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Los jardines de la mansión lucían tan hermosos como siempre, perfecto para hacer que dos sombras se reconciliaran.
—No creo que esto de resultado, siempre se aleja de Thomas.
—Usted confíe en mi y recuerde lo que ensayamos estos días. —Emilico acicalaba el vestuario de Thomas, de paso le peinó el cabello y el bigote. Luego se apartó de él para admirarlo mejor. —Perfecto, ahora tome este ramo de peonías blancas.
—Thomas daría rosas rojas.
—Son las favoritas de Angie, mi esposo las cultiva y se encargó de escoger las más bonitas, por cierto allá está. —Patrick se encontraba presenciando la escena, Thomas volteó. —¡Saluda mi amor! —Gritó Emilico para que su esposo correspondiera, levantó leve la mano a modo de saludo. Emilico sonrió. —Es tímido. Ahora nos enfocaremos en la sombra que está leyendo tranquilamente. —Caminaron más adelante viendo a su objetivo, Emilico contó hasta tres y luego le dio un empujón. —Suerte.

Thomas miró por última vez a Emilico la cual alzaba su pulgar animándolo. Era mala idea, lo sabía pero era mejor enfrentar las cosas a que luego se arrepintiera de no haber dicho nada.

Aclaró su garganta haciendo notoria su presencia, el ramo oculto tras de sí, ella alzó la mirada y lo miró sorprendida, cerró su libro y se dispuso a levantarse. —Angie no te levantes, solo vine a hablar un poco.
Ella se volvió a sentar, con su mano llevó su cabello tras su oreja. —Bien, de acuerdo.

Emilico y Patrick se acercaron para ver el momento en que le entregaría el ramo, lo cual fue muy bien aceptado.

—Vaya parece que las peonías funcionaron bien.
—Peonía ¿no es la flor que le aceptaste a Margaret?
—S-si, solo fue por cortesía.
—Claro, claro.
Patrick sintió aires de celos en su esposa, sonrió y la abrazó. —La única que despertó en Patrick sentimientos fuiste tú Emilico.
—Que tierno mi Patrick, te amo. —Besó su mejilla para luego seguir enfocándose en los dos de al frente.

Thomas suspiró. —Angie, querida ¿porqué no lo intentamos? Seamos amigos de nuevo, ¿No te gustaba Thomas?
—B-bueno si pero...—Sus mejillas se tiñeron. —Eso fue hace mucho.
—No fue intensión de Thomas decirle a tu muñeca aquello, fue impresión del momento.
—Si, entiendo, pero ella ya no está para escuchar tus disculpas.
—Pero está Angie, bueno, Evangeline, recuerdo que no te gustaba que te llamara Angie.
—Le ha tomado cariño y ahora todos la conocen por ese nombre.
—Thomas siente haber causado tanto dolor, lo lamenta de verdad.

Ella pensó en el pasado, si lo que ocurrió hace años en su vida, el como sufrió todo ese tiempo al lado de su muñeca, la pobre se sumió en profunda tristeza luego de escuchar las dolorosas palabras de Thomas, ella no estaba más y ahora cuidaba de su cuerpo.

—También merece ser feliz, ¿no lo cree así?
—Si, tal vez. —Respondió ella. —Está dispuesta a perdonarlo e iniciar nuevamente. Viví con esto tanto tiempo que no se si sea real.
—Si lo es Angie, podemos vivir tranquilos el uno con el otro.

Emilico y Patrick viendo que funcionó su plan les dejaron solos, ella solo bailaba de felicidad por el pasillo de la mansión, al haber dejado atrás a Patrick corrió de vuelta a sus brazos. —Emilico eres una cajita de sorpresas.

—¿Te lo parezco?
—Claro. —Patrick y ella comenzaron a danzar hasta que una sirvienta les dio un mensaje a ambos para que fueran con Kate.
—Señor Patrick, el señor Ricky le está esperando.
—Claro, vamos Emilico.

Se dirigieron con Kate y los demás, dentro de la oficina estaba, John, Shaun y Ricky.

