13. Imparable ♡


[advertencia]
mención de abuso/explotación laboral.
si esto puede traerte malos recuerdos, por favor, lee con mucho cuidado. 🩷

˙ ̟


noviembre 1, 2023

el sonido de mis tacones al golpear el suelo suena más fuerte de lo que debería. los ecos retumban en mi pecho, cada paso acercándome más al escenario que han armado especialmente para esta ocasión, nuestra primera presentación frente a todos los CEOs del conglomerado. mi respiración se vuelve irregular, mis palmas sudan a pesar de haberme asegurado de que mi maquillaje estuviera perfectamente intacto antes de salir. todo es parte de este momento: la tensión, el nerviosismo, la presión de estar aquí, de hacer bien las cosas, de finalmente mostrarme como quiero, cuando quiero.

me detengo un momento antes de atravesar la cortina, y me miro en el espejo lateral. tacones altos, la falda ajustada, y el top que hace que mi figura se curve de manera que me hace sentir linda. hay algo diferente hoy. hoy no me siento como la chica que siempre se oculta detrás de la imagen perfecta, la que teme ser juzgada por lo que muestra o no muestra. hoy, quiero ser quien soy realmente, lo que nunca me he atrevido a ver: poderosa, sensual, atractiva. para mí misma. quiero sentirme guapa, quiero creerlo.

con el corazón acelerado, le doy un último vistazo a la coreografía en mi mente. los tacones negros de alto impacto me dan el aire que deseo para la presentación, un poder sutil que no quería perder. mis piernas, al estar cubiertas con la falda ceñida, se estiran con gracia mientras termino de entrar al escenario, y la luz del escenario se ilumina con mi figura cuando la música comienza a sonar.

el sonido de la pista de Drinks & Coffee llega a mis oídos, y me estremezco. la canción que compuse, mi creación, mis pensamientos reflejados en cada acorde, en cada palabra. y la coreografía, la que doori y yo hemos trabajado juntas, con su ayuda y apoyo incansables. quiero darlo todo, quiero que no haya dudas de lo que soy capaz. pero, en el fondo, hay una duda que me acecha: ¿seré suficiente para que ella me vea? ¿para que me vea como la chica que es sexy, no solo la que quiere serlo?

sí, hoy quería interpretar mi versión atractiva y sensual, la versión que quería ver para mí misma, pero, tal vez, también ante los ojos de doori.

y, wow, mi cuerpo se mueve casi sin pensar, como si cada músculo ya supiera lo que tenía que hacer. el vibrante beat llenó el aire y, al primer compás, me envolví en la coreografía que había ensayado con doori una y otra vez. quería que mis movimientos no fueran solo sensualidad pura, sino poder y libertad. al principio, todo parece simple: bajo la cabeza, bajo el cuerpo, me muevo con la suavidad de una pluma. es solo una coreografía, pero es mucho más que eso. cada movimiento de caderas, cada flexión de mis piernas, cada giro parece despojarme de todas las inseguridades que me han acompañado durante tanto tiempo... los tacones clavan el suelo con fuerza, me hacen sentir poderosa.

con una suave caída hacia el suelo, mis rodillas tocan el escenario mientras mis manos se deslizan por la falda, hacia arriba, con mis caderas comenzando a moverse con precisión, intentando que el ritmo de la canción forme parte de mi cuerpo. cada giro de mi cintura, cada paso hacia adelante, parece despojarme de la fragilidad con la que suelo percibirme. los tacones, como extensiones de mi propio ser, me ayudan a mantener la postura erguida, pero también a moverme con una elegancia que me hace sentir poderosa e imparable.

la coreografía me lleva más cerca del suelo, otra caída suave acompañada por un giro que me hace rozar la piel con la madera del escenario, un movimiento que necesitaba ser tanto seductor como controlado. mientras me deslizaba de vuelta hacia el centro del escenario, podía ver a doori desde el rabillo del ojo, aquella confidente, la chica con la que había compartido tanto en esos días... estaba detrás de los monitores, sonriéndome, teniendo esa sonrisa que solo yo conozco. estaba mirándome, y me permití un breve pero intencionado vistazo a sus ojos. eso es suficiente para recordar por qué lo estaba haciendo: por ella, para ella. para mí.

