Villanos, esas enigmáticas personas que le dan un desafío a nuestros héroes favoritos y hacen que nuestra sangre hierva al tenerlos en pantalla o dentro de las líneas de un libro, ¿pero qué es un villano?

La mayoría de las veces decimos que un villano es aquel ser con metas muy concretas para hacer daño a alguien, una persona capaz de matar hasta a su propio padre con tal de conseguir lo que quiere, otras, es simplemente aquel pensando que es el héroe y hace todo lo que puede para beneficiar a los suyos, ejemplos hay muchos, personas que haciendo lo correcto a sus ojos, terminan destruyendo vidas enteras, sin ir más lejos, Hitler podría caber dentro de esta descripción, a sus ojos estaba siendo un héroe para su nación, para los alemanes, él era la promesa para un mundo mejor, pero como todos sabemos, sus actos distaban mucho del concepto «Mundo ideal».

Un arquetipo clásico del villano es aquel con deseos de conquistar el mundo, un concepto muy generalizado, apareciendo dentro de muchas culturas, en la biblia, lucifer, satanás o como le quieran decir, es el clásico ejemplo de un villano, quiere tener el mundo a sus pies y hacer lo que quiera con la población, Jesús es el bueno que se sacrifica para ayudar a todos y conseguir la derrota del malo, historias como esta se repiten a lo largo de incontables historias, como en cómics, películas, telenovelas, libros y un largo etc.

¿Pero cuan cierta es la imagen del villano convencional? A mi parecer todos esos conceptos pecan de simples, aludiendo a un público impresionable que no hace el mínimo esfuerzo por entender las circunstancias del villano, solemos pensar en dos extremos de la balanza, el malo muy malo y el bueno muy bueno, separando sus ideales y encasillando sus acciones dentro del rango de acción que su posición les permite, un villano jamás debe mostrar compasión o se volverá más humano, el héroe no debe sucumbir ante sus impulsos o ya no será tan admirable, pero... ¿y si eso es lo que necesitamos? Nadie es perfecto, no podemos estar todo el tiempo actuando como una persona buena y despreocupada, solemos tener arranques de ira, solemos tener bajones emocionales y a veces incluso hacemos daño a otros sin querer, dependiendo del punto de vista, todos podemos ser villanos en un instante y al día siguiente ser el humano más bueno del planeta, somos seres que cambian de lugar constantemente, nos movemos en tonos grises sin aludir a ningún lado en específico y podemos elegir que es conveniente para cada ocasión, las filosofías más extremistas dictan ser buenos con todos, aun si son malas personas, pero muchas veces eso puede traer consecuencias más graves, lo que necesitamos es tener personajes humanos, héroes que no sean intachables, que caigan y hagan cosas que no deberían hacer para al final ponerse en pie a pesar de las circunstancias, necesitamos villanos que tengan corazón, gente que sienta el peso de sus acciones, gente que sabiendo el daño que hace y piensen dos veces antes de hacer algo para que se pongan de pie, protejan sus ideales y a los que quieren, necesitamos menos seres idealizados, menos villanos llenos de maldad, menos héroes intachables... necesitamos humanos.