder cosas y nuestros hijos eran astutos, así que sabían que teníamos sus regalos en casa de los abuelos Dunphy.

— Claro papá, descuida, fingiré que no se que irán por nuestros regalos— Harper sonrió mirando a su padre desde el espejo.

— Te lo dije— arquee una ceja y sonreí.

— Si les mencionas algo a tus hermanos, el regalo se lo daremos a Elizabeth— aseguró Luke.

Harper solo giró los ojos y se alejó a los vestidores para cambiarse el vestido, mientras tanto Luke tomaba asiento en el amplio sillón, observando a lo lejos los vestidos de novia.

— Sabes que algún día vendremos y la veremos con uno de esos, ¿verdad?— sonreí divertida.

Luke me miró sentenciaste.— ¿Bromeas? Harper no se va a casar jamás, es mi pequeña.

— ¿Lo dice el chico que se casó joven?— me acerqué a él y le mostré el anillo en mi dedo.— Lo siento Dunphy, pero ella también tendrá novio algún día.

— ¿Ahora usa eso contra mi, Sra. Dunphy?— siendo más rápido me tomo del brazo, haciendo que cayera sentada en su regazo.

Lo mire con atención, y lo bese tiernamente.— Si, lo hago— dije en el acto.

Un sonido de asco nos interrumpió.— ¡Por dios! Esto me recuerda al día que los sorprendimos con un desayuno en su aniversario y...— levanté mi mano interrumpiendo a Harper.

— Todos acordamos olvidar ese tema, Harper Dunphy— dijo Luke con rapidez.

📹 Luke y _____

— Bueno, al parecer también tuve el mismo problema y situación inolvidable, como lo tuve con mis hermanas y mis padres— comentó Luke soltando un suspiro.

— Es por eso que ahora la puerta de la habitación tiene 3 cerrojos— mordí mi labio recordando apenada.

— Si, aunque lo peor... fue que los niños les contaron a mis padres y mi madre no lo dejó pasar por alto.

Asentí.— Claire se burló de nosotros durante una semana entera. Dijo que era divertido vernos en la posición que alguna vez ellos estuvieron— fruncí el ceño.— Ahora que lo pienso, fue una mala elección de palabras

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Sin más, salíamos de la tienda, en dirección a la casa, pasaríamos a dejar a Harper con Cam y Mitch, ya que Lili y Harper irían de compras con Poppy.

Frank y Cris estaban en un campamento de futbol americano y Luke y yo tendríamos la casa completamente sola.

Llegamos a la casa Tucker-Pritchett y Luke tocó el claxon, haciendo que Cam saliera de inmediato.

— ¡Déjame verlo, quiero ser el primero!— exclamó con emoción corriendo hacia el carro.

Se detuvo y miró por la ventana, pero al no encontrar nada más que a nosotros, me miró confundido para después cruzarse de brazos.

— Lo siento, Cam. Pero el vestido permanece secreto para los demás, es parte de la emoción de un quince años— justifique.

— ¿Así que tu no lo viste?— Cam arqueó una ceja— Me ofende que no me pidieras ser el planeador de la fiesta.

— Tío Cam, querías contratar payasos y a Fizbo, y papá le tiene pánico, no queremos accidentes como el de mi cumpleaños— recordó Luke años atrás.

[•••]

No muy convencido, Cam terminó por entender. Sin más dejamos a Harper y nosotros seguimos nuestro camino hasta la casa.
Luke estacionó el auto, bajamos y nos adentramos, Molly estaba recostada en el sillón, ya era algo mayor y solo dormía. Así que la dejábamos hacerlo en donde más estuviera cómoda.

— Veo que encontraste un nuevo hueco en el sillón, Molly. Chris tendrá que sentarse en otro lugar de ahora en adelante— sonreí y me acerqué a acariciar su cabeza.

Molly lamió mi mano, y se recargó un poco en mi pierna, tomé una manta junto a ella y la coloqué sobre su cuerpo.

— Sra. Dunphy— musitó Luke desde la planta alta.

— ¿Si?— me asomé por un costado de la escalera— ¿Qué pasa, Luke?.

Él se asomó y dejó caer lo que parecía ser su camisa, sonreí divertida y comencé a subir las escaleras, hasta llegar a la habitación.
Al entrar no lo vi por ningun lado, pero había un gigantesco ramo de rosas en la cama.