y ahí está ella, en un rincón, todavía mirándome. es como si, por un momento, el resto del mundo se desvaneciera. el miedo a los ojos del público, a los CEOs que me observan fríamente desde las sillas del fondo, desaparece. solo existimos doori y yo. en este momento, solo existe esto.

siento la presión en mi pecho y el sudor que recorre mi espalda mientras la coreografía avanza, pero no importa. me siento viva. y no solo por el baile, sino porque al mirarla a ella, sé que soy capaz de ser esa versión de mí misma que siempre he deseado ser, no solo para alguien más, sino para mí. cada deslizamiento al ritmo de la canción, refleja una verdad que ya no me importa ocultar. hay algo que nunca había sentido, un tipo de libertad que solo el escenario me puede dar. y, al mismo tiempo, me siento observada por ella, su mirada como un ancla que me mantiene en el suelo.

cuando la introducción llega a su fin, un suspiro de alivio se escapa de mis labios. de alguna manera, a pesar de estar rodeada por una audiencia de CEOs, silenciosa y en su mayoría indiferente, me siento en mi elemento. he dado todo lo tengo, he mostrado todo lo que soy. pero, a diferencia de las veces anteriores, cuando mi mente se inundaba de dudas sobre si había hecho lo suficiente, hoy creo que lo he logrado.

entonces, en el segundo acto de la presentación, el ritmo de la canción cambia a back for more de txt. los demás cuatro integrantes del grupo: xiu, dan, aestoria, aeris y la misma doori, se unen al escenario. dan, aún convaleciente de su reciente recuperación, se queda sentado en una silla, elegantemente y con el rostro serio. aunque su cuerpo se encuentra limitado, su voz, potente y decidida, corta el aire mientras el resto de nosotros tomamos posiciones. yo, ya sudada y con los tacones que comienzan a sentirse como una carga, no me permito titubear.

esta es mi oportunidad, la de demostrar que puedo seguir adelante, que puedo ofrecer más. pero yo solo quiero llegar al siguiente paso, al momento en que doori y yo bailamos juntas, cuando la canción nos brinde la oportunidad de acercarnos.

back for more sigue sonando, doori y yo intercambiamos miradas, en esa parte de la canción, nuestros cuerpos se acercan, y por un momento, podemos fingir que todo el mundo desaparece, que solo existe esa fracción de segundo donde ambas bailamos solo para nosotras mismas.

nuestras caderas se mueven al unísono. mis manos tocan suavemente sus hombros, mientras nuestros rostros se acercan. la intensidad de la mirada de doori me hace sentir capaz de derretir cualquier barrera que quede entre nosotras. el baile siendo el mismo que ensayamos, pero la conexión reforzándose. de alguna manera, en ese instante, yo dejo de ser la chica nerviosa detrás del escenario, y me convierto en alguien más fuerte.

los CEOs observan con expresión impasible. no puedo leer sus rostros, pero ya no me importa. ya no me importa que no me sonrían, que no se inmuten. lo que importa es lo que siento, lo que veo, lo que hacemos juntas en el escenario.
porque mientras sigo bailando, mientras la música me envuelve, me doy cuenta de algo que nunca había entendido: al final, no importa lo que vean los demás. lo único que importa es cómo me siento al mostrarme tal cual soy, al tener la oportunidad de ser auténtica. y hoy, por fin, me he permitido serlo.

en este instante, la mirada de doori es todo lo que necesito para seguir adelante. en este breve momento, lo tengo todo: mi voz, mi cuerpo, mi confianza. y, al finalizar la canción, la energía es palpable en el aire.

sin aliento, pero con una sonrisa en el rostro, intercambio una última mirada con doori. nadie dice una palabra, pero ambas parecemos saber que hoy, hemos logrado algo más grande que una simple presentación. nos hemos acercado.











el eco de nuestras respiraciones aún resonaba en el aire cuando la música se apagó. el final de la presentación fue abrupto, y la calma que siguió estuvo impregnada por una sensación de anticipación, un vacío que se llenó al instante con el sonido de los CEOs abandonando sus asientos.

nos miramos entre nosotros, mi corazón aún palpitando con la adrenalina de haber dado todo en el escenario.
doori y yo compartimos una mirada fugaz, un entendimiento mutuo de lo que habíamos logrado juntas.

pero sabíamos que esto no era todo. no aún.