—Que bueno que llegan, adelante —dijo Kate, ahora que estaban reunidos les comentaría que Edward mandó la invitación al ala de los niños hace días.

Tocaron a la puerta y le dejó pasar. —Permiso, como solicitó tengo a la pareja seleccionada, es una pena que ya no se haga la unificación.
—Podemos vivir en conjunto, no es necesario tomar vidas de personas inocentes.
—Si me lo permiten las invitaré a pasar. Adelante chicas.

Dos jóvenes ingresaron, estaban nerviosas por su primer día en el ala de los adultos.

—Vanessa y Vania, se unirán a nosotros de ahora en adelante.
Todo el grupo les dio la bienvenida.
—Les agradecemos que nos hallan invitado a venir al ala de los adultos, ¿Qué es lo primero que haremos aquí? —pregunta Vanessa mientras mira a su compañera Vania.

Las posibilidades son infinitas podían hacer de su vida lo que quisieran, decorar sus habitaciones, tener más ropa bonita y joyas a combinación, intentar socializar con los adultos existentes pero muchos de ellos no querían a seres sin fusionar, también encontrar el amor, pero ya sería algo un poco complicado.

Luego de que las chicas se marcharan guiadas por Emilico, Patrick y Ricky a sus nuevas habitaciones, Kate se preguntaba si estaba haciendo bien su trabajo, al menos los que llegaban a la casa recibían educación y privilegios, aún sabiendo que probabilidades de que alguna sombra siguiera su instinto de fusionarse y así matando al humano o muriendo los dos en el acto, agradecía que nada de eso hubiese pasado.

Fue sacada de sus pensamientos por John. —Mi amor, iré con Shaun a dar una vuelta.
—Bien yo me quedaré revisando estos archivos. —John besó su cabeza y se despidió.

Estaba completamente sola, se levantó y miró por la ventana; traer a una nueva vida a vivir, estaba asustada por si nacía niña John no la quisiera ya que de su cabeza no salía la idea de que fuese un niño. —No te preocupes mi amor yo si te amaré seas lo que seas, si Emilico ama sin saber que será su bebé yo también haré lo mismo.

John y Shaun estaban de camino a otra sala para realizar alguna actividad. —Dígame señor, si le pidió disculpas a la señorita Louise.
—Trató pero se complica, ¿tal vez la ha evitado? Shaun, John no sabe cómo.
—Es fácil, si quiere le ayudo. —Justo escuchan la jovial y alegre voz de Louise, terminan por cruzarse además que estaba acompañada de Lou; en sus manos llevaba flores para adornar su habitación.
Ellas se detienen al mirarlos. —Ay Lou mejor vámonos.

Shaun le hace señas a su amo para que no la deje ir ya que esta era la oportunidad de arreglar las cosas.
—Louise espera... amm John tiene algo que decir.
—A ver te escucha. —Louise esperaba sus disculpas, pero se enfocaba disimulada en Shaun.
—Pues John lo s... —Las palabras no querían salir, costaba pedir disculpas, lo intentaba.
—Mira si tanto te cuesta mejor lo dejas para la próxima, Louise está ocupada.
Shaun enojado con su amo golpea con su mano la espalda de John haciendo que se queje.
—Bien, Louise, John lamenta haber dicho lo de la otra vez, solo se dejó llevar por el enojo.
—Louise también se disculpa, espera que su futuro bebé se parezca también al padre.

Ambos quedaron a mano, volvían a ser los de siempre, John le agradeció a Shaun por darle el empujón que necesitaba. Ahora que se retiraron ellas dos, ambos entraron a la sala para descansar un rato Shaun no sabía que sentir al respecto con Louise, estaba confundido, Emilico se había poco a poco esfumado de sus pensamientos y fueron reemplazados por las cosas pasadas entre él y Louise.

Las puertas se abrieron dejando ver a Patrick, Ricky y Emilico.

