44. Paranoica

Elena

Meses después...

Soy una amargada. Bueno, nunca me he considerado una persona divertida. Aunque después de todo lo que pasó, me he vuelto peor. Papá dice que combinamos bien con Adrián, porque nos complementamos. No sé si siquiera eso es un cumplido o una burla.

Está lloviendo, alzo la mano para tocar el agua mientras con la otra sostengo mi paraguas. Unas cuadras más y me sentiré a salvo para llegar a casa. Visitar a mi amiga siempre me reconforta, pero el tramo que tengo que hacer para ir a su casa me pone intranquila.

Miro que el semáforo no cambia, y eso me inquieta, quiero cruzar la calle rápido. Me mantengo en la vereda nerviosa, esperando que no venga nadie.

Parezco paranoica.

Suspiro cuando el semáforo cambia y comienzo a caminar.

—Elena.

Esa voz.

Me detengo en la otra acera y los autos empiezan a pasar, me giro a mirar al otro lado.

¿Edel?

Estoy paranoica.

Me doy la vuelta y sigo mi camino. Aumento el paso, entonces cuando llego a casa, cierro la puerta rápido, dejo el paraguas a un costado, luego echo un suspiro al apoyar mi espalda en la entrada.

Respiro con agitación, me toco el vientre y lo acaricio.

Es enorme.

No sé qué quiero de ti, con sinceridad no me siento madre, peor si descubro si eres niño, así que le comenté al doctor que no me lo diga, no quiero saberlo.

El timbre suena y me sobresalto, me alejo de la puerta.

—¿Quién es? —pregunto nerviosa.

Nadie contesta.

—¿Hola? —insisto.

No pienso abrir, si no hay respuesta del otro lado, definitivamente no.

—Elena —Oígo esa voz otra vez.

No puede ser.

—¿Qué haces tú aquí? —le digo al reconocer su tono, pero me niego a abrir —Deberías estar en la cárcel.

—Ya salí.

Trago saliva.

—¿Qué quieres Edel?

—Hablar.

No. No. No.

Debe ser una pesadilla, otra vez no.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top