━━━━ ustedes dos. ━━━━ la voz de bang sihyuk resonó en el aire, algo cortante y autoritaria, como si no estuviera en el mejor de los humores. ━━━━ vengan conmigo, tenemos que hablar.

el resto del grupo fue guiado hacia la sala de prácticas, en silencio, mientras seong-su, el guardaespaldas de dan, se quedaba con ellos, tal como había ocurrido otras veces. mi intuición nunca me había fallado, y por alguna razón, el silencio en su postura hoy me decía algo diferente. había algo más en su mirada, un algo que no podía identificar completamente, pero que me hacía sospechar que las cosas entre él y dan estaban a punto de dar un giro importante. algo en él me decía que pronto sería más que un guardaespaldas para dan, más que un simple protector.

desistí de mis pensamientos cuando doori me dio una ligera palmada en el hombro antes de que nos dirigiéramos al despacho del CEO. yo, por mi parte, intentaba no pensar en las sensaciones de incomodidad que se apoderaban de mi pecho al pensar en lo que nos esperaba: una charla con ellos, los altos mandos de la compañía, el juicio que siempre sentí pesando sobre mí.

me sentía como si estuviera en el borde de un precipicio, lista para dar un paso, pero sin saber si caería o volaría.

la oficina seguía estando fría, moderna, de un blanco inmaculado, casi asfixiante en su pulcritud. los CEOs estaban allí, de pie, detrás de sus escritorios, con la misma expresión engañosamente tranquila que siempre mostraban. observaban, fingiendo no juzgar, pero sus ojos eran afilados, atentos a cada movimiento, cada palabra.

sihyuk fue quien levantó la mirada, y me hizo un gesto con la mano para que tomara asiento junto a doori. ━━━━ han hecho un buen trabajo.━━━━ comenzó, su tono era de aprobación, pero no dejaba de ser distante. ━━━━ pero antes de seguir hacia adelante con el proyecto, necesitamos hablar de un nuevo cambio en el grupo.

mi corazón dio un vuelco. sabía que algo estaba por venir. algo que quizá no todos estábamos listos para escuchar.

━━━━ como saben... ━━━━ continuó ━━━━. dan ha estado enfrentando dificultades con su recuperación. lamentablemente, no podemos permitirnos perder su talento, pero entendemos que la situación lo pone en una posición difícil. por eso hemos decidido... agregar a un nuevo elemento al grupo.

por largos segundos, él miró hacia la ceo de ADOR, con una complicidad raramente vista entre ellos.

mis dedos se apretaron sobre la tela de mi falda. la nueva adición. el rumor que había estado circulando entre las paredes de la empresa durante semanas, pero que hasta ahora nunca había sido confirmado. bang chung-ae. el chico de pelo azul que todos decían que era el próximo en reemplazar a dan.

a pesar de las sonrisas y palabras discretas que el CEO usaba, la noticia se sentía como otro intento del hombre para contentar a min hee-jin.

━━━━ bang chung-ae es el nuevo miembro. ━━━━ agregó el ceo de belift, finalmente, con su voz grave y calculadora. ━━━━ estará con ustedes a partir de ahora. la CEO min lo traerá para presentarles el nuevo ajuste.

mi mente comenzó a girar, tratando de procesar todo lo que acababa de escuchar.

¿era esto lo que realmente necesitábamos? aún podía ver la imagen de dan, con su silla de ruedas, luchando por seguir siendo parte del grupo.

