Me alegro de que Haru y yo seamos amigas, es bueno de vez en cuando juntarnos y tener conversaciones de chicas. Quiero decir, ya no me molesta en absoluto que Legosi la haya elegido a ella, después de todo comprendí que lo que sentía por él no era realmente amor, y se nota que ellos se quieren de verdad.

A mí me gusta alguien más, aunque sé que él no siente lo mismo por mí, y eso me entristece. Pero no es momento de pensar en eso, no cuando me dirijo a ayudar a mi nueva amiga.

- ¡Llegué! Perdón por la tardanza –

- ¡Juno! Descuida, no esperamos mucho – Haru me sonrió detrás de su bastidor. Aún me preguntaba por qué decidió unirse al club de pintura, creí que estaba feliz en el de jardinería. Legosi me saludó mientras preparaba el lugar en donde posaría yo, y Louis...

- ¿L-Louis sempai? ¿Qué haces aquí? – tal vez soné descortés al preguntar eso, pero me superaba el asombro. Él estaba igual de extrañado que yo.

-Vine a ayudar a Haru ¿qué haces tú aquí? -

- ¡Yo vine a ayudar a Haru! ¡Ella me pidió que posara para ella! –

- ¿Qué? ¡Eso no puede ser porque ella me pidió a mi que posara! –

Ambos miramos a la coneja que parecía reírse de nosotros. Legosi no estaba sorprendido, más bien parecía que ya sabía que esto sucedería.

-Calma, calma, ambos van a posar para mí- Dijo Haru con una sonrisa y pose bastante orgullosa.

-Dijiste que me necesitabas para pintarme porque me considerabas muy hermosa... - me señalé a mi misma mientras hacía un puchero, me sentí tan adulada que no pude evitar aceptarlo en ese momento.

-Ya veo, entonces nos dijo lo mismo a ambos... - Louis se cruzó de brazos ante eso.

-Pues no mentí, ambos son hermosos, por eso les pedí ayuda. Ahora posen juntos para mí- señaló la coneja con autoridad. Ambos nos miramos y volvimos a ver a la coneja. - ¿Qué esperan? Acomódense, quiero una pose que refleje algo romántico- dio aplausos para apresurados, pero ambos quedamos estáticos intentando reaccionar a lo que nos pedía.

- ¡¿QUÉ?!-

- ¡¿Estas bromeado?!-

-Quiero dibujar a una pareja interespecie y bonita, y me dibujaría con Legosi pero eso es imposible, y como ustedes son herbívoro con carnívoro y ambos son atractivos quiero que posen de esa forma – Se explicó Haru con poca paciencia. Legosi sacude un poco su cola al escuchar a Haru, seguro por decir que ellos son una pareja bonita. -Vamos, ustedes son actores ¿No? Actúen profesionalmente –

No me atreví a ver a Louis, estaba muy avergonzada de esa situación. Al final ambos accedimos, se lo habíamos prometido y Haru necesitaba pintar ese cuadro para un examen importante, no pudimos negarnos a ayudarle.

Louis estaba con el torso desnudo, apenas cubierto con una tela que Legosi le colocó una vez que se posicionó en la base. Yo tenía una toga femenina y tenía que posicionarme frente a Louis. Hasta mi cola tenía que estar en una posición que Haru elegía.

-No me convence del todo... -Comenta Haru.

-Tienes razón, no parecen pareja romántica... más bien parecen disgustados el uno del otro- responde Legosi, conociéndolo seguro lo decía sin intención de ofender, más bien de una manera analítica.

Sólo pude desesperarme por dentro mientras mi corazón se aceleraba y mi rostro enrojecía. ¿Por qué me hacían estar en esta posición con el animal que me gustaba? Parecía como si lo hicieran a propósito para torturarme. Ni siquiera rompía su espacio personal y me avergonzaba desde esa poca cercanía.

-Juno, acércate más a Louis y mírense a los ojos, como si de dos amantes prohibidos se tratasen – Bajo la dirección de Haru obedecí y ambos nos miramos. Pude verlo en sus ojos, el tampoco estaba cómodo con eso. - ¿Sólo eso? Vamos, ustedes pueden hacerlo mejor, no siento el romance que debería inspirar esta escena – presionaba nuestra amiga.