—Nos encontramos con Louise y Lou, nos dijeron que estaban ustedes aquí.
—Si, vimos a relajarnos un poco.
Shaun preparó té con los implementos de la mesa y amablemente lo sirvió, mientras su amo hablaba con Patrick, él se sentó con Ricky y Emilico, solo que no quería que mencionara lo de Louise.
—Emilico ¿Cómo te encuentras de salud?
—Oh, pues bien, tengo los mismos síntomas por la mañana, suelo tener más sueño, y aunque no se note aún mi vientre está creciendo.
—Que bueno. —dio un sorbo a su té.
Emilico sonrió, pero Ricky no soportaba tener el secreto y que no pudiese decir nada.
—¿Sabes que Shaun está saliendo con alguien? —Ricky se ganó una mirada asesina por parte de Shaun, pero la cara de Emilico era una deslumbrada y le intrigaba saber.
—Shaun, no me dijiste que tenías algo con una chica.
—Para su información no hay nada, solo estamos en términos de amistad y que no sentimos nada el uno por el otro.
Emilico se entristeció. —Shaun... pensé que si tendrías algo con esa persona.
John había escuchado sin querer, saltó a la conversación. —No puedo creerlo Shaun, no le comentaste nada a John.
—No lo veo necesario, solo es una amistad.
Patrick se incluye. —¿Quién es tu amiga? Nunca vimos que estuvieses con alguien. —eso significaba que por fin alguien había sacado a Emilico de los pensamientos de Shaun.
—No es importante ¿de acuerdo? —Shaun deja su taza tras la abrumante presión por revelar a la chica y abandona la pieza.

Ricky lo sabía, pero no dijo nada, luego se ganaría un buen sermón por parte de su esposa. Cuando John estuvo con Kate ya por la noche, no podía dejar de pensar en que Shaun tuviese una amiguita secreta y que tan bonita pudiese ser para que ocupara ese lugar que tenía la encantadora Emilico.

—¿Quién podrá ser? — Caminaba John por la habitación, Kate solo se preguntaba de que hablaba pues no entendía las extrañas cosas que decía. —¿Kate, sabías que Shaun tiene una amiga? Sabes a lo que me refiero ¿no?
—No... ¿amiga, amiga o amiga para novia?
—Está saliendo con alguien ¿puedes creerlo?
—N-no...— Enterarse de esa manera no le gustó, era como sentir un filo enterrándose poco a poco en su corazón. Sus manos temblaron, las lágrimas no se hicieron esperar, aunque quisiera evitarlo no podía, para su suerte John se metió al baño para tomar su habitual baño antes de dormir.

Por la puerta entró Shaun, el cual presenció el hollín saliendo de forma descontrolada de Kate. —¿Se encuentra bien? —Se acercó.
Ella secó sus lágrimas y trató de controlar sus emociones. —S-si, es solo un poco de estrés y algo de ansiedad.
—Le serviré un poco de agua. —Mientras el se ocupaba de eso Kate estaba pensando que ya había otra mujer a la cual le daría su cariño, su tiempo y seguramente terminarían en una relación. Shaun es guapo, inteligente, amable y cualquier chica sería afortunada de tenerlo.
Cuando Shaun volteó, otra vez estaba saliendo hollín de ella. Le ofreció el agua para intentar que se calmara. —No le sentará a su bebé ponerse de esa forma.
—Lo siento, intentaré calmarme.
—La dejaré descansar, procure hacerlo.

Kate quedó nuevamente sola, ¿Cómo podría calmarse si Shaun estaba con alguien más? —Para este punto creo que debo dejarlo ir. —Fue al baño, su ropa estaba manchada de hollín. —¿Puedo entrar contigo?
—Claro mi amor. —Ella se metió a la tina. —¿Sucede algo?
—No, solo necesito que me abraces.
John la abrazó, podía sentir que no estaba bien, acarició su cabeza. —Descuida, lo que sea que te esté atormentado, todo estará bien. —De alguna manera John hizo que ella se calmara.