¿qué significaba esto para él?

no pude evitar mirar a doori, quien había guardado silencio hasta ese momento. su rostro mostraba una expresión que no pude leer, pero que sentí reflejaba una mezcla de desconcierto y una sutil preocupación. era la misma que sentía yo, pero mi propio temor me impedía expresarlo abiertamente.

mientras la noticia de la nueva adición al grupo retumbaba en mi mente, algo más se empezaba a formar en mi interior. la calma exterior que mantenía mientras escuchaba al CEO hablar de bang chung-ae era solo una fachada. por dentro, sentía que algo se estaba quebrando. pero no era por esa nueva adición.

lo que más me hacía sentir una mezcla de ansiedad y desconcierto era la forma en que la empresa manejaba todo. esta frialdad calculadora, como si fuéramos piezas en un tablero de ajedrez, movimientos estratégicos que no tomaban en cuenta nada más que el "avance" del conglomerado. no podía evitarlo: todo esto me hacía sentir incómoda, como si no importáramos en realidad. como si, para ellos, solo fuéramos algo para comercializar, algo que ajustar, cambiar, sustituir cuando ya no encajábamos en el molde que ellos habían creado.

la información que dan me había compartido días atrás se filtraba en mi mente con fuerza. su guardia, seong-su, no solía hablar mucho, pero cuando lo hacía, su mirada siempre parecía cargar con algo más, algo que no decía en voz alta, pero que transmitía en gestos. esa vez, en una conversación con dan, este había revelado algo que me dejó helada. algo que la empresa hacía en las sombras, que no solo afectaba a los trainees, sino a todos los artistas bajo su ala.

"esto no ha salido a la luz, pero están creando reportes semanales," me había dicho dan, con un dejo de desconfianza en su voz.

"reportes diseñados para sabotear a otros artistas y compañías. reúnen información privada, datos sobre la vida personal de los artistas, sus relaciones, sus debilidades... y luego la usan para jugar sucio."

las palabras seguían resonando en mi cabeza. esa noche, dan no estaba solo preocupado por su propia situación, sino por lo que sabía que la empresa podía hacer para arruinar la vida de otros, de cualquier otro, en cualquier momento. los documentos decían que incluso se encargaban de crear tácticas de marketing viral para destruir la reputación de quienes no se alineaban completamente con sus intereses. estaba claro que la imagen que proyectaban sobre nosotros no era una verdad absoluta, sino una construcción basada en lo que les convenía, lo que querían mostrar al mundo. y, lo peor de todo: sabían exactamente qué palabras, qué gestos usar, qué fotos difundir, para destrozar las carreras de aquellos que ya no servían a sus intereses.

la idea de que pudieran estar haciendo esto de manera sistemática me enervaba. ¿qué no podían hacer con nosotros? sabía que no éramos inmunes, que podíamos ser reemplazados en cualquier momento, y que nuestros esfuerzos, nuestro sudor, no significaban nada para ellos más allá de lo que podíamos aportar a sus bolsillos. me enojaba, me irritaba profundamente pensar que las personas no éramos vistas como seres humanos, con sueños, con miedos, sino como productos. y mientras pensaba en todo esto, no pude evitar preguntarme si, en algún momento, crearían un documento sobre mí, sobre mi físico, sobre mi trabajo, uno que me haría parecer menos de lo que soy.

¿cómo sabía que no harían lo mismo con mi grupo? ¿nos estaban observando solo para encontrar nuestra próxima debilidad?

el simple hecho de que pudieran tener informes sobre el esfuerzo físico, la fatiga, las imperfecciones de cada uno de nosotros... eso no solo me molestaba, me llenaba de un coraje reprimido. sabía que había un precio por todo esto, y el precio parecía ser nuestra humanidad.
no quería pensar que algún día estarían escribiendo sobre mí, sobre mi cuerpo, mis pasos de baile, mis decisiones, como si fueran informes fríos sobre algo que se puede desechar cuando ya no sirve.

