xix
Las siguientes semanas fueron todo menos sencillas para Deb.
La banda de los chicos se había, naturalmente, desintegrado. Calum Hood era quien, en la mayoría de los casos, escribía las canciones, que luego eran compuestas por Michael, Luke y Ashton. Sin escritor, los tres integrantes restantes decidieron ponerle tres puntos suspensivos al proyecto de la banda, y concentrarse en lo que se les venía encima: los exámenes finales, la graduación y la universidad.
Cada uno tenía un plan establecido. Luke comenzaría a estudiar finanzas en la universidad más cara del estado, la FSU, gracias a su programa de estudios completamente pagado desde antes de su nacimiento. Por su parte, Ashton estudiaría ingeniería en la universidad de la comunidad con Michael, quien estudiaría artes modernas con mención en música. Los exámenes finales eran lo único que se interponía entre ellos y el logro de sus metas, pero para Deb era diferente.
A pesar de que tenía buenas notas y créditos por actividades extracurriculares, carecía de un plan en concreto. Años atrás, había decidido estudiar literatura en la FSU, pues estaba segura de que conseguiría una beca. Hoy por hoy, sin embargo, no sabía si eso era, en verdad, lo que quería. Ya escribir no era lo mismo. La motivación que antes había sobrado en ella había sido corrompida y manchada; hacía mucho tiempo que no escribía absolutamente nada, y no estaba segura de cómo reaccionar a eso.
Los días en la escuela se habían convertido en un suplicio, pues ahora tenía la constante paranoia de tener que adivinar en dónde se encontraría a Calum Hood, con quien, de hecho, compartía más clases que antes, debido a que sus clases recuperativas coincidían con algunas de sus clases regulares. Tenía que soportar tenerlo cerca, mirándola, hablándole sin emitir sonido.
Y era tremendamente difícil no sentarse a llorar.
A veces se adentraba en el baño, simplemente a hacerlo. Claire le acompañaba, Claire era paciente y soportaba toda la mierda que Deb le hacía pasar sin quejarse, abrazándola hasta que se clamara y pudiera salir de nuevo.
Ashton le había preguntado si quería hacer algo al respecto al vídeo, y Deb se había rehusado de manera categórica. Eso solo crearía un escándalo innecesario, del que él podría librarse con el presionar de un botón de "suprimir". Ella, por el contrario, nunca podría librarse, ni siquiera del mero hecho, así que llevar a cabo acciones legales era simplemente ilógico. Pero Ashton se refería más a otro tipo de cosas. Pagar a alguien para que le diera una paliza, darle un susto de muerte, jugarle una mala pasada con su auto... pero Deb no quería hacer nada de eso. No quería que la imagen del rostro de Calum Hood siguiera apareciendo en su mente. Solo quería actuar como si nada hubiese sucedido.
Y casi pudo hacerlo, hasta el día de hoy, cuando se encontraba en casa de Luke, descongelando una pizza en su microondas, mientras él revisaba su móvil, sentado en la barra de la cocina. Luke había asumido, junto con Ashton, el papel de protectores a tiempo completo de Deb. Estaba con ella todo el tiempo, incluso más que Claire, y se aseguraban de que Calum no se acercara a ella a menos de veinte metros.
—Luke —dijo Deb, su voz ronca.—, ¿crees que debería aceptar?
Luke entendió inmediatamente a lo que se refería. Esta mañana, Michael, Claire, Ashton, él y ella habían estado hablando sobre eso sin parar.
—Yo también estudiaré ahí —se refería a la beca que Deb había obtenido para la FSU. Un e-mail la había despertado ese día, diciéndole que había sido aprobada para ella una beca del setenta por ciento para su licenciatura en letras—, ¿por qué no?
Deb se encogió de hombros, sacando la pizza del microondas y sirviéndola frente a Luke. Luego se sentó a su lado y comenzaron a comerla a grandes trozos.
—¿Me estás diciendo que acepte solo porque tú estarás ahí?
Luke se encogió de hombros.
—Precisamente.
—¿No hay nada sobre mi futuro, lo que quisiera hacer, lo que aspiro? —Deb comenzaba a reírse.
—Tu futuro soy yo, lo que quieres hacer es con conmigo, y aspiras a estar conmigo, así que ahí tienes tu respuesta.
Deb soltó una carcajada con ganas, lo que hizo que Luke también se echara a reír. Deb suspiró, y se sentó sobre el regazo de Luke, apoyando su cabeza en su hombro y depositando un leve beso en la línea de su mandíbula.
Las cosas entre Luke y ella ya no eran como antes. Llevaban lo que parecía años sin si quiera verse desnudos, y aun así disfrutaban de la compañía de otro. Desde que había descubierto el vídeo, Deb no quería que nadie le viera desnuda, por alguna razón que pretendía no entender, pero que, al final, sí comprendía.