Note un rastro de molestia en Louis pero desapareció antes de acercarse más a mí.

Estaba muy nerviosa y temblaba sobre mis brazos, no supe cuanto iba a aguantar en esa posición. Tan cerca de él que me robaba el aliento, y mi corazón pedía a gritos un poco de piedad.

-Oh cielos me encanta tu sonrojo Juno, le da más detalle a la escena -Comenta Haru y casi quiero asesinarla por delatarme. Pude notar una pequeña sombra de sonrisa en Louis y me estaba a punto de morir de la vergüenza.

- La posición de Juno se ve inestable, no podrá aguantar ni veinte minutos -Observa Legosi.

-Tienes razón... - Haru para de bocetar y lo medita un momento. – Juno, acomódate en el pecho de Louis –

Eso era el colmo. Ambos salimos de nuestra pose para dedicarle una mirada incrédula a la coneja enana.

-¡¡¿Qué?!!-

-Salvo que quieras acalambrarte los brazos, necesito al menos 20 minutos para dibujarlos...- Su forma tan despreocupada para decirlo me ponía los pelos de punta. ¿No sentía ni un poco de empatía por mi?

-Da igual, apóyate - Me dio permiso Louis, sin mirarme a los ojos. Parecía molesto, y no me extrañaba, ninguno de los dos sabía que terminaríamos de esta manera al aceptar ayudar a nuestra amiga.

- Lo siento- me disculpe con voz bajita mientras apoyaba suavemente mi perfil contra su pecho y me acomodaba con una mano en su pectoral frente a mí. La mano derecha de Louis se apoyó entre mis rizos y no pude evitar ponerme mas nerviosa. Estaba mal que una parte de mí disfrutase esto, porque de todas maneras me daba esperanzas que no servirían más que lastimarme. Pude ver a Haru maravillarse ante nuestra pose y pidió que aguantaremos así.

Perdí la noción del tiempo en el que llevabamos quietos de esa manera. Nuestros cuerpos juntaron un calor suficiente para no tener frío con esas pocas prendas. Como lo supuse comencé a sentir calambres en distintas partes del cuerpo, pero lo que me llamaba más la atención era escuchar los latidos de Louis en primera fila, ¿siempre latía así de fuerte el corazón de un siervo? Ni siquiera la conversación de Haru y Legosi me distraían.

Olía a su perfume caro pero ligero, no de esos que me pican la nariz con solo olerlo. Debía admitirlo, me gustaba estar así con él, y quería aprovechar ese momento e imaginar que no lo hacíamos porque ayudábamos a una amiga en común, imaginar que nuestro amor no era unilateral, imaginar que estaba bien que estemos juntos, que no había problemas con eso.

Ilusionarme de esa manera me daban ganas de sacudir la cola, pero debía contenerme y fingir indiferencia.

-Solo un poco más, aguanten muchachos – Avisó Legosi, quien en todo ese tiempo se mantuvo al lado de Haru como su asistente personal.

Sí, me dolía la posición, pero más me dolía saber que faltaba poco para separarnos. Ya me había acostumbrado a su calor y no quería extrañarlo. Quería seguir escuchando su corazón y no perderme ningún latido, quería quedarme en su calor y no volver a sentir frío.

Cómo dolía el amor.

- ¡Listo! Ya pueden estirarse- avisó Haru sin quitar la mirada en su bastidor y seguir dando pinceladas. Suspiré y me levanté lentamente, Louis me soltó y por su parte se estiró los músculos. Lo vi de reojo, me preguntaba si no le daban ganas de verme, pero dejé de verlo cuando caí en cuenta en que claramente no quería.

- ¿Puedo ver cómo quedamos? – Pregunté con un poco de emoción a verme en un cuadro, ser pintada por alguien más era algo interesante, eso era lo que me animó a participar como modelo vivo. Sin embargo, Haru se puso nerviosa y negó con la cabeza.

- ¿Por qué no? Luego de hacernos esto mínimo podrías mostrarnos como nos dibujaste- reclamó Louis tranquilamente.

- Aun le falta unos retoques – Responde ella.