Emilico y Patrick venían charlando cuando vieron de frente a Thomas con Angie de lo más feliz, ambas parejas se acercaron. —Buenas noches chicos, estuvimos hablando y Thomas me ha contado que ha sido idea de Emilico reconciliarnos, Angie te lo agradece y a Patrick también por apoyarla.
—No hay de que, era más que evidente que necesitaban estar juntos.
—Thomas agradece también, hace mucho que quería compartir con ella mis momentos, ahora ya puedo.
Se despidieron por esta noche, Emilico miró a Patrick. —Creo que puedo estar en paz un rato.
—Siempre ayudando a los demás, te admiro mucho. Venga vamos a ir a descansar.

Una vez en su habitación iniciaron su rutina antes de dormir, ir al baño, cambiar sus prendas y ponerse el pijama, Patrick tomó un peine de plata para arreglar el cabello de ella, siempre cuidaba de su dorada cabellera.

Ella disfrutaba del suave toque de su esposo, siempre tan delicado con ella, se levantó de la silla. —Patrick no sé que haría sin ti, te amo.
—Yo también, Emilico, mi corazón. —Juntó su frente con la de ella, le dio una caricia en la mejilla y luego unieron sus labios en un dulce beso.
Para terminar la noche Emilico se sentó frente a la mesa para escribir en su diario, siempre lo hacía, pero gracias a Patrick ahora contaba con materiales para adornarlo a su gusto. —Siempre me ha encantado plasmar mi día a día. —Se estiró un poco. —Estoy cansada.
Patrick miró que pronto acabaría su diario, así que pensó en que le regalaría otro, le encantaba verla feliz.
Se acostaron a dormir deseándose que pasaran una linda noche, Emilico se durmió más Patrick no podía conciliar el sueño, se dedicó a contemplar a su amada esposa, habían pasado varios meses luego de su boda, estaba feliz sabiendo que serían padres pero su más grande temor era que no tuviese un rostro y que no pudiese conocerlo, solo quedaba una esperanza de que se repitiera lo que pasó con Kate.
Estaba tan perdido en sus pensamientos y de repente Emilico se incorpora de golpe algo sobresaltada.
—¡¿Quién es la novia de Shaun?!
—¡Que susto! Pensé que estabas dormida.
—No, solo cerré los ojos para intentar dormir y empecé a pensar varias cosas hasta que me surgió la duda. —se empezó a reír.
—Patrick se pregunta ahora lo mismo. —Emilico se acercó a él para dormir más cerca.

Los siguientes días se empezó a planificar la habitación para el bebé de Kate, Shaun como asistente y mano derecha de Kate se ocupaba de la decoración. —Estuve pensando y creo que este estaría bien, un tono en azul, es muy bello, le llaman costa azul y es un tono bajo y tranquilo.
—Muy buena elección con el papel tapiz.
La puerta se abre dejando ver a Emilico, Lou y Louise ya que venían de ayudantes.
—¡Vaya Kate! Vinimos a ayudarte para elegir muebles, Louise consentirá mucho a sus sobrinos.
—Oh pues muchas gracias, Emilico, por favor dales a ambas nuestro catálogo.
—Si, justo les estaba comentando de camino lo de los muebles. —Emilico le entregó a cada una los catálogos.
—Nos pondremos a revisarlo. —comenta Lou mientras le da un vistazo al libro.
—Si gustan cuando hayan encontrado opciones los consulten con Shaun, es quién está a cargo de decorar.

Las dos miraron al muchacho el cual sonrió con algo de incomodidad, Lou miró a su ama y a Shaun. Suspiró porque ambos estaban en una relación complicada, solo pasar un rato juntos y cada uno por su lado.
Kate recordó que tenía que ir con John ya que quería hablar con él de algo importante. —Vuelvo al rato, quedé de verme con John.
—Claro descuide, nosotros nos encargaremos de esto.