Mi emoción se esfumó y dejé la camisa sobre la cama.— Maldición— dije al instante.— ¿Luke, porque hay flores, olvidé nuestro aniversario?.

— No, no lo hiciste— respondió llegando por mi espalda, y abrazándome por la cintura— Hoy me dieron los resultados finales, y el cancer desapareció por completo, desde hace 1 año— dijo girándome con delicadeza hasta quedar cara a cara.

Coloqué mis manos en sus mejillas y lo bese.— Creo que literalmente puedo decir que salvaste mi vida.

— En la salud y en la enfermedad— él tomó una de mis manos y la beso.

Ambos nos miramos por unos segundos, hasta volver a unir nuestros labios en un beso. Aún éramos jóvenes, y sabía que Luke había hecho lo posible por eliminar el cancer de mi sistema, ya que a sus palabras, aun teníamos mucha vida por delante.

Luke comenzó a acariciar mi espalda por debajo de mi blusa, subió hasta quedar justo en el broche de mi sostén, el cual logro desabrochar en un parpadeo.

— Si sirvieron esas clases— reí en el acto.

— ¿Aún lo recuerdas?— me miró con una sonrisa tierna en su rostro.

Asentí y de nuevo volví a besarlo, el ambiente se tornaba cada vez más lleno de intensidad. Hasta que sin darnos cuenta, estábamos en el baño ya desnudos.
Yo estaba sentada sobre la base de marmol junto al lavamanos, Luke besaba mi cuello, mientras con sus manos acariciaba mis pechos.
Baje mi mano hasta llegar a su miembro, el cual estaba erecto y palpitante. Comencé a moverlo, haciendo que Luke soltara pequeños jadeos en mi oído.

— No me tortures mas— pidió con la respiración agitada.

— ¿Qué esperas?— dije mirándolo fijamente.

Con firmeza, me tomó de los glúteos, acercándome más a él, pero sin levantarme del mármol. Yo aún permanecía sentada, mientras que él estaba parado frente a mi, con la altura perfecta para que pudiera introducir su miembro dentro de mi.
Sentí su gran tamaño entrar, aún después de tanto, no me acostumbraba, rasguñé un poco su espalda, mientras que él me comenzaba a dar embestidas lentas, pero fuertes.

— ¿Quieres que me detenga y...— negué y lo tomé de la barbilla para besarlo.

— Estoy bien— susurre en el acto.

Él asintió y siguió, aumentando cada vez más su ritmo, haciéndome retorcerme del placer. Haciéndome recordar cada momento como la primera vez.

[•••]

Dentro de la bañera, estaba recostada boca arriba en el pecho de Luke, mientras el acariciaba mi abdomen y de vez en cuando me besaba se agachaba para besar mi frente.

— Fue un buen día— dije por lo bajo.

— Así es. Los niños estarán felices de saber la noticia— afirmó Luke.

Algún tiempo después, Luke y yo nos dispusimos a ver películas, estábamos recostados en la cama, cuando escuchamos la puerta de la casa, y a los chicos hablar y reír. Chris y Frank al parecer ya habían vuelto y justo a tiempo que Harper.

Luke y yo nos levantamos de la cama y decidimos bajar  para darles la noticia. Escuchábamos sus voces, hasta que al bajar las escaleras, nos dimos cuenta del silencio. Ellos estaban de espaldas a nosotros. Mirando en la sala.

— ¿Chicos?— los llamo Luke. Sin respuesta, Harper se giró y corrió a los brazos de Luke, con los ojos ya envueltos en llanto.

Mire confundida, camine hasta la sala, y me paré junto a mis dos hijos, viendo la escena.

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Luke abrazaba a Harper, mientras que yo era consolada por mis dos hijos, sostenía la pequeña caja de madera que ahora con letras doradas, se adornaba con el nombre de "Molly".

La coloqué sobre la chimenea de la sala, y limpié un par de lágrimas. Todos nos unimos en un abrazo, observando las ahora cenizas de Molly, mientras que a un lado de ellas, estaba una foto, la primera que tomamos de ella con los 3 pequeños Dunphy recién nacidos.

— Estará bien aquí, era su lugar favorito, ¿verdad mamá?— Chris me miró con los ojos algo cristalizados.

— Si, aquí estará bien— bese su frente y mire a Luke por sobre la cabeza de Chris. Él me miró también y me regaló una sonrisa reconfortante.