- ¿Pero Legosi lo puede ver? - infle las mejillas indignada.

- ¡Es que yo no estoy en el cuadro! – Se defendió Legosi y Haru asintió de acuerdo.

-Como sea... - Responde Louis mientras se levanta.

-Vayan a cambiarse mientras tanto, o van a pillar un resfriado – Dice Legosi y ambos asentimos.

Es raro que en un momento simulemos ser una pareja romántica y en otro momento somos dos actores volviendo a la normalidad, yendo a cambiarse de ropa.

-Otra vez lo siento, Louis-sempai – le dije. – No se si fui muy pesada y rompí tu espacio personal... de seguro estabas muy incómodo... - Le dije cuando salimos de cambiarnos a nuestras ropas normales.

- No te preocupes... creo que la que estaba más incómoda eras tú- Me miró y mi corazón latió cuando lo vi sonreír. Era entendible el por qué tenía tantas fanáticas a sus espaldas, aunque no quería unirme a ellas, tengo que tener dignidad con mi sempai.

- ¡Para nada! Volvería a hacerlo – solté sin pensarlo dos veces. Allá iba mi dignidad. Cuando caí en cuenta me tapé la boca con ambas manos. La mirada atenta de Louis estaba sobre mi y yo no sabía que decir para no verme rara. – Quiero decir que... estuvo bien, no me molestó tu cercanía... - intenté sonreír mientras analizaba mis propias palabras, esperando haber sonado normal. -Creo a ti si te molesto ¿cierto? Tu corazón latía con fuerza, de seguro te incomodé mucho – Comenté cuando Louis no respondía nada. Luego de decir eso su mirada se agrando, quiso decir algo, pero se arrepintió antes de tiempo y tosió.

- No, bueno yo... es porque no acostumbro tener un carnívoro tan cerca de mí, ya sabes, instintos de supervivencia- Aclaró él sin volver a mirarme. Yo me desanimé un poco, pero asentí para demostrar que comprendía. – Pero estuviste bien como modelo vivo ¿ya lo hiciste antes? – volvió a mirarme, pero yo ya me había desanimado.

- No – cielos, fui muy cortante.

Espero que no se note que esperaba algo distinto. No quería pensar en que los latidos de Louis sempai eran de miedo más que de amor, pero era la realidad, y mi humor ahora era tan dura como la misma.

-Ya veo... - Louis pareció desanimarse también con mi respuesta corta. Supuse que esa era el final de la conversación. – Que pena que Haru no nos haya dejado ver el resultado- al notar que seguía hablándome lo miré, el desvío la mirada de mí en ese mismo momento. – Digo, me hubiese gustado ver como quedamos... -

¿Por qué me decía eso? ¿Por qué seguía nervioso en mi presencia? ¿Aún me tenía miedo? ¿Acaso tan interesado estaba en vernos juntos y en esa pose? ¿Sientes algo por mí, Louis sempai?

Me acerqué lentamente a él, cuando me sintió volteó a verme y conectamos miradas. Respiramos nuestros alientos, y mi corazón me dictaba que me acercase más a él, hasta que no hubiese distancia entre nuestras bocas. Pero mi cerebro me decía que deje de humillarme y me retire antes de salir más herida. Y esta vez quise hacerle caso a mi cerebro, pero algo me detuvo.

Las manos de Louis me sujetaron del rostro y le mire asombrada.

-Lo sien...- quise disculparme, pero él me interrumpió con un beso corto en los labios.

Nos volvimos a ver y nos volvimos a besar, está vez por más tiempo y acercándonos más entre nosotros. Le abrace y él me correspondió, acarició mi espalda mientras movía sus labios contra los míos, yo estaba encantada ante su habilidad besando y me quitaba el aliento. Una sensación satisfactoria recorrió por todo mi cuerpo, no quería que parase, prefería ahogarme en sus labios antes que me dejase. Por eso, cuando se separó buscando aire, no pude evitar soltar su nombre de una manera suave y baja. Pero aun no había acabado.

Él me presionó contra la pared, sin lastimarme, pero provocando que mi emoción aumentará mientras me acariciaba y seguía besándome de esa forma apasionada. Me sentí tan amada, ¿Cuánto amor estaba conteniendo Louis sempai de mí? Algo me decía que no iba a saberlo, no esa tarde.