John se encontraba en la sala de entrenamiento pues debía deshacerse diario de su hollín, lo hacía con tanto poder, era majestuoso ver como sus poderes estos años se habían vuelto más fuertes.
Desde lejos una mujer lo admiraba, ¿cómo contenerse ante tal cantidad de hollín? —Delicioso... —Siempre se contenía pero decidió acercarse. — Es sorprendente la cantidad de hollín que John posee.
Él volteó. —Si... bueno. —Las alarmas se dispararon en John pues sabía lo peligrosa que se podía poner. Sophie, delicada como mariposa pero una feroz oponente.
Pronto se vió envuelto en sus brazos. —Sophie no se ha podido contener ante esa cantidad de hollín.
—¡¿QUÉ?! ¡¿CÓMO?! —Chilló.
Viendo que su hollín estaba impregnado en su ropa solo acercó su lengua al rostro de él ya que estaba sometido a ella.
—No soy delicioso como Thomas, soy solo una sombra sin fusionar.
Sophie con su mano sujetó el mentón de John y lo hizo mirarla.
—Más rico, a Sophie solo le gusta el hollín, Thomas solo fue un pequeño aperitivo nada mal, pero tú encanto... Sophie a ti te necesita.
John estaba a merced de ella, con su lengua degustaba del hollín del rostro, él no podía en ese momento defenderse pues había gastado energía, ella había estudiado bien sus movimientos para aprovecharse, gritó ante la mordida que le dio en el cuello. —Que exquisitez.
—¡¡¡Detente!!!
—¿Crees que Sophie se detendrá? Eres lo que Sophie anhela probar. —Estaba dispuesta a acabar con él, cuando Kate entra en acción, lastimándola un poco y apartándola de John utilizando sus poderes de hollín.
—Con que aprovechándose de los débiles, Sophie me sorprende que se deje llevar por sus impulsos.
—Kate... —Dijo débilmente John viendo que su esposa vino a su rescate.
Sophie viendo que Kate había interrumpido, se mantuvo al margen pues no quería enfrentarse con ella.
—Solo fue un impulso mi señora, no volverá a suceder.
—Eso espero Sophie, ahora desaparezca de mi vista.
—Si señora.

Kate se acercó a ver el estado de John que se quejaba. —¡John cariño! ¿Estás bien?
—Si, eso cree, ¡John casi se convierte en el almuerzo de Sophie, pero gracias a ti Kate John se salvó.
—Creo que no quería que fueras su almuerzo, solo se dejó llevar por sus impulsos, tu hollín para ella es como el dulce néctar de las flores. Ven te ayudo a poner de pie.
—No Kate, John aún puede, no quiere que te esfuerces por el bebé.
Kate igual le ayudó un poco, John se quejó por la mordida del cuello, solo dejó su marca con cariño. Lo atendería ella misma. —Ahora te cuidaré y descansarás ¿si?
—Claro, Kate será la enfermera de John. —Dijo alegre ya que las delicadas manos de Kate lo curarían.

Emilico había abandonado la habitación pues tenía cosas en que trabajar dejando solo a Shaun, Louise y Lou, esta última se le ocurrió dejarlos solos. —Yo tengo quehaceres, nos vemos... —Sonrió cómplice de ambos.
—Lou, no dejes sola a Louise...
—Estará bien mi ama, Shaun te la encargo. —Ella se retiró.

Louise no sabía que hacer sola con él, Shaun simplemente se dedicó a seguir con el trabajo.
—Shaun, Louise lo siente, Lou lleva una idea equivocada de nosotros, nuestro trato solo es para hacernos compañía y lidiar con la soledad.
—Así es, porque ninguno siente nada por el otro ¿no es cierto?
—Si. —Louise habría podido solo estar ahí pero su cuerpo empezaba a temblar, su corazón a latir de una manera diferente, él es tan serio, ni un músculo de su cara movía para sonreír , era como si no tuviese sentimientos, pero estaba reprimiendo todo ya que tenían un acuerdo, ninguno debería enamorarse.
Ella se acercó a él decidida. —Shaun presta atención a Louise, no la evadas con la mirada.
—Esto... pues...—No podía formular bien las oraciones, el sonrojo apareció en sus mejillas y trataba de no mirarla.
—Louise te necesita ¿si? ¡Maldita sea, Shaun! —Louise tomó sus manos para acercarlo a ella y besarlo, él siguió el beso con algo de desesperación, había pasado días sin que se dirigieran la palabra por ocultar su relación.