Calum Hood había producido en ella un trauma y, aunque días habían pasado, el suceso seguía fresco en su memoria. Cumpliendo su pedido, no volvió a recibir una llamada o un mensaje de él nunca más, y rara vez lo veía en la escuela, aunque sabía que asistía todos los días.
Las cosas estaban mejores así.
Deb acaricio la fina capa de vello rubio en el pecho de Luke y besó sus labios con suavidad, gesto al que él respondió sin inmutarse, pero luego sonrió adorablemente.
—Solo quiero que, eh, sepas... que por supuesto que pienso en tu futuro y tus aspiraciones. De hecho, me paso un ochenta por ciento del tiempo pensando en todo lo que refiere a ti.
—Luke...
—No. Déjame terminar —le interrumpió—. No te lo he dicho, pero he leído tus historias, las que han ganado premios, y yo nunca leo, pero me encantaron. Y no las leí recientemente, lo hice hace años y tan solo quisiera que entiendas que llevo queriendo estar contigo por mucho tiempo, y que no es algo que surgió ahora.
Deb volvió a besarlo.
—Siempre has estado conmigo.
—Sabes que no me refiero a esa forma. —se echó a reír, y la sentó sobre el taburete de un solo movimiento. Luke Hemmings ya era tremendamente hermoso, pero verlo vulnerable y pequeño era simplemente desgarrador—. Deb, ya no quiero estar con nadie más, pero tampoco quiero estar contigo si tu cabeza sigue queriendo a Calum. Y sé que puede que necesites tiempo, y por eso te pido que vengas a estudiar conmigo en a FSU. Puedo demostrarte que, aunque no lo parezca, tengo mucho para ofrecerte. Nadie te volverá a lastimar de nuevo.
—No sé si estoy lista para estar con alguien otra vez.
—No lo hagas, entonces. Puedo ser tu amigo. Lo he sido por cuatro años ya. Eso no cambia lo que siento por ti. —la tomó de las caderas—. Tampoco te estoy exigiendo una respuesta. Yo te amo y ya. Sin condiciones, sin chantajes. ¿Qué más puedes necesitar?
Quiso decirle que también lo amaba, pero sintió una terrible inseguridad. Ella tan solo lo abrazó, y esperó que pronto pudiera darle una respuesta, fuera cual fuera.
Sé que no se esperaban que actualizara esta novela nunca más, ¡pero aquí está! Yo no miento cuando digo que sí seguiré, eventualmente.
Les comento que vengo con noticias. Estoy editando That Something para ponerla más decente, falta muy poco para que esta novela se termine y tengo unps pequeños anuncios:
1. ¡¡PUBLIQUÉ UNA OBRA ORIGINAL!! Si me has leído por algún tiempo puede que recuerdes que hice el intento de un fanfic con Luke, llamado Noelle, pero nunca avancé mucho. Pues he reinventado la idea, dando un giro mucho más interesante, y de naturaleza original. Si deseas leerla, puedes irte a mi cuenta alternativa (dedicatoria) l_valentine, te lo agradecería muchísimo porque en esa cuenta no tengo casi ningún seguidor ¡y la historia me tiene súper emocionada!
Aquí tienen un pequeño vistazo, por si acaso les parece interesante y se animan a leerla:
"En Victoria, Australia,
un joven psicólogo toma el lugar de su difunta mentora,
quien, en sus últimos días, se negó a dejar de tratar a una peculiar paciente."
Descubre el misterio de Noelle de la mano de Robert King, un psicólogo al que le ha tocado develar la verdad sobre lo que le pasó a los expedientes de Katherine Miller.
2. Hasta nuevo aviso, luego de editar mis novelas y terminar esta, no creo que continúe haciendo fanfics. NO SE SIENTAN TRISTES, LAS COSAS EVOLUCIONAN Y ES PARA MEJOR. He tenido un periodo de revelaciones creativas en las que me he inclinado más hacia las historias originales, y quisiera de verdad escribir un libro de características más serias.
NO ME MALINTERPRETEN, yo adoro mis fanfics, por más cheesy o cursis o clichés que sean. ¡Que quede claro que no los borraré! Esta cuenta quedará abierta por si se me ocurre un buen fanfic (¿Quién sabe? 5SOS está por sacar nueva música *al FIN* y puede que se me ocurra algo), y para que, quien lo desee, pueda leerlos.
Ha sido un placer escribir estas historias, que tanto me han ayudado a descubrirme a mí misma como persona y como escritora. Esto no es un adiós, mis niños, ¡esto es un simple hasta luego!
PD: Si llegaste hasta aquí quiero agradecerte por no haber perdido la fé en mí y lo que escribo. Para mí, eso vale oro.
Besitos.
xx.
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