Otra vez se detuvo, está vez por más tiempo, respirando agitado, yo también lo estaba. Nos miramos otra vez, se veía tan asombrado al verme, me preguntaba como me veía yo ante sus ojos, sentí mis párpados cansados, pero no deje de mirarle.

-Estoy enamorada de ti, Louis sempai... - no había razón para decirlo en un volumen más alto, el podía escucharme perfectamente a esa corta distancia.

El parecía procesar mi declaración. Pensó un momento en qué responder cuando de repente escuchamos un grupo de animales acercándose a dónde estábamos. Tuvimos tiempo suficiente para separarnos y fingir que no acabamos de besarnos con pasión.

-Oh, Louis – saludó uno de ellos, al reconocerme del club de teatro creyeron que acabábamos de ensayar. 

Mientras hablaban con él, yo aproveché para huir, no quería que me dijese que no podíamos estar juntos o que sólo me besó porque quería probarme.

Días antes...

-Te lo aseguro, Legosi, Louis está enamorado – Haru sonrió con malicia antes de llevar su vaso lleno a la boca.

- ¿Cómo lo sabes? - preguntó curioso el lobo.

- Se distrae con facilidad cuando su enamorada aparece, habla mucho y no permite terminar el tema de conversación, se le nota en sus ojos... vamos, no me digas que no lo notas... -

- No, no suelo notar esas cosas... - se encogió de hombros. – Supongo que mala suerte para Juno – comentó para sí mismo, pero Haru lo escuchó perfectamente.

- ¡¿Juno gusta de Louis?!- grito lo más bajo posible. Legosi se asustó y comenzó a negarlo.

-Ella no me dijo directamente, pero a veces sí se le escapa algo así respecto...-

- Legosi ¿No sabes de quién está enamorado Louis? – Haru le miró con los ojos grandes. El lobo lo pensó y negó apenado. - ¡Tonto! ¡Le gusta Juno! ¡Y Juno gusta de el! – exclamó alzando los brazos y sujetando de su cabeza. Legosi se asombró ante ese hecho.

Ambos tomaron de sus bebidas en un momento silencioso de reflexión.

-Ya veo... ¿Pero por qué no se llevan bien? –

- Louis es complicado... de seguro no quiere aceptar que le gusta un animal de otra especie, y mucho menos una carnívora...- Haru frunció el ceño recordando lo denso que era cuando ellos salían a escondidas. -Hay que darles un empujón... - Sonrió ampliamente.

Fue entonces que la coneja enana planificó su idea para emparejar a sus dos amigos, con la ayuda y el apoyo del lobo gris. Fingió unirse al club de pintura y con ayuda de Legosi convenció que le prestasen el aula y algunos instrumentos de la misma. Luego le contó a Louis y a Juno que se unió al club de pintura y que ya había pintado muchos cuadros.

Tiempo después daría a pie su plan de invitarlos a posar para ella.

Haru suspiró mientras veía el cuadro que pintó. Pues sí, había pintado a Juno y a Louis en esa posición, pero le faltaban unos toques.

-Haru, pintas muy bonito – Comenta Legosi una vez los modelos se retiraron.

-Gracias, estuve practicando para que la mentira sea más creíble... -vuelve a suspirar. – Pero ¿crees que haya valido la pena? –

-Desde aquí pude olfatear la vergüenza y nerviosismo de Juno, pero fue difícil de notar algo en Louis... - Dice en voz baja por si los otros dos tuviesen oportunidad de escucharlos.

-Conozco a Louis y podría decir que estaba dando su mayor esfuerzo para ocultar su verdadera expresión... ¿cuál sería? Esa es la pregunta... - Le da otras pinceladas a su cuadro. – Me pregunto si logramos darles el empujón que necesitaban... -

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N/A: Ya sé que no es la gran cosa pero me inspiré en el fanart que está de portada (en realidad es más grande la imagen pero para que entrara tuve que cortarla) y simplemente lo escribí u.u

En algún futuro escribiré más sobre ellos y con más seriedad...? En fin, Espero que les haya gustado! gracias por leer~