La puerta se abrió. —Emilico... —Ambos se separaron de golpe tomados por sorpresa y voltearon a ver al testigo. —Ahh... no vio nada... —Cerró la puerta nuevamente.
Louise caminó directo hacia él — ¡Patrick, ven aquí!
—¡Ya lo dijo, no vio nada!
—¡Eres sombra muerta Patrick!
Lo persiguió para intentar darle una advertencia, Patrick siempre era lastimado dado que ella era mucho más fuerte que él, pero no sería esta vez y la enfrentó. —Louise, Patrick ha pasado por lo mismo, sabe lo que se siente ocultarles a todos su amor por encajar, o ¿es que acaso a Louise le avergüenza haberse enamorado de un humano?
—Las cosas no son así Patrick, Louise y Shaun no están enamorados, han decidido solo pasar ratos juntos hasta que encontremos a la persona indicada, solo eso.
—¿Segura? Los sentimientos pueden florecer sin previo aviso. —Patrick se retira y la deja pensando.

No sabía que le estaba pasando últimamente, buscó consejos en sombras cercanas. —Y es que últimamente lo veo y mi corazón late descontrolado ¿Qué debería hacer Louise?
—Preguntarte si lo amas, por que son claros signos de que empezaste a enamorarte de esa persona.
—Y ¿porqué Louise recurre a nosotros?
—No quería hablarlo con mis compañeros debutantes, Louise prefirió venir con ustedes, Bárbara y Benjamin.
—Ese joven debe sentir algo, ¿no cree?
—Louise no está segura Benjamin, tal vez no siente nada, es como si de verdad aceptara el trato.
—Que tontería, si tiene que decir sus sentimientos que lo haga, que no le pase como a Bárbara, debió aceptar que se moría por él, siempre llevará esa carga por el resto de su vida.
—Señorita Barbara...
—Está bien, Barbie, necesita decirlo, si hubiese declarado su amor las cosas hubiesen sido diferentes. Solo...tal vez hubiésemos estado más cerca uno del otro y no ser simplemente amigos.

Volvía Louise de camino junto a Lou luego de la charla, su compañera lo sabía la conocía mejor que nadie se resistía a aceptar que le había empezado a gustar Shaun.

Benjamin conociéndola desde hace tiempo las alcanzó junto a Ben.
—¡Louise espera!
—¿si que pasa?
Terminaron por quedarse charlando un poco más, Benjamin podía notar a través de Lou que Louise estaba sufriendo por un amor que se negaba a aceptar.
—Louise ya no es una niña, Benjamín siempre pensó que era una sombra decidida y conseguía lo que quisiera.
—Pero es que no debía pasar de esa forma, no estaba en los planes de Louise que ocurriera, cree que es un error y debería alejarse.
—piénsalo no querrá arrepentirse luego cuando venga alguna otra y se lo lleve de su lado.

Shaun había estado cuidando a su amo luego de enterarse del ataque de una sombra hacia él. —Tenga cuidado la próxima vez.
—Lo tendrá, pero necesita a Shaun a su lado, antes solías acompañarlo a todos lados, has estado distante.
John estaba preocupado y suponía que desde que empezó a salir con una chica se había distanciado, pero no sabía que clase de relación había entre los dos. Kate solo miraba en dirección a Shaun.
—Lo siento mi señor, no volveré a separarme de usted, sigo siendo su rostro después de todo. —No había caso pensar en Louise si él solo era objeto de su diversión, para eso vino a trabajar a la casa, sirviendo a los amos sombra.

Emilico estaba con Patrick en la habitación, pero este parecía distante, absorto en sus pensamientos. —Patrick... —Le llamó varias veces pero no respondía. Se preguntaba que era lo que lo entretenía ya que se estaba sirviendo té y el líquido rebasó la taza, eso lo sacó de sus pensamientos.
—¡Que descuidado! Se disculpa. —Entre los dos limpiaron, Emilico lo hizo más rápido.
—¿Algo te preocupa mi amor? —Su curiosidad le invadía, Patrick asintió y rápido negó. —Ya decídete, ¿hay algo que contar?
—Patrick lo siente, no puede contarte prometió que no diría nada.
—Pero... pero pensé que no había secretos entre nosotros. —Emilico solo se entristeció, lo entendía. —Comprendo.
—Claro que quiere decirte pero...
—Está bien cariño. —Suspiró mientras se levantaba de la mesa. —Saldré a caminar un rato.
—No has terminado de cenar.
—Lo siento se me fue el hambre.
Se sintió un poco mal por no decirle pero lo prometió, no era a él que le tocaba decir que Louise y Shaun salían.