¿qué pensaban hacer con los artistas que no se ajustaban a su visión del éxito?

todo esto me hizo sentir aún más la presión que ya arrastrábamos como futuros idols. los CEOs se sentaban ahí, con sus sonrisas frías, sus ojos calculadores, como si todo fuera un juego de estrategia. pero yo sabía que no éramos piezas de ajedrez, no éramos solo fichas que se movían de aquí para allá para alcanzar la victoria. éramos personas.

y con esa idea, mi furia se intensificó. no podía permitir que nos viéramos como simples herramientas en su maquinaria. no podía ser que nuestro esfuerzo se redujera a meras estadísticas en una hoja de papel, en un reporte sobre lo que no éramos. si alguna vez me llegaban a hacer un informe, no podía ser uno que me etiquetara como la chica que no tiene el cuerpo perfecto, que no cumple con las expectativas. no podía ser eso. no mientras pudiera hacer algo al respecto.

tomé una decisión, en silencio, dentro de mí misma. no los dejaría ganar. no importaba cuánto me presionaran, cuánto me intentaran moldear. iba a seguir siendo la persona que quería ser, sin importar los informes que pudieran escribir sobre mí.

sentí un nudo en el estómago. no solo por dan, sino por todos nosotros. incluso por el chico nuevo. perfectamente podríamos estar al borde de ser simplemente números en una hoja.
pero no iba a dejar que eso sucediera. no lo permitiría.

la reunión terminó sin muchas palabras adicionales. sihyuk apenas dijo algo más, algo sobre esperar la llegada de chung-ae y las posibles adaptaciones que debíamos hacer como grupo.

al salir de la oficina, mi mente no dejaba de dar vueltas alrededor de la noticia. había demasiadas emociones mezcladas: no solo miedo por lo que vendría, sino una extraña sensación incomodidad. de repente, siendo muy consciente de éramos observados y evaluados constantemente.

cuando llegamos a la sala de prácticas y vimos a los demás, la atmósfera era densa. dan estaba sentado en su silla, su rostro inexpresivo pero sus ojos delataban lo que sentía: desilusión. lo vi y pude sentir su angustia. el miedo de ser reemplazado, el miedo de no ser suficiente. y, aunque intentaba ocultarlo, el sentimiento de inseguridad que transmitía.

a pesar de que todos intentaban seguir adelante con la conversación, era imposible ignorar la incomodidad en el aire.

━━━━ vamos a hacer todo lo que podamos. ━━━━ dijo aeris, su tono un poco forzado, como si tratara de aliviar la tensión que nos rodeaba. pero ninguno de nosotros podía evitar la mirada de dan.

él no decía nada, pero su mirada, fija en el suelo, era todo lo que necesitábamos saber. estaba preocupado, herido, y temía lo peor. temía que su lugar en el grupo ya no fuera seguro.

así pues, cuando escuché la puerta abrirse de nuevo, volví a mirar a doori, quien, al igual que yo, estaba esperando el momento en que bang chung-ae entrara. el chico de pelo azul, el que había sido mencionado tantas veces en los rumores. lo que me esperaba me causaba una ansiedad creciente.

no confiaba fácilmente en los hombres. no desde lo que había ocurrido en el pasado, no desde lo que mi mente trataba de bloquear, pero que siempre volvía a mí con fuerza...
aun así, sabía que no podía dejar que mi miedo dictara el futuro del grupo.

por respeto a chung-ae, por respeto a mi equipo, me quedé callada. me guardé la tensión que sentía en el fondo de mi pecho, observando en silencio.

el miedo me quemaba, pero lo mantuve oculto. mi corazón estaba dividido entre mi dolor por dan y mi deseo de ser justa con este nuevo miembro, aunque aún no entendiera lo que significaba realmente su llegada. lo que sí sabía era que la atmósfera había cambiado, y no podía evitar exasperarme.

la puerta se abrió por completo, y en el umbral apareció bang chung-ae. con su cabello azul fuerte, una actitud exageradamente relajada, y una mirada que parecía decir: "en realidad, me cago de miedo".












[notita]

el bailecito de miu está inspirado en el dance cover de mushroom chocolate que hizo lalisa
(quiero hacerlo tmb)

tercera y última parte de mi regalito para mi noviecita doooorida 🩷 ♡(@'ω'@)/

chung-ae, el séptimo integrante, ya está aquí!! yayyy (Д)!!



[Aquí debería haber un GIF o video. Actualiza la aplicación ahora para visualizarlo.]



˙ ̟ !!🎀☁️



Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top