Valquiria, hermosa mujer, segadora de las almas caídas en combate, se paciente. Mi muerte está cerca, puedo sentirla. Ansío tus brazos, tu suave toque. Las runas lo han dicho y las Nornas lo han tejido, nuestro destino es encontrarnos. 
Las noches se han vuelto más oscuras, los enemigos más cobardes, las batallas han cesado y mi alma llora en silencio. ¿Cuánto tiempo tendré que soportar esta vida terrenal? ¿No merezco el Valhalla? ¿Podré disfrutar tu compañía, hermosa Valquiria?
Los gritos agónicos de la noche que muere llenan mi corazón con el más sentido de los pesares.  El amanecer trae nuevas esperanzas, Midgard brilla en su vasta extensión, el aire está cargado de sufrimiento y dolor. Ha llegado, aquella brutal batalla que acosaba mis sueños finalmente está aquí. Aclamados sean los dioses pues mi final está cerca.
Oh, hermosa Valquiria, nuestros caminos finalmente se cruzan. Con alegría y gozo, mi alma se eleva, hacia el Salón de los Caídos, acompañada por la más bella de las criaturas.