Emilico caminó hasta un balcón y vió que estaba Shaun mirando el cielo. —Buenas noches Shaun.
La dulce voz de Emilico hizo que volteara. —Buenas noches. —Pudo notar que ella tampoco estaba bien ya que suele ser muy risueña, algo había pasado. —Pareces triste ¿que tienes?
—Oh pues cosas de parejas, pensé que no habría secretos entre él y yo pero pues...
Shaun rápidamente recordó lo de la tarde. —No es su culpa, lo siento Emilico. —Ella lo miró, sabía algo. —No debes molestarte con él.
—No estoy molesta y lo entiendo, tiene sus secretos.
—Pero estás aquí triste porque se lo guarda. —Shaun tomó aire y le confesó lo que pasaba con Louise, ella por fin se enteró.
Con su mirada iluminada le preguntó si la amaba pero él no supo responder, estaba confundido.
—Esto no creo que sea amor Emilico, solo es por no estar solo algunas veces.
—Entiendo Shaun, aun no has encontrado a la chica correcta y están juntos porque se encuentran en las mismas.
—Bueno si. —Sonrió y le dio una palmada en la cabeza a ella. —Eres muy dulce, ya, no te enojes con el amo Patrick.

El nombrado la había salido a buscar y los encontró. —Emilico... —La llamó, ellos lo miraron, Shaun se dirigió a Patrick para comentar y pedir disculpas si causó conflictos entre ellos.
—N-no te preocupes, entiendan, le hubiese comentado pero Louise amenazó con matar a Patrick, lo más seguro es que le hubiese lastimado. Algunas veces da miedo.
Shaun y Emilico rieron, ella se regresó con Patrick, no sin antes animar a su amigo.

Ella es feliz con una sombra como Patrick, sus compañeros encontraron a alguien menos él, se dirigió a su habitación pero antes de entrar Kate le llamó.
—Shaun ¿podemos hablar?
—Claro, pase adelante.
Una vez dentro Kate fue directa confesando que lo sabía. —Estás saliendo con alguien ¿no?
—Bueno digamos que más o menos, no le comenté nada para no lastimarla.
—No te preocupes Shaun, lo entiendo, si me duele pero quiero que seas feliz con quien tu quieras.
Shaun no guardó más el secreto igual todos se darían cuenta alguna vez. —La señorita Louise, ella es con quien tengo algo.
Para Kate fueron palabras dolorosas, Louise ese nombre se repetía una y otra vez en su mente, ¿Qué hizo ella para conquistarlo? Aquella que veía a los muñecos vivientes como inferiores, esperaba que fuese cualquier chica menos ella.
—¿Cómo es posible? Louise... pero ¿Por qué ella? —¿Porqué era débil en ese momento? Llorar no tenía remedio, pero ahí estaba sufriendo ya que Louise le arrebató algo que deseaba más nunca pudo tener.
—Perdóneme, tal vez si las cosas hubiesen sido distintas en otras circunstancias quizás usted y yo nos hubiésemos conocido y tal vez tendríamos una historia juntos. —Shaun sabía lo difícil que era para ella enterarse de ello, con su pañuelo secó sus lágrimas.
Solo el tiempo sanaría cada corazón que se encontraba afligido, Shaun se preguntaba porqué estaba envuelto en ese enredo, las mujeres enamoradas eran un dolor de cabeza y ahora consideraba que su antigua vida en soledad era tranquila sin deberle nada a ninguna.

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Continuará...

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ꔛFeliz Año Nuevo 2024